Partida Rol por web

-El gran maestro del aire Toshiro los tiene ocultos Shui...y tiene el pelo tan largo como yo...por cierto ¿Me estás llamando guarro?- Pregunto con una sonrisa.

-Solo hace falta ver lo higiénico que soy yo, que es el que no tiene pelo, y luego ver lo guarro que es Opipo, que es el que más tiene.

-Eso es un razonamiento ridículo, la higiene de Opipo depende de ti...si está sucio es porque no lo limpias, así que el guarro eres tú no él- Respondo sonriendo aún.

-Uuuuu - Digo como si acabase de decir la peor acusación del mundo - No sabes el odio que le tiene ese gorrino al agua - me giro hacia Opipo - ¡Sí! ¡Hablo de ti! ¡Si colaborases un poco...!

-Sigo sin ver el pelo largo algo antihigiénico- Digo encogiéndome de hombros -¿Acaso yo lo tengo sucio?- Pregunto.

- No es solo tenerlo sucio, por ejemplo se te pueden caer los pelos a la comida, y que se te quede algo enredado...

Me llevé una mano a la cara* y no dije nada más...con lo fácil que sería recogérselo...de todas formas daba igual, no le iba a dar tiempo de que le creciera el pelo...

Jin habia descubierto lo que yo ya sabia desde hacia mucho, era imposible discutir con shui sobre algunas cosas, jamas lograria que aceptase nada de lo que le dijera.

-Por cierto, Jin, pareces más animado, me alegro mucho.

-Sí...la verdad es que nunca me había sentido tan bien...aún tengo un poco de miedo por si no soy capaz de dar la talla...¿Pero sabes qué? Me he dado cuenta que puedo usar el fuego azul cuando quiera...sólo los grandes maestros del fuego han sido capaces de dominarlo, ¡Y yo puedo! ¿No es fantástico?- Pregunto animado.

-Te lo dije, te dije que no estarías aquí si no fueses un buen maestro del fuego - Le contesto sonriente - A ver, ¡muéstranos tu pericia! - añado animado, para mi usar el control del viento esparte de mi vida diaria, lo usaba para comer, para lavarme, para divertirme... Ni siquiera se me pasa por la cabeza que alguien pueda tener algún reparo en usar su control elemental.

Sonrio y levanto la palma de mi mano para crear una llama azul -¿Qué quieres que haga exactamente?- Pregunto sonriendo -No se me ocurre qué hacer para mostrarte mi pericia como tú dices-

-¡Ala! - Exclamo - ¡Es increíble! ¡Ojalá yo pudiese hacer algo así!

Apago la llama cerrando la mano y digo -Tú puedes hacer otras cosas Shui- Digo con una sonrisa -Puedes controlar el viento, yo el fuego-

-Ya ya - Digo apartando la mirada del extinto fuego - Pero ese fuego azul es muy chulo.

-Ya...-Digo con una sonrisa y miro a Kham -Oye hermano...¿Me puedes enseñara usar los rayos?- Llamé a Kham como a un hermano, pues eso éramos ahora.

Observo con alegría que ahora parece llevarse bien con Kham, parece haberlo perdonado y eso me alegra, Kham no era mala persona, desde luego, y no merecía ser odiado.

Me mantengo en silencio observando el buen humor de mis compañeros
- perdonad pero estoy algo cansada...me retirare a descansar un poco pues mañana llegaremos a tierra, buenas noches a todos-
dicho esto me dirijo lentamente hacia mi camarote cerrando la puerta detrás de mí. Una vez allí me siento en un cojín y intento relajarme.

-¡hasta mañana Yue! - Me despido alegremente.

Estaba bien el entisiasmo de Shui y no le dije nada, aunque no pude evitar una mirada de advertencia. Ahora mismo Yue necesitaba paz y descansar, no pensar en nada y si podía en nadie, aunque eso me doliera tenia que intentar apartar todo lo que había sucedido, al menos durante la misión...y yo también.