Partida Rol por web

¡¡NOTIFICACIÓN RECIBIDA!!

Un pequeño icono en forma de Bloc de Notas apareció en la interfaz acompañada del sonido que solo tu podías oír.

Si pinchabas sobre él (para pinchar sobre algo, lo tienes que tocar... haciendo que los demás te vean raro XD), el archivo se abría y salía... un nombre...

Elaisa Nursy

A pesar de los esfuerzos del abogado para conseguir algo de información sobre el nuevo testigo, no parecía que fueran a sacar nada en claro. Casi se sentía mal al tener que insistir tanto, pero es que tenía la corazonada de que debía hacerlo...

Fue entonces cuando sucedió, la chica dio un ligero respingo sobre el sofá, mientras alzaba la mirada, al tiempo que alargaba su brazo derecho en el aire, como si hubiera apartado una mota de polvo en suspensión o algo similar.

Acto seguido ladeó la cabeza mientras se cruzaba de brazos de nuevo, pensativa. Entonces.. No tengo otra opción, lo siento mamá.

- Nursy.. Elaisa Nursy. - susurró con tono calmado a medida que alzaba la voz hasta ser audible para todos. Luego se giró para mirar a su madre, suavizando su gesto a una sonrisa de disculpa. - Debe ser una de tus compañeras en el Hospital. Creo que me suena su nombre, de alguna vez hablando durante la cena. - siguió diciendo, asintiendo levemente para sí. Luego dio un pequeño suspiro antes de seguir. 

- Siento haber insistido tanto mamá, ¿podrías contarnos más sobre como es ella? Porfi.. - pidió mientras acariciaba la mano de su madre en gesto conciliador, esperando no equivocarse con aquella idea.

-Lo... lo siento, Sra. Cross. Le aseguro que no era mi intención... - empezó a disculparse Helio. La Sra. Cross parecía estar realmente triste y angustiada con aquel asunto. Tal vez realmente no sabía nada, y Helio le estaba insistiendo sin parar, tratando que le explicara algo que no sabía, casi cargándola con toda la responsabilidad de... - ¿Eh? ¿Quién? - preguntó Helio. - ¿De qué está hablando, eh... Srta. Cross? - preguntó a Heather. ¿Sabía ella algo? Si era así, ¿por qué no había dicho nada antes?

Nursy... Elaisa Nursy

 Cuando la sra. Cross escuchó aquel nombre de los labios de su hija... la cara que se le quedó lo decía todo. Como si algo se rompiera dentro de ella y le doliera -¿Co-como...? ¿Po-porque...? ¿Co-como lo ha-has...?- fue diciendo realmente nerviosa y destrozada, acabando mirando al suelo. Acompañando a su extraña reacción, cuando Heather le puso la mano encima apartó su mano y se levantó muy inquieta.

¿Po-porque has dicho su nombre? ¿D-de verdad está i-implicada? E-entonces... e-entonces... no... n-no... - iba diciendo con los nervios a flor de piel -¡Es culpa mía! ¡Todo esto es culpa mía!- dijo cayendo sobre el asiento, con las manos en la cabeza, llorando, agarrando y tirando de su pelo totalmente destrozada.

-¡Sra. Cross! - la respuesta instintiva de Helio fue acercarse a la mujer del acusado y acercar sus brazos para volver a alzarla del suelo, alertado por su reacción, pero no se atrevía. ¡¿Qué estaba pasando?! - ¿Q-Qué ocurre, Sra. Cross? Por favor, tranquilícese... - murmuró con preocupación, lanzando una mirada a Heather y a su jefe, en busca de ayuda.

- Mamá.. - se atrevió a decir, no se esperaba que su madre explotase de aquel modo. Se arrepentía en parte por haber revelado aquello, pero es que no le había dejado otra opción... ¿Por qué tanto empeño en encubrir a esta persona? Es acaso más importante que papá..? No, no puede ser, tiene que tener un motivo pero.. Heather dejó caer los hombros ligeramente abatida, miró a Helio sin saber que responderle, ¿cómo iba a explicar algo así? Probablemente empeoraría las cosas.

Por lo que prefirió evitar la mirada del joven abogado y se centró en ayudar a su madre, que estaba al borde de un ataque de pánico. - No es culpa tuya mamá, tranquila.. Respira conmigo.. Así, por favor mamá, respira hondo. Todo irá bien. - comenzó mientras la animaba a inspirar y espirar como ella, con el fin de intentar que se recompusiera. 

- Sabes que puedes contarme lo que sea que te aflija, pero por favor no lleves sola esa carga, no quiero verte así.. - volvió a decir, esta vez con tono suave y conciliador, se sentía responsable del desastre que había ocasionado poniendo a su madre tan nerviosa.

La mujer estaba realmente en medio de un ataque de pánico; hasta el punto que el señor Yersen tuvo que intervenir bastante sorprendido y un poco agobiado -Señora Cross, por favor mantenga la calma... expira e inspira- dijo yendo a vuestro lado, intentado relajar a la mujer y que se recuperase un poco.

