Partida Rol por web

Joder!!! me separo del pollon del rubio y me pongo rápidamente el bikini, no es momento de ir semidesnuda habiendo un asesino suelto en la isla. ¿Heather? ¿Quien es Heather? la verdad es que no recuerdo los nombres de casi nadie.

Me da un ataque de ansiedad y comienzo a correr de un lado a otro del bar hasta que por fin me calmo tras caerme al suelo. Nerviosa cojo algo de ginebra y doy un trago, a continuacion hecho el resto sobre la herida de Tom, es para desinfectar, se que duele pero es mejor que nada

Sami se zambullo rodando como si estuviera en el ring y echo a correr hacia la ventana, por la que se zambullo. Aquel tipo tenia un machete y el, solo una navaja.

Al llegar a la piedra, Elli se quedó "sin salida" al quedar entre la espada y la pared, y qué espada, la cual sentía entre sus nalgas y no ansiaba más que se clavase en ella. Ante sus pensamientos bastantes vulgares, apoyó sus manos en la piedra, la cual gracias al musgo estaba algo más "acolchada", inclinando hacia atrás la cadera, juntando más sus nalgas al miembro de Ryan.

Cuando vuelve a tocarle los pechos y estimulándola más al jugar con sus pezones emite un leve jadeo, empezando a ser poseida por el placer. Empuja más su trasero, como de manera instintiva por sentirle dentro, pero opta por inclinarse un poco más cuando Ryan baja la mano hacia su sexo, y de esta forma, permitiendo que con más facilidad pueda tocar su sexo, el cual deja que la acaricie y que no a pesar del agua está humedo y caliente.

Yo deseo sentirte ya dentro. Emite de nuevo otro jadeo tras decir esas palabras, girándose bruscamente después, pues ya estaba lo bastante excitada como para seguir esperando, besando a Ryan después y apoyándose en la piedra rodeando la cadera de Ryan con sus piernas, consiguiendo así que su miembro erecto entre brusca y directamente dentro de ella.

Vaya, pues deseo cumplido al parecer Esta bien que la pareja tenga tantas ganas como uno mismo, lo hace todo mucho mas fácil, aunque me cuesta un poco salir de mis valores estereotipados. Elli parece de las que agradecen mas la acción que el cortejo, aunque yo disfruto de las dos cosas. Solo espero que no sea un tio de usar y tirar. Seria un palo.

Al menos, me asegurare de que me use hasta que no quede nada dentro del tubo.

El cambio de perspectiva me demora un segundo. Pasar de la curvilínea espalda de Elli a los masivos y mas que curvos senos es una visión agradable, aunque la sensación de mi miembro penetrando en su cálida apertura...eso queda entre Dios y yo mismo.

Al mismo tiempo que comienzo a moverme sobre ella, entierro mi rostro entre sus pechos y por fin mi lengua prueba la textura de sus pezones. No me importa reconocer que estaba deseando catarlos desde que los vi en el barco. Con nata o sin ella saben a gloria.

Apoyo una mano en su cintura y otra sobre la roca hasta que me siento bien afianzado para comenzar a aumentar el ritmo sobre Elli. Creo que aguantara bien, asi que pese a mis intenciones iniciales, el ritmo que le imprimo es mas brioso que suave.

Dios, me encanta el bamboleo de tus pechos cuando te embisto. Es una visión que no voy a olvidar nunca. No se si a Elli le gusta que le digan cochinadas mientras tiene sexo, pero estamos aun descubriéndonos el uno al otro.

-¡¡Dios como escuece!! Heather era la chica pelirroja que se adentro sola en la selva...pobre...intente cargar con su cadaver hasta aqui pero al ser atacado y tener que salir huyendo no me quedo otra opcion que dejarle alli, por eso estoy cubierto de sangre, es la sangre de Heather....me alegro de volver a verte Kelly, y a Oli, veo que no habeis perdido el tiempo...jajaja-

Tom se reia intentado relajar el ambiente que se habia generado, despues se dejo caer hacia atras en la tumbona mirando el cielo estrellado

-Pense que aquel iba a ser mi final....-

Estaba a punto de contestar a Cassie cuando nos sorprendió el revuelo de Tom sangrando por su pierna.

