Partida Rol por web

A pesar de que sé que el guardia sólo hace su trabajo Y que además ya me hubiesen matado luego del escaneo, asi que para no hacer una escenita simplemente respondo con voz seca:

Soy Harlan Sheridan Greed Mallhanson, he sido citado aquí por su excelencia Helmut Spencer, aquí esta mi identificación. - digo mientras descubro mi antebrazo para facilitar el escaneo.

Y aquí esta la orden - entrego el documento solicitado, a pesar de que sé que tienen datos de sobra para saber y asegurarse de quien soy.

A pesar de lo mucho que me molesta que me hayan detenido, no queda más opción que seguir las reglas. Es un pequeño precio por ver en persona a su excelencia y por tanto es normal que haya más seguridad a medida que me adentre en el complejo.

Introduce la tarJeta de identificación en un aparato de comprobación de identidad y credenciales.

"Harlan Sheridan Greed Mallhanson. , codigo Omega,Autirización Curtis Scott, acceso temporal.Destino A. 1257. Identidad confirmada. Reunión a las 0.9.25 Horas Zulu. Camarote 2A31."

-Credenciales verificadas y confirmadas. Pase al interior, le acompañaran a su habitación.

Entregando la tarjeta a su dueño y mostrando el paso a traves del arco.Si se le pudiera ver el rostro, se diría que esta riendo.

Pasas por el arco, deteniendote bajo él, donde un haz de luz te recorre de arriba hacia abajo y luego a la inversa.Un escalofrio recorre tu cuerpo, no por la luz, si no por u nombre que ha soltado  el ordenador autorizando tu entrada al complejo. Curtis Scott, una leyenda Pure, pero que fue asesinado en una incursión por unos Girke. Se rumorea que aún vive, pero nadie lo ha visto. El ha sido tu referencia. El mejor cazador de mutantes de toda la historia. El otro soldado, una vez terminado, te indica que continues, adentrandote en el edificio, La entrada es una hermosa extructura de ventanales curvados, cuyas puertas, tambien de cristal  y madera   se abren al público para acceder a la puerta,  existe pasto (artificial) en el caminito al edificio.  El edificio se vería muy elegante si no fuera posiblemente por la entrada custodiada y la torreta de seguridad (marcada con T) que se alza  para ver a todos los que entran. (ver número 1)

Una vez ingresas al edificio (ver número 2), podrías  pensar que te encuentra en  un respetable edificio corporativo. El piso es de marmol, existe un area de recepción ( número 3) donde una hermosa mujer atiende al visitante, de igual manera existe una sala de espera, con costosas y sillones de cuero, una maquina para café y dulces, así como un baño para el público.

En la mitad de la sala, hay, como especie de múseo una replica del primer sentinela construido (S1), en apariencia esta desconectado, y es sólo para que los visitantes lo contemplen.

Existe una gran escalera (número 4) que comunica al sector social del edificio.

Aparece otro soldado, que te indica le sigas,conduciendote por un pasillo hasta alcanzar un ascensor (nº 27), ascendiendo dos plantas, donde al abrirse las puertas  se nota que esto ya si es un cuartel militar. Huele a sudor, poca higiene y humo de tabaco, flotando en el aire.  El soldado camnina delante, llevandote hacia la zona de las habitaciones, caminando a traves de un pasillo, desde el cual puedes ver un ascensor y una enorme puerta blindada a la derecha. El color de esta zona en sus paredes, es marrón, o es que tiene mucha suciedad incrustada desde hace milenios, el suelo es de hormigon, lleno de agujeros y manchas. Cuando llegas y abre la puerta con una tarjeta magnetica, te alivia ver que al menos son individuales, aunque la comodidad y limpieza resalta por su ausencia. Hay una cama metalica, con un "mullido" colchon de no mas 4 cm de grosor, una taquilla con cierre magnetico, la cual esta abierta, a la espera de introducir una clave para cerrarse y poder abrirla nuevamente, una mesa con una silla, o lo que queda de ella, sobre la que hay depositada toallas y ropa de cama, de un solo uso.. Hay una pequeña puerta que te da acceso a un "cuarto" de baño, con un plato de ducha, un inodoro y un lavabo. Tras entregarte la llave de tu dormitorio, el soldado te indica que si deseas cenar algo, el comedor se abrirá a las 21.00, al final de los pasillos de esta planta.

