Partida Rol por web

Ignorando el comentario de Eva, uso el stick para empujar a los caminantes lejos de Alberto.

- ¿Estás bien? - Le pregunto mientras le quito de encima al caminante que casi lo atrapa. - ¿Necesitas ayuda?

Una vez alejados los caminantes limpio el stick contra su ropa, para asegurarme de que no quedan restos orgánicos en el y espero a que los demás estén listos para "reparar" el motor del coche mientras vigilo los alrededores. No puedo dejar de pensar en que hay que alejar los restos de los caminantes de las cercanías de la casa, tanto por salud como para evitar que su presencia pueda atraer a posibles saqueadores hasta las cercanías de la casa.

Este bate es una mierda, digo levantándome del suelo, dolido en mi orgullo para continuar el trayecto. Sigamos, digo friamente de forma cortante esperando proseguir sin alargar la conversación en lo más mínimo.

Asiento levemente antes el comentario de Alberto antes de decir:

- Mientras vuelves a poner operativo el coche, yo seguiré vigilando. - Digo alejándome unos pasos y observando la zona por si se ve más movimiento de caminantes que se hayan visto atraídos por el ruido de la pelea.

Asentí con la cabeza al comentario de marcos, habían salido de una situación bastante fea, pero ahora tenían un breve respiro, miré el arma improvisada con el que había reventado al zombie, era la primera vez que había matado uno, pero imagino que tendría que acostumbrarme. 

A dos cuadras del hospital

Noche

                Primero el vehículo dio de sí lo que podía. Cuando se acabó el combustible tuvieron que hacer paradas de emergencia e ir por más. Lo consiguieron (no sin antes combatir con varias decenas de podridos) para subir al coche de nuevo y seguir conduciendo. Decidieron no parar hasta llegar, sin importar que venía la noche. La calle se iba saturando de caminantes y frenar podría significar no volver a arrancar. De más está decir que pisaron muchas cabezas de camino al Carlos III pero valió la pena.

                Porque casi estaban allí.

                -Con una mierda!! –dijo estrepitosamente Eva y todos miraron, pero era obvio desde unos metros atrás.

                Alguien había puesto un vallado de metal todo alrededor del hospital. Teniendo en cuenta que faltaban dos cuadras para ingresar debió de ser todo un operativo. El problema, más que el vallado en sí, eran los muertos. Se apilaban unos contra otros como intentando romper la valla con su fuerza en número. Y aun no habían visto el coche en movimiento pero no tardarían en hacerlo.

                -Tenemos que pensar un puto plan, y ahora…- dijo ella observando la situación. Había un montón de vehículos apilados afuera, podrían esconderse entre ellos. Incluso era posible meterse a un edificio aledaño hasta pensar como traspasar el cercado.

Cuanto más nos acercamos al hospital más se complica la situación. Eso es bueno en parte, ya que significa que el sitio está atrayendo a muchos de los caminantes de los alrededores, por lo que lo más probable es que siga operativo o, al menos, parcialmente operativo.

Al llegar a dos manzanas y ver la vaya que parece rodear el perímetro hay una cosa que me queda clara, los militares están en el hospital, eso o lo estuvieron hace tiempo y les dio tiempo a poder rodear el perímetro del hospital a una distancia más que considerable, lo que garantiza en parte la tranquilidad del personal civil y seguramente les habrá permitido establecer una segunda o incluso una tercera línea defensiva a su alrededor para garantizar la seguridad del personal sanitario.

- No podemos acercarnos más con el coche o quedaremos rodeados y eso será nuestro fin. - Digo examinando la situación lo más rápido posible. - Creo que la mejor opción es la de sacar el coche de la vista y buscar un sitio en el que poder pasar la noche. Con la luz del día podremos examinar la disposición de la vaya y ver si hay algún paso o zona que nos permita pasar al otro lado sin riesgo para nosotros ni para la propia vaya.

En el momento que Eva se da cuenta de la situación, echo rápidamente un ojo y acto seguido giro la llave del contacto para apagar el motor mientras me acerco a los coches abandonados intentando ocultarlo de su vista, una vez hecho pongo el freno de mano y saco la llave apretándola en mi mano para no perderla. Tal vez necesite un colgante para guardarla mejor.

Busco con la mirada un sitio seguro, o que parezca seguro si más no, pues es posible que queden zombies rezagados en el interior de los pisos, y cuando lo encuentre lo señalaré con la mano para no tener que emitir palabra cerca de esa muchedumbre.

En parte es buena la situación, nos permitirá encontrar refugio cerca del hospital por si más adelante tenemos que volver. El vallado significa que los del interior se defendieron, pero no significa que lo consiguieron. Hay que ir con cautela.
 

