Partida Rol por web

Aventuras en los Reinos Olvidados II

Capítulo primero. El secreto de Suzail.

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19/12/2013, 09:58
Eldar Peloescarcha

"¿Pero qué negligencias y qué ostruciones?", pregunta el propietario de la posada, "¡Anda que no usais lenguajes raros los aventureros!, ¡pues si habéis intentado salvar a los viajantes, todos lo vieron!".

(Sigue...)

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19/12/2013, 10:03
Director

Cuando Banjeela se dirige a los paisanos que mañana tienen intenciones de relacionar lo sucedido y comienza a hablarles de responsabilidades subsidiarias y de actos anónimos, la mayoría de los aludidos se quedan con una cara de extrañeza bastante pronunciada.

De los siete que pretendían dar la información, dos mercaderes y un buhonero decidieron no darla, seducidos por las palabras de la medio elfa. Un campesino con un cargamento de espinacas y un par de pinches que se dirigían a trabajar en las cocinas de la Avenida pensaron que, por mucho que dijera, era su deber consignar lo sucedido, así que se hicieron los locos. Y un mozo de cuadras entrado en años no tenía ni puta idea de los que significaba la palabra "anónimo", así que asintió a Banjeela sin entender qué era lo que quería exactamente, y le miró las tetas.

Además, un pescador huraño y un petrimetre coleccionista de sellos que no tenían pensado contar nada decidieron en secreto comunicar a las autoridades con toda exactitud el aspecto de los implicados en el asunto, por si acaso eran delincuentes buscados y podían acusarles de encubrimiento.

Mientras Banjeela intentaba en solitario convencer a todo el mundo de que debían callar lo sucedido y ocultar sus identidades, el gigantesco bárbaro Bronas estaba contando a voz en grito cuales eran sus hazañas y las de sus compañeros, con templos malditos y viajes por las montañas incluidos. Con cada nueva hazaña que contaba, (y que todo el mundo creía, porque ellos eran aventureros y, ya se sabe, los aventureros corren aventuras), su público gritaba con admiración y maravilla. Incluso en aquellas partes en las que las exageraciones distorsionaban su relato, los viajeros y lugareños aplaudían y creían sin medida alguna, ya que les habían visto derrotar a muchos orcos y al lobo más gigantesco que habían visto en sus vidas. Y además estaban bastante borrachos todos.

Cuando más animadas estaban las cosas, con Bronas en el culmen de sus historias y Banjeela a punto de llegar al episodio en el que el mago Grey rellenaba a la campesina como a un pavo, Rordar decidió que aquello era demasiado para su refinada sensibilidad enanil (¿?), y se fue a sus habitaciones seguido por Barundar.

Y es que los enanos tienen estómagos fuertes, pero totalmente descontrolado por la bebida gratis, el guerrero enano había trasegado barril y medio de cerveza él solito, y entre el coma etílico y el ataque alucinatorio decidió acostarse, que era lo mejor que podía hacer. Al día siguiente se levantaría con una terrible gastroenteritis.

Garius, que había estado impasiblemente retirado en una esquina de la posada, (aunque en realidad lo que sucedía era que estaba en pleno ataque de pánico social), también pensó en marcharse en ese momento, aprovechando un pasillo que casualmente se había abierto entre la multitud, directamente hacia las escaleras. Comenzó a fluir hacia los escalones, y a punto estuvo de unirse a sus compañeros enanos cuando Ark, el sacerdote que le ganaba en locuacidad, le agarró del codo.

Ark consiguió separar a Bronas de su audiencia y a Banjeela del baboso del mozo de cuadra, que se había acercado sospechando que "ser anónima" significaba los mismo que "estar cachonda". Silbido, que bebía tranquilamente en una de las mesas, se dio cuenta de la reunión y se acercó un momento. Fue entonces cuando el sacerdote les comunicó a todos las palabras del difunto consejero, que probablemente tendrían consecuencias relacionadas con más hazañas y más aventuras que contar en alguna posada.

Tras este encuentro todos volvieron a sus ocupaciones, (Rordar, Barundar y Garius a sus habitaciones, Bronas a su audiencia y Banjeela... ella hará lo que le parezca, pero esa noche puede beneficiarse a un nada atractivo mozo de cuadra cincuentón con barba de tres días y sin un cobre en el bolsillo).

