Partida Rol por web

Las estepas heladas de Islandia, las agitadas aguas del Atlántico Norte, las tranquilas olas del Mediterráneo... Tu viaje te había llevado lejos de donde te criaste... Ibas rumbo a Grecia, lugar donde naciste, ya que sabías que algo no iba bien. Como hijo de alguien que en su día trabajo en el Santuario sabías que los Olímpicos no tardarían en realizar su movimiento contra la humanidad. 

Sin embargo una tormenta os sorprendió en el camino e hizo que el barco perdiese su rumbo y en uno de los golpes del oleaje te diste un golpe en la cabeza que te dejo inconsciente...

Una vez despiertas ves que el barco ha encallado en la costa de lo que a simple vista parece ser una gran isla.

Una vez consigues mantenerte en pie el suficiente tiempo como para que recuperes la consciencia completamente, ves en la playa como algunos de los marineros que te acompañaban están empezando a hacer las reparaciones oportunas en el barco.

Es en ese momento cuando oyes unas trompetas sobre un de los riscos que dominan la playa y ves unas banderas aparecer...

La tormenta fue sorpresiva y fatal, acostumbrado a situaciones criticas a lo largo de mi vida, me encomende en manos del destino confiando en que todo resultaria de la mejor manera. Cuando perdi la conciencia tras ser golpeado por una verga que se desprendio de sus cabos, secretamente albergue esperanza en la luz que ardia en mi interior para salvar mi vida.
Cuando desperte en aquel paramo de arena y rocas, con la cabeza estallandome y el cuerpo debil, necesite un buen momento para comprender donde me encontraba. Por unos instantes intente asimilar aquel lugar a la geografia de Islandia, aunque de ninguna manera me encontraba en los fiordos. Definitivamente aquello era el mediterraneo y posiblemente hubieramos naufragado hasta la costa.
Me aproxime hacia los marineros que trabajaban incansablemente para intentar reparar los daños de la tormenta, y antes de que pudiera preguntarles donde nos hallabamos el sonido de una lejana trompeta acaparo nuestra atencion, seguido de la aparicion de un grupo de gente en un risco cercano portanto un estandarte.
- Donde hemos llegado, reconocen ese emblema?

Uno de los marineros se gira y al ver los emblemas se sobresalta algo, para después explicarte.

- Al parecer hemos ido a dar a Malta... y esos deben ser los famosos Caballeros de Malta... deben haberse acercado al ver el humo de nuestras hoguera... - te comentó el marinero mientras seguía con las labores de reparación.

Acto seguido comenzaste a observar a los templarios, que parecían observar la situación con extremo detalle, y fuiste capaz de percibir que varios de ellos tenían la capacidad de manipular el cosmos, de hecho dirías que incluso están realizando algún tipo de llamada, a la espera de encontrar a alguien que fuese capaz de sentir dicha llamada...

Ante la respuesta de los marineros fijo mi antecion en aquellos Caballeros y noto como algunos parecen estar manipulando su cosmo energia, no estaba seguro aun de que lado estarian por lo que opto por un acercamiento neutral para averiguar más sobre aquella orden antes de develar mis capacidades del domino del Cosmo.
Me despido de los marineros diciendoles que voy a ver si aquellos hombres pueden ayudarnos, y me encamino hacia el risco, mi idea es acercarme a ellos y plantearles la situacion de nuestro naufragio para averiguar sobre aquella region y la presencia de estos templarios en aquel risco.

Vas subiendo por los riscos con facilidad dado tu entrenamiento previo, y al llegar arriba ves una patrulla de unos 10 caballeros. Uno de ellos alza la mano en tu dirección y empieza a hablar.

- ¡Alto! ¿Quien va? - notas que su forma de hablar es arcaica, como si se encontrasen en la Edad Media. Ves que el resto habla de informar a sus superiores del naufragio y ofrecer su ayuda, entre ellos alguno sabes ya a ciencia cierta al encontrarte cerca de ellos que conocen el secreto de la manipulación del cosmos al igual que tú.

-Soy Neithan Üller- respondo acercandome al hombre de armadura que me habla, y prosigo- he naufragado junto a la tripulacion de aquella embarcacion -señalo la playa donde los marineros trabajan por reparar los daños- Los vimos desde la playa y me ofreci para venir a pedir ayuda en nuestra labor para que podamos continuar nuestro viaje.
Examino disimiladamente a los caballeros e intento ver sus reacciones para luego preguntar.
- ¿Que es esta isla donde hemos llegado?¿Vosotros sois la guardia?

Tras tu respuesta uno de los cabaleros se quita su yelmo, mostrando un rostro anciano pero solemne.

