Partida Rol por web

- Bah! No veo dos caminos como aquél viejo de la tienda. Solo el de ladear el lago. Menuda recepción la de estos desgraciados... - Se quejó mientras esperaba impaciente a que se decidiera un curso de acción antes de ponerse en marcha hacia las ruinas.

Una bandada de incompetentes que esperan, ansiosos, la muerte de la mano del primer monstruo que cruce por aqui. Por nuestro lado, no me gusta la idea de ladear, pero creo que no nos queda otra opcion, tendriamos de otro modo, que abandonar los caballos. Y el tamaño del shaman nos pasaria cuenta en medio de las aguas. - Dice con el simpatia de siempre, el palido guerrero, mientras toma las riendas del animal y lo conduce hacia el camino - Andando, ya me asqueó este lugar.

Me da igual lo que decidan, pero que sea rápido...hmm.. aunque no se por que obviamos la opción de entrar volando...digo esto mientras doy unas palmaditas en el cuello de Sephira tras de un salto haberme subido encima de su lomo, y haber tomado las riendas, cuando acto seguido ella desplegó las alas esperando mi orden para iniciar el recorrido

Siguió sin emitir palabra alguna al otro humano que parecía el más decidido del grupo. El camino era largo y perder tiempo en sandeces era absurdo. Tardarían menos tiempo ladeando rápido y de una vez que cazando y adiestrando dragones para usarles de monturas aladas. Eso estaba claro...

El variopinto grupo de aventureros se pone en camino. Tomando el camino que sale del campamento se dirigen directos hacia los lagos que rodean Andorhal y tras eso se tuercen del camino principal. El lago es realmente fetido y podeis ver por el suelo a algunos cadaveres flotando sin vida, aventureros que antes que vosotros habian pasado por alli, optando por otros caminos más seguros. El olor a muerte es bastante intenso y muy incomodo.

El día pasó lento y engorroso para Gerrard entre la humedad y pestilencia de aquél condenado charco que se vieron obligados a bordear. Además a todo ello su humor estaba por el piso a causa del precario recibimiento en el campamento, donde fueron despachados como carne de cañón a pesar de la veteranía de la tropa.

- Más les vale que tengan un buen montón de oro a nuestro regreso, porque si no...- Se quejaba con molestia mientras intentaba ignorar el insoportable olor a muerte del lago, y por lo menos se consolarse con la idea de que hubiera sido peor cruzar en barca aquella inmensa masa de agua podrida.

Entonces... ¿Eso es todo lo que te motiva, humano, el oro? ¿Solo vienes aquí por la recompensa que se te pueda entregar una vez hayas completado tu tarea? -pregunto, montado en mi flamante kodo gris, mientras proseguimos la marcha.

Esta tierra sufre, humano. Es nuestro deber purificarla, y devolverla a su estado natural. La naturaleza no debe de ser corrompida de la manera que es aquí. Cuando mueras, el oro se quedará ahí, pero tú volverás a la tierra, que es el lugar del que procedes. Recuérdalo, humano. Que tu única motivación no sea el oro...

El veterano toma una profunda bocanada de aire y comenta - Hogar, dulce hogar...- en modo sarcastico mientras dirige su montura a travez de los bordes del fetido lago. A paso lento y pesado, el jinete y su corcel se encaminaban inmersos en profundos pensamientos, ajeno a las conversaciones de sus camaradas. Hasta su alerta se suspendio. En su mente se arremolinaban incognitas de la mision, mesclandose con sentimientos de venganza. Se semblante se fue aclarando a medida que fue saliendo de ese trance.

- Los árboles no me darán armas con las que pelear contra los muertos vivos. A lo sumo me darán sombra y leña al descansar, pero a la hora de la verdad un guerrero solo se tiene a sí mismo y a sus veneradas armas. Lo demás queda en segundo plano entonces, y la única necesidad es la de supervivencia. - Respondió con desdén ante la opinión del tauren. Cada uno podía tener sus motivos para lucha y poco le importaba o los cuestionaba, él tenía los propios y nada los cambiaría: Perfección, fama y riquezas. Esas eran sus prioridades y lo demás podía irse directamente al Infierno.

Podríais cayaros de una vez...reprimo a los que inconcientemente mantenían una charla como si estuvieran en una caverna..no se dan cuenta que lo unico que hacen es dar la alerta de que estamos por akí,  cada uno tiene sus motivos y son los suyos, no les importan a los demás, cayaros y seguid su camino.Yo tambíen tenía mis motivos, librar al mundo de la pestilencia, erradicar toda malicia que se desbordaba por la faz de la tierra, vengar a mis seres queridos, a mi querida mujer he hijas, asesinadas sin piedad. Ya esta bueno ya de tanto sufrimiento, de tanto despilfarro, los muertos, pues de vuelta a su inframundo, la tierra es para los vivos.

