Partida Rol por web

"Baptisma Pyros"

1 - Una misión de rutina

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01/10/2010, 18:12
Director

Crucero YAMATO - Bahía de lanzamiento este – 1000hs

 

De uno en uno y a trote, cada uno de los soldados recién llegados, los quince, encabezados por el sargento Pavlo Kyonz, salen a la bahía de lanzamiento este, la cual se encuentra bastante agitada para el ritmo que lleva normalmente, y mas en ese horario. Mecánicos van de aquí a allá, operadores merodean por la sala de control de lanzamiento, desde la cual se tiene vista a toda la zona. En ella se puede ver la figura del capitán Galen Marshall, que observa de brazos cruzados e inmóvil desde el lugar. Sin duda todos se toman aquello como un gran acontecimiento, mandar a unos “palurdos” recién salidos de la academia a una roca inundada por tormentas, algo digno de regocijo para muchos. Mecánicos terminan de revisar por ultima vez a los dos “Mohawk” que se encuentran apostados a las puertas de las bahías de lanzamiento, sobre sus respectivos remolques.

Y en el medio de ambos transportes, de pie y con su pose rígida, digna de todo buen oficial, y con su traje de faena, esta el teniente Anders. Los quince soldados se ponen de pie y en fila frente al teniente. Todos saludan al unisono, orgullosos en su primera misión, luciendo sus trajes N7 en perfecto estado, con el equipo básico (pistola y cuchillo), así también como armados con un rifle SCAR, nada muy ostentoso, el equipo básico para una misión en la cual siquiera esperan a usarlo. Y en el frente de la fila, con una linea vertical, color roja, completamente visible, como si recién hubiese sido pintada, el sargento Kyonz exhibe su rango con orgullo frente a sus nuevos hombres.

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01/10/2010, 18:24
Teniente Zack Anders

Anders realiza el saludo, siguiendo el protocolo, como siempre, saludo que los soldados frente a él responden inmediatamente.

- Señores – dice mirando a todos, con tono firme, aunque sin hacer demasiado show, mientras el resto de los técnicos siguen dando vueltas por el lugar – Esta va a ser su primera misión, me imagino que estarán bastante excitados. Todos lo estamos, realmente, no se ve mucha acción por aquí – dice dibujando una ligera sonrisa, la cual no dura mucho tiempo en su rostro – Pero no quiero tonterías – dice ya mas serio – sigan la rutina, es lo que hacemos aquí.

Tras eso toma una carpeta que hay sobre una caja a sus pies y la abre con cuidado, ante la mirada de los soldados formados frente a él.

-El Sargento Kyonz estará a cargo del escuadrón “Bravo”, junto con Mitchell, Raccór, Wolf, Velazquez, Yevgeni, Conrad y Tanaka. Irán en el “pájaro” que hay a mi izquierda – señala con el pulgar, y sobre su hombro, a uno de los “Mohawks” que hay detrás de él, efectivamente, a su izquierda - y descenderán en el sector S-7. Será el equipo encargado de la torre. Tanaka es el ingeniero asignado, así que se encargará de realizar el diagnostico. Esperamos vientos de 120k/h en la zona de la torre, por lo que una vez hayan desembarcado entraran a ella, y se prepararaa àra su repliegue en el campamento base de la meseta, en donde el pájaro podrá descender sin problemas. Utilicen el sistema de imanes de las botas de sus trajes para caminar fuera de la torre hasta entrar, no queremos tener que salir a hacer rastrillaje para buscar a nadie en el desierto – dice medio en broma, mirando a todos durante un instante, antes de volver al expediente – Una vez hecho el diagnostico de la torre, tomaran el transbordador que lleva al campamento base. Los muros del campamento permitirán al pájaro esperarlos en el lugar, realicen una inspección de rutina en el campamento y vuelvan a la nave ¿entendido?.

Siquiera da tiempo a una respuesta cuando continua dando indicaciones.

