Partida Rol por web

Prueba Arcadia

Antecedentes

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15/08/2016, 23:49
Director

Introducción histórica para la mesa de juego

El 1 de septiembre de 1939 comenzó la guerra que con más fuerza ha incendiado la mente común de nuestra sociedad. En esa fecha comenzó la invasión de Polonia por parte de las fuerzas nazis, en ese momento aún cubiertas por su acuerdo con la URSS. La réplica de Gran Bretaña y Francia es inmediata, declarando la guerra a Alemania. Esta respondió a su vez dando comienzo a la llamada Guerra Relámpago (Blitzkrieg), en la que Hitler, tras invadir a los declarados neutrales Dinamarca y Noruega, avanzó a paso veloz sobre los Países Bajos y Bélgica. Para 1940 sus tropas habrían logrado entrar en París. Japón e Italia se implicarían en la guerra para apoyar a Hitler y en 1941 se rompería la estudiada la neutralidad estadounidense con la excusa del ataque japonés a Pearl Harbour, ampliándose asi el frente del Pacifico.

Mientras, en el continente europeo y dado que los británicos poseían superioridad militar aérea y marina, Hitler se vió forzado a optar por una estrategia de aislamiento a las Islas Británicas mediante acoso naval y guerra submarina. Ignorando lo errónea que acabaría resultando la decisión, la Alemania nazi también decide declarar la guerra a la URSS, consiguiendo llegar cerca de Moscú y Leningrado. Ahí es donde están detenidas sus tropas en octubre de 1942, momento en el que empieza la acción de este módulo. Sin embargo, la aventura no tendrá lugar allí, sino en la invadida Noruega.

Noruega lleva ocupada desde abril de 1940 y actualmente se encuentra bajo una administración militar que coexiste con un gobierno civil formado por noruegos simpatizantes de la Alemania nazi. Como la mayoría de países nórdicos, se había mostrado neutral durante la primera guerra mundial y esta actitud se mantuvo cuando Alemania e Inglaterra se declararon la guerra. Sin embargo, cuando Inglaterra realizó sus primeros movimientos para el control de las aguas nórdicas, Alemania decidió iniciar la invasión de Dinamarca y Noruega, que sería llamada Operación Weserübung.

La invasión movilizó fuerzas de la Kreigsmarine (Marina de Guerra) y la temida Luftwaffe (Fuerza Aérea) alemanas en una operación similar a la invasión de Polonia. Tras ocupar las costas de Noruega casi sin encontrar resistencia, se lanzó sobre el resto de fuerzas dispersas, ocupando las principales ciudades. Este país estaba en clara inferioridad frente al potencial militar alemán, como lo habrían estado frente al británico. Sin embargo, los noruegos lograron ser un problema más correoso que cualquiera de las otras fuerzas armadas barridas por la blitzkrieg, mostrando una gran capacidad de resistencia al invasor mientras se retiraban hacia el norte, sobre todo comparada con la que ofrecerían los polacos o los franceses. En cualquier caso y pese a que tras las primeras horas se produjo una reorganización de las tropas noruegas y la aparición de refuerzos de Francia e Inglaterra, la insuficiencia de los mismos y los ataques de Alemania en el centro del continente acabaron por obligar a los aliados y al gobierno noruego a abandonar el país, dándose por completada la invasión en mayo. A partir de ese momento Noruega serviría como base naval para la Kriegsmarine en el Atlántico Norte y para interceptar las vías marítimas de ayuda a la Unión Soviética. Adicionalmente, miles de soldados alemanes harían guardia frente al mar en las costas de la península escandinava, en prevención de un desembarco aliado.

Inicialmente, los alemanes nombrarían al noruego Vidkun Quisling jefe del gobierno nazi en Noruega. Quisling había sido miembro del partido noruego Nasjonal Smaling, de corte nacionalsocialista, por lo que tenía una mínima base social de simpatizantes que utilizar para aparentar un cambio de gobierno más natural. La legislación fue modificada para asegurar la presencia de nazis noruegos en casi todas las organizaciones masivas del país, prohibiendo los demás partidos políticos. Además, para la filosofía racial nazi, en control de Noruega tenía una gran importancia cultural, no sólo por el estereotipo racial del ario, sino por las creencias religiosas y místicas de origen nórdico, en las que los nazis y en especial la SS tenían especial interés.