Luego de que me dejasen a solas en mi habitación, dedico algunos momentos a almacenar mis cosas en la taquilla y a tomar una ducha para luego ir a cenar, no se me dijo que no caminara por allí.

Curtis Scott, Eso si me dejó frío, No solo su excelencia esta aquí, mi héroe personal también esta en este lugar y lo que más me sorprende... VIVO!!! ..

Habrían algunas que querría preguntarle, si se me da la oportunidad, cualquier cosa que me pueda decier alguien que sobrevivío a estar sobrepasado por los girke merece todo mi respeto, aparte de mi admiración.

Luego de tomar la ducha y colocarme un uniforme limpio, caigo en cuenta de que no estaré aquí mucho tiempo, probablemente luego de la reunión con su Excelencia saldría de aquí, una habitación temporal, toalla y ropa de un sólo uso, no, no parece para nada una "zona residencial".

Veré si puedo salir de la habitación a dar una vuelta por allí o si está con cerrojo.

Que lento pasa el tiempo cuando lo único que haces es vigilar a esta bazofia, uno tras otro pasan los días, estáticos, inamovibles, sombríos como los ojos de los que aquí perecerán en cautiverio. Esos mismos ojos que aunque llenos de vitalidad y tan parecidos al de los humanos, nada tienen de humanidad en ellos. Una vez pude ver como uno de ellos con sólo sus ojos redujo a un batallón entero a cenizas… ¿Qué hay de humano en eso?

Recorrer los pasillos, alrededores y celdas de la zona B ese es mi cometido, mi deber, mi razón de existencia, siempre al servicio de una misma causa. Mi padre había consumido su vida al servicio de esta misma causa y hasta su último día de vida sólo deseo que se cumpliese. Yo le daré la consecución que tantos ansían, yo seré la mano ejecutora de los PURE, yo seré… Despierta iluso.

Afortunadamente, se me ha llamada ante coronel Helmut Spencer, como lo llamaron, ah si, el proyecto Odin… es mi oportunidad de salir de aquí y de colaborar realmente con la causa…

Tanta vehemencia en las palabras del guardia me resultaba extraño, yo prefería el frío y calculado odio y desden hacia los portadores del gen x, o al menos así percibía que había sido en algún momento anterior a mi estado actual.

- Sabe que al principio se plantearon descargas menores, ya de por si mortales, pero cuya fuerza no implicaba una muerte instantánea. Sin embargo se decidió aumentar su patencia.- Mantuve mi rostro inmutable y un tono de voz monótono similar al de mis profesores.

- No piense que era compasión por esa escoria, simplemente descubrimos que algunos de ellos eran capaces de soportar y canalizar las descargas, pero gracias al sujeto VZ-2397 y al XZ-0982 se estimo el nivel de canalización y resistencia máximos. Se tardarón cerca de 20 días de descargas y aun así se duplico el voltaje.- Mi memoria mantenía aquellos números y conocimientos, venían a mi mente sin problemas, pero ya no generaban sensación alguna en mi cuerpo, eran simples datos.

Dando por terminada la clase entregué las ordenes y dispuse mis pasos hacia el arco como recordaba haber hecho en multitud de ocasiones, o al menos eso era lo que un parte de mi mente me gritaba y mi cuerpo parecía saber.

El guardia te entrega el pase, sin mediar palabra, aunque si se pudiera ver su rostro, sería entre asombrado y aburrido.Pasas por el arco, deteniendote bajo él, donde un haz de luz te recorre de arriba hacia abajo y luego a la inversa. El otro soldado, una vez terminado, te indica que continues, adentrandote en el edificio, La entrada es una hermosa extructura de ventanales curvados, cuyas puertas, tambien de cristal  y madera   se abren al público para acceder a la puerta,  existe pasto (artificial) en el caminito al edificio.  El edificio se vería muy elegante si no fuera posiblemente por la entrada custodiada y la torreta de seguridad (marcada con T) que se alza  para ver a todos los que entran. (ver número 1)

Una vez ingresas al edificio (ver número 2), podrías  pensar que te encuentra en  un respetable edificio corporativo. El piso es de marmol, existe un area de recepción ( número 3) donde una hermosa mujer atiende al visitante, de igual manera existe una sala de espera, con costosas y sillones de cuero, una maquina para café y dulces, así como un baño para el público.