- Joven... os encontráis en la Isla de Malta... último bastión de defensa contra los falsos dioses que atentan contra toda la Creación... - dijo respondiendo a tu pregunta... - He podido advertir que poseeis una fuerza prodigiosa joven... ¿quién os enseño a manejar el cosmos de esa forma? - esa pregunta te cogió algo por sorpresa, pero al concentrarte más en el anciano te das cuenta de que es el que más cosmos emana, al nivel de uno de los antiguos caballeros de oro. 

Cuando mencionaron lo del ultimo bastion contra los falsos dioses mis hijos se abrieron, luego me sorprendio que el anciano guerrero pudiera notar mi cosmos aun sin manifestarlo, era evidente que se trataba de un guerrero veterano y muy conocedor de la energia que vibraba dentro mio.

-A decir verdad nadie me ha enseñado nada, yo solo he ido aprendiendo a dominarlo. No sin desagradables accidentes de por medio, pero creo que actualmente tengo un buen dominio del Cosmo. 

Has mencionado a los falsos dioses, son aquellos los del Olimpo? Si es así, yo tambien vine aqui dispuesto a detener lo que ellos estan haciendo con el mundo.

El maese se sorprendió al escuchar tal afirmación... y la verdad es que luego te diste cuenta del porque... tú... un joven apenas entrenado hacer frente a los dioses Olímpicos, sin lugar a dudas a oídos de otros sonaría como una locura... pero ese era tu destino.

- Grandes palabras joven... pero veo que vuestro poder aún está verde... si estáis dispuesto a retrasar vuestro viaje un par de meses, nosotros os entrenaremos y haremos de vos una fuerza que incluso los infiernos temerían... - dijo a la expectativa de tu respuesta. 

Le miro con determinacion y hablo.

- El destino me ha conducido a esta isla, fuerzas más alla de los olimpicos me han hecho llegar a estas costas en este día. Es evidente que nuestro encuentro forma parte de los planes de algo mayor a nosotros, y en eso tengo toda la fe de mi vida, asi que estoy dispuesto a entrenarme con vosotros para cumplir con mi cometido.

Culmino mi respuesta llevando mi puño cerrado sobre mi corazon, con solemnidad.

El maese esbozó una gran sonrisa al escuchar tu respuesta... - Me gusta tu determinación joven... ¿dónde están mis modales? ¿Cómo os llamáis? Tendréis tiempo para contarme vuestra historia según volvamos a la fortaleza... - dijo mientras te invitaba a seguirle... entonces pudiste darte cuenta de que en un cerro que dominaba gran parte de la isla se levantaba una gran fortaleza, construida probablemente en la Edad Media.

Emprendo el camino con el anciano, no era una persona dada a hablar demasiado sobre si mismo, pero fui satisfaciendo su curiosidad en la medida en que no era demasiado complicado hacerlo, a cada paso estabamos más cerca de aquel enorme castillo que coronaba el monte.
-Mi nombre es Neithan, hasta donde yo se mi padre fue un guerrero entrenado en el Santuario griego, aunque su dominio del Cosmo era incompleto por lo que sufrio una herida que le dejo relegado para siempre a ser un mayordomo de otros santos. Mi madre era nativa de Islandia y se conocieron en uno de los muchos viajes que hizo mi padre, cuando el señor al que servia murio, fue liberado a su suerte por lo que se fue a Islandia a buscar a mi madre, entonces nacimos nosotros. Sin embargo apenas habiamos nacido cuando el regreso al Santuario para pelear la batalla contra los olimpicos.
Mi hermano gemelo y yo, nacimos y fuimos criados sin conocer absolutamente nada del cosmo ni de la herencia de nuestro padre. Aunque de muy pequeños comprendimos que eramos diferentes al resto de los niños y que podiamos hacer cosas unicas. Por eso crecimos alejados de todos, trepabamos montañas escarpadas, nos internabamos en las cuevas de los glaciares o visitabamos los Geisers para pasar el rato. Poco a poco comprendimos que dentro nuestro existia una gran energia que podiamos dominar y controlar, eso nos permitia influir en lo que nos rodeaba o nos protegia de cosas que otros considerarian mortales. ASi empezamos a luchar entre nosotros para conocer nuestros limites y fue asi que tambien termino nuestro entrenamiento cuando dejamos que nuestras emociones nublaran la mente que controlaba el cosmo. Mi hermano perecio por la furia de la lava volcanica y los vapores hirvientes de los glaciares derretidos, yo me salve milagrosamente y comprendi que tenia que aprender a usar mejor mi don para evitar dañar a otros. Emprendi mi viaje hacia el santuario para luego aprender lo que habia pasado en el pasado y conocer de boca de mi madre la historia de mi padre, fue entonces que decidi enfrentar a los olimpicos por mi hermano y mi padre, asi como por todos los hombres, niños y mujeres de este mundo que merecen la absoluta libertad y libre albedrio
Finalmente el camino se habia hecho ameno y tenia la garganta reseca de tanto hablar, ademas que hacia muchas horas que no probaba bocado alguno.