Sin embargo, Quisling estuvo lejos de lograr la adhesión masiva de la población noruega al nuevo régimen. A ello no ayudaba nada que la economía del país se viera perjudicada durante la invasión. Sus productos de exportación fueron dirigidos en exclusiva a abastecer a la propia Alemania, que se convirtió en el único mercado disponible para Noruega, a precios forzosamente beneficiosos para el empresariado alemán. Por suerte, los recursos naturales y el difícil control de la gran extensión del territorio noruego permitieron a la mayoría de la población rural subsistir gracias a la caza y la pesca.

Para compensar la mayoritaria falta de adhesión gobierno nacional-socialista, se consideró necesario enviar al político alemán Josef Terboven como Reichkommisar y jefe de la administración alemana en Noruega. Él sería quien realmente gobernase en el país y cuando se hizo obvio que sería imposible ganarse el apoyo del propio pueblo noruego, pasó a realizar una estrategia de represión militar sobre la población, dirigida por el general von Falkenhorst, con apoyo de varios miles de hombres de la SS y la policía nazi de los simpatizantes noruegos. A mediados de 1942 alemania controlaba de forma directa el Gobierno Noruego y Quisling no pasaba de ser un pelele manejado con hilo germanico.

La población civil mostraba su rechazo a la ocupación de varias formas, más o menos sutiles; pequeños detalles como el rechazo a sentarse en el tranvía al lado de los colaboracionistas del partido Nasjonal Samling de Quisling, pintadas que aparecían reivindicando con un “H7″ el retorno del rey Haakon VII, exiliado en Gran Bretaña o la costumbre de llevar una flor en el ojal para celebrar el cumpleaños del monarca. Mientras, las fuerzas noruegas leales al gobierno legítimo que permanecieron ocultas en el país convirtieron el descontento en el movimiento de resistencia que cuajó en el invierno de 1940-41 con la formación de un Koordinasjonskomiteen (comité de coordinación), del que nació la rama civil y política de la resistencia noruega, llamada Sivorg (sivile organiserte). La rama militar tomó el nombre de Milorg (militærorganisasjon), organizada principalmente por ex-oficiales del Ejército de Noruega y dirigida por el primer ministro en el exilio, Nygaardsvold. A la Milorg se uniría además una compañía especial de saboteadores del ejército noruego, adiestrada en Escocia.

Siguiendo las directrices del gobierno exiliado en Londres, la resistencia concentró sus acciones en el sabotaje de las instalaciones y comunicaciones del enemigo y el espionaje, además de facilitar un constante tránsito de prófugos, resistentes y mensajeros a través de barcos mercantes que hacía parada en puertos noruegos. Al haber un número tan alto de militares noruegos en ella lograr éxitos tan rotundos contra los invasores, el legítimo Gobierno noruego consideraba a la Milorg una más de sus Fuerzas Armadas más que un grupo de resistencia al uso.

Pero el éxito de estas acciones llenó las calles noruegas de dos sonidos terribles: los fusilamientos al azar de ciudadanos noruegos cada vez que una de ellas se producía y el  sollozo ahogado de los hogares donde quedaba una silla vacía. Temiendo que esta estrategia de los invasores alemanes crease un tercer ruido, el de la simpatía hacia la resistencia quebrándose, la Milorg comenzó a orientar sus acciones a estructurar mejor la fuerza de resistencia, así como a recopilar y transmitir información sin hacerse notar demasiado. Su objetivo a largo plazo era la creación de un ejército secreto, listo para atacar cuando las fuerzas aliadas desembarcaran para liberar Noruega. Esta estrategia más blanda provocó no pocas críticas y debates en el seno de la resistencia y del gobierno en el exilio; tanto el grupo comunista de la resistencia, llamado Norge Fritt, como los cuerpos de operaciones especiales británicos S.O.E., que colaboraban con la resistencia preferían las acciones más agresivas. Con el objetivo de mantener la lucha pero coordinada de tal forma que no dañase el futuro de la resistencia, en 1942 se estableció un Mando Superior de las Fuerzas Noruegas en Londres dedicado entre otras cosas a que estas acciones pasasen desapercibidas o bien parecieran ataques de comandos del ejército aliado, sin intervención agentes de noruegos.

