Partida Rol por web

Mientras corre Sam se da cuenta de que la herida que aquel perro de la habitación le había provocado en la pierna le picaba ligeramente.

¿Estará infectada? ¿Podría convertirme en algo como esos bichos?

Apartó aquellos pensamientos de su mente y continuó corriendo torpemente atenazado por el miedo de que aquellos seres le dieran caza, y de que aquello le pudiera ocurrir a él.

Os dais cuenta los dos Sam y Dan Que la herida aunque no duela esta un poco mugrosa...no se nota mucho pero lo esta.
El movimiento de la pierna va bien por ahora.

Mientras Sam y yo corremos hacía el granero vemos como Sara y Dan toman la delantera como si de una carrera se tratase......como corren estos dos cuando tienen motivación.....susurro a Sam, mientras corro un poco más rapido...encuanto los perros corran estaremos perdidos...pienso y eso me anima a correr mas rapido.

Intentaba correr lo más rápido que podía pero veía a mis compañeros pasar y parecía que no iba a tener más opciones que rendirme pues no era tan rápida como ellos. Me sentía frustrada, temerosa y vulnerable pero aún así no dejaba de correr, al menos lo intentaría.

 Finalmente el grupo alcanzó la puerta del granero y Sam intentó con toda la voluntad que pudo reunir abrir la puerta del mismo.

Que esté abierto, que esté abierto, que esté abierto... rezaba mentalmente

Los perros se habían puesto en movimiento aunque aún no habían empezado a correr mientras que los zombis o lo que fueran aquellos seres se acercaban peligrosamente por momentos.

Que esté abierto, que esté abierto...

Cuando vais corriendo hacia el granero los perros se pone en movimiento empiezan a corre poco a poco cuando estáis cerca de la puerta, veis que es una puerta roja que esta cerrada por fuera pero se puede abrir... se Tarda 3 segundo en abrirse y allí es totalmente oscuridad y silencio , Los perros intentan abrir la puerta o meterse dentro ...

Entro rápidamente en el granero totalmente jadeante a la vez que Dan. Apoyo mis manos sobre mis rodillas y mi mirada clavada en el suelo intentando coger algo más de aire.

- Dan esta y no más eh?ya no vuelvo a hacer carreras contigo -digo jadeante.

Miro un poco hacia atrás para ver quien vallegando al granero.

Menuda carrera. Al llegar por fin al granero trato de recobrar de nuevo la respiración. Con la voz entrecortada por la dificultad para respirar le digo a Sara: Bueno ... yo creo que ha sido empate ...

... Dijiste algo de que en el granero había premio ¿no? ...

Me acerco a ella, la cojo de la cintura y vuelco en un apasionado beso todo el miedo que he tenido a perderla.

Después le pido: Sara, enfoca aquí con la linterna, por favor. Contemplo la herida de mi pierna. Lo cierto es que no me ha molestado a la hora de correr, pero el aspecto que tiene es bastante preocupante. Trato de olvidarme de eso cuando, poco a poco, van entrando los más rezagados.

Cuando Vais corriendo los primeros en entrar son Dan y Sara parecía un campeonato de atletismo pero no, era tan solo "para ponerse a salvos dentro del granero" Cuando el ultimo entra se ESCUCHA un grito de DOLOR
A fuera se escucha ladra a los perros
Todo estaba oscuro hasta que uno de vosotros enciende la linterna para poder ver algo por dentro....

El granero tiene dos plantas una escalera de madera de pared para acede a la parte de arriba del granero, esta lleno de paja y mucha humedad, esta todo muy dejado muy sucio hay mucho gatos.
Al fondo en una manta o sabana sucia parece que se oculta algo por la forma puede que sea un coche.

Parece ser ahora esta todo por dentro en silencio.

Mientras recibo el beso de Dan noto como mis piernas flaquean.

"Que me pasa?"

Siento como recorre una sensación de bienestar y deseo por mi cuerpo y cuando acaba de besarme no puedo evitar mirarle con una sonrisa algo embobada.

- Ah! si, si ahora mismo te enfoco con la linterna. Miro la herida. Dan, eso no tiene buena pinta, habría que buscar algo para que no se te infecte.

En ese momento enfoco con la linterna el granero y podemos ver como es en su totalidad.

Dan voy a subir arriba. Lo mismo hay algo para curarte eso o por lo menos algo para tapar la herida.

No sé si un granero será el mejor sitio para encontrar un botiquín, o algo limpio para la herida, le digo a Sara. Después de unos instantes de mirarle a los ojos añado:

Vale, espera que te acompaño. Al dirigirnos hacia la escalera pasamos por delante de un bulto con pinta de ser un coche, completamente cubierto por unas mantas polvorientas. Espera un segundo Sara, a ver qué es esto. Enfoca aquí.

Poco a poco voy moviendo las mantas para, al final, pegar un tirón y dejar aquello totalmente al descubierto.

- Guau!Dan, mira! es increible! Un coche viejo, viejo, viejo, ¿para que querran esto? pongo mi mano sobre mi barbilla dando la impresión de pensar y moviendo el dedo indice con el que me golpeo suavemente la barbilla anda que la gente no es rara mira que pensar que los gatos iban arreglarlo si lo usan de cama mira!le digo señalando a unos gatitos acurrucaditos. Va!esto no vale para nada. Le cojo de la mano venga vamos a buscar algo para tu herida. Me dirijo hacia la escalera ydesde ella miro a Dan esperando aque se acerque.