- Edward estará a cargo del escuadrón “Alfa”, junto con el resto del pelotón: Foley, Kowalsky, Kackzinsky, Frost, Tamir, Madeiros y Wenders. Lo tendrán sencillo, descenderán en el pájaro que hay a mi derecha justo en el centro urbano de la colonia de Ardo. Creo que no tengo que recordarles lo que tienen que hacer, es sencillo, y las murallas de la ciudad van a repararlos de los vientos, así que tendrán la situación aun mas tranquila. Tan solo sigan el protocolo, caballeros.

Anders hace una pausa, aclara la garganta y toma algo de aire antes de seguir.

- Hasta que la torre este preparada, las comunicaciones van a ser un problema. Las frecuencias cortas funcionan, pero la comunicación a larga distancia va a ser un problema debido a las tormentas. Los “pájaros” van a hacer de puente a la hora de comunicarnos. Si quieren decir algo al otro grupo, o avisarnos algo aquí arriba, primero va a tener que pasar por los pájaros. Ellos van a a sobrevolar la tormenta y nos mantendrán comunicados, a nosotros y a ustedes, al menos mientras estén a altitud.

Vuelve a hacer una pausa, mira a todos unos breves segundos.

- Esto es de manual señores, no quiero que ningún novato me arruine el día por olvidar como andar en medio de una tormenta. Tan solo respeten el clima, sigan el protocolo, y hagan lo que tienen que hacer, sin sobresaltos, y estarán aquí arriba para el almuerzo, ¿Esta claro?.

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01/10/2010, 19:24
Director

Tras las palabras de Anders todos responden al unisono, incluso Pavlo, e inmediatamente todo el grupo se divide en ambos escuadrones, subiendo a sus respectivos vehículos, mientras Anders se hace a un lado supervisando todo desde un costado.

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01/10/2010, 19:31
Director

Pavlo, acompañado de sus hombres, encabezando el escuadrón “Bravo”, sube al Mohawk, a la izquierda de donde antes estaba Anders, acomodándose rápidamente en su interior, mientras la nave comienza a moverse lentamente, empujada por un remolque, hacia la bahía de lanzamiento. Si bien Pavlo es quien tiene mas experiencia viajando en trastos como esos, ya todos están bastante acostumbrados a ir apretados dentro de aquella lata de sardinas... sin contar que las que están en la YAMATO no parecen ser precisamente nuevas.

Los ocho miembros del escuadrón “Bravo” se acomodan en los asientos de aquel vehículo, preparado para llevar a sus pasajeros. Pavlo a un lado de la puerta lateral derecha, la cual permanece abierta mientras la nave se mete en el tubo de lanzamiento, dejando que la luz entre e ilumine el interior del vehículo. Hacia su izquierda, uno al lado del otro, Raccor y Wolf, empotrados en sus armaduras básicas, mascaras de oxigeno incluidas, y armamento de serie, como todo los demás, salvo tal vez por Pavlo, quien lleva una armadura claramente mas gastada por el uso respecto a las otras que se ven en aquella cabina, ademas de tener la distintiva franja roja que recorre su brazo derecho y marca su grado de sargento. Salvo por Pavlo, quien había tenido tiempo de estudiar mas a sus nuevos muchachos, el resto no se conoce demasiado entre si, salvo por algunas palabras que intercambiaron antes, entre si son completos desconocidos, y no parecen muy animados por conocerse, pues nadie dice demasiado. Mithcell, un joven de mirada seria (según se ve por su visor) esta sentado frente a Pavlo, mirando hacia fuera por la puerta. Aparenta estar tranquilo, aunque mueve su pie nerviosamente, golpeándolo contra el suelo. Hiro Tanaka, el ingeniero encargado de hacer el diagnostico de la torre de comunicaciones, esta sentado justo frente a Raccor. El soldado oriental (o al menos sus rasgos, pues la mezcla de razas actualmente hace que ese tipo de distinciones sean, cuanto menos, imprecisas), mas pequeño en tamaño respecto a sus compañeros, parece bastante tranquilo, mirando hacia fuera mientras carga el fusil sobre sus piernas. A su lado, y frente a Wolf, Conrad, el moreno bocazas que ya se había hecho notar antes, se mantiene de brazos cruzados y con los ojos cerrados, sin decir palabra tampoco. Finalmente, sobre la puerta lateral izquierda, se encuentran Yevgeni y Velazquez, dando un curioso contraste entre el primero, con su casi metro noventa de altura, que aun sentado se hace notar, respecto al segundo, sentado frente a él, y que apenas es mas alto que el ingeniero, lo cual no es decir mucho... ambos se muestran igual de serenos. Yevgeni mirando al techo, dando la impresion de estar completamente dormido, mientras Velazquez mira hacia fuera, a través de la puerta, mientras acaricia su fusil, el cual lleva sobre sus piernas, delicadamente, como si de una mujer se tratara, o eso es mejor pensar...