¿Qué es el S.O.E. (Special Operations Executive)? Algunas veces llamados "Los Irregulares de Baker Street" en un guiño al escritor escocés Conan Doyle, es un grupo creado oficialmente en julio de 1940 por el primer ministro Winston Churchill y el ministro de economía de guerra Hugh Dalton. Este operativo llevaba la lucha tras las líneas enemigas por medios indirectos, dando soporte y facilitando las acciones de espionaje y sabotaje y sirviendo como núcleo para el movimiento de resistencia en Europa, reclutamiento y entrenando a sus efectivos. Bajo su control directo operaban más de diez mil efectivos y su influencia alcanzaba a un millón de agentes en todo el mundo. El director del SOE era siempre un cargo militar de algún tipo, que era además el principal miembro de un Consejo de quince jefes de departamento o sección. Este Consejo lo formaban personas provenientes tanto de las fuerzas armadas como de la administración pública, la abogacía o eran expertos en negocios e industria. Cada sección del SOE se ocupaba de la actividad resistente en un país concreto, aunque aquellos con una insurgencia patriótica especialmente activa o compleja podían tener varias secciones. A la hora de elegir a los miembros del SOE se prefería a quienes tuvieran un conocimiento exhaustivo de la zona de trabajo, múltiple nacionalidad, dominio de idiomas y experiencia en el manejo de equipos especiales, en acciones de infiltración o similares. Esto significaba que en muchos casos acaban llegando al equipo personas con un pasado delictivo o marginal. Sin embargo, la lista de deserciones en el operativo se reducía virtualmente a cero. Una vez dentro, la mezcla de camaradería en el peligro y odio al bando del Eje formaban un buen hormigón.

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15/08/2016, 23:52
Director

Septiembre de 1942. Los personajes noruegos son miembros de la resistencia en la zona de Telemark desde la invasión nazi de hace tres años. Su labor ha sido principalmente el sabotaje de instalaciones clave y la lucha de guerrilla contra fuerzas alemanas en movimiento, aprovechando lo complicado del desplazamiento en la zona. Tienen su base y residencia en Rjukan, un pequeño pueblo, pero no un pueblo cualquiera; tiene una estación de esquí y un puerto fluvial y una planta eléctrica en el mismo pueblo; pero sobre todo es un lugar estratégico porque en sus cercanías, en Vemork, la empresa Norsk Hydro tiene una planta hidroeléctrica mucho mayor, con una potente caída de agua. En esa planta se fabrica también amoniaco, hecho que, aunque aún no lo saben, la convierte en clave para el desarrollo de la guerra.

Recientemente, además, ha llegado a tomar el mando de la misión alemana en la zona un cargo de la SS, un hombre al que aún apenas han visto más que un par de veces desde lejos y que no sólo ha aumentado los controles en la zona y en especial en la hidroeléctrica y fábrica de amoniaco de Vemork, sino que se ha mostrado como un hombre especialmente duro con la población y con las sospechas de pertenencia a la Resistencia. Su nombre es de lo poco que ha trascendido a vosotros: Teniente Coronel Theo von Meer, Gauleiter (Comandante Regional) de la SS. Con él ha llegado un grupo de soldados del mismo cuerpo, veinte hombres bien entrenados y despiertos que han complicado mucho las cosas a la Resistencia, pues al contrario que los soldados regulares ya aclimatados y acostumbrados a Rjukan y por lo tanto más confiados, estos realizan su labor de vigilancia con eficacia, seriedad y diligencia.