Escucháis al entrar un chillido de dolor veis a Sam Dejando caer un poco la pierna Izquierda , esta llena de sangre ...el pantalón todo rajado ..
A pesar de eso a podido cerrar la puerta... Pero las llave han caído a fuera del granero...

Puede ser que un perro lo haya cogido o este en el suelo tirada aun.

Vaya. A estas alturas casi resulta una decepción encontrar en el coche una familia de gatos en lugar de dos cadáveres putrefactos sentados en los asientos delanteros.

Acaba de entrar en el granero el último que es Sam y parece que ha vuelto a probar una dentellada de esos cabrones de perros. Ya están Luzi, Victoria y Édgar para ocuparse de él así que animo a subir las escaleras a Sara, que se ha quedado parada viendo la entrada desesperada de Sam y cómo los demás han cerrado la puerta. Venga,  vamos pues para arriba. Me parece que ahora sí que necesitamos de verdad encontrar un botiquín o algo, le digo lanzando una última mirada al compañero herido.

Sam iba corriendo hacia el granero justo detrás de Edgar, y cuando parecía que iba a alcanzar la puerta sintió un profundo dolor en su pierna izquierda. Giró la cara hacia allí y comprobó horrorizado como un perro se ensañaba mordiendo su carne con todas las fuerzas de su potente mandíbula. Desesperado y azuzado por el dolor, Sam se apoyó en la puerta y utilizó la otra pierna para propinar una patada en la cara de aquel perro, que parecía desorientado por un momento. Sam aprovechó aquel instante para soltarse e intentar atravesar el umbral, pero justo antes de hacerlo el perro reaccionó de nuevo mordiendo cerca de la anterior dentellada clavando sus colmillos y rasgando la piel con su patadas delanteras.

Es el final, estoy muerto. Pensó mientras oía al resto de perros acercarse. No hay nada que hacer. Será mejor que cierre la puerta desde fuera para que no entren en el granero.

Sin embargo, en un último vistazo hacia el interior de la puerta vio cómo Luzi se giraba y lo miraba a los ojos. Una expresión de terror cruzó su hermoso gesto y aquello dio fuerzas a Sam para soltarse. Repitió la patada con la pierna de apoyo y esta vez logró que el perro lo soltara por completo. Con un rápido movimiento cruzó a puerta y la cerró cómo pudo con la mala suerte de que la llave cayó fuera.

Se apartó un par de metros de la puerta y se tiró al suelo sentado. Se arrastró un par de metros más para alejarse más de la puerta visiblemente asustado. A continuación dirigió la mirada hacia su ensangrentada pierna. Aquello no tenía buena pinta, el pantalón estaba hecho jirones y la sangre lo manchaba todo. Podía sentir las dentelladas latiéndole con fuerza y el agudo dolor que le hacían sentir.

Buscó en las miradas de sus amigos un atisbo de esperanza pero todos lo contemplaban con gestos de preocupación o de terror.

¿Qué me pasará ahora? Pensó Sam aterrado... ¿Qué me pasará ahora...?

edgar intenta correr mientras su herida supura, ni tan siquiera mira que es lo que pasa a su alrederor solo le importa sobrevivir para lograr salvar a eli de todo el horror que le riodea.

apenas logra notar cuando sam quedo detras de el y seguramente lamentara ese pequeño acto de velocidad pero la herida de Sam le aterra.

sam amigo ....

edgar mira aterrado a sam sabiendo que seguramente tengan alguna enfermedad contagiosa y que eso sea su final

creo que no te pillaran en el equipo de atletismo .

era una broma a destiempo y de mal gusto.......como las que le gustaban a el para romper esos malos momentos tras eso se proximo y le susurro

aun no sabemos si tienen algo contagioso....legaremos a la ciudad y te pondremos la antitetanica antes de que termine el dia

Edgar se encontraba junto a Sam y en un intento de animarle hizo una pequeña broma sobre atletismo, sin embargo, no fue capaz de ocultar sus verdaderos pensamientos que afloraban en su rostro. Sam miró a los ojos a su amigo y se rebeló ante aquella situación.

No, de ninguna forma. Si esto se acaba, no acabará así. No puedo dejar de ser yo por mucha herida que tenga.

Sam pensó en Edgar, en aquel gesto para animarle. Lo cierto es que no tenía mucha gracia, pero el mero hecho de intentarlo le animó. Por muy extraño que pareciera, Sam logró superar al dolor por unos momentos y sonrió.

- Tengo que haceros una pregunta -dijo Sam intentando en vano hacerlo en un tono de voz normal -¿Quién se ha olvidado de dar de comer a esos perros? -Una punzada de dolor le hizo soltar un jadeo antes de continuar -Porque ya podéis avisarle de que ya lo hice yo por él.

Una instantánea carcajada salió de su boca y se silenció en un segundo, jadeando de nuevo.

Las escaleras crujen a nuestro paso mientras subimos. Sara va delante con la linterna y yo detrás, con la barra en la mano preparado por si hay alguna sorpresa desagradable. Tras una decena de escalones, llegamos por fin al altillo y Sara hace un barrido con el haz de luz para iluminarlo.