Partida Rol por web

La música suena casi 60 personas valían al son de la música y victoria desde su oficina en la parte de arriba del local mueve todos los vicios humanos de la ciudad.

Desde su despacho con cristales opacos pero que transparentan 2 persons parecen estar peleandose.
Un hombre de seguridad inpide el paso de nadie

Al llegar dentro, se introduce entre el montón de gente y para cerca del despacho de Victoria, esperando a los demás. Cuando están con ella, se acerca a ellos para hablarles por encima de la música.

Ahí está. Parece que está con alguien. Y no creo que nos dejen entrar ahora.

Llegamos y entramos en un sitio con buena música.

Esto parece más divertido.

Una vez descubrimos la posible ubicación doy un salto de felicidad y grito con un puño en alto.

Siiiiiiiiii!!!

Ya me encargo yo de entretener al guarda ese.

Aunque después añado con un tono más bajto

o eso o esperamos a que terminen de pelear.

Que sea lo primero, que sea lo primero...

-Estate quieto por el momento -dice muy seria para desconsuelo de Karl-. No hemos venido a provocar altercados ni queremos llamar la atención tan pronto.

Antes de hacer nada, Karin observa atenta el l8ugar, la gente que hay en él...

Sigo a mis compañeros adentrandome en el club. Me sorprende la facilidad que tiene Karl por animarse a meterse en broncas. Simplemente no opino al respecto y sigo a las chicas que parecen tener las ideas bastante más claras que él.

Necesito un poco de acción.
Estate quieto... niño peleón... pero quien se han creido que soy.
Joder soy un Brujah! y me gusta pelear.
Me esperaré por el momento y ahorraré energias para cuando llegue el momento.
Odio no ser el centro de atención, además no puedo perder más tiempo.
Tengo cosas que hacer y cuanto antes acabemos antes el principe me dirá donde esta mi hermano.

Me estaré quieto, por lo menos hasta que vuestra via diplomática fracase.

quieren algo
pregunta 1 de los camareros
tenemos todas las especialidades

un chillido de la discusión resuena por encima de la musica
PERO LO PROMETISTE...
tras eso alguien sale de la sala de victoria y farfulla algo
me dejas con el culo al aire maldita zorra...

es por si alguien lo duda...
Totem y parece que esta precupado.
Al salir os mira y intenta pasar por vuestro lado disimulando

Elisabeth lo observa con mirada interesada y claramente maliciosa...

¿Y tú pretendes ser como yo, Victoria? Consigue aguantarse las ganas de echarse a reír...

Mira hacia el despacho de victoria para ver si aún queda alguien.

esta sola.
pero entre ella y vosotros teneis 1 segurata

Bueno... pues vamos a ello, chicos. Plan A.

Elisabeth se acerca al segurata, con su sonrisa y miradas más seductoras, contoneándose con elegancia...

Perdona... ¿Podría hablar con Victoria un momento? Pregunta mirándolo directamente a los ojos... Necesito comentarle algunas cosas que... Se acerca peligrosamente a él llevándose una uña escarlata a los labios... que tenemos en común...

"generico segurata"
El hombre tiembla y os cede el paso
Pasen.

Eli cariño que te trae por aqui tan bien acompañada

Bien hecho, piensa Karin al ver la sutil actuación de Elisabeth.

Cuando Totem pasa a su lado, ésta clava sus ojos en él. ¿Qué haces tú aquí?
dice para sí misma y observa al brujah hasta que sale del local.

-Buenas noches -saluda Karin cortés al llegar hasta Victoria.
No conocía exactamente la relación de Victoria con Elisabeth, de modo que lo mejor era dejarles hablar primero a ellas.

Las sigo hasta dentro de la habitación. Miro curiosa al hombre que hay en la puerta asombrándome de la facilidad con que Elizabeth consigue pasar. Al entrar observo a la mujer mientras las escucho sin decir nada.

Cuando veo salir a Totem lo saludo haciendo un leve gesto con la cabeza.

No se ni si habrá visto, se le veia bastante preocupado u no creo que sea para menos.

Cuando Elisabeth se acerca a hablar con Victoria y le dejan pasar, miro extrañado al segurata y cuando paso al lado de él le miro con odio y le susurro al oido.

Cambia de trabajo antes de que acabes muerto.

Me acerco para escuchar la conversación.

Elisabeth sonríe, aunque es una sonrísa que podría traer escalofríos a cualquiera que la conozca en profundidad...

Buenas noches... Mira a la vampira fríamente... querida... Verás... Toma asiento en la silla de delante del escritorio, cruzando las piernas y con aire imponente. Buscamos información que quizá tú tengas... Clava sus pupilas en las de su interlocutora, analizando cada una de sus expresiones.