Partida Rol por web

   Aunque mis intenciones eran un tanto mas banales al estar rebuscando aquel espejo, no me esperaba encontrar con la presencia de otra de las sirvientas del lugar, mas cuando esta claramente no parecía muy a gusto de cruzar miradas con otra de sus compañeras.

   Ssssiento interrumpir lo que... fuera que esssstuviera haciendo pero, essss la cabaña que massss e revissssado - mentaba haciendo una leve reverencia, mas por cortesía que por pena en realidad ... tampoco es que me esperaba que alguien mas estuviera aquí... , PERO... mientras levantaba la vista y la luz lunar se comenzaba a filtrar por la ventana algo extraño comenzó a ocurrir, algo.... tan...

    ¡¡ A..a.....Ama !! - Comentaba maravillada tras recordar mi misión al verle en su nostálgica forma - Tan ssssaludable, tan essssponjossssa... tan... privilegiada... - iba diciendo mientras cortaba nuestras distancias evitando aquel agresivo primer movimiento para quedar en una pose mas servicial - Como extrañaba el verle assssí, que necessssita de mi ¿ quiere que le peine ? ¿ le massssajeo las patitasssss ? ¿ Algo de ssssalmón ?

Eché un vistazo a la Maid Serpiente y tras unos segundos sin saber qué hacer, si volverla a atacar o si por el contrario mejor quedarme en silencio, finalmente alcé la voz y hablé, tratando de ser lo más cordial posible, aunque sin comprender del todo bien qué era lo que estaba pasando.

-Supongo que eres una de mis sirvientes. -Comenté sin alzar demasiado la voz- Si es así, necesito que me ayudes a encontrar el "Punto Débil" del Maestro. Las negociaciones depende mucho de esto, además, creo que encontrar mi casa me ayudará a ver si hay algo... Ah, y que NADIE se entere de mi forma de oso.

 Ssssi a ssssi lo dessssea, sssse cumplirá - iría diciendo sin  perder aquella servicial postura - lo que eh averiguado de todo mi tiempo explorando essss que hay una ssssirvienta cercana al príncipe, tal que tiene el encargo de cuidar al pequeño felino - para entonces callar, tan solo para meditar sobre mis propias palabras - sssoy una Lamía... Habia una vampira... También Una no muerta... La otra tenía cuernossss de demonio, y ahora ssssu estacionaria forma felpuda - mientras daba vueltas y vueltas por el sitio - Quizássss... Y el pequeño Felino essss mássss que un ssssolo gato - para ladear un poco más mi cabeza en el sitio - Que.... Planeaban hacer en essssta issssla...

Escuchando con atención las palabras de la Maid VIII, el oso polar se quedó durante unos segundos pensando qué era lo mejor que esta podía hacer en estos momentos, hasta que, finalmente dio con una respuesta que quizás fuera la correcta, aunque no estuviera muy segura.

-El gato es el punto debil, o quizás sea él. -Racionalizó- Secuestremos al gato.

Sobre la otra pregunta no lo sabía del todo bien, pero tampoco iba a responderlo. No quería arriesgarse a decir más de la cuenta y al final no ser cierto, como ya se arriesgó con el gato.

    Me parece una idea esssstupenda - comentaba bastante agradecida de recibir la orden, para inmediatamente dibujar una ligera mueca - Ssss-ssssolo que el pequeño minimo no essss tan abierto de colaborar con mia perssssona - decia ligeramente alicaída, para de forma inmediata comentar algo mas animada - aunque parece que sssse da con lassss perssssonassss que le acercan helado, una vez en forma humana, ussssted podría cazarlo tranquilamente ssssi sssse hace con aquel objeto - para entonces mirar la hora y seguir con mis planes originales, los cuales eran moverme a un baño a inspeccionar mis heridas.

     En cuanto ressssuelva mi anciedadessss essssteticassss le prometo que rebusssscare en cada hogar hassssta dar con el vuesssstro mi querida Ama.

Aquella Osa Polar dudaba si estar indignada o sorprendida por la respuesta de la Maid VIII, por lo que ni tuvo ni una ni otra reacción al no saber cual poder anteponer en su lista de prioridades de reacciones. Pese a aquella situación, la princesa volvió en sí y trató de solucionar aquello.

-Un robot no necesita necesidades estéticas. -Le dijo como si nada- Necesito encontrar mi cabaña, es urgente. Alguna ha de ser. ¿Tienes alguna idea de cuál podría ser?. ¿Una pista o una intuición?.

     . . . - pasmada me quedaba escuchando las palabras de mi Ama, pues aunque había algo en ellas que me llamaba poderosamente la atención - ¿ C-como que... robot ? 

   Aunque antes de resultar en algo molesto para mi Ama, enseguida me ponía a pensar en su petición.