Todos, menos Silbido, que se acercó a la joven que, atareada, servía cervezas sin dejar de mirarla.

(Sigue...)

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19/12/2013, 10:28
Triana de Suzail

El exabrupto de la arquera a Triana resultó bastante brusco para la camarera, que dejó caer la bandeja por el sobresalto ganándose cuatro gritos más de Eldar, que era el que estaba sirviendo la cerveza en las escudillas de barro. Estremecida, miró a Silbido como quien mira a la alta e imbatible heroína de alguna historia mítica, que por alguna razón te pregunta a bocajarro y sin tacto alguno "qué querías antes".

"Yo... eh... solo...", tratamudeó con la ferocidad de un cachorrito, "Es que... tú tienes mi e.. e.. edad, ¿no?", dijo ganando un poco más de confianza. "Yo sólo... solo he visto esta posada, y... o sea, tú corres aventuras y... eres valiente, tienes un arco y... o sea...".

Al final, totalmente colorada, la miró con la misma reverencia que una adolescente de nuestro planeta podría ver a Miley Cyrus chupando un martillo, "¿Po... podrías enseñarme?".

(Sigue...)

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19/12/2013, 10:34
Director

Unas horas después, la posada estaba silenciosa y tranquila. Todos dormís en vuestras habitaciones, y mañana os despertaréis descansados, excepto quizás por el sexo desenfrenado con algún maduro mozo de cuadras, (que no durará más de tres minutos), o por unas iniciales lecciones de arquería y aventurería.

¿Qué haréis al día siguiente?.

Es vuestra decisión, y vuestro turno.

Notas de juego

Piticlín, piticlín.

Bronas gana 30 px por postear + 5 px por su gracia vikinga.

Silbido gana 30 px por postear.

Ark gana 30 px por postear.

Banjeela gana 30 Px por postear + 5 px sadomasoquistas.

Rordar gana 30 Px por postear.

Garius gana 30 Px por postear.

Barundar gana 0 Px por postear.

Experiencia.

Bronas: 3.525 + 30 + 5 = 3.560 Px.
Silbido: 3.445 + 30 = 3.475 Px.
Ark: 3.230 + 30 = 3.260 Px.
Baljeela: 1.755 + 30 + 5 = 1.790 Px.
Rordar: 1.620 + 30 = 1.650 Px.
Barundar: 1.620 + 0 = 1.620 Px.
Garius: 1.645 + 30 = 1.675 Px.

Pupas.

Bronas = 19 puntos de golpe por mordiscos de Worg. (Sanación natural por noche de descanso)

Barundar = 1 puntos de golpe por alfanjón orco. (Sanación natural por noche de descanso)

Aviso

Próximo turno el lunes día 23 de diciembre!

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19/12/2013, 11:19
Banjeela

Las palabras de Bronas consiguieron hinchar una vena en la frente de Banjeela.

¿Mis curvas? ¿Dicho así? ¿Cómo si tuviese caderas prominentes y culo gordo? ¿Y lo de "la mestiza" no es un poco racista? Él tiene sangre de gigante y no se dice así mismo "el mestizo". No sé... Podría decir "Banjeela, la interesante conversadora" o "Banjeela, la mujer capaz y autosuficiente".

No era como para estamparle un tortazo, atendiendo a que un brazo de aquel bárbaro era como toda una Banjeela. Pero si hubiese tenido novio, le habría mandado partirle la cara por insultarla de aquella manera. El caso es que Bronas acababa de pregonar en alto sus nombres, y lo del anonimato ya era cosa imposible.

Olvídelo, posadero. Glugluglu...-vació su vaso, desconsolada por haberse juntado con tanto patán-Creo que tomaré una segunda copa.

Mientras tendía el vaso para que Eldar Peloescarcha lo rellenase, Banjeela volvió su atención al enano mago para retomar su conversación. Misteriosamente, había desaparecido en cuanto la semielfa se puso a hablar de anonimato y problemas con las autoridades. ¿Era aquel tipo de fiar? ¿O era algún proscrito de la Justicia al que las palabras de la mujer le recordaron que debía ocultarse? Tendría que estar más atento a los movimientos de ese enano, y a la de sus dos otros acompañantes. ¿Acaso no era mucha coincidencia que apareciesen justo en el momento del ataque orco? Como si estuviesen compinchados, y la aparición de los músculos de Bronas les hubiese obligado a matar a sus camaradas para mantener la tapadera.

