Partida Rol por web

Calendario Estelar Estándar:
- Año: 3784.
- Mes: Febrero.
- Día: 02.
- Hora: 17:00 h.

El Cabo Frank Bishop observó el gesto del Neomarine Mercury ante el comentario del Soldado Stuntman. No pudo evitar recordar las largas conversaciones mantenidas entre ambos durantes las muchas horas invertidas en la reparación de las armaduras hacía no tanto tiempo. Las palabras del soldado no eran sino un claro reflejo del rechazo de los humanos hacia los neomarines, algo ya mencionado en aquellas diatribas pseudofilosóficas, que se habían desarrollado a medio camino entre la seriedad y la necesidad de aliviar las tediosas jornadas.

El Cabo se acercó al Neomarine y puso una mano en su hombro. El mensaje era claro, no merecía la pena sentirse ofendido y aún menos reaccionar ante aquella inconsciente provocación. Después, se volvió hacia el soldado.

- Soldado Stuntman, cuando acabe su turno, preséntese ante mí. Quiero hablar con usted.

Miro soprendido al Cabo. No tengo ni idea de qué es lo que querrá de mí después de acabar aquí, pero lo cierto es que estoy agotado después de tantas horas sin dormir y de andar de aquí para allá. Pero el deber obliga y a pesar de apetecerme una mierda no me queda sino obedecer.

- Sí, señor. Así lo haré.

- "Tranquilo, Cabo. Estos neomarines son escoria inhumana, y no está mal que de tanto en tanto alguien se lo recuerde." -

Calendario Estelar Estándar:
- Año: 3784.
- Mes: Febrero.
- Día: 02.
- Hora: 17:30 h.

- La Técnico Slasher llega al Hangar y ve a un montón de gente alrededor de la "Matrazza", sobretodo militares.

Se esperaba toda esa espectación, sobretodo por parte de los soldados que debíane estar preparando el apartado armamentístico. No había prisas para acercarse, y tampoco dudaba que la detuvieran ni nada por el estilo. Así que, echando una ojeada de paso, buscó a Zhay. Y por qué no, al Cabo Bishop que tanta ayuda desinteresada le había dado.

- Es normal que esté nervioso, Trashman... después de todo, la misión de ir a destruir un planeta no es algo que ocurra cada día verdad? - hago una pausa - Bueno, no es que vayamos a volarlo entero, sólo a dejarlo inhabitable, pero aún así es una buena aventura que contar a nuestros nietos. Usted sólo tiene que concentrarse en que no nos destruyamos a nosotros mismos por el camino, pero no se deje llevar por la presión del momento, que tampoco es para tanto. Total ¿qué es lo peor que nos puede pasar? ¿Una muerte rápida e indolora? Tampoco es para tanto.

Extrañamente, la clara descripción que ha hecho el segundo oficial, en lugar de asustarme me ha emocionado ligeramente. Esta misión es una de las mayores cosas que puede llegar a hacer un artillero en su vida. ¿Cuantos habrán tenido la oportunidad de bombardear un planeta entero? Y, lo mejor, sin miedo a provocar bajas civiles, pudiendo tener la conciencia perfectamente limpia.

Tras un merecido descanso en su camarote, Clarek hace nuevamente acto de presencia en el hangar justo a tiempo para presenciar el enfrentamiento entre Heartworth y Mercury. Inmediatamente se dirige con paso firme hacia ellos, haciendo buen ruido al pisar, situándose luego entre los dos y colocando su cara a escasos milímetros de Heartworth, a la vez que clava en él una mirada de gorgona.

--- ¿Se puede saber qué cojones está pasando aquí, sargento Heartworth?

¿Es que queréis acabar conmigo o qué? Mascullaba para mis adentros mientras trataba de recordar porque las cosas habían cambiado tanto.

- Victoria por favor, dame los datos que he pedido - digo pronunciando el nombre casi marcando cada letra.

- "A sus órdenes, mi Coronel. Lo que está pasando aquí es que estamos cumpliendo las órdenes del General Worg: proteger la lanzadera y sus misiles. No nos hemos movido de aquí en ningún momento y llevamos ya unas cuantas horas, Señor." -

- "Sí, Técnico Trashman. ¿Qué datos ha pedido?" -

- En principio todo lo que tengas para realizar una simulación del proceso de aproximación, entrada, bombardeo y salida de la atmósfera - le resumo a Victoria.

- También necesito calcular el peso de la nave y todo lo que vaya dentro, personal humano y equipos, para hacer simulaciones de combustible, punto de no retorno y ángulo óptimo de entrada en la atmósfera para poder calcular la trayectoria que nos proporcione la salida más rápida posible - sigo divagando.

- Voy a necesitar tu ayuda con todo esto Victoria- sentencio.

- "Muy bien, Técnico Trashman. Cargando datos en el puesto del piloto de la "Matrazza". Carga de datos en curso. Optimizando. Proceso completado. Ya tiene disponibles las simulaciones, Técnico Trashman." -

--- No intente pasarse de listo conmigo, Heartworth, o le devolveré a Auriga Prima de una patada en el trasero. ---Volviéndose ligeramente hacia el resto de los presentes, y con aquella mirada todavía en su rostro continuó hablando---. No pienso consentir este tipo de estúpidos enfrentamientos entre mis hombres, ¡¡¿ESTÁ CLARO?!! .Si quieren descargar adrenalina vayan al gimnasio, y sino resérvenla para cuando entremos en combate con el enemigo.

Dicho esto Clarek dirigió una última mirada tanto a Heartworth como a Mercury, entrando a continuación en la "Matrazza" para dirigirse a sus tripulantes.

--- Teniente... Trashman..., ¿cómo van los preparativos?

- Voy lo más rápido que puedo Coronel. Estoy preparando unas simulaciones basándome en datos que me ha descargado Victoria. No quisiera que nada me coja desprevenido - recalco haciendo una resumen para ponerme manos a la obra con las simulaciones.

- Ya está casi todo listo, mi coronel. El piloto está haciendo las últimas simulaciones. Estamos preparados para despegar en cuanto den la orden.

Los resultados de las simulaciones parecían servir de algo, al menos para darme ánimos, sino esperanzas, ya que a los militares parecía no importarles mucho el volver a la órbita, si había unos buenos fuegos artificiales. Pero sólo yo sabía hasta que punto la "pequeña" soportaría la presión de las maniobras y nos sacaría del infierno que se desataría en la superfice del planeta. Los cálculos no daban mucho más margen del que me había imaginado, un 10% a lo sumo. Hay quine dice que por menos de eso han esquivado la muerte, pero la matrazza no era un bisturí y ese planeta un quirófano completamente controlado y estable. Quien sabe como nos afectarían las ondas de choque propias por las detonaciones, si se producirían cambios en los campos electromagnéticos demasiado intensos como para freir los apantallamientos o sabe Dios que demonios más.

- Coronel, puedo seguir haciendo pruebas pero...no creo que pueda sacar mucho más en limpio. Según lo veo, estoy todo lo preparado que podría estar para... "esto" - dejo caer con desgusto.