Reunidos en una habitación del Park Hotel, negocio hostelero del centro del pueblo cuyo propietario es miembro y principal financiador secreto de la Resistencia, Hilda, la enfermera miembro de la resistencia, trajo un mensaje de uno de los empleados de la planta eléctrica de Norsk Hydro, el ingeniero jefe Jurianssen. Jurianssen es un simpatizante de la Resistencia, aunque no un miembro activo y Hilda va todas las tardes después del almuerzo a su casa para cambiarle los vendajes y realizar las curas de una fea quemadura que tuvo recientemente en la espalda y que corre riesgo de infectarse. Según su mensaje era urgente pasarles una información, un microfilm. Tras engañar a la escolta de Jurianssen, se hicieron con él y al examinarlo vieron una serie de diagramas, instrucciones y fórmulas de difícil comprensión que requerían el vistazo de un experto en ingeniería. Por recomendación del propio Jurianssen, se envió a Fredrik Asleson, profesor de física de la escuela de secundaria de Rjukan y miembro de la resistencia a la universidad de Olso para contactar con el profesor Leif Carlsen, eminente doctor en Física del que se rumorea volvió de trabajar en Alemania antes de la invasión por su desafecto con el régimen nazi. Además, Carlsen trabajó como asesor de Norsk Hydro, por lo que conoce bien la fábrica. Teniendo en cuenta que el profesor no es bien visto por los nazis y su vida corre peligro, rechazar el contacto con la resistencia fue su primera opción, pero cuando echó un simple vistazo a las imágenes, se convenció de que debía ayudaros. Las conclusiones que se podían sacar del microfilm son, según Carlsen, que los alemanes van a triplicar su producción de agua pesada, consiguiendo así suficiente para enriquecer una cantidad de plutonio que les permitiría obtener la bomba atómica en el plazo de 12 a 24 meses. El protocolo de colaboración de la Resistencia con las Fuerzas Aliadas requería informar a Londres de lo descubierto, enviando el microfilm junto con vuestras conclusiones. En efecto, pronto buscásteis la manera de enviar a Carlsen con su teoría y el microfilm a Inglaterra ocultos en un barco a Francia. Una vez allí, Carlsen subió a un pesquero capitaneado por un resistente francés que sorteó los mares minados para llegar a Londres.

 

Notas de juego

Esta es la introducción para la resistencia, por lo que no pongo a los comandos en copia.

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15/08/2016, 23:59
Director

6 de Noviembre de 1942, hace dos semanas. Treinta comandos noruegos, pertenecientes de la Décima de Comandos Interaliados y entrenados por el S.O.E., han sido convocados a una reunión secreta en un sótano bien vigilado en el 64 de Baker Street, en Londres; en realidad se trata de una oficina encubierta desde donde se planean gran parte de las operaciones de resistencia contra la invasión nazi de Noruega, coordinados con el alto mando inglés y el gobierno noruego en el exilio. La sala donde han sido convocados tiene espacio suficiente para acogerlos en sillas de madera y aún dejar espacio para una pizarra en la que el Mayor Sir Thomas Collingwood, oficial encargado de la logística y control de la misión, va a dar las instrucciones; sea la operación que sea, se debe hacer conscientes a los jugadores de su gran calado si un cargo tan alto en la organización está dando instrucciones directas.

Todos conocen a Collingwood, un hombre que comenzó su carrera en la Royal Air Force durante la Gran Guerra, donde probó tener un don natural en el combate aéreo. Terminó la guerra con 54 victorias en su haber, la Medalla Militar, la Cruz Militar, la Cruz Victoria y el rango de Mayor dentro del ejército Británico. Durante el periodo de entreguerras sirvió en Oriente Medio y pasó a formar parte del cuerpo del Ministerio de Defensa británico. La Segunda Guerra Mundial le sorprende relegado a los despacho con 37 años, pero su suerte cambiaría cuando en 1940 fue llamado a Berkeley Square House por Gladwyn Jebb, el encargado de formar las primeras unidades de la Special Operations Executive. Colaboró en el entrenamiento y en las primeras misiones de espionaje del SOE pero también participó directamente en varias acciones de sabotaje que le valieron el apodo de "Dum Dum" Collingwood. En Septiembre de 1941 fue ascendido al cargo de Brigadier y comenzaría a encargarse de coordinar las acciones del grupo de escenarios del norte de Europa y los países escandinavos.