   B-bueno... ssssi tomamos que ssssu forma massss natural, exige un hogar algo masss amplio, una caballa grande podria sssser una pista - mentaba mientras iba dando vueltas de un lado a otro - lo otro podría ser que de pissssta aquel mensaje en el interior de cada cassssa, puessss cada uno corressssponde a uno de los 10 mandamientossss, numero exacto de las sssssirvientassss que se encontraban aquella mañana que desssspertamossss - dando otra vuelta por el lugar - por lo que ssssi tomamosssss en cuenta que vuessssstra gafete era el ssssséptimo, la cabaña con la frasssse "no robarassss" debe sssser la que le pertenece a usted.

   Ssssi quiere puedo proceder a preguntar por menssssajería a las ssssupervivientesssss si alguna massss se lo a encontrado, o podría ir una por una hassssta dar con ella.

La Osa Polar se apartó para dejar que la Maid VIII pudiera verse en el espejo que casualmente había justo detrás de ella. Al parecer en el fenshui de las cosas que había en esa casa implicaba que también iban a cubrir una necesidad del Master de la partida de acelerar un poco todo eso.

En efecto, la Maid VIII pudo reconocer que esas heridas no eran propias de un ser biológico, sino sintético.

La Osa Polar estaba satisfecha con lo que aquella sirvienta le estaba diciendo. A fin de cuentas, este tipo de situaciones era de todo menos tranquila y cualquier información y apoyo era bien recibida para tener un poco de ventaja tanto contra el entorno como contra el resto de posibles enemigos. 

-¿No robarás?. -Preguntó- No me suena. Pero adelante, pregunta. Necesito ir hasta allá cuanto antes. ¿Es seguro salir ahora?. ¿Vamos afuera o esperamos aquí?. El tiempo apremia, y si nos ve alguna con esta forma tengo una fuerza superior, por lo que podre derrotar a quien sea.

      M-me.... lleva la que me trajo - exclamaba mientras un sinfín de recuerdos computados en 0 y 1 iban pasando por mi cabeza, recordando como poco a poco algunas de mis características iban comenzado a tener sentido - T-tengo m...tengo mucho en que penssssar - decía, aunque esto solo era por cosa de segundos, a fin de cuentas al recordar este tipo de cosas vuelve a devolverme ciertos detalles como pensamiento mas frio y protocolares.

      E-en efecto, ssssi el tiempo apremia lo mejor es comenzar a movilizarnossss cuanto antessss, pero la ruta pacifissssta tampoco essss una mala opción - para sacar entonces mi PDA y comenzar a escribir cierto mensaje para todas - déjeme hacer un ssssolo intento, ssssi ni el messssaje ni mi opción essss correcta enviare el messssaje a todassss diciendo "Ohhh, pero que cielo mas despejado", como sssseñal de que puede ssssalir, ¿ le parece bien... mi querida Ama ?

   Independiente de su resolución, no perdería mas mi tiempo y saldría del cuarto en dirección al centro del lugar.

El mensaje me había llegado, no entendía porque la Maid VIII también me lo había mandado a mi también, pero bueno, era algo que se podía asumir. Con mi gran zarpa rasqué levemente mi panza, mi pelaje blanco me picaba un poco ahora, pero por suerte no estaba estresada sino se me caería el pelo.

-Me complace. -Le dijo a la Maid VIII.- Aunque no hacía falta que me llamaras a mi...

Y así fue como aquella Maid ahora conociendo su posición y la misión que tenía en mente, podian trazar un plan junto a aquella osa para que ambas salieran ganando, a fin de cuentas, eso era todo lo que ambas estaban buscando, a no ser que de repente recordaran algo...

Me muevo al pueblo

Se mueve al pueblo.

El interior de aquella cabaña lo primero que una persona podía ver era un mensaje bordado en una pared, aquel mensaje era bastante sencillo, y aunque algo ominoso, no parecía dar mucho más que simplemente recordar a los que se adentraban en aquel lugar esta pequeña norma.

No tomarás el Nombre de Dios en vano

Por lo demás, aquella cabaña parecía ser una pequeña vivienda unifamiliar bastante adecentada. Claramente alguien estaba viviendo en el lugar, pero pese a ello, no había nada desordenado ni que se saliera de la norma de lo que una cabaña, o el hogar de alguien, debería ser (y estar).

La Maid se alejó de las otras Maids que seguían por el pueblo sin hacer demasiado y se adentró dentro de una de las casas al azar -aunque trataría de que fuera la correcta esta vez- para poder usarla, en donde, esta notaría aquellas cosillas que la diferenciaban del resto de las cabañas, pues pese a estar todas cortadas por el mismo patrón, cada una parecía mostrar su vida y personalidad propia... y lo que era mejor, agua y luz.

Si su teoria era correcta, aquella casa tenia que pertenecer a II, asi que en algun lugar, debia de estar el maldito laboratorio, asi que se dispuso a encontrarlo, aunque tubiera que destruir la casa.

Lo que aquella Maid encontró a simple vista fue bastantes pelos blanquecinos por aquí y por allá, probablemente fuera uno de los osos. Aunque si hacía memoria recordaría que el oso que disparó había salido de esta casa en particular. Por otro lado, también había rastro de que las tablas del suelo estaban algo hundidas por donde el oso estaba, así como ropa de Maid rota y desgarrada. Reconociendo el uniforme de la Maid VII.