Partida Rol por web

Sangre Ancestral

Comida China

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07/03/2014, 16:38
Richard Straptom

- Mire, señorita - dijo, clavando sus ojos azules en ella - Sabe tan bien como yo que esto está más claro que el agua: su cliente mató a ese chico, probablemente tras alguna pelea tras entregar el pedido, y quiso camuflar el asesinato fingiendo  que había sido atropellado. En cuanto lleguen mis compañeros de la policía científica con los resultados, no habrá lugar a negociaciones de ninguna clase ni reducciones de condena por confesar. Así que, última oportunidad, ¿nos dices que ha pasado, tipo silencioso, o me voy a tomar un café y a preparar el papeleo?

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07/03/2014, 18:02
Director

El chino, que sabía perfectamente lo que estaba pasando, dejo esa pose y se empezó a preocupar.

La mujer, torció el gesto, pero no dijo nada más, porque entre otras cosas, sabía que mantener la charada de que el tipo era inocente no iba a ningún lado.

Se lo pensó dos veces, y volvió a hablar al hombre.

..- Bien, reconoce que estuviste con él, di que te amenazo, y fue un accidente, una tontada como que se enredo la cadena en su cuello, porque usaste la cadena, verdad-..

El hombre, que seguía sin muchas ganas de hablar, se aclaro la garganta y contesto tranquilo.

-.- Bueno, pues, esto…, nos robo, dinero de la caja, eso estará bien, y cuando fui a hablar con él, pues ya estaba como si le hubieran pegado, porque le habían pegado antes de traer y dejar el paquete en la puerta de atrás y pirarse con la bici.

Y quise averiguar qué pasaba, y donde estaban las cosas de los jefes, y se puso tonto, y fue un accidente. Dile eso-.-

El hombre se calló. Y te miro. Y luego antes de que ella dijera nada.

-.- El jefe Hei no me va a sacar de aquí verdad -.-

La mujer medito un segundo como pensando que decir, y tú la miraste inquisitivo.

Dice que el hombre robo dinero de la caja cuando dejo el paquete, y que alguien le habían dado una paliza, supone que por drogas. Así que fue a hablar con él, pero el hombre, seguramente un drogadicto, se puso a luchar con él, y en el forcejeo se estrangulo.

Piensa que estaba vivo, y no sabe nada más.

Espero que con eso, podamos hablar con la fiscalía sobre una reducción de condena, y homicidio involuntario.

Algo te llamo la atención y es que ella no iba a contestar a la ultima y suplicante pregunta del fortachón.

Estaba claro que estaba allí para zanjar el tema. Y por lo que habías oído, nada implicaría a los jefes en aquel asunto. Aunque sin duda habían mandado matar al repartidor.

Dudaste, pero decidiste que era mejor no tocar el tema Vampírico desde la comisaria, y el tipo era culpable, así que aquello seria sencillo, un tío entre rejas, y otras cuestiones en otro momento.

Tampoco estabas seguro de que había en el paquete. Puede que el mismo cocinero no lo supiera. Pero si que era importante para que mataran al chaval. Pero si decía la verdad y no había motivo para que mintiera creyéndose a salvo por el idioma.

Quien le había dado la paliza y quien tenía el geotransmisor que tenía su ruta…

Miraste hacia el cristal de detrás de la mesa, y asentiste. Estaba todo grabado. Y abogada y delincuente aun no sabían que tu podías ratificar todo lo expresado en voz alta. 

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07/03/2014, 19:47
Richard Straptom

- Tuvieron una pelea, y el repartidor terminó muerto por accidente, vale - dijo, mirando con expresión neutra al chino, para luego esbozar una sonrisa - pero ahórrense los adornos de las drogas, que eso no se lo traga ni usted. Con homicidio involuntario y mi declaración, podríamos dejarlo en cuatro años de cárcel más o menos, según mi experiencia. Eso ya lo decidirá el Juez, y nos aseguramos de que ambas comunidades sigan en paz.