Buenos días, señores. Han sido convocados hoy por orden del Alto Mando en base a informaciones recibidas de sus compañeros de la resistencia Noruega. Esta información llegó hace menos de dos meses y la operación de la que vamos a hablar aquí hoy se ha tenido que planear en tiempo récord, lo que les dará una idea de su importancia y urgencia. La información que nos han hecho llegar es que las fuerzas de ocupación nazi han ordenado realizar cambios técnicos en el sistema de producción de una planta eléctrica situada al suroeste del país, acompañadas dichas modificaciones de un aumento de la presencia de personal militar y técnico alemán en la planta, en Vemork, la pequeña población donde esta se encuentra y en Rjukan, la capital de la comarca, también muy cercana a la central. El objetivo de tales modificaciones, según el experto de la universidad de Oslo, ahora exiliado aquí y que trabajó en el diseño de dicha fábrica, es triplicar la producción de agua pesada, una sustancia no tóxica que se obtiene en el proceso de fabricación de hidrógeno para la posterior obtención de amoniaco. Al parecer, un flujo constante y abundante de agua pesada permitiría al gobierno de Hitler poner en marcha y acelerar la consecución de un desarrollo científico que les otorgaría gran ventaja en la guerra. Un ingenio de tamaña capacidad destructora que nuestro gobierno cree con sinceridad que podría dar la victoria final al primer bando que lograse su fabricación; según los científicos al tanto del asunto, ese arma podría destruir el puerto de Londres entero y parte de sus inmediaciones. La naturaleza exacta de cómo lograrían los “come-salchichas” tal avance es alto secreto y no nos ha sido revelada, pero no es relevante para nuestra misión. Lo importante para nosotros es que esa planta eléctrica y su almacén de agua pesada han de ser neutralizados lo antes posible.

En este momento el Mayor Collingwood le pasa la palabra al jefe de campo de la misión, el Capitán Jan Ostberg, alias "Villhund" (“perro salvaje”). Este despliega sobre la pizarra un mapa en el que se ve la zona de Rjukan. Todos conocen también muy bien al capitán Ostberg, con quien han participado en alguna operación y al que consideran un simpático aventurero con una larga carrera de avatares. Del hosco norte de Noruega, combatió voluntario del lado de Francia en la primera guerra mundial apenas cumplida la mayoría de edad (hay quien dice que no la había cumplido). Durante la segunda guerra mundial fue uno de los soldados noruegos que permaneció en el país tras la invasión alemana para coordinar la Milorg, hasta que fue traicionado por un colaboracionista y se vio obligado a escapar, llegando de incógnito a Inglaterra. Allí fue asignado al SOE en el que ha participado varias operaciones de entrenamiento de agentes de campo en Escocia, incluyendo la vuestra. Ostberg es el hombre que debe guiar a estos treinta hombres en esta misión.

Chicos, como veis, la planta hidroeléctrica de Vemork y el pueblo de Rjukan se encuentran ahí, en medio de ese montón de nieve. Si os fijáis, es un profundo desfiladero, todos los tejados estarán igual de blancos en estas fechas y para bombardear la central con garantías de éxito tendríamos que volar literalmente la sierra entera, lo que podría provocar muchas bajas civiles. En consecuencia, nuestros cerebros de operaciones han decidido intentar hacer explotar ciertos componentes esenciales de la propia planta desde dentro, introduciendo en Noruega una treintena de comandos, verbigracia, nosotros. Para la acción contaremos con la colaboración de la célula de la resistencia en la zona, que desde hace más de un año llevan realizando operaciones de guerrilla contra los malditos nazis. Seremos transportados en unos bonitos bombarderos Halifax modificados hasta una meseta... ¿Cómo demonios se llama? Es como un maldito juego de palabras: meseta de Har-danger-vidda. En concreto aquí, a un punto sobre el que nos lanzaremos en paracaídas. Una vez allí, seremos contactados por la resistencia, bien en este punto donde se espera que aterricemos si todo va como debe, bien en un punto de recogida a varios kilómetros, más resguardado. Usaremos ese punto de encuentro si por algún motivo no podemos realizar el salto donde deberíamos y tenemos que lanzarnos antes o después de lo previsto. Los compañeros de la Resistencia nos ocultarán acampados en la zona hasta que llegue el momento de la infiltración y voladura de la fábrica, a la que algunos de sus miembros nos acompañarán como guías. Entre ellos habrá un especialista técnico que nos dirá dónde colocar las cargas para lograr el máximo daño. Saldremos en dos semanas para Noruega. Los detalles, mapa y horarios de la misión hasta el momento de contactar con la resistencia están en las carpetas que el teniente Haugen les está entregando. El resto habremos de planearlo ya junto con los insurgentes, que son quienes tendrán la información más actualizada y un plan para obtener la información y equipo necesarios para la misión.