Cerveza... A partir de ahora debería estar más vigilante con esos tres desconocidos.

Cerveza... Aquellos tres desconocidos. Sus mejores amigos.

Cerveza... Le dijo que sí a Ark, sobre nosequé piel de armiño. La verdad es que Banjeela prefería los abrigos de visón.

Cerveza... Vista nublada. ¿Qué diantres le ha puesto el enano amistosísimo en la bebida? ¡La ha envenenado!

Inconsciencia...

Resaca...

Despertó, en una cama de la posada. Un hombre estaba a su lado, dándole la espalda. Dormido. Desnudo.

No-no-no-no-no...

Se incorporó a toda prisa, y la resaca la frenó de golpe.

¿Qué he hecho? No... ¿En qué estaba pensando?

Desde luego no era así como se había imaginado encontrar marido. Así que casi mejor ponía pies en polvorosa y huía de aquel tremendo y colosal error. Se vistió con prisas y agarró su zurrón. Por suerte aquella alma perdida había venido a Banjeela buscando solo sexo, su dinero seguía allí. Trató de salir lo más silenciosamente posible.

En el pasillo se encontró con muchas puertas, pero ninguna decía quién era su ocupante. Al pegar el oído a cada puerta, encontró una que podría ser de uno de sus mal llamados amigos. Porque los amigos de verdad no te abandonan para que cometas errores de borrachera como aquel. Los ruidos que delataron a Ark eran sus oraciones matutinas. Normal, el sacerdote era más sobrio, y no habría bebido. Es una suposición de Banjeela, tampoco es que recuerde muchos detalles de anoche.

Toctoctoctoctoc... Toctoctoctoctoc...

Ark, tenemos que irnos. Al puerto de Suzail a coger un barco. O a donde sea. Lejos. Apura-susurró a la puerta.

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19/12/2013, 11:44
Bronas

 Bronas estaba exultante. 

 Disfrutaba del momento, tras haber estado a punto de perder la vida contra una temible criatura, allí estaba, narrando sus aventuras y desventuras. Disfrutando de la gloria que le podían dar lo presentes. Con esas gestas, por si solas, no lograría el objetivo de su viaje, pero esa era la senda. Lástima que las sureñas no fueran tan lanzadas como las mujeres de su tierra. Solo faltaba eso para terminar de pasar una buena noche.

 Durante una breve pausa, entre cervezas, Ark lo reclamó en un aparte, junto a Silbido y a Banjeela.

- ¿Lucius Pieldearmiño... secreto de Suzail... una hija?- Bronas estivo a punto de hacer una chanza a su compañero, pero por algún motivo no terminó de hacerlo.- Ark, relájate. Mañana hablamos... de acuerdo. Ahora disfruta del momento, recuerda nuestras desventuras y abstinencias, y que ahora las podemos solventar. Aprovecha, pues no sabemos que nos aguarda mañana.

 Tras la pausa, el jotrun regresó ante su público y continuó narrando historias y sobre por qué no se puede fiar de los semi orcos. Una hora más tarde, la gente fue recogiendo, mañana era día de trabajo. Sin la concurrencia, y con las magulladuras del enfrentamiento contra el gran lobo, Bronas también se largó.

 A la mañana siguiente, el ilushkano despertó cuando el trajín de las camareras y los primeros parroquianos llegaban a por los desayunos. Tomó sus armas y armaduras y bajó al salón de Puerta Nocturna. Se fue a una mesa soleada y llamó.

- Pan caliente, carne y queso. Y un cubo de agua y unos trapos.

 Cuando le sirvieron, desayunó con avidez para ponerse a trabajar en limpiar y cuidar sus arreos de combate. Su armadura estaba hecha un desastre, la sangre se había resecado y tanto el cuero como el acero estaba manchado. Así fue como lo encontraron los compañeros, junto a un gran plato vacío lleno de migas de pan, y frotando un trapo y un cepillo el peto de la coraza.

- Buenos días.

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20/12/2013, 22:05
Barundar de Mithril Hall

Menuda fiesta, beber queriendo invitar esta muy bien, pero beber siendo invitado esta mejor e intente enfadarme al intentar negar que yo pagara la ronda, pero entre cerveza y cerveza la verdad que es dificil no encarinarse con las gentes de esta noble ciudad. Me contaban cosas de sus maravillosas murallas, sus valientes soldados y sobre sus magnificas cosechas.