           Aparcaron el coche detrás de otros vehículos que cubrían la vista. Ahora había que guarecerse para intentar ingresar por la mañana. Todos miraron alrededor, sobre todo Alberto. La idea era hallar un edificio menos comprometido.

       El panorama era el siguiente: había dos edificios en las esquinas. Uno era un edificio de departamentos de unos ocho pisos. La puerta principal estaba abierta y algunos caminantes merodeaban por allí. Al lado había otro de la misma cantidad de pisos con la puerta totalmente derrumbada. La mayoría, por razones desconocidas, se había encaprichado con el vallado y quería pasar al otro lado. En frente de dicho edificio se encontraba un terreno de parques, un lugar lleno de árboles y lugar para serenarse, al menos cuando el mundo era mundo. Al lado del edificio primero había un negocio pequeño, un lugar donde se vendían golosinas y otras cosas de ese estilo.

      -Me decanto por el edificio uno, el negocio lo veo poco fuerte y el parque es igual a morir... ¿No?
 

Escucho las palabras de Eva y respondo: No importa cual, todos tienen mala pinta, sólo es cuestión de ir a alguno antes de que todos nos vean.

Asiento ante el comentario de Alberto antes de decir:

- Totalmente de acuerdo.

Tras examinar la zona y fijarme en donde están los caminantes susurro:

- Ir al parque a oscuras no es una opción, es muy arriesgado; no me fío del escaparate de la tienda de golosinas, y además suelen estar preparadas para que se vea el interior; de los dos edificios, uno tiene a varios caminantes en la zona y el otro no. Creo que deberíamos probar suerte en el que menos riesgo corremos. ¿Que opináis?

Había estado pensando en las opciones de mis compañeros, parecía que el guardia de seguridad Marcos tenía toda la razón al optar por el edificio que menos caminantes tenía, al fin y al cabo, era una tontería exponerse mas de lo necesario. Me encogí de hombros y le contesté.

-Ahora minimizar riesgos es lo mas aconsejable, bueno, ahora y siempre... Asi que por mi cuando querais, yo estoy listo 

Matar a aquella cosa me había hecho un poco mas echado para alante, eso era bueno y malo a la vez, esperaba que no se me subiera el falso merito a al cabeza en el peor momento 

                Decidieron probar suerte con el primer edificio. Salieron todos del auto y fueron acercándose, agazapados, hasta un camión desvencijado que se hallaba enfrente de la puerta abierta. Eva miró con atención la situación junto con sus compañeros.

                Era un portón de esos dobles, de madera oscura; unos caminantes deambulaban por allí, desde su posición veían a tres en total. También se atisbaba el inicio de un hall extenso de entrada con pisos de azulejos negros y blancos. Además se veía en el fondo una escalera amplia.

                -No sabemos qué hay adentro hasta que ingresemos –susurró la ladrona, -podemos pasar de largo a esos muertos y probar cerrar la puerta. ¿Qué os parece?

                Por ahora seguían a cubiertos de los caminantes de la calle, pero tampoco debían estar demasiado tiempo quietos, a veces esos podridos surgían de la nada…

Miro a los caminantes que se interponen en nuestro camino mientras aprieto el stick con fuerza.

- Si los eliminamos podremos entrar sin que los demás nos descubran. - Digo en un susurro. - Si los esquivamos y nos ven entrar en el edificio es probable que nos sigan y que atraigan a más hasta nosotros.

Me giré para mirar como la chica hablaba sobre entrar en secreto, pero Marcos parecía tener otros planes y aunque me parecía arriesgado, tenía que darle la razón.

-Es cierto, mas vale eliminar a los que hay ahora afuera que 30 mas dentro. Si lo hacemos en silencio y con cuidado podemos acabar con ellos sin que siquiera sepan que ha pasado

              Deciden que lo mejor es encargarse de los tres muertos que están en la puerta del edificio antes de que otros caminantes los atisben desde afuera. Así que, cuando el momento es propicio, ingresan en el mismo. Alberto junto a Marcos y Eva con Charlie. 

            Los tres muertos los han visto, claro está que eso es lógico ya que han ingresado. Eva aprovecha para cerrar la puerta mientras tanto. Así evita que entren los que están afuera que son la mayoría. El hall de entrada es suficientemente amplio para pelear con holgura, así que pueden combatir contra los podridos sin muchas molestias. 

          -Encargaos de ellos, yo vigilo la puerta. Eva tiene un punto válido, su arma es de fuego y disparar no es la mejor opción.