Notas de juego

Esta es la introducción de los comandos noruegos interaliados. No respondáis a este mensaje, esta escena es parte del pasado y cuando empecemos a jugar quedará muy atrás. Tan sólo tiene el propósito de dar algo de información inicial para vuestros personajes.

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16/08/2016, 15:15
Director

Meseta de Hardangervidda, sur de Noruega, cerca del pueblo de Rjukan y la estación de esquí de Gaustablikk, 19 de noviembre de 1942, 21:45 horas. Los miembros de la resistencia se encuentran en un valle limpio y llano del área de Kalhovd, frente al lago del mismo nombre y el río Mär. Allí hay una cabaña de cazadores y pescadores que les sirve como refugio para las bajísimas temperaturas del invierno mientras esperan. Con ellos, al mando de la operación está Edvin Olsen, el padre de Hilda, como equipo de recogida y guía de un grupo de treinta comandos ingleses que en breve saltarán en paracaídas. Su misión es recogerlos y llevarlos hasta una zona resguardada y poco vigilada para que acampen hasta el momento de realizar la misión conjunta. Miran al cielo constantemente mientras canturrean o silban distraídamente el himno nacional de Noruega o algún otro tema patriótico.

Están allí para montar una zona de aterrizaje con bengalas dispuestas en círculo para que los paracaidistas ingleses las tomen como referencia. Este grupo de comandos habrá de ayudarles a realizar una misión de sabotaje, de la que tendrán más información enseguida. Pero antes de que puedan hacer más preguntas, escucharán los motores de los aviones acercándose y es necesario empezar a prepararse.

Notas de juego

Voy a ir contando lo ocurrido en vuestro pasado en presente, para aprovechar los textos del propio módulo. Pero recordad que todo esto es parte del pasado.

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16/08/2016, 15:18
Director

"Mientras te dedicas a la tarea asignada, aprovechas para disfrutar un momento de las vistas que te ofrece el horizonte, difuminadas por el brillo de la luna menguante en lo alto, apenas una línea curva difusa. Sigues con la mirada la línea de la cordillera que tan bien conoces y quieres, repasando mentalmente el nombre de las cumbres: el glaciar Hardangerhokulen, el pico Harteigen... Espera. ¿Qué es eso? Te encuentras con el perfil de una montaña con tres cumbres que no debería estar ahí. Se ve difusa, lejana, justo detrás de la primera línea de picos que tienes delante. Intentas recordar de cuál se trata, pero no lo logras. Ha de ser un efecto óptico, una cordillera cuya imagen distorsionada por la presencia de niebla helada en la lejanía. Ya has visto este fenómeno antes pero en este caso parece más real que nunca. Entonces, uno de tus compañeros alza la voz un momento para avisar de que cree escuchar los aviones y miras en su dirección un par de segundos. Al volverte hacia la montaña misteriosa, la visión ya no está allí, confirmando lo ilusorio de su presencia."

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16/08/2016, 15:19
Director

Enseguida escucháis el motor de los bombarderos H.P. Halifax, en este caso con las tripas vacías de bombas y llenas de comandos noruegos entrenados por el S.O.E. británico (Special Operations Executive) en escocia, acercándose. Calculáis su posición al noreste de la vuestra, acercándose desde un punto por donde no los esperábais. Aún tardarán unos minutos en ver vuestra pista de aterrizaje y en que podáis ver vosotros sus siluetas, pero acecháis igualmente el cielo.