Pero la mujer no se calmaba del todo, continuaba viéndose realmente estresada, llorando y temblando. Mientras estaba diciendose a si misma -Todo esto es culpa mía... todo esto es culpa mía... todo esto es culpa mía...- en bucle una y otra vez. No sabíais exactamente que estaba ocurriendo... pero la mujer había entrado en una especie de bucle auto-inculpatorio.

Entonces, el alguacil entró en la sala -¡Defensa! El juicio está a punto de empezar- dijo desde la entrada para luego volver.

No os podíais ir así como así dejando a la señora Cross así; pero el abogado tenía que defender... y Heather estaba castigada en el atril de la defensa. Por ello, el señor Yersen se ofreció a quedarse -Yo trataré de calmarla y que este bien- dijo a los dos con su tono serio. Luego se acercó a su pupilo -Chico... vas a continuar solo este caso. Y viendo como ha reaccionado la señora Cross...- dijo mirando con cierta pena a la mujer -La señora Nursy es la clave para resolver este caso. Espero lo mejor de ti muchacho- terminó de decir.

En ese rato que el señor se despide del abogado, notas como tu madre te agarra la mano al final... no para buscar cariño, sino para dejarte algo en ella. Marianne te dejó un pañuelo de seda en ella... y te miró con los ojos llorosos -Esto... snif... es culpa mía... esto lo demuestra... snif... lo siento- dijo a duras penas llorando desconsolada -En cuanto has dicho su nombre... snif... me has hecho darme cuenta de todo... esto... es... snif... el [color=#E74C3C]móvil[/color]- terminó de decir apesumbrada -Por favor... cuando lo oigas... snif... perdóname...- terminó de decir, volviendo a hundirse en un mar de lagrimas.

[13 de Marzo, 11:56 Tribunal del Distrito Sala nº3]

Se reanuda la sesión en el juicio contra el Dr. Evans Cross- dijo el juez una vez la sala se llenó de nuevo de las personas acompañado de varios golpes de mazo -Fiscal Portsman, ¿ha preparado a su testigo?- preguntó serio al fiscal.

Jeje, por supuesto Sr. Justice- dijo el fiscal confiado. Parecía que por algún motivo había recuperado toda aquella arrogancia que el inspector Gammier le había quitado de golpe -Aunque me gustaría decir una cosa. La pobre testigo todavía no ha pisado su casa desde el incidente por estar ayudando a la policía con su testimonio. Así que estará cansada y deseando querer asearse en su hogar... así que espero que no la atosiguen y terminemos rápido- avisó al Juez -Que haga su aparición el nuevo testigo, la enfermera que encontró el cuerpo al entrar en la habitación luego de salir el acusado- dijo sujetándose la chaqueta, sintiéndose totalmente ganador con aquella presentación.

Entonces, una mujer subió a su puesto como testigo. Por su uniforme, sus guantes y la jeringuilla que sostenía, era evidente que el oficio de aquella mujer era enfermera... y como bien dijo el fiscal, no parecía haberse podido cambiar. Tenía un cuerpo bastante atractivo que podría hacer babear a cualquiera, y emitía un dulce olor seguramente proveniente del perfume de la flor que tenía en el pelo. Y cuando se situó tras el atril les dedicó una sonrisa cálida a todos -Saludos- dijo escuetamente acompañado de una leve reverencia -Soy Elaisa Nursy, enfermera del hospital Remedy y ayudante del doctor Cross- dijo con un tono elegante y educado -Mucho gusto.

E-encantado srta. Nursy, mucho gusto a usted también- dijo el juez... claramente embelesado por la mujer -Entiendo que tenga prisa, pero ya sabe para que ha sido llamada: para verificar si la declaración del doctor Cross es verdadera o falsa... así que, si pudiera empezar ya, más pronto podrá irse- terminó diciendo.

Gracias por entenderlo Su Señoría, trataré de ayudar en lo que pueda- dijo haciendo una leve reverencia.

-DECLARACIÓN DEL TESTIGO-

-¿Verdad o mentira?-

Aprecio mucho al doctor Cross, por lo que seré lo más sincera que me permita la memoria.

Como ha dicho el fiscal, entré muy poco después de que el doctor saliese de la habitación.

No puedo saber con seguridad si le regaló o no un boleto de lotería al pobre chico, no pude oír nada...

Aunque es cierto que ese día en el trabajo todos nosotros recibimos un boleto.

Un regalo de un paciente agradecido.

Y es cierto, la tele estaba puesta en el mismo canal donde ponían la lotería.

Pero lo demás he de reconocer que no entiendo porque lo ha dicho.

Cuando descubrí el cadáver... no encontré ninguna flor en la escena del crimen.

Simplemente traté de despertar al chico para darle sus medicinas...

Pero no recibí respuesta como imaginarán.