Dejó esas palabras sobre la mesa, dejando caer que no quería que los chinos se enfadaran, sin embargo, sabía perfectamente que el detenido transmitiría lo dicho a su jefe. 

- Vale, voy a por el formulario, gracias por su tiempo, señorita Cho.

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07/03/2014, 22:07
D. Treynor

Sales de la sala de interrogatorios, y la abogada sale después, y conducen al tipo a otra sala a espera de que firme la confesión.

La abogada saca el móvil y llama por teléfono, y no le pierdes ojo, al tiempo que tu capitán se acerca.

El había visto el interrogatorio desde detrás del cristal.

Bueno, parece que este caso lo van a resolver en tiempo record. Confesión, y dudo que con lo que me ha dicho Wahlberg este escape. De involuntario no tiene nada, tiene un millón de golpes.

De todas formas. Sé que hablas…

Lo dejo caer, pero no termino la frase por si alguien os escuchaba. Tu capitán tenía acceso a tu expediente, y sabía que hablabas chino, alemán, italiano, y francés. Motivos por los cuales muchas veces te requerían de otras comisarias para algunos casos especiales.

Y sobre todo motivo por el que estabas destinado cerca de Chinatown y Little Italy.

No obstante, tu antiguo compañero Boby Robson, también sabía eso, pero Collins aun no tenía la menor idea. Y tú preferías mantener el arma siempre oculta.

Alguna cosa más que tengamos que añadir a esa confesión.

Mientras tanto mirabas como Cho, la abogada asentía al teléfono, ponía cara de extrañarse y asentía de nuevo. No estabas seguro de que decían, porque entre el capitán hablándote cerca, ella lejos, y que hablaba bajito. Pero aun así te quedo la impresión de que ella no tenía claro porque tenía que dejar que su cliente se pudriera en prisión.  

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08/03/2014, 09:54
Richard Straptom

Richard sonrió casi imperceptiblemente, a veces olvidaba de que en pleno siglo XXI era bastante difícil guardar ciertos secretos. Bajó el tono y habló con su jefe como si apoyara la barbilla en su mano, un gesto aprendido con los años, para disimular su conversación.

- En apretarle las tuercas a ese chico no se tarda hora y media, y ese grandullón le dijo a su jefe que ya venía con la paliza de camino. El problema fue que el paquete que debía de traer no era el acordado, de ahí lo sucedido - dijo, apoyándose en la mesa - El contenido original y geolocalizador siguen perdidos... creo que quedan flecos sin resolver. Me da que la víctima tenía sus propios negocios para poder llegar a fin de mes.

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08/03/2014, 20:43
D. Treynor

Bueno, si es así, investígalo. Pero si tenemos al culpable, le damos carpetazo.

El capitán se da la vuelta y te deja para que hagas tu trabajo murmurando mientras, y solo audible para alguien como tú.

Así dejan de comerme el culo con este asunto.

Durante la siguiente media hora estuviste con uno de los muchachos que escribía muy rápido, y redactaste la confesión. En ella se incluía todo lo que él había dicho a la abogada, se omitía lo de la droga, porque era una mentira y demás .

Al leerla, no pudiste evitar sonreír. La gente siempre se pensaba que era más lista que la justicia, o que tú en este caso.

Los resultados de las pruebas, todos incriminatorios y claros llegaron al mismo tiempo que tu documento. 

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08/03/2014, 20:43
Director

Te sentaste en aquella sala, mucho menos incomoda para el sospechoso, y la abogada se puso en la puerta.

Le pusiste el papel a hombre delante y un bolígrafo.

El miro la hoja, luego a la abogada, y miro de nuevo la hoja. No tenía muchas ganas de firmar, pero cogió el bolígrafo con rabia y firmo.

Había confesado un homicidio que para nada era accidental, y habías incluido material de sobra para que el crimen pudiera llegar a ser de tipo B, aunque dudabas que lo consiguieras. Seguramente estaría al menos 4 años en prisión, en eso no te equivocabas.