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16/08/2016, 15:19
Director

Hay una calma extraña en el avión. En el ambiente ensordecedor y tenso que crean los motores del Halifax y de los cazas que os escoltan volando en formación alrededor vuestro hay poco que os anime a charlar. Os subieron a bordo a mediodía con la idea de llegar al punto de lanzamiento después del anochecer. Todos estáis atados al arnés de los paracaídas desde hace unos minutos. El frío es intenso en la cabina y quizá sea eso, la temperatura y el sueño lo que os mantiene a todos en silencio en medio del sonido envolvente y el vaivén uterino de lo motores. Alguno consulta su reloj; ya deberíais estar encima. La voz metálica del piloto anuncia que estáis llegando al punto de lanzamiento. Una luz roja se enciende tiñendo toda la bodega de carga de ese color. El capitán Ostberg, jefe de la misión, se pone en pie. “Señores, preparados. No tenemos toda la mañana y quiero que estos aviones puedan de aquí inmediatamente después de que el último de nosotros haya tocado el suelo de Noruega. En vuestro idioma, eso quiere decir que en cuando os dé la señal salgáis tan rápido como si os pisara el diablo las pelotas.”

Este último comentario arrancará algunas risas entre los soldados que quedarán repentinamente cortadas por el estallido en cadena de los antiaéreos disparando. No hay tiempo de pensar. El capitán les grita que se preparen para saltar ya, no hay tiempo de llegar al punto de salto y empieza a dirigirles hacia la compuerta; antes de que el primero de ellos llegue a ella, escuchan el estallido del otro Halifax, cuya onda expansiva hace temblar el aparato en el que van. Llueven los primeros impactos sobre este avión. Algunos disparos comienzan a atravesar el fuselaje. La puerta trasera del aparato se abre poco a poco en lo que parecen ser unos segundos interminables. Siguiendo las normas militares, el capitán es el primero en el orden de salto y después de él va el personaje del zapador, Horn, muy importante para la misión. Después el teniente Andersen y luego Guldbrandsen, Nass y el resto de los miembros del comando, hasta quince. Entre el capitán y Horn cuelga un paquete grande, un recipiente especial metálico, del tamaño de una persona y con forma de tubo acabado en punta redondeada que, como se comunicará a la mesa de juego, incluye equipo especial, necesario para la misión, incluyendo los esquíes. Otro recipiente idéntico a este se encuentra varios puestos más atrás, entre el último y el penúltimo de los saltadores.

De repente, un proyectil revienta la cabeza de Ostberg, el capitán, que iba a saltar en primer lugar y que queda colgando inerte sobre el cable que se une al riel. Los soldados empiezan a empujarse para salir cuando la puerta está sólo a medio abrir. Empujan el cadáver de Ostberg, Dios lo tenga en su gloria, para saltar como y cuando puedan. Ya en el aire, justo después de que Nass haya saltado y antes de que salte el siguiente compañero, el avión pierde un ala en un impacto y se precipita girando como una peonza. Por el ángulo de caída, lo pierden de vista pero escuchan el inequívoco sonido del brutal golpe contra el suelo, cerca de la roca de una loma, lo que les permite tener una idea de dónde se ha estrellado, junto con el segundo recipiente de equipo especial y los compañeros que no han saltado a tiempo.

Por suerte, los paracaídas de los personajes se han desplegado sin problemas. Horn ve pasar a una veintena de metros a un compañero, el que debía saltar justo detrás suyo, colgando inerte de su paracaídas. Tiene la cabeza sobre el pecho y los brazos y piernas laxos. Una herida de grandes proporciones puede verse un segundo en su tórax antes de que desaparezca en la oscuridad al girar y ser llevado sin control por el viento contra el muro de piedra. A todos los efectos está perdido, si no está muerto ya. Para más desgracia, se dan cuenta entonces de que el comando que transportaba los explosivos iba en el otro avión, el que reventó en pleno vuelo (zapador y explosivos iban en dos vuelos separados por precaución, para evitar perder ambos si uno se estrellaba). Por tanto sólo quedan 4 de los 30 comandos para la misión y no tienen explosivos. Mal asunto.