La guinda la culmino Bronas, que aparecion como si un pino se te acercara muy rapido y comenzo a narrar mil y una aventuras. Yo mismo reconocia alguna de sus triquinuelas, y sus desvarios, pero estaba claro que no iba muy lejos de la verdad. Aquellos eran verdaderos aventureros como nosotros, asi que era normal que tuvieran esas vivencias.

Con la cabeza algo abotargada, tuve como ultimo reflejo el buscar con la mirada a Garius y a Rordar, solo para ver que estaban bien, uno bien acompanado por una humana y el otro charlando con los parroquianos, vaya! si parecemos gente sociable pense para mi mientras volvia a brindar con Rordar.

El brazo aunque me escocia, ya apenas me dolia manana estaria muchisimo mejor gracias a la intervencion de Garius, ese elfo le terminaria cogiendo carino quien lo diria, y el alcohol ayudaba a paliar poco a poco cualquier sensacion. Llegado un momento segui sin mucho tino ni son, apestando a batalla y banado aun en sangre a Rordar hasta una habitacion, donde mi ultimo gesto fue el de quitarme parte de la armadura...

...a la manana siguiente me levanto un impulso que llegaba desde el centro del estomago, algo que queria salir y rapido, empujando la sabana con la que me tapaba y parte de la armadura con la que dormi, busque una palangana o escupidera a tientas para echarlo todo, pero no dio tiempo, una arcada y ya andaba fuera mas de media jarra de cerveza. Al volver a poner el cuerpo sobre la cama, el mal sabor de boca y la habitacion que bailaba me dio a entender que aun estaba vivo, y aunque la batalla hubiera sido fuera de la ciudad, dentro me habian derrotado. Me limpie con la manga el bomito pegado a la barba, y descubri para mis adentros que olia fatal, a algo que se descomponia. Pronto un impulso mayor hizo que me moviera para buscar un sitio donde hacer males mayores fuera de la habitacion, y quedarme un buen rato ahi. Azorado. Cabizbajo. Sin sentido.

Como a la hora y poco, decidi pedir un bano que me limpiara cuerpo y mente. Aunque aun andaba algo raro dentro de mi, ya una buena parte habia salido, o eso esperaba aunque por la enorme cantidad la verda no hubiera apostado por mi tanto volumen. Limpio y mareado, baje a buscar a los demas dispuesto a pedir una sopita caliente que me relajara el estomago y las tripas. Movi el brazo con energia y lo senti como nuevo, y aunque mareado pense al ver a Bronas que era buena idea limpiar algo mi armadura y ver su estado. Me acerque en silencio y salude por lo bajo aun resacado -buenos... dias-

 

- Tiradas (1)
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23/12/2013, 01:02
Rordar Petrascudo

La noche había sido reparadora para el enano, aunque por lo que había podido oír su compañero no la había pasado tan bien, pues cuando se encontraba en medio de su hora de preparación escuchó cómo se levantaba, primero para vomitar todo lo ingerido la noche anterior y luego salir corriendo, probablemente al baño.

Se esforzó por mantenerse concentrado y, cuando hubo acabado cerró el libro, se vistió, recogió todas sus cosas en la mochila y bajó al comedor, donde ya se habían congregado varios de los combatientes del día anterior.

Sin decir una palabra se sentó al lado de Barundar, que tenía, en efecto, una cara horrible y esperó a que el posadero se acercara para pedirle algo de leche y pan.

Notas de juego

Los conjuros te los pongo en el siguiente post.

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23/12/2013, 01:14
Garius

Garius no estaba acostumbrado a beber, no lo hacía nunca(siempre había creido que era malgastar dinero), sin embargo la noche anterior bebió de más(de más para él, 3 cervezas fué lo que bebió de un trago Barundar), pero no sabía como decir que no y no paraban de rellenarle la jarra, cuando se escabulló para irse, pensaba que estaba bien, sin embargo el dolor de cabeza y que hubiera dormido con medio cuerpo en la cama y medio en el suelo le indicó que no fué así. Al menos se habia quitado la armadura y no vió vomito cerca. No notaba las piernas, así que aprobechando que ya estaba en la postura recitó sus oraciones matutinas y con mucho esfuerzo se vistió y bajó para ver como estaban los demás.