Mientras los muchachos de uniforme se movían para llevarse al cocinero, la abogada le echo un ojo al documento.

..-Espera, yo no dije nada de esto-..

Luego te miro con los ojos abiertos como platos.

..-Y no había ningún traductor de ….-..

No termino la frase, porque al final del documento ponía quien había sido el traductor, y eras tú. La mujer, casi con un ictus facial, salió dejando la confesión sobre la mesa, y salió más rápido de lo que una mujer con tacones podría caminar.

Estaba claro que tenía miedo de que la imputaran por falso testimonio, o algo peor, y seguramente se iría a preparar una defensa para su culo.

Poco importaba, si tu trabajo estaba bien hecho, ese tipo de abogados pagados por criminales no tenían nada que hacer. 

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08/03/2014, 20:44
A. Collins

Volviste a tu mesa y te preguntabas donde podía estar el paquete. Allí te esperaba Collins que seguía revisando el expediente que os había pasado el capitán al principio del turno.

Era casi la hora de salir, y podías haberte sentido satisfecho si no fuera porque aun tenias preguntas.

Oye, buen trabajo, ese olfato tuyo no falla.

Cerro el expediente y lo dejo en la mesa.

La próxima vez a ver si me toca algo más interesante a mí. Ya no me da tiempo de ir a ver a la hermana del repartidor. Fue ahí donde se detuvo el tiempo que falto.

Ella no creo que lo sepa siquiera, porque trabaja lleva toda la noche trabajando de camarera en uno de esos restaurantes que no cierran en la otra punta de la ciudad.

Y ya con el tipo detenido, la llamare cuando haya dormido para informarla. No me gusta dar malas noticias.

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09/03/2014, 13:00
Richard Straptom

Si fuera un humano normal y corriente, con una vida limitada y que pensaba solamente en llegar a fin de mes y satisfacer sus necesidades, Richard se habría dado por satisfecho, olvidándose de los flecos que aún quedaban por resolver. No era la primera vez que veía cómo sus compañeros se daban por contentos por confesiones a medias, o pruebas inconclusas, sin embargo él se había convertido en un perfeccionista con el paso de los siglos.

Una de las dudas la había resuelto su compañero, al informarle qué había estado haciendo en esa hora y media, y quizás la hermana del fallecido podía darle alguna pista de dónde se había hecho esas magulladuras. Podía matar dos pájaros de un tiro si se lo trabajaba bien.

- ¿Por qué no vas a hacer una visita sorpresa, con café y bollos? - dijo, haciendo alusión a la posible relación con la joven con que empezaba a salir - Puedo acercarme esta noche a hablar con ella al restaurante donde trabaja. Yo también necesito dormir.

Y esquivar la luz del sol hasta llegar a casa, pero eso era otra historia.

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09/03/2014, 13:56
Director

A Collins le pareció perfecta la idea, pero tenias que acercarlo.

Tras un rato conduciendo y charlando sobre cosas muy mundanas, lo dejaste cerca del rio Hudson, en una zona de clase media.

Tras aquello cogiste los datos del restaurante que había conseguido tu compañero. A punto de amanecer, la chica debía de haber salido ya para su casa.

Tenias más oportunidades de pillarla allí.

Llegaste en menos de diez minutos, dentro de poco la ciudad empezaría a despertar y el trafico sería bastante más lento, pero por el momento te movías bien.

El edificio, era un edificio común, sin nada reseñable, cerca de comercios, y supusiste con viviendas más bien pequeñas, todas apartamentos.

Al entrar, no te costo sentirte ubicado, había cierta simpleza en los diseños de aquellos edificios que hacía que fuera sencillo orientarse por ellos, al menos para alguien que llevaba siglos moviéndose por ellos. 

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09/03/2014, 13:56
Sara May

Llegaste a la tercera planta y enfilaste el pasillo derecho cuando escuchaste la voz de una mujer.