En la mitad de la sala, hay, como especie de múseo una replica del primer sentinela construido (S1), en apariencia esta desconectado, y es sólo para que los visitantes lo contemplen.

Existe una gran escalera (número 4) que comunica al sector social del edificio.

Aparece otro soldado, que te indica le sigas,conduciendote por un pasillo hasta alcanzar un ascensor (nº 27), ascendiendo dos plantas, donde al abrirse las puertas  se nota que esto ya si es un cuartel militar. Huele a sudor, poca higiene y humo de tabaco, flotando en el aire.  El soldado camnina delante, llevandote hacia la zona de las habitaciones, caminando a traves de un pasillo, desde el cual puedes ver un ascensor y una enorme puerta blindada a la derecha. El color de esta zona en sus paredes, es marrón, o es que tiene mucha suciedad incrustada desde hace milenios, el suelo es de hormigon, lleno de agujeros y manchas. Cuando llegas y abre la puerta con una tarjeta magnetica, te alivia ver que al menos son individuales, aunque la comodidad y limpieza resalta por su ausencia. Hay una cama metalica, con un "mullido" colchon de no mas 4 cm de grosor, una taquilla con cierre magnetico, la cual esta abierta, a la espera de introducir una clave para cerrarse y poder abrirla nuevamente, una mesa con una silla, o lo que queda de ella, sobre la que hay depositada toallas y ropa de cama, de un solo uso.. Hay una pequeña puerta que te da acceso a un "cuarto" de baño, con un plato de ducha, un inodoro y un lavabo. Tras entregarte la llave de tu dormitorio, el soldado te indica que si deseas cenar algo, el comedor se abrirá a las 21.00, al final de los pasillos de esta planta.
 

Entras en el comedor, convertido en taberna temporal, solicitando una cerveza. Mientras esperas, ojeas al personal, un camarero, que por la manera que te esta sirviendo la cerveza de un grifo, apenas tiene conocimientos, y tres soldados mas sentados en una mesa, hablando a voces, sobre como se han cargado a unas aberraciones durante los pasados dias. Cuando ves la cerveza, te piensas si beberla o usarla para fregar el suelo con ella. La jarra, si es que es eso, tiene el asa partida y los bordes tienen mas grietas que un vaso descacarillado. El contenido tampoco invita a beberlo, lleno de espuma de color amarillento.

La puerta se cierra, dejandote solo. Mientras colocas las cosas, miras el reloj y notas que apenas son las 20.15. descubres un pequeño papel, que indica "hora feliz de cerveza casera en el comedor hasta las 21.00".

El soldado que te ha acompañando a la habitación, te indica que si que hay gimnasio, pero que se cierra a las 19.00 h. Que si quieres puedes pasar a degustar cerveza casera en el comedor, que hasta las cenas es la taberna de la planta. Que puedes moverte libremente por la planta y por el vestibulo de la planta baja. Que hasta no salir de la reunión esta es la zona abierta para tu acreditación.

Compruebas que la puerta esta abierta, dejandote acceso al pasillo. Mirando a la derecha desde la puerta, observas dos hombres, uniformados, pero con aspecto distendido entrar por la doble puerta, que se supone te han indicado que es el comedor. Miras el reloj y apenas pasan 10 minutos de las 20.00, y la cena se sirve a las 21.00

Has terminado tu turno, y tras una ducha y cambiarte de ropa, miras el reloj y la cena se sirve a las 21.00 (nº 10 en el plano), y te quedan casi 50 minutos. Recuerdas que hoy es el dia feliz de la cerveza casera. Aún recuerdas su mal sabor, y lo que es peor, su resaca, pero seguro es una oportunidad de pasar el tiempo y ver algun colega para intercambiar impresiones.

Agarro los restos de la jarra que me han pasado y saboreo la cerveza; no disfrutando especialmente de ella pero si ligeramente del frescor de la misma... siempre he pensado que es mejor ver el lado bueno de las cosas. Seguramente en este centro no tengan mucho tiempo para distraerse.