... Pues la mayoría peor que él. Por la constitución y la manera de beber de algunos de los presentes Garius sintió pena por el tabernero, y estaba completamente seguro de que se arrepentía de haber invitado a tanta gente.

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23/12/2013, 01:22
Garius

Con todo el disimulo que puede tener un elfo armado y encapuchado dentro de un sitio cerrado Garius se acercó a los enanos.

Tras tragar saliba y tardar lo que parecía una eternidad en empezar a hablar susurra:

Lo- lo que dijjjo ayer Ark... ¿Qu-que hace-cemos?

 

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23/12/2013, 02:04
Silbido

Se quedó mirando a los ojos de la otra muchacha largamente, hasta que el dueño de la posada le gritó de nuevo. Las personas eran un misterio. Había vivido sola durante la mitad de su corta vida, y su contacto con otras personas había sido escaso. Quelnaas era un druida solitario, y los hermanos eran unos misántropos, poco que ver con el resto del mundo. No había tenido la oportunidad de aprender a leer las emociones en el fluir de los rostros, en el tono de las palabras, en los sutiles movimientos del cuerpo. Y lo que decía la camarera era jodidamente raro.

—¿Me tomas el pelo? —Los hermanos lo hacían a menudo, relativamente, y no tenían una expresión como aquella. Pero ellos tienen como tres o cuatro veces nuestra edad, cada uno, y caras como cortezas de roble—. Aquí hay leña pa calentarte en invierno, y camas de veras, y otra gente, y no ties que ir corriendo tras de animales pa no quedarte sin comer ese día. Te haces a estar ahí fuera, pero no es bonito o mejor o diwuenie —¿Cómo se dice eso en humano?, de cuentos, de aventuras y tal quiero dicir, ¿sabes? Que no te dicen na de pillar fiebres y casi morirse, o de pelarse el culo de frío al cagar, o de quedarse canina porque no te queda comida, y eso. —Apenas recordaba los cuentos de su infancia, pero había escuchado a sus compañeros, a los bardos de las tabernas, a los que pintaban la vida del camino como un ideal romántico e idealista. Seguro que ellos no habían visto a unos cadáveres putrefactos masticarle el hombro y el brazo, o ver ahogarse a un compañero en un río helado, o dar con sus huesos en una celda, o ser aplastados por una piedra gigante, o…— Pero si quies aprender a tirar, o acechar, o algo así, se pue mirar. Anque Ark quiere hacer nosequé. Así que cuando puedamos.

Silbido se quedó sin aliento. Podía pasarse una dekhana entera diciendo menos de lo que había dicho en ese momento. Estarse calladita era cómodo y agradable. Y si debía hablar, prefería hacerlo en la lengua élfica; era bonita y le salía con más facilidad que la humana, que de por sí le resultaba tosca, y en sus garganta se tornaba ruda y desagradable.

 

No tardó mucho en marcharse a dormir. Se había acostumbrado a las camas de verdad; ya no había pesadillas, despertares bruscos al golpear el suelo o dolores de espalda. A este paso, se ablandaría tanto que le costaría un mundo regresar a las viejas costumbres. Claro que no tenía que regresar a ellas, era una chica humana, no un animal. Se lo había ganado, y su lugar estaba entre otros como ella, por extraño que le resultara.

Tardó en bajar al salón. Pidió agua y jabón a una empleada que limpiaba el pasillo, y aprovechó para quitarse de encima la roña acumulada. Incluso tenía una muda de repuesto, y estaba más o menos limpia, y apenas olía, o quizás es que ya estaba acostumbrada a su olor. La armadura, sin embargo, hedía a tripas de muerto, y sangre de orco y de trasgo, y de Mielikki sabía qué coño más. Y menos mal que ella solía tirar de arco; para Ark y Bronas debía ser peor.

El bárbaro estaba ocupado limpiando su armadura, y el elfo y los enanos que se habían encontrado la noche anterior estaban sentados en silencio, con aspecto de estar enfermos. Silbido se sentó en la misma mesa, saludó con un meneo de la cabeza y esperó a que le sirvieran el desayuno.

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23/12/2013, 07:03
Director

Turno 8

La joven Triana, que había seguido a Silbido toda aquella noche, se quedó pensativa ante la sarta de incomodidades aventureras que la arquera le estaba enumerando, y en las que ciertamente no había pensado antes. Pero finalmente sacudió la cabeza con fuerza, mostrando su resolución.