Notas de juego

Voy a ir contando lo ocurrido en vuestro pasado en presente, para aprovechar los textos del propio módulo. Pero recordad que todo esto es parte del pasado.

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16/08/2016, 15:24
Director

Lo primero que escucháis son los estallidos, una secuencia rápida de explosiones, seguida de las líneas de luz disparadas hacia el cielo desde una de las cuerdas montañosas sobre la que deben estar pasando en este momento los aviones. Reconocéis el sonido: baterías antiaéreas. Por vuestra cabeza pasan rápidamente los informes de la Resistencia sobre las posiciones antiaéreas alemanas, pero da igual; ni los aviones de los comandos estaban entrando por donde se les esperaba ni hay nada para lo que esos informes os puedan ayudar ahora mismo. Una porción de la noche se ilumina de repente con el estallido de uno de los aparatos. Tomáis mentalmente nota de su posición aproximada antes de ver la línea de fuego que va dejando el segundo bombardero, también tocado en los motores, pero aún volando. Este Halifax pierde altura de forma constante durante unos agónicos segundos hasta que revienta en una bola de fuego tan pronto se topa con la pared de roca de la cordillera y sus mil pedazos recorren en una avalancha de fuego la falda de la montaña.

Fiske ha tenido los reflejos suficientes para sacar los prismáticos y cree ver recortadas contra el blanco de la falda de los picos más altos algunas figuras en paracaídas. Parece que van a caer a unos quince kilómetros de distancia.

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16/08/2016, 15:26
Director

El resto de la historia es sencilla: esquivando patrullas alemanas mientras se buscan unos a otros, el grupo de la resistencia y los cuatro comandos supervivientes logran unirse y refugiarse en la cabaña de Edvin, desde donde contactan con Londres mediante el programa de radio de la BBC y un código de claves. Cuando lo hacen, reciben la orden de realizar igualmente la misión como puedan, en un plazo de menos de tres días.

El día siguiente lo pasan recorriendo Rjukan, obteniendo explosivos y otros materiales como uniformes de comando para los miembros de la resistencia, que se verán obligados a participar en la misión; conviene que sean confundidos por comandos para que no haya represalias contra la población civil. También consiguen mapas del complejo de la planta hidroeléctrica, cuyos depósitos de agua pesada han de hacer volar.

Por fin, llega la noche del asalto. Sólo sois 9 personas, en lugar de 30, por lo que el asalto a la fuerza no es viable. Se impone el sigilo y recordar que vuestras vidas son lo de menos. Si podéis cumplir la misión incluso aunque eso os haga arriesgaros a ser capturados... bien, eso no debe ocurrir. Cada uno de vosotros tiene una pastilla de cinauro en su equipo.

Notas de juego

Bien, voy a ir subiendo los mapas del complejo aquí y vuestro equipo a las hojas de personaje, para que podáis irlo viendo y haciendo planes en vuestra cabeza.

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16/08/2016, 15:44
Director


 

Notas de juego

Este es el mapa del complejo; lo primero que deberéis hacer es decidir el punto por el que empezar el asalto.

Tenéis bastante información sobre las guardias: el cambio de turno se produce a las 20, 24, 4 y 8 horas. Cinco minutos antes de cada cambio, doce soldados salen de su acuartelamiento en las oficinas de la casa de máquinas y se suben a un camión del parking y se dirigen a la caseta H. Al mismo tiempo, cuatro soldados más salen del mismo edificio para dirigirse a sustituir a los guardias que hay entre los edificios G y C y junto a los edificios F y E. El camión llega hasta la caseta H, deja a cuatro soldados y recoge a otros cuatro, luego va al puente y hace lo propio con los que están allí de guardia. Diez minutos después vuelve hacia el complejo, subiendo hasta la caseta de guardia B y sustituyendo a los últimos cuatro soldados para volver al edificio C veinte minutos después de haber salido.

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16/08/2016, 15:58
Director

Notas de juego

Este es el mapa del edificio de la fábrica de agua pesada, estando los depósitos de la misma en la planta 0.

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16/08/2016, 23:52
Thrud Bjorndotter
Sólo para el director