El variopinto grupo logra bordear finalmente el lago, ha pasado un rato ya que van algo lentos para evitar llamar la atencion de nadie. Llegais a la parte norte de Andorhal. Veis una colina por esa zona y decidis subiros para ver el panorama mejor. El paisaje es deprimente. Más al norte de Andorhal hay unas granjas en las cuales se pueden ver a muertos vivientes esqueleticos arrojando animales medio muertos en calderos enormes para continuar con la plaga de aquellas tierras.  Si mirais hacia Andorhal podeis ver a los muertos vivientes caminando sin saber hacia donde por la pequeña villa.

Y alli esta él.

El maese Lavaescarcha, haciendo la ronda por la ciudad, flotando sobre el suelo en su forma de liche, en busca de algun despistado animal o algun desafortunado cruzado escarlata para matarlo y ampliar asi su ejercito. De todos los sirvientes de Ner´zhul éste es quien mejor defendido está con diferencia.

Un extraño brillo os llama la atencion. Proviene de uno de los edificios, os fijais con esfuerzo porque pensais que os han descubierto y desde un edificio que pudiera ser una especie de almacen de grano podeis ver a una pequeña gnoma en el tejado haciendo destellos con la hoja de su pequeña espada.

- Bien, esa debe ser la señal. !En marcha! - Murmuró con presteza el espadachín señalando con su dedo índice el origen de los destellos para luego ponerse rápidamente en camino hacia el mismo, siempre atento y cauteloso ante una posible trampa o emboscada del enemigo.

Valora al menos tu propia vida -digo bajando la voz y agarrando por el hombro al humano, deteniéndolo en su marcha. Después, señalo al Lich que está rondando por la ciudad- Creo que deberíamos de buscar una manera menos descabellada de cruzar para encontrarnos con Cromi. O mejor, quizás ella pueda venir con nosotros. Seguro que es mucho más fácil para ella que es una dragona...

Cuando digo esto último, busco en mi morral un pequeño cuchillo de plata, el cual uso para algún que otro ritual, y con él; hago señales a Cromi en respuesta. Por supuesto, lo hago cuando el lich no pueda verlas.

Esperemos que nos vea y se acerque... -digo tras hacer las señales a Cromi- No quisiera enfrentarme a un lich. Al menos, no hoy...

Un circulo de color verdoso se aparece ante vosotros y una imagen de una gnoma un tanto translucida aparece dentro del circulo.

- Os esperaba muchachos. Permitid que me presente, soy Cromi, guardiana de las lineas del tiempo. ¿ Con quien tengo el honor de hablar? Envie solicitudes de ayuda a muchos organismos y sois las primeras personas que veo que responden a esta llamada.

Hago una reverencia a la imagen que aparece ante nosotros, para decir después- Mi nombre es Murbloff Thunderbreak, y soy un enviado de Cima de Trueno para esta misión. Sabíamos que estas tierras estaban enfermas, pero no conocíamos el porque, ni qué era lo que lo causaba. Ahora ya lo sabemos -contesto a la imagen de la gnoma.

Así pues, ayudaré con todo lo que esté en mi mano a purificar estas tierras. Y si con ello hay que destruir esta ciudad maldita... Que así sea.

Diganos señora, ¿Cual es la situacion, y cual el problema?, nosotros nos encargaremos de erradicarlo. - Dice lentamente el guerrero, luego se detiene por un momento, y agrega - Aunque debo pedirle, antes de cualquier accion que emprendamos, equipamento adecuado. Debo decir que nos han enviado en este viaje sin los elementos nesesarios, y si hemos llegado hasta aqui, ha sido por gracia divina. - Resio el montaras hablanda sus maneras un tanto, solo un tanto, pareciera suplicar.

Cromi sonrie al ver la predisposición de los aventureros. Al mismo tiempo la imagen cada vez va ganando nitidez y cada vez va siendo más opaca.

- Vuestra misión es mucho más que salvar esta ciudad. Conozco las lineas del destino y se que esta ciudad no puede ser salvada, al igual que la ciudad de Stratholme.

Vuestra misión es viajar al pasado, hasta el tiempo en el que Kel´thuzard era solamente un polluelo. Debeis infiltraros en la escuela de Scholomance, y dejar que el destino siga su curso hasta un momento. Llegado ese momento el destino decreta la muerte de Ras Lavaescarcha .- Señala al liche que se pasea por las calles.- Debeis impedir que se llegue a convertir en un liche. Simplemente que se muera. Una vez echo eso, que ocurre en el dia en que la escuela cae sobre la ciudad, debereis huir de alli y quemar la escuela hasta los cimientos. Os tendre comunicados conmigo a través de un orbe forjado por mi misma. Pronto os podré dar armamento y artilugios que garanticen la entrada a la escuela. Por el momento decidme vuestras dudas y ruegos.

Cromi se sienta en el suelo de una forma un poco rara para un humanoide, pues dobla las rodillas hacia los lados y deja los brazos rectos, pero claro, ella de humanoide tiene la apariencia nada más, el aura es sumamente poderosa como para saber que ella es una dragona.