(Sigue...)

- Tiradas (1)
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23/12/2013, 07:06
Triana de Suzail

"Vale... pero... bu... bueno, si tú me enseñaras yo podría ser una aventurera también, ¿no?... por favor, por favor... aquí tengo fuego y cobijo, pero me siento marchitar... quiero ver ca... caminos y elfos... como tú...".

(Sigue...)

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23/12/2013, 07:07
Director

La fiesta nocturna terminó, y tras una noche de sueño reparador, (o de sexo desenfrenado, breve quizás, pero desenfrenado), os reunís en el salón de la posada. Todos menos Banjeela, se entiende, que golpea la puerta de una habitación vacía y susurra incoherencias hasta que ve abrirse la puerta de su habitación, y salir de ella al gallardo amante con el que ha compartido tres minutos de intenso placer esa misma noche. Lleva tan solo los pantalones, y si bien tiene un cuerpo musculado de trabajar con las bestias, una barriga saliente y temblorosa estropea el efecto apolíneo que su desnudez parcial pudiera tener.

(Sigue...)

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23/12/2013, 07:11
Gobo del Río

"Oh...", exclama el romántico caballero al observar a su dama intentando huir desesperadamente, "Sin duda mi señora tenía hambre, ¿sí?, y por eso bajaba tan aprisa al comedor, dejando al buen Gobo descansar, ¿sí?". En sus ojos se puede ver la fragilidad del ánimo del mozo de cuadras, que solo pretende, está claro, el mismo tipo de cariño que pudiera otorgarse a un cachorrillo abandonado. "Banjie, amor mio...", suspira el hombre acercándose penosamente, "Ha sido una noche marvi... maravo... hemos follado tan bien los dos, así arrejuntaos...".

(Sigue...)

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23/12/2013, 07:16
Director

El mozo de cuadras se pasa la camisa de lino por la cabeza, y coge de la mano a la hermosa bardo pensando que le ha tocado la lotería. Toda su vida lo han despreciado y se han burlado de él por sus pocas luces y su triste procedencia, ya que fue encontrado por los clérigos de Ilmatir abandonado junto a las orillas de un lago. Pero hoy, después de una vida de penurias y tristezas, ha encontrado a una joven hermosa que por fin, lo ha tratado bien. Si Banjeela recordara la escena de la noche anterior, (cosa que no hace porque estaba muy borracha), se acordaría de que sus torpes caricias y groseros besos indicaban que con más de cuarenta años este hombre jamás había catado mujer alguna. Sus ojos de cordero degollado, (que no se apartan mucho de los pechos de Banjeela), dejan a las claras que a pesar de su visible estupidez se trata de un alma buena y atormentada.

Abajo, mientras tanto, se han reunido el resto de los integrantes del grupo, y Eldar les está sirviendo un copioso desayuno basado en huevos revueltos, tiras de cerdo salado e infusión de camomila. Por alguna razón, una camarera bajita y morena le está sirviendo una doble ración a Silbido. ¿Qué haréis una vez desayunéis y os aseeis un poco?.

Notas de juego

Piticlín, piticlín.

Bronas gana 30 px por postear.

Silbido gana 30 px por postear.

Ark gana 0 px por postear.

Banjeela gana 30 Px por postear.

Rordar gana 30 Px por postear.

Garius gana 30 Px por postear.

Barundar gana 30 Px por postear.

Experiencia.

Bronas: 3.560 + 30 = 3.590 Px.
Silbido: 3.475 + 30 = 3.505 Px.
Ark: 3.260 + 0 = 3.260 Px.
Baljeela: 1.790 + 30 = 1.820 Px.
Rordar: 1.650 + 30 = 1.680 Px.
Barundar: 1.620 + 30 = 1.650 Px.
Garius: 1.675 + 30 = 1.705 Px.

Pupas.

Bronas = 19 puntos de golpe por mordiscos de Worg.

Barundar = 1 puntos de golpe por alfanjón orco.

Aviso

Próximo turno, en principio, el jueves 26 de diciembre. Salvo problemas de última hora, que estamos en fiesta.

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23/12/2013, 09:39
Bronas

 El norteño estaba enfrascado con su armadura, el dejar la sangre en ella toda la noche no había sido precisamente buena idea. Pero como tenía tiempo, y ya estaba harto de holgazanear se dedicó a limpiarla. A medida que iban bajando el resto, los fue saludando.

- ¿Y la mestiza?- Preguntó a Ark y a Silbido.

Tampoco es que insistiera mucho, pero no era normal que Banjeela tardar tanto en bajar, pero claro, tampoco era normal pegarse la juerga de ayer por la noche.

- Y dime Ark, ¿qué era eso de Pieldearmiño y un secreto?

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23/12/2013, 11:59
Banjeela

Oh, claro... yo...-lo más triste es que este tipo no es la peor arena de gladiadores en la que he luchado-Me has estropeado la sorpresa, Gobo. Iba... iba a pedir el desayuno abajo para traértelo a la habitación antes de que te despertaras. Oh, qué pena. Bueno, que ya no sea una sorpresa no significa que no lo podamos hacer. ¿Porqué no vuelves a la cama, y... y me esperas allí? ¿La mochila? No, no... la mochila... llevo en la mochila unas cuantas prendas íntimas que quiero que el servicio de habitaciones me lave. No era cuestión de llevarlas en las manos.

¿Porqué tengo que ser yo siempre la mala?

Le vió las intenciones. Era un perdedor. Se ofrecería a ir él a por el desayuno con tal de volver a tener sexo otra vez con Banjeela. Así que, antes de que pudiese hablar le besó en la boca. Acto seguido, Gobo ya llevaba sus manos al culo de la semielfa con ímpetu.

Para, Gobi, cielo. Ya... ya tendremos tiempo para eso tras el desayuno. Vuelve a calentar la cama, ¿me haces el favor? Soy muy friolera y no quiero estar en unas sábanas frías.

No había tiempo de seguir buscando puerta por puerta a los demás. Banjeela tenía que irse ya. Bajó los escalones hasta el salón. Ahí estaban todos los demás. Reconocía esos ojos. La estaban juzgando. Se acercó a Triana.

Por favor, ¿puedes llevar un desayuno a mi habitación dentro de media hora? Dí que un guardia de Suzail se presentó aquí de improviso y tuve que acompañarlo a la capital a declarar por el incidente de anoche con el Consejero.

Entregó una pieza de oro a la camarera. Que el posadero les hubiese invitado no significaba que la empleada tuviese que pasar el mal trago de mentirle a Gobo sin recibir nada a cambio.

Y vosotros, chicos... Yo me voy ya. Quiero hacer unas compras en Suzail, ya sabéis cómo somos las chicas cuando vamos de tiendas. Si os venís ahora, perfecto. ¿Que no venís? No pasa nada. Desayunad tranquilos y venid a buscarme después.

Ark... ¿tú habías comentado no se qué de un armiño? Es igual, ya me contarás los detalles luego. ¡Ciao, muchachos!

No se quedó más tiempo. Seguramente no hizo algo muy distinto a lo que pasó entre su padre y su madre, pero Gobo era un terrible, terrible error del que quisiera alejarse lo más pronto posible. Abandonó la posada y fue a los establos para llevar el carro de los cadáveres a alguna guarnición.

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23/12/2013, 21:29
Barundar de Mithril Hall

Mirando a Garius con un ojo si y otro no, intentando concentrarme y buscar las palabras en mi seca boca suelto:

-Algo habra que hacer, no? a mi me da igual un trabajo que otro mientras estemos en la brecha- sentencie, y si no nos interesaba aun podriamos volverlo a pensar, aunque claro a esas horas no eran las mas optimas para pensar, por eso agilizaba las manos en limpiar un poco.

 

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23/12/2013, 21:31
Barundar de Mithril Hall

Poco a poco mas miembros del otro grupo se comentaban y se hablaban, la verdad que el tema de aquel que comentaba el tal Ark comenzo a intrigarme, mientras la sangre corria vigorosa por mis venas y mi armadura queda en un estado mas o menos coherente, espere entre bocado y bocado que me aceptaba mi cuerpo que bajara a desayunar el tal Ark. Cuando asi lo hizo le pregunte nada mas llego:

-Podrias explicar un poco eso de anoche, creo que no lo entendi- digo parpadeando con fuerza -ya sabes lo de anoche, a lo mejor nos interesa unirnos a vuestra causa al menos por un tiempo- dije escupiendo fuertemente sobre la ultima mancha de sangre grande y reseca que quedaba, con la esperanza de hablandarla y sacarla lo mejor posible.