Una vez me reúno de nuevo con los demás, sin que nadie más escuche, hablo, en voz baja.
Me he enterado de que el castellano hubiera querido atacar Cornualles, pero que el conde lo tiene prohibido. Seguir al anterior ataque sería ir contra el conde, no solo contra la prudencia. Y temía, además, que fuera una distracción para tomar su castillo, lo que causaría muchas muertes en Logres.
Me pregunto si la espina no será el señor conde o algún consejero, que estén aliador con Cornualles.
Motivo: Gloria
Tirada: 1d20
Resultado: 1 [1]
Menudo 1 justo ahora, jaja.
Escucho a mi compañero con la barbilla dejada caer sobre mi mano.
- Pudiera ser cierto, no hay dudas. Yo, por mi parte, creo que se confirma la suposición que tenías, - le digo a Sir Flaín, - es posible que Sir Portius tenga una fulana o incluso un bastardo entre las víctimas.
Motivo: Gloria
Tirada: 1d10
Resultado: 10 [10]
- Sí, eso mismo he oído yo. - dijo Cadwallon ante el comentario de Sir Loren. - Puede que simplemente quiera visitar a su querida o a su bastardo y que esto le esté afectando. Eso explicaría su comportamiento sospechoso, sin que sea un comportamiento traidor.
Se volvió hacia Sir Flaín. - Lo que decís tiene sentido: que haya alguien queriendo provocar al castellano para dar una excusa a Cornualles... ¿quién, aparte de Sir Portius, abogó por atacar?
En realidad, soy más partidario de que el conde esté intentando provocar al castellano para meter tropas en Cornualles y darles una excusa. Porque sir Gravent dijo de no seguirles.
Cadwallon asintió. - Tiene sentido. Si es así, lo volverán a intentar. Y el castellano, tarde o temprano tendrá que actuar, si no quiere perder la lealtad de los campesinos bajo su protección.
Al poco de todo aquello, volvió a instalarse la rutina en el castillo, guardias, controles, exploración...
Pero una madrugada sucede algo que os rompe el sueño.
Sir Portius en plena madrugada os despierta uno a uno. Viste ropa de cuero.
Habemus tarea, vestiros sin armadura, pues hay que gastar de sigilo. Facerlo rápido no dar voces ni hacer ruido. Os espero en el establo, preparando los vuestros corceles.
(No con los caballos de batalla).
¿Lo hacéis?
La llegada de Sir Portius le sorprendió, y más su extraña propuesta. No pudo evitar pensar que igual se le había ocurrido algún plan alocado como ir a Cornualles a por su bastardo secuestrado. Tentado estuvo de rechazar la orden o desobedecerla...
Pero pudo más la curiosidad. Y la posibilidad de averiguar más sobre el caballero y sus intenciones.
Cadwallon se vistió con una cota de cuero y se dirigió al establo
La prudencia y la temeridad se ponen a jugar una partida de tabas a ver quien gana cuando aparece sir Portius. Miro un poco desconfiado, pero al final gana la temeridad empujada por la juventud.
Me levanto, me pongo la armadura de cuero y cojo la espada, y sigo a mis compañeros.
Aquella llamada me sorprendió tanto como a mis compañeros. En nuestras caras se reflejaba la perplejidad de la situación. Me levanté de un salto e indeciso miré a los demás. Todos se estaban preparando, así que mis dudas, aunque no se disiparon, se alejaron de mi cabeza. Me vestí corriendo y seguí a mis compañeros hacia la cita que nos esperaba.
Quería comentar algo, pero el sigilo era importante, así que callé.
En la rutina del castillo: RESUMEN.
Sir Flaín de Figsbury "Piel de Hierro" marca en batalla, +5+1
Sir Cadwallon de Catterick +2