Si, le digo que han entrado en mi casa, y me han revuelto todo. Señora…

Tuviste una extraña sensación, no conocías el aspecto de la mujer con la que tenias que hablar, pero casi podías sentir que el destino te decía que era aquella mujer de espaldas.

Sabias como se llamaba, Sara May Parker. Y parecía alterada, estaba en el quicio de la puerta sin entrar en el domicilio y no te estaba viendo.

… pues no sé cuando paso, acabo de llegar, oiga, no me ponga en espera. Mierda. 

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09/03/2014, 18:13
Richard Straptom

Si aquella mujer estaba intentando hablar con el servicio telefónico de la policía en pleno cambio de turno, las iba a pasar canutas. Esperaba que aquello no fuera grave, porque si no, alguien se iba a llevar un buen rapapolvo. Sin embargo, la mayoría de esas denuncias se quedaban en papel mojado.

- Disculpe señorita - dijo, sacando discretamente la placa - Estoy buscando a Sara May Parker, ¿podría decirme en qué piso vive?

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10/03/2014, 11:37
Sara May

La mujer su vuelve sorprendida, y mira la placa acercando la cara. Parece que en el otro lado de la línea alguien le responde.

No déjelo, ya hay policías aquí.

Y cuelga al tiempo que suelta un bufido y comentar por lo bajo.

Antipática.

Soy Sara Parker, gracias por venir, supongo que ha venido por lo del apartamento.

Dice completamente segura de tu presencia allí es exclusivamente por eso. Le da con el pie a la puerta y cuando miras ves como el pequeño trozo de salón que tienes a la vista esta patas arriba.

No he entrado porque sé que tendrán que tomar huellas y esas cosas.

Dice también convencida de que tiene alguna idea de cómo funcionan en verdad el asunto. Y lo cierto es que a menos de que sean robos muy graves, o homicidios, no se toman muestras ni huellas.

Si esto fuera un robo menor, aparte de algún agente de uniforme nadie se iba a acercar a allí a hacer nada.

Pero lo cierto es que bien podría ser que lo que hubiera pasado allí tuviera que ver con el hermano muerto que había en la morgue. Así que miraste con interés lo que podías ver desde la puerta.  

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10/03/2014, 13:09
Richard Straptom

Así que por eso había tardado tanto el chaval, porque había estado allí. ¿Había escondido el contenido del paquete en casa de su hermana, y alguien había ido a buscarlo, o había revuelto él a drede el sitio para que nadie lo encontrara?

- Dígame, señorita Parker, ¿cuándo fue la última vez que vio a su hermano? - dijo, entrando al apartamento y buscando el rastro de aquella sustancia.

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10/03/2014, 16:41
Sara May

Un primer vistazo te dijo que el repartidor no había estado allí con ninguna esencia de salsa agridulce, pues no había rastros de ella.

Lo que si había eran varios rastros, huellas en un tono descarnado, que sin duda estaban por todo la casa, porque eran las de la dueña.

Otras muchas, antiguas, más recientes, y restos de algo que parecía barro justo a las estanterías volcadas, y el sillón destartalado.

La mujer, que te seguía y cerraba la puerta, puso una mueca extraña, como si le estuvieras cambiando de tema más de lo que podía haberse imaginado.

Bueno, pues no sé, dos semanas, puede que mas. Pero oiga, que tiene eso que ver con mi casa, me está diciendo que mi hermano tiene algo que ver. Es un perroflauta, pero no se atrevería a putearme así.

La mujer dejo su bolso sobre la banqueta de la cocina. Y miro aquel desastre.

Joder, voy a tardar horas en ordenar todo esto. 

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10/03/2014, 17:45
Richard Straptom

Estaba cansado del turno de noche, y conducir bajo el sol hasta la casa de la joven le había debilitado. Necesitaba retirarse a su apartamento y descansar, pero su parte más profesional le decía que tenía que seguir tirando del hilo que ese chico le había dejado.

- Por favor, señorita Parker, siéntese - dijo, señalando el sofá de mercadillo - Tengo una mala noticia que darle.