- Una triste historia joven... pero tu valor es encomiable... aquí te enseñaremos a usar tu talento... y quizás en un tiempo podamos ir juntos a enfrentarnos a los Olímpicos... - te contestó a la vez que llamaba a algunos sirvientes de la fortaleza.

- ¡Qué preparen algo de comida y bebida! ¡Tenemos que dar la bienvenida al joven Neithan como los caballeros de Malta sabemos hacer! - dijo al sirviente que fue presto a realizar la tarea que se le había encomendado...

Pasaron un par de meses desde que llegaste a la isla y casi habías conseguido ponerte por delante del resto de caballeros en cuanto a talento en la lucha... delante tuyo te aguardaba tu última prueba... habías oído rumores sobre un tesoro que protegían los Caballeros de Malta y que concederían al más bravo de sus filas... y parecía que el momento de ponerte a prueba a ti había llegado...

Frente a ti se encontraba el Gran Maese... nunca lo habías visto o imaginado como enemigo... pero su energía cósmica era abrumadora...

El entrenamiento de los últimos meses habia sido arduo, aunque sabia dentro mio que toda mi vida me habia preparado para aquello aunque jamás escuchara hablar de los caballeros del Malta y su trabajo tesoro. En mi interior solo habia un motor que me habia superarme cada día y era el deseo de volverme suficientemente fuerte y poderoso para no permitir que nadie abusara de aquellos mas debiles. Levantaria mi puño contra todos los que intentarán oprimir a otros abusando de su poder. El maestro estaba enfrente mío, lucia demasiado avejentado sin embargo su cosmo era poderoso y energico. Me tocaba enfrentar la ultima prueba, la cual pocos siquiera llegaban a aspirar para tomarla. - Gran Maese, he llegado hasta aqui para reclamar el tesoro de los caballeros de Malta para mi. No para incrementar mi gloria ni para hacer mal uso del mismo, sino para convertirme en un guerrero digno de enfrentar a los olímpicos para liberar al hombre de su tiranía. Dime, gran Maese ¿cual es la ultima prueba a la que debo someterme?

El Gran Maese empezó a concentrar su energía cósmica...

- ¿Acaso no es evidente, joven Neithan? ¡Tendrás que enfrentarte a mi! ¡Solo aquellos que superen mi fuerza son dignos de portar la reliquia que llevamos siglos salvaguardando! - dijo mientras avanzaba hacia ti... su energía te abrumaba... pero tu entrenamiento había sido duro y tenías confianza en tus habilidades...

En la arena estaban como espectadores el resto de Caballeros de Malta mirando casi sin parpadear y en absoluto silencio el duelo...

Siento su gran cosmo elevandose, esperaba que aquello solo se tratara de una prueba, de ninguna manera accederia a poner en riesgo la vida del Gran Maesse. Enciendo mi cosmo haciendo que la energia se acumule para formar unas alas luminosas que brotan de mi espalda, aquella tecnica la habia usado en pocas ocasiones pero no constituia ninguna sorpresa para los presentes, sin embargo me mantendria algo alejado del alcance de los puños del maestre y con mayor posibilidad de esquivar sus ataques a distancia, luego veria si tendria que duplicar la apuesta.

El Gran Mese vio tu técnica y se quedó a la defensiva con su gran espadón a la vez que empezaba a concentrar energía cósmica.

- Buen movimiento Neithan... pero eso no te servirá si me mantengo yo también a la defensiva... - dijo el maese analizando tus movimientos...

Ya tienes la ficha modificada y puesto el resumen en tu hoja de personaje aqui en la partida, ya puedes actuar en consecuencia en el combate

Desde lo alto con las alas desplegadas comienzo a acumular cosmo energia mientras evaluo la actitud del maestre, era obvio que aquello era una prueba, pero no me gustaba tener que golpearlo para demostrar que estaba dispuesto a todo. Sabia que el anciano guerrero tenia un cosmo mucho más poderoso que el mio y apenas si tenia una chance de tocarle, menos de causarle una herida, sin embargo tampoco lograria nada lanzandome en un ataque ciego con todo mi energia.

- Maestre no deseo pelear contra usted para demostrar mis habilidades, nuestros verdaderos enemigos estan alla afuera no aquí en esta arena. Pruebeme combatiendo contra un titan si lo desea, pero no pretenda que use toda mi energia intentando golpearlo y derrotarlo, pues no esta en mis intenciones.