¿Un asesino? Pero si acabamos de llegar. ¿Quién nos quiere ver muertos?

Miro para la selva intentando ver algo...

Sea lo que sea está ahi fuera...no creo que sea bueno estar más al aire libre...

De repente de la maleza sale Sonya, con la cara desencajada. Por fin ha llegado a la playa. Poco después llega Sami, que tiene una herida de cuchillo en el hombro derecho...

Sami, trastabillando y con su gran pene aun a la vista, sangraba como un cerdo. Estaba acostumbrado a las lesiones y al dolor pero nunca lo habian atacado con un PUTO MACHETE.

-Tios! Era verdad! Hay un loco con una mascara totemica y un machete! Ha intentado matarnos a Sonya y a mi!

Toda la travesía cruzando la selva se le habia antojado como el acto final de una obra de teatro, con el pesado y polvoriento telón cayendo inexorable como una guillotina, finalizando la obra de su vida. Casi estaba esperando oír el crujir de una rama, el zumbido metálico y notar un instante de dolor extremo mientras observaba desde el suelo como el resto de su cuerpo caía delante de ella.
Pero nada de esto pasó.
Sonya llegó a la playa siguiendo las luces como una polilla. La arena significaba por alguna razón un fortín inexpugnable contra el monstruo que la perseguia, y como un niño busca la protección de su manta, la chica voló hacia ella.
Cuando sus pies la tocaron no tuvo valor suficiente para mirar atras. Estaba segura de que vería al hombre del machete sujetando con la mano algo redondo y viscoso. Algo que apenas ya goteaba.
Fué el oir a otros humanos lo que la despertó. Morir no parecia tan malo si se hacia en compañia.
Una parte de su cerebro no era consciente de que iba desnuda y con las piernas llenas de arañazos y barro seco por la huida, para ella lo más importante era extirpar el grito del pecho que llevaba aguantando todo ese tiempo.
-¡¡Ayuda!!¡¡Hay un loco con un machete!!¡¡Sami está herido!!
Se acercó al grupo tambaleandose, con las piernas dormidas por el esfuerzo.
Sami salió de la selva como un fantasma, pálido y con parte del pecho y el hombro oscuro y brillante. La chica se llevó las manos a a la boca y ahogó un grito. Se acercó a él y se quedó quieta a un par de metros.
-Joder... ¡Estás vivo!
No podia desviar la mirada de la sangre, morada y resplandeciente a la luz de la luna.
-Mierda, tenemos que coserte ese hombro.

-¡Coño! mira quien aparece por fin...., vaya la verdad es que tienes un cuerpazo, se me esta poniendo dura y todo...-

al poco rato aparece Sami sangrando por el pecho y hombro

-Vaya, tambien has sido atacado por el lunatico ese que anda suelto por la selva no? bueno, sientate en una tumbona y unete a mi en el hospital playero, tambien fui atacado por el asesino en la selva, me metio una buena estocada en el muslo....por suerte pude escapar gracias a Marie, por cierto colega...tapate el rabo, ya es bastante desagradable tu estado como para encima hacerlo aun mas...-

Tom cogio un poco de cocaina de su mochila y se puso una raya

-Si.......esto me ayudara a mitigar el dolor, ¡es la nueva morfina!-

Sami vió a Sonya y le sonrió con confianza. Cuando habló de coserle el hombro se echó un vistazo y concluyó que tenía razón pero que ya habría tiempo para ello. Cogió una toallas que había por la arena y se tapó como pudo. No por las palabras del gilipollas negro, sino por respeto al resto de desconocidos. 

¿Estamos todos aquí? ¿Qué ha pasado con el ligón, la rubia y la peliroja?