Me quedo en la barra; en silencio observando a la gente del lugar... es poco probable que haya sido llamado aquí yo solamente. Y en ese caso entiendo que me lo habrían indicado así o al menos me habrían dado un trato más elitista. Busco por la sala a alguien que desentone. Alguien sin duda como yo...

¿Hora feliz de cervezas? me quedo pensando cuando descubro el papel, no sabía hasta que punto una cerveza me sentaría bien para estar más tranquilo a la hora de reunirme con el coronel. Termino de colocar algunas cosas y decido salir a echar un ojo. Puede que no me tomara una cerveza, pero habrá soldados allí que piensen al contrario que yo.

Recojo la tarjeta magnética y cierro la puerta tras salir al pasillo. Ya sólo me quedaba enfilar el pasillo hasta el comedor y ver que era lo que me esperaba allí. Con cada paso que daba, aquella cerveza me parecía una mejor opción.

En todo caminaré un poco, iré al comedor y a estirar un poco las piernas, quién sabe, puede que vea a

Curtis deambulando por allí. Antes de salir de mi habitación activo mi IPS para mirar que hay en la red,

bajas, nuevos agregados, estatus de las misiones, informes de exploradores, Curtis Scott.

Me gustaría estar informado por si surge algun cotilleo no quedar mal parado, aunque no soy muy dado

a la conversa tampoco me gusta quedar como un estúpido.

asi que me "pongo a gusto" en mi cama mientras me tomo un rato para revisar, Si hay una ventana en la habítación

me asomo para ver hacia donde apunta y que hay debajo.

Tras escuchar las aclaraciones del soldado, Rafael entro en su habitación, colocó sus cosas en la taquilla, y como clave puso el día que su vida cambio, el dia que murió su familia, el que sería el cumpleaños de su hijo si estuviera vivo.1206. Luego, observó con detenimiento aquella planta mientras caminaba hacia la cafeteria, respiraderos y posibles escondites principalmente, aunque ya lo observaria todo con mas detenimiento cuando tuviera tiempo. Por el momento la cafeteria era la forma mas rapida de conocer a los que serían sus compañeros, igual de importante que conocer el lugar.

El lugar pasó de ser la recepción de una gran empresa, pese a las notas disonantes del centinela y la seguridad, a un cuartel militar que había visto mejores años. En mi mente se agolparon algunas imágenes de mi juventud, aquel olor mezcla de detergentes, disolventes y sudor, el tacto de rugoso e irregular del hormigón, el ruido sordo y constante de los soldados a ir y venir. Volvía a estar en el centro de instrucción, quizás aquel era el último intento de tratar de reactivar las zonas perdidas de mi memoria o simplemente era el lugar donde esperar el veredicto final.

Tratando de evitar que mi mente vagara por elucubraciones vanas que no me ayudarían en nada, lo único claro era mantener la mente fría. Investigué la cerradura de la taquilla, poco tenía por guardar, pero buscaba entretenerme, buscar algún detalle que me diera ideas sobre mi nueva estancia. No era una cárcel, tenía opciones de salir y el guardia lo único que había mencionado eran los horarios estrictos de la cena.

Tras hacer la cama y depositar las toallas en el escueto y reducido baño, observé mi reloj, quizás tuviera tiempo de dar una vuelta, ver cuantos más se hallaban en aquellas instalaciones y hacer algo de tiempo hasta la cena. Debía haber traído algún libro, sin embargo el viaje había sido repentino y sin casi aviso.

No es que tuviera predilección por ningún tipo de bebida alcohólica, pero esa cerveza casera era lo peor que había probado en muchísimo tiempo, pero viendo el tesón y la ilusión con la que la elabora Sam, el pinché de cocina de la Zona B, no me podía negar una noche mas. Además, un poco de alcohol merma los pensamientos y relaja la mente de preocupaciones…

La 21:05 horas, me he retrasado un poco en llegar al comedor… La cena está servida. Hoy el turno ha sido muy largo.
 

No puedo evitar escuchar la hora cuando aquel soldado la dice para si mismo. Miro mi bebida y le doy un último sorbo dejando un poco en la jarra. Seguidamente me despido del barman y salgo en dirección al comedor.

Pongo rumbo al comedor. Lo cierto es que ya empiezo a tener algo de hambre, aunque cierto temor me recorre pensando que la comida pueda ser similar a la bebida de aquel local improvisado.