Muy bien, muchas gracias por el testimonio- le agradeció el juez -Sr. Dusklaw, ya ha oído al fiscal... no sea muy invasivo con ella, a riesgo de una penalización. Sea delicado con su interrogatorio.

El modo en que actuaba su madre había logrado desconcertar a Heather, que no supo que responder cuando fueron llamados de nuevo para reanudar el juicio, simplemente le dedicó una mirada llena de preocupación cuando tuvieron que despedirse.

Pero por qué.. ¿Qué habrá pasado realmente..? Cuando lo oiga... 

Aún tenía aquello entre las manos, pero viendo que entraba el testigo, no pensaba interrumpir al juez, además, ¿dónde encajaba eso? Sentía que apenas estaban viendo la punta del iceberg. - Hay mucho más de lo que pensamos... Creo que no nos hacemos una idea. - murmuró quedamente.

Ahora el abogado se encontraba sólo sin su jefe. Helio tendría que perseverar, pero ella no pensaba quedarse atrás. Sacudió la cabeza alejando aquellos pensamientos negativos, tenía que ser fuerte. Lo último que necesitaba el joven era una actitud derrotista. - Haré todo lo posible por ayudarle señor Dusklaw. - dijo con firmeza, mientras adoptaba una pose resolutiva mirándole. Luego clavó la mirada en la enfermera, su actitud provocó que Heather hiciera rodar los ojos. 

- Para empezar, mamá dijo que era posible que alguna compañera de trabajo supiese de su tradición de intercambio de cartas. ¿Cree que fue ella quién la escribió? - comentó en voz baja mientras la observaba, había algo en ella que le hacía desconfiar, sobretodo recordando la reacción de su madre antes. ¿Dónde encajaba Nursy en todo esto? 

Eso sí, tenía la impresión de que cada palabra que salía de su boca era una burda mentira. - Hasta ahora no se había mencionado que todos los trabajadores habían recibido un boleto. ¿Y qué es eso de que no pudo oír nada? Los espiaba tras la puerta o..? - continuó mientras se cruzaba de brazos, aún tenía el pañuelo en una mano.

Negó con la cabeza ligeramente, analizando las palabras de la enfermera. - Cuando se encuentra un cuerpo sin vida, yo no me pondría a mirar si hay flores en el lugar. - añadió frunciendo el ceño, estaba claro que esa enfermera sabía algo y estaba ocultando información. Manipuladora.

-Bien. Cuento con usted, Srta. Heather. - dijo Helio con Heather a su lado, dedicándole una sonrisa de supuesta seguridad a la chica... Aunque, por dentro, estaba prácticamente aterrorizado. ¡Su primer juicio, y no tenía a su lado al Sr. Yersen! Y por si fuera poco, el Fiscal Portsman había logrado poner de su lado al Juez gracias a aquella testigo... [color=#00BFFF](Lo cierto es que es bastante mona... ¡Agh! ¡Céntrate, Helio!)[/color] 

El interrogatorio comenzó, y Helio escuchó todas y cada una de las palabras de la testigo con la mirada clavada en ella. ¡Tan concentrado intentaba estar, que cuando el Juez le permitió comenzar con el interrogatorio apenas se dio cuenta de ello!

-¡A-Ah! ¡S-Sí, por supuesto, Su Señoría! - respondió el chico. [color=#00BFFF](Vamos a ver... piensa... su testimonio en general es extraño, pero... ¿por dónde podría demontarlo?)[/color] A su lado, Heather le dio unas cuantas sugerencias, aunque Helio sólo la escuchó a medias. ¡Tenía que estar atento a demasiadas cosas! - ¡Un momento! - dijo en voz alta... sin casi darse cuenta. [color=#00BFFF](¡Agh! ¡No estoy preparado para esto! ¡Rápido, Helio, pregunta algo! ¿Qué es lo último que ha dicho la Srta. Heather...?)[/color] - ¡S-Srta. Nursy...! - dijo Helio, no demasiado seguro de sí mismo. - ¡D-Dice que no encontró ninguna flor en la escena del crimen, pero...! ¿Acaso la buscó? - la señaló. - ¡Acababa de encontrar un cadáver! ¡Aunque hubiese una flor en aquella habitación, seguro que la habría pasado por alto! ¡¿No es así?!

La enfermera, a pesar de tu grito y después del pequeño bajón que dio al recordar a la víctima, sonrió con una media sonrisa y te miro -Esta usted muy tenso... debería calmarse y relajarse. Así haremos mi presencia lo más apacible para todos- comenzó diciendo -Lo de esa flor que menciona, tiene razón que no la busqué... no era momento para ello. Pero si me di cuenta de que no habia porque la hubiera visto al entrar- dijo sacando la flor de su pelo y oliendola -Snif... me gustan las flores y su fragancia. Habría recordado ver una. ¿Quiere usted olerla señor abogado?- dijo con una sonrisa dulce.