La mitad del pelotón, ocho hombres que poco se conocen, y poco tienen que ver entre si, pero que aun así tienen un mismo objetivo. Dentro de esos trajes todos son iguales, o asi se ven, de no ser por los nombres impresos en la parte izquierda del pecho de cada traje, posiblemente ninguno podria saber quien esta sentado a su lado, pero eso ya no importa.

-Bien, ultimo chequeo – dice una voz seria, de manera rutinaria. Lo escuchan por el intercomunicador de la nave, el cual comunica la cabina, totalmente independiente, de la sección en la que van los pasajeros. Aquel intercomunicador es la única forma de contacto que hay entre el piloto y los pasajeros dentro del Mohawk.

-¿Otro? Mierda, ¿vamos a despegar alguna vez? - contesta otra voz, un poco menos seria. Al parecer se trata del piloto y su respectivo copiloto, aunque no parecen caer en la cuenta de que su conversación es escuchada por los pasajeros, posiblemente por algún descuido respecto a los intercomunicadores, cosa que no es precisamente muy tranquilizadora, al menos por lo que pueden oír.

-Viendo el estado de este trasto no se como hemos llegado tan lejos – responde la voz seria.

-Vamos, hace falta algo mas que arena y viento para tumbar a este bebé – contesta la otra voz

-Parece que el indicador del segundo motor no piensa lo mismo...

-¿Que? ¡oh, mierda!... deja, ya lo arreglo...

-Rápido, tenemos que salir de aquí en tres minutos... suerte que no pagué mis deudas – dice finalmente la voz seria, antes de que la radio vuelva a apagarse.

Mientras tanto, la nave se detiene dentro del tubo de lanzamiento, un túnel largo conocido como “cañón”, lugar en donde se nivela la presión respecto al exterior antes de la salida de cada nave. Ahora el único sonido que se oye es el de la gente trabajando detrás, en la bahía, aunque el ruido que hacen las puertas del tubo de lanzamiento, cerrándose detrás de la nave, tapa cualquier sonido que les pueda llegar. El interior del compartimiento para pasajeros solamente esta iluminado por la luz que llega desde afuera, a través de las puertas, que aun siguen abiertas.

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01/10/2010, 20:02
Director

Edward, acompañado de sus compañeros, “encabezando” (pues en realidad esta haciendo de niñeara por parte de su sargento) el escuadrón “Alfa”, sube al Mohawk, a la derecha de donde antes estaba Anders, acomodándose rápidamente en su interior, mientras la nave comienza a moverse lentamente, empujada por un remolque, hacia la bahía de lanzamiento. Ya todos están bastante acostumbrados a ir apretados dentro de aquella lata de sardinas... sin contar que las que están en la YAMATO no parecen ser precisamente nuevas, pues su estado es bastante mas precario respecto a las que habían visto antes, al menos a la vista.

