-Hola jefe.- Saludo.- Hoy no te quejaras, llego 3 minutos antes.
-Hoy es el día de las sorpresas. Yo he limpiado y tu no llegas tarde. Bien, te presento al señor Salzoya, se quedará con nosotros todo este mes. Vamos a una mesa a hablar, ocúpate tu del local. Si no puedes, avisame.-
Breogán es un hombretón de 2 metros de algo y 120 kilos. Aunque suele ser brusco y casi siempre parece malhumorado, es un cachito de pan.
Marcad sólo a Miguel Ángel Salzoya “Curtidor” y a Berit Schneider, que sois quienes coincidireis en esta escena.
- De acuerdo.- Respondo algo sorprendida por la inesperada visita mientras me preparo para abrir el local.
Esperamos por tu compañero para seguir, en cuanto postee el, seguimos.
Güas noches Señorita! Pos un boptellín sí que me bebía, señor Breogán. -Me siento con él en la mesa Pos usté dirá.
Un tipo extraño que habla de un modo peculiar, nada que ver con la gente que suele reunirse por aqui. Todo esto es muy raro, pienso para mis adentros mientras abro un botellin que dejo sobre la mesa diciendo. - Aqui tiene.
Luego me aparto, fingo arreglar las mesas pero intento no alejarme demasiado por si mi jefe tiene problemas, no es que yo sea cinturon negro pero llegado el caso una patada donde duele se darla.
Muchismas gracias, moza.- me giro hacia el gigantesco hombre.- Usté dirá.
-Vamos mejor a una mesa a hablar- dice Breogán llevándose al señor Salzoya a una mesa apartada.
-Berit, limpia todas las estanterías de detras de la barra mientras hablamos. Quitas las botellas las limpias y las vuelves a poner-dice mientras camina hacia la otras esquina del bar.
En cuanto os sentais a la mesa empieza a hablar contigo.
-Verá usted, parece que algún empresario quiere quedarse con este edificio, y todos los vecinos han vendido menos yo. Tengo en propiedad el bar y el piso de arriba y quiero conservarlos, pero parece que ellos tienen otros planes. Necesitaría que se quedase todo el mes para controlar lo que habla la clientela, por si hay algún topo, y además que nos ayude a mi y a Berit si hay problemas. Ese es su trabajo.- te lo explica todo de forma tranquila pero seria.
Desde la barra, ves como Breogán conversa con el hombre de forma tranquila, aunque parece bastante serio.
Empiezo a limpiar las estanterias como me a pedido mientras, disimuladamente, intento averiguar que esta pasando.
Mu bien. Y si endescubro algo ¿qué hago?, ¿ná más que se lo cuento a usté?, ¿la chiquilla sabe algo d'esto u sospecha d'ella?, ¿llamo a la policía u le hincho la cara al susodicho tipo y que se vaya a su casa calentico? - Me enciendo un cigarro y me bebo tranquilamente el botellin- ¿Y que tipo de sitio es este, tengo que venir vistío de forma especial? Por que como aquí venga toa la chiquillería d'esta rara no creo que hablen así mu libremente si estoy yo merodeando. quizá a lo mejor sería que hiciera de camarero o de algo así.
.Simplemete quiero que al final de la noche me diga que es lo que ha oido con respecto al tema que le he comentado. No quiero más violencia que la inevitable.La chica no sabe nada, y prefiero dejarlo así. Respecto a la ropa, esto es un bar de heavys, pero unos vaqueros y una camiseta negra estarám bien.- te dice visiblemente más aliviado.
Aunque lo intentas, no consigues oir nada, pero ves como Breogán parece mucho más relajado a medida que la conversación avanza.
Haz una tirada de Aplomo, dificultaad 8, para ver si puedes oir algo.
Pos d'acuerdo entonces. Mañana empiezo, a las 9 aquí com'un clavo . - Estrecho firmemente la mano de Breogán- Hasta mañana, muchacha. - Salgo del bar y me dirijo a casa.
¿a partir de aquí seguimos en mi hilo?
Te pondré un últimos post en esta y despues si, pero estoy esperando por tu compañera. En cuanto postee, seguimos.
Escuchas frases sueltas del estilo "todos los vecinos han vendido ya" "solo debe controlar a los clientes" "con vaqueros y camiseta negro vendrá bien vestido".
El señor Salzoya se va y se despide de tí.
Muy buena tirada. Pasamos a tu escena.