Partida Rol por web

Los niños poco a poco van calmandose con la ayuda de la elfa y de otras mujeres, con miradas curiosas puestas en la elfa por parte de los hombres del pueblo.

El capitan schiller se acerca a vosotros y a varios hombres del pueblo. Tenemos que encontrar a Nana urgentemente, es nuestra sanadora y sin ella aun estamos mas indefensos.

-Poco más indefensos podremos estar, la verdad. Vayamos a buscarla de una vez. ¡Cahir, Ugrim, Weber! ¡Vámonos a por la paseante!

Ionor cogió sus pertrechos de guerra, un odre con agua y se acercó a la linde del bosque dispuesta a buscar a la recalcitrante anciana.

Al fin la elfa se digna a hacer algo...- piensa Ungrim mientras sigue a la elfa a una distancia prudencial mientras mira si los demás les siguen.

Ionor empieza a buscar a partir del carro y no hay ningún rastro que pueda coincidir con Nana hacia el exterior del campamento, poco a poco va ampliando la búsqueda. Una media hora mas tarde y 50 metros mas atrás en el camino un rastro aparece de la nada, en dirección a Fahndorf.

- Hemos de recorrer el camino inverso al de llegada. Parece ser que se ha dirigido hacia Fahndorf. Os recuerdo que por aquí había trampas, y que ya han caido algunos por el camino. ¿Estais dispuestos a seguir?

- Vaya, parece que no vamos a parar de dar vueltas sobre nosotros mismos. Algo huele a podrido en Fahndorf, ¿no creeis?

- Yo solo se que no me acaba de gustar este maldito bosque así que busquemos a esa vieja y salgamos de aqui cuanto antes.

Ionor siguió el rastro cual perro de presa, con el arco en la mano izquierda preparado para encajar y tirar la flecha de la derecha.

Varios minutos mas tarde en un claro del bosque podéis ver una enorme hoguera, rodeada por oscuras siluetas animales. Las llamas bailan al son de los cánticos que llenan el aire. Una figura cubierta por las sombras arroja cosas a la hoguera, haciendo que cambie de color, de rojo a azul y luego a verde. Se puede sentir la magia en el ambiente.

Ionor entrecerró los ojos para evitar que la hoguera la cegase, pero no conseguía ver nada. Dudando entre si tirar o no, indicó con un gesto a sus compañeros que se pararan y montó la flecha en el arco, apuntando a la figura que hacía magia.

Ungrim llega al claro y ve una hoguera pero las llamas le impiden ver nada más. En ese momento ve la elfa que saca su arco e inmediatamente saca sus armas y se prepara para atacar.

El humo de la hoguera no dejaba ver nada a Cahir que sentía un terrible escozor y lagrimeo.

Las sombras animales se mueven interponiéndose entre la figura humana y vosotros, pero no se acercan a vosotros ni abandonan el claro. Ahora las podeis contar mejor, son 4.
Allí estáis vosotros con las armas desenfundadas en el limite del claro.

Ionor retrocedió un paso cuando vió que las figuras animales se interponían en el camino de su flecha.

-Podreis con ellos, ¿verdad? Tengo un plan en mente, pero necesito que acabeis con ellos vosotros solos.

Mientras esperaba la respuesta, dejó que su arco zumbara y soltara el proyectil a la figura más cercana.

La flecha impactó en el animal con bastante puntería, algo que la elfa llevaba mucho sin hacer.