Fue lo más diplomático y suave que pudo, evitando ser muy descriptivo, y reforzando sus palabras con el hecho de que el asesino había sido ya detenido. La policía había cumplido con su trabajo. No le dio más detalles de los necesarios.

- Y por eso estoy aquí, vine a notificarle personalmente la noticia, no vine a evaluar el asalto - dijo, mirando la puerta. ¿Había sido forzada?

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11/03/2014, 15:46
Sara May

La chica cayó en un tremendo estupor, y tras colocar el sillón para que os sentarais te miro en silencio mientras le dabas la noticia, las lagrimas fueron brotando poco a poco hasta convertirse en un rio que tuvo que tapar con ambas manos.

La respiración de la mujer era muy agitada, y tardo al menos tres o cuatro minutos en empezar a calmarse.

Aun tenias cosas que preguntarle, pero debías dejar que asimilara la noticia.

Mientras, tus ojos te decían que las muestras de barro no eran habituales en aquella casa. Para alguien como tú, con aquella visión, era fácil ver incluso los intentos de limpiar la casa de aquella joven.

La puerta sin duda estaba rota, por las marcas, dirías que de una patada, si bien no había saltado el marco, y la cerradura seguía cerrando, pero también era muy cierto que en aquellas casas no tenían una calidad muy buena, y puede que la cerradura solo hiciera ver que cerraba y otra patada, incluso sin ser muy fuerte fuera capaz de abrirla.

Dejas que la mujer ahogue su pena y luego ella empieza a hablar.

Entonces, si el hombre ya está detenido. Que le ha pasado a mi casa. Porque me pregunto si lo había visto. El ha hecho esto.

Ella estaba confusa, con los ojos llorosos, la mirada casi perdida en algún punto del pasado, quizás recordando momentos felices, pero sin duda momentos duros en aquellos momentos.

Nunca te acostumbrabas del todo al sufrimiento humano. Era tan genuino. Tan intenso.

Estabas conectando con aquella joven mujer, mirándola a los ojos, y el cansancio paso de largo, mientras el día se levantaba a tus espaldas al otro lado del cristal y las cortinas.

Ella debía tener la clave…

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11/03/2014, 20:24
Richard Straptom

Intentó consolar a la mujer lo mejor que pudo, porque algo en sus ojos le decía que era la clave para todo aquello. No podía ser coincidencia. A lo largo de los siglos había aprendido a seguir sus instintos, y ahora le estaban diciendo que eso no era únicamente un asalto aislado.

- ¿Tenía su hermano llaves de su apartamento? ¿Es posible que le diera algo, hace tiempo, para guardar?

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11/03/2014, 20:28
Sara May

Llaves…

Dijo ella entre sollozos. Lo miro perplejo, y contesto con la cabeza antes que con las palabras.

Si tenía llaves, claro. Pero no recuerdo que nunca las usara. Siempre decía que mi casa le quedaba muy lejos.

Se rio de forma tosca, con las lagrimas en los ojos.

Lejos, y estaba todo el día recorriendo la ciudad de una punta a la otra.

Porque me insiste en eso. Ya le he dicho que mi hermano, hacía tiempo que no nos veíamos. No sé cuándo fue la última vez.

Notas de juego

No se si le has dicho que el georeferenciador dictamino que paso aquella tarde por aquella dirección. 

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12/03/2014, 10:43
Richard Straptom

- Verá señorita - dijo, mostrándole su cara más comprensiva - Como ya le he dicho, no es casualidad que estuviera aquí, ni le he preguntado por su hermano a la ligera. En la empresa en la que trabajaba usaban un sistema de localización para saber dónde se encontraban los repartidores en cada momento, y en el último envío, su hermano estuvo aquí.

Observó alrededor, algo se le escapaba, pero no sabía qué.

- Quizás alguien supiera que usted era su hermana y vino a buscar algo que él podría haber escondido aquí - dijo, observando el resto de la vivienda, para ver si se encontraba en las mismas condiciones, o a ver si podía encontrar algún rastro.