Partida Rol por web

-Hai, hai...

Le digo a modo de afirmación. La escucho de regreso a la posada, sonriendo levemente debido a su euforia en la entonación de las palabras. 

-No voy a morir, Saiyuuki. No tienes de que preocuparte. 

Le digo simple y llanamente a pesar de sus ideas, con tono calmado y seguro.

-¡Venga, acelera que te quedas atrás!

Insinúo esta vez con tono bromista, picándola como era costumbre mientras seguía avanzando hacia la posada, algo más rápido que antes.

-Una noche abierta, estrellada y algo fría. Un momento de paz en todo aquel caos, nuestro momento de paz... Quizás ese fuera uno de aquellos momentos que me gustan atesorar en mis memorias, mis valiosas memorias... Sé que no podrá durar para siempre, pero quizás... Sólo quizás...... Algún día lo comprendas.

Escucho las palabras bromistas de Mikoto y me alivia un poco, sobretodo por haber escuchado mis palabras tan duras. - ¡Que no me quedo atrás! ¡Eres tu el lento! - le digo mientras me pongo a correr los pocos metros que quedan antes de llegar a la posada. - Así es como me gusta que esté...aún en situaciones duras él siempre sabe cómo aliviar la situación... él es especial... y llegará al final de todo esto, lo tengo muy claro. - pienso mientras abro la puerta de la taberna antes que él. Llegamos los dos juntos a la habitación y sin hacer ruido cada uno se va a su rincón. Miro a Taka como duerme e instantáneamente me quedo dormida, pues el primer día ha sido una locura.