Partida Rol por web

Creo que los especifiqué antes, pero vamos, que en un par de días te comento los detallitos. Ahora mismo estoy saturado, así que te pido un pequeño tiempecillo de cortesía, hasta que me libere un poco de curro

EDITO

Howly intentará encontrar un kishin con el que poder hacer un trato. Las condiciones son las siguientes:

-Howly protegerá y ayudará al kishin a conseguir almas por la ciudad, valiéndose de su magia para encubrir sus crímenes

-El Kishin ofrecerá una parte de las almas que consiga a Howly para ir dopando al niño. Howly propondrá que sean la mitad, pero estará dispuesta a ceder un poco si piensa que el kishin en cuestión lo vale

Antje y ella se instalarán en un hotel cercano con una identidad falsa. La idea original es valerse de la confusión de la ciudad para encubrir sus actos, pero no lo importa viajar a la campiña o extender su radio de acción si el kishin lo propone y le parece buena idea

Podríamos llegar a otro tipo de acuerdo, pero esta es la base, en principio. Ya me dirá si quedamos por chat, interpretamos la escena por aquí o lo resumimos todo en un par de líneas. Cualquier cosa coméntame y te respondo

Pasaron unos días desde tu reunión con tus amigas, la planificación y el traslado a otra zona mas segura, aun cuidabas de ese extraño niño, mientras pensabas en todas las cosas que ibas a tener que hacer mas adelante y en como el mundo podría comenzar a cambiar y animarse nuevamente, con el sol de la mañana anunciando un nuevo día te levantaste y aseaste para estar lista para una nueva jornada...

Eeeeeeh...

¿Te has leído lo último de mi escena? O del resumen que te envié, vaya

Lee el post de 23/10/2012, 19:35. Si es un poco largo, te lo resumo: Howly está en París, junto con Antje y el niño, buscando un Kishin con el que pactar. Me ha parecido raro tu post, sobre todo la parte de "el traslado a otra zona mas segura". Pero vamos, si ya lo sabías me pongo a postear ipso facto ;)

Howly levantó la mirada para observarse en el espejo, con el ojo derecho aún medio cerrado. Aquella noche había dormido a pierna suelta, y ni la amenazante presencia de aquel demonio encarnado había interferido en sus bellos sueños de Vanitas y Maaba atados a distintos cohetes directos a la luna. Quizás por eso, tenía una cara horrible, la boca pastosa, y unos pelos de loca que daban cierto tono humorístico al conjunto. Soltando un gruñido, se quitó el pijama de lechuzas que llevaba encima y se metió en la ducha. El agua llegó como una bendición, aunque rápidamente tuvo que apagarla cuando, sin explicación alguna, pasó de estar de temperatura agradable a un glacial insoportable en menos de un segundo. No volvió a encontrar el punto correcto, así que, maldiciendo, decidió asearse lo más rápido posible para evitar aquella tortura. Media hora más tarde ya estaba en la pequeña cocinilla que había junto a su habitación, tomando un par de croissants con leche mientras miraba la televisión sin llegar a prestar atención. En realidad, se alegraba de haber optado por un hotel caro: Teniendo en cuenta lo mucho que le quedaba por hacer, lo mínimo era estar cómoda en aquellos breves momentos de paz

Cuando Antje, que como era costumbre se despertaba después de ella, apareció por la puerta Howly le dedicó una sonrisa maliciosa

Buenos días, dormilona. ¿Qué tal vas llevando lo de conciliar el sueño al lado de un pozo de locura?

Divertido Anje se estiró, ronroneando Aunque tampoco es que haya mucha diferencia cuando está despierto. No habla nunca

La bruja hizo una mueca de asco cuando vio lo que estaba comiendo Howly

Oh, no, más comida francesa no. ¿Es que aquí no desayunáis decente?

Es leche, idiota Howly dio un mordisco a uno de sus croissants, distraída Y bollos. No me vendas lo de que en Alemania coméis algo distinto

Antje se encogió de hombros

Yo desayuno a la americana. Hay que empezar bien el día

Caminando con cierta torpeza, se sentó junto a Howly y apoyó los codos sobre la mesa, sonriendo

Bueno, cuenta. ¿Cuál es el plan para hoy?

Howly tragó y le devolvió la sonrisa

Eso depende de qué quieras hacer. He pensado que, durante estos días, una se encargará de patear París buscando posibles Kishins, mientras que la otra vigilará al niño. Para no volvernos locas, nunca mejor dicho, nos iremos turnando: Un día tú, otro día yo

Antje se echó hacia atrás en la silla, suspirando

Bah. ¿Para qué necesitamos un demonio que nos haga el trabajo sucio? Nosotras lo hacemos mucho mejor, ya lo sabes. Si quieres algo bien hecho, hazlo tú

Howly le devolvió una mirada implacable

Ya hemos hablado esto, Antje. Si actuamos por medio de un intermediario será a él a quién le pillen, y podremos contar con el factor sorpresa en caso de participar en un hipotético combate. Si el Shibusen mete las narices de por medio, mandarán una fuerza más manejable si no saben que hay dos brujas implicadas. En el peor de los casos, siempre podremos escapar y reagruparnos en otro lugar

¿Y qué gracia hay en todo eso? Es como jugar al parchís sin dados. Y no es que con dados sea muy entretenido, que digamos

Al ver la expresión ceñuda de Howly, se apresuró a rectificar

Sí, sí, lo hacemos a tú manera. Tú encontraste al niño, ¿No? Venga, va. Dime qué me toca hoy

Pueeees... Howly arrugó la nariz, pensativa Había pensado en darte a elegir. La verdad, me apetece tanto quedarme al lado de esa cosa como alejarme todo lo posible de ella. Decide tú

Mmmm... Buscar esbirros de poca monta o hacer de niñera con una larva de Kishin. No sé qué me apetece más Howly se cruzó de brazos, y Antje decidió cortar con la ironía Si tengo que optar por uno u otro, supongo que prefiero quedarme con el chaval. Vete a ver París hoy, que sé que te gusta. Ya me contarás qué tal

Ah, no Howly se llevó una mano al bolso, y sacó un pequeño teléfono móvil de dentro Sé que no te gusta la tecnología, pero tenemos que estar comunicadas. Te llamaré a lo largo del día para saber qué tal te va Antes de que su aliada se pusiera a hacer pucheros, alzó una mano para acallarla No, no hay negociación por aquí. Espero que tú también me llames si ocurre algo. A menos que hayas inventado una manera mejor de comunicarnos, claro