Los ocho miembros del escuadrón “Alfa” se acomodan en los asientos de aquel vehículo, preparado para llevar a sus pasajeros. Edward a un lado de la puerta lateral derecha, la cual permanece abierta mientras la nave se mete en el tubo de lanzamiento, dejando que la luz entre e ilumine el interior del vehículo. A su izquierda está Foley, empotrado en su armadura básica, mascara de oxigeno incluidas, y armamento de serie, como todo los demás. No se conocen demasiado entre si, salvo por algunas palabras que intercambiaron antes, entre si son completos desconocidos, y no parecen muy animados por conocerse, pues nadie dice demasiado. Kackzinsky , el mas joven de todo el grupo, permanece mirando hacia fuera por la puerta, sentado frente a Edward. Aparenta estar tranquilo, aunque mueve su pie nerviosamente, golpeándolo contra el suelo, movimiento que acompaña también con una sobre sus manos, golpeteando levemente los dedos sobre su muslo. Frost esta sentado justo frente a Foley, serio, según se puede ver a través de sus ojos que se dejan ver por el visor de su casco, mirando hacia fuera mientras carga el fusil sobre sus piernas, parece muy tranquilo. A su lado, Kowalsky, un joven moreno con un apellido que no pega mucho con su aspecto (aunque actualmente la mezcla de razas y etnias hace cualquier tipo de división de este tipo algo, como poco, impreciso) se mantiene de brazos cruzados y con los ojos cerrados, sin decir palabra tampoco. Por un momento da la impresión de pacer estar rezando. Frente a él, a la izquierda de Foley, Wenders permanece de brazos cruzados y mirando al suelo. No dice nada, ni hace mucho mas, pero no parece que le guste mucho viajar en ese tipo de naves.
Finalmente, sobre la puerta lateral izquierda, se encuentran Madeiros y Tamir, dando un curioso contraste entre el primero, con su casi metro noventa de altura, que aun sentado se hace notar, respecto al segundo, sentado frente a él, con menos de una cabeza de altura respecto al moreno que esta sentado frente a él. Ambos se muestran igual de serenos. Madeiros mirando al techo dando la impresión de estar completamente dormido, con los brazos cruzados y respirando lentamente mientras Tamir mira hacia fuera, a través de la puerta. Ademas de la altura, la tez pálida de Tamir contrasta bastante con la piel oscura de su compañero, digna de un nativo de Zulú.

La mitad del pelotón, ocho hombres que poco se conocen, y poco tienen que ver entre si, pero que aun así tienen un mismo objetivo. Dentro de esos trajes todos son iguales, o así se ven, de no ser por los nombres impresos en la parte izquierda del pecho de cada traje, posiblemente ninguno podría saber quien esta sentado a su lado, pero eso ya no importa.

Aun no hay noticias de los pilotos. No se los puede ver ni oír, pues su cabina esta en un compartimiento separado respecto a la de los pasajeros, solamente comunicados entre si por un intercomunicador que hay sobre una de las paredes metálicas del vehículo - Tres minutos para el despliegue - dice una voz por intercomunicador, para luego volver a hacer silencio.

Mientras tanto, la nave se detiene dentro del tubo de lanzamiento, un túnel largo conocido como “cañón”, lugar en donde se nivela la presión respecto al exterior antes de la salida de cada nave. Ahora el único sonido que se oye es el de la gente trabajando detrás, en la bahía, aunque el ruido que hacen las puertas del tubo de lanzamiento, cerrándose detrás de la nave, tapa cualquier sonido que les pueda llegar. El interior del compartimiento para pasajeros solamente esta iluminado por la luz que llega desde afuera, a través de las puertas, que aun siguen abiertas.

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01/10/2010, 20:54
Pavlo "Hammer" Kyonz

Pavlo recorre con los ojos a los muchachos. Críos, en serio... menos mal que esto es casi un simulacro.

Con un suspiro, se relaja en el duro asiento, que es poco más que una tabla con huecos para el culo de la armadura. En acto reflejo, como cábala luego de tantos años, se palma la insignia claveteada a su pecho izquierdo, con el nombre. Nunca olvidaría aquella vez que estaba suelta, se perdió, y luego en el piso fue encontrada por su sargento. Lo obligaron durante un mes a llevar otra que decía "puta gratis"...

Tocó un botón en el casco y señaló a los demás, haciendo el número 3 con los dedos. Esperó a que todos sintonizaran el canal de audio apropiado, y habló.

- Bien, este es nuestro chequeo. Usaremos el canal 3 para comunicación normal, el 8 como back-up de emergencia. Mantengan el canal 8 libre, solo emergencia, entendido?

Continuó hablando, al tiempo que él mismo seguía el procedimiento.

- Verificación de harneses, check. Oxígeno, tanques, nivel, check. Munición asegurada, check. Sellos ambientales, al 100% y estables. Monitoreo de funciones vitales, check.

Parpadeó un segundo, para luego llamar la atención con voz firme y dura. Velazquez, te copio en rojo en funciones, revisa el casco, bebé de mamá. Tanaka, si eso es tener a la munición asegurada, nos vas a pegar un tiro en cuanto la nena de un salto. Protocolo, culos de talco! Ahora!

Sonrió bajo sus bigotes mientras los muchachos volvían a revisar todo, una vez más, y el lanzamiento estaba pronto a realizarse.

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01/10/2010, 22:26
James Edward

 James se levanta la visera del casco y sonrie algo brilla en sus ojos al ver ese puñado de hombres uniformados sentados a su alrededor, nerviosos, asustados, ansiosos de emociones, va a ser su primera, nuestra primera misión, una misión aburrida, pero bueno, la primera. A ver si todo sale bien. 

 Chicos, vamos a hacerlo bien, vamos a demostrarle a todos que hemos aprendido a trabajar, que con un poco de práctica y trabajo duro vamos a ser realmente buenos. De todas formas va a ser al rutinario y aburrido, pero bueno, mejor que estar encerrado en esa nave.

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02/10/2010, 00:41
Paul Foley

Paul esta un poco nervioso, pero no piensa demostrarlo ante los demas por lo que empieza a hablar para quitar la sensacion de la espera.

-James, no lo dudes, bajo tu supervision, seremos los mejores. Entramos, lo hacemos y nos largamos, y rapido, que me esperan en la cafeteria de popa para tomar unas copas unas enfermeras, quien se apunta para despues? he quedado con 4 no podeis dejarme en la estacada, las he dicho que vendrian los mejores de la flota, asi que habra que hacer caso al "pequeño sargento" aqui presente y volver con "galones de la mision" dice entre sonrisas y mientras golpea suavemente el casco de James en plan simpatico

Quizas me he pasado con James, y no quiera esas confianzas, pero lo comprobare rapidamente, de todas maneras, si se apunta a la escapada con las emfermeras, sera un punto a favor.

Notas de juego

he supuesto que durante la instruccion, este " seudo presumido, mujeriego" habra quedado con alguna chica o grupo de ellas, si no es asi, pues ya me las ingeniare para no quedar mal ante mis nuevos compañeros jejejejejej :)

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02/10/2010, 05:14
James Edward

 James sonríe, y aprieta el brazo de Foley a la altura del bicep con su mano. Esto se pone interesante.

 Centrémonos en la misión, ya habrá tiempo para todo, aunque si mal no recuerdo esas enfermeras te doblaban la edad facilmente, por no hablar del vello facial. Pero con ir a la cantina a curarme con alcohol por dentro me basta, ya veremos cómo se da la noche allí. 

 Dirigiéndose a todos los demás con un tono más formal 

 Chicos, repasad vuestro equipo, que esté todo y en perfectas condiciones. La pistola en su sitio, las baterías de las botas magnéticas, la munición, todo. Quiero que cada uno repase el equipo del compañero de su derecha siempre antes de saltar a una misión

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02/10/2010, 11:58
Jécnor Ráccor

El novicio soldado siguió el protocolo de seguridad, a la par que su Sargento. Todo parecía estar en orden en mi equipo, no pudiendo decir lo mismo del transporte al que el tiempo ya le pasaba factura -¿Pero es que en esta nave todo tiene que funcionar por lo pelos?- Pensó, sin poder evitar un nerviosismo palpable; Vale que en tierra nos pueda pasar cualquier cosa pero, si no conseguimos llegar por culpa de un fallo técnico sería algo muy patético.

Confirmo el OK por el canal 3, y mientras se hacían las reparaciones pertinentes en uno de los motores de la nave pertrechó concienzudamente su SCAR BJ-2; No era plan que a causa de una turbulencia o problema durante el vuelo, el rifle saliese disparado contra la pantalla de la máscara de un compañero, provocando su rotura, y la asfixia de este.

Es un arma, la SCAR BJ-2, tosca y pesada para el soldado de ascendencia Francesa, un tanto exagerada en comparación con la versátil TURCOTTE SMG, que sin duda prefiere.

Todo listo, tan solo esperar que el copiloto regrese y ponga en marcha la nave, que nos llevará a nuestra primera misión.

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03/10/2010, 15:52
Paul Foley

Paul sonrie ante la edad de las emfermeras, y dice:

-Tienes razon, la mitad si, pero la otra mitad no, y solo hemos quedado, luego cada uno a lo suyo, de todas maneras, como superior mio que es le he guardado la emfermera jefe, una mujer de 35 años con ganas de TODO!!!! dice entre risas  moviendo los brazos simulando tocar pechos y dando besos al aire para hacer mas distendido el viaje.

despues de reponerse de la risa, aclara la voz y como segundo al mando de James, dice:

-Venga chicos vamos a ver como esta el equipo del compañero, seguro que perfecto, pero vamos a comprobarlo por si las moscas, ya que es el, el que nos cubrira el culo.

dicho esto se pone a revisar el equipo de James, a ver si todo esta en condiciones.

 

Notas de juego

tiro liderazgo para que lo hagan con entusiasmo, ademas de empatia. jejejejejee

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03/10/2010, 17:38
James Edward

 Coge uno de los brazos del segundo al mando en el aire cuando ve que se está emocionando demasiado, y con tranquilidad le comenta.

 Foley, suficiente.

 Tras dejar que le revise su equipo, se levanta y revisa el equipo del que está sentado junto a la puerta, parece algo nervioso, y como todos los demás, tiene el uniforme en perfecto estado y todo en su lugar, le da un par de golpes en el pecho, signo de que todo está en como de estar y vuelve a su lugar.

 Parece que todo está en orden, y la revisión ha tomado la mayor parte del viaje, ha sido una buena idea tener a los chicos entretenidos, estar esperando en esta lata de sardinas los habría puesto más nerviosos todavía. No es un vuelo excesivamente largo, aunque sería mucho mejor estar en los mandos de la nave.

 

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05/10/2010, 16:50
Izan Wolf

Wolf comprobó sistemáticamente su equipo paso a paso, traje, equipo de respiración, armamento, munición, sistemas electrónicos... Todo en orden. Era meticuloso con todo lo que a su equipo se refería, un soldado no cuidadoso ni disciplinado, era soldado muerto. Una vez todo estuvo en orden, siguió con la respuesta al sargento.

- Todo en orden mi Sargento, esperando instrucciones. - Dijo como unica respuesta.

Estaba deseando que la misión comenzara, y no por pegar cuatro tiros, sino por hacer su trabajo. Uno que amaba en cierto sentido, con una etica del deber encomiable, y para lo que sentia que habia nacido. Sus compañeros eran medianamente competentes y el sargento le caia bien, aun asi eran un equipo de la ostia, nada pesado, y la verdad es que en cierto modo, como una pequeña familia.

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06/10/2010, 06:36
Director

El intercomunicador de la nave vuelve a encenderse, y a través de él escuchan nuevamente las voces que habían oído antes.

- Todos los sistemas en linea y funcionando al 100%. Tenemos permiso para despegar. Estén preparados – dice una de las voces que habían oído antes, posiblemente la del piloto.

Tras eso se hace un silencio en la nave. Todos escuchan como el aire comienza a ser succionado fuera, en el tubo de lanzamiento, a la vez que las puertas de la nave se cierran rápidamente y de manera hermética. Por unos respiradores comienza a entrar aire a la nave, a la vez que todos los pasajeros se mueven en su lugar, preparados para el lanzamiento. La nave desciende de manera brusca unos centímetros, haciendo a todos sobresaltarse. Una luz roja se enciende dentro de la cabina de los pasajeros, única fuente de iluminación que tiene el interior de aquel cacharro.

- ¡Lanzamiento! - dice la voz del piloto, al mismo tiempo que la nave es eyectada por aquel tubo de manera brusca, haciendo que el estomago de todos sus ocupantes se revuelvan.

Por las pequeñas ventanas que hay en las puertas laterales de la nave pueden ver como se mueven a través del tubo de lanzamiento a gran velocidad, y rápidamente este queda atrás, dando a lugar a la inmensidad del espacio. Sienten como los cuerpos se hacen ligeramente mas livianos, haciendo a aquella imagen, junto con el silencio que inunda la cabina, bastante relajante. De todas formas, la nave se mantiene muy poco tiempo en aquella posición tan indefensa, pues rápidamente gira y vuelve su rumbo hacia Ardo, el destino. Aquel planeta se ve inmenso a través de las ventanas, incluso con la nave de frente, aunque son pocos los privilegiados en la cabina que tienen la posibilidad de ver aquel paisaje, arrimándose a las pequeñas ventanas de las puertas.

- Estamos mas cerca de lo planeado. Tiempo de entrada en la atmósfera reducido por el cambio en la distancia y velocidad. ETA: 60 segundos. Aumentando velocidad en un 200% - avisa el piloto por el intercomunicador.

La imagen del planeta Ardo, pintado de un color ocre casi en su totalidad, se dibuja completamente frente a ambas ventanas, acercándose rápidamente, como si la nave fuese a ser engullida por aquel gigante. Apenas un par de minutos mas tarde aquella imagen se borra por un destello blanco que enceguece a todos los que están observando hacia fuera, obligandoles a cubrirse la vista con las manos, mientras la nave tiembla bruscamente.

-Estamos dentro – dice la voz del piloto, y tras aquellas palabras el destello se detiene, y por la ventana se puede ver un mar de nubes color ocre, entre el cielo y la tierra. El cambio de gravedad se vuelve a sentir, haciéndose muy parecido al que había dentro de la nave, aunque se sienten apenas un poco mas pesados - Nos acercamos a la tormenta – vuelve a comentar el piloto, mientras la nave se acerca rápidamente a aquel mar de nubes, para finalmente adentrarse en él.

La imagen a través de las ventanas vuelve a cambiar. Sienten como la nave se acerca rápidamente a las nubes de la tormenta, y pueden sentir la velocidad a la cual lo hace. En un instante, el paisaje cambia a un manto ocre que no deja ver absolutamente nada. Tan solo se puede ver algo en el interior gracias a la luz roja que ilumina la cabina de los pasajeros.

- La tormenta tiene una intensidad mayor en un 70% respecto a lo previsto – comunica otra voz, definitivamente la del copiloto – visibilidad nula, nos movemos con los sistemas de navegación. Rumbo fijo. Todo en orden. ETA: dos minutos.

Los pilotos parecen bastante seguros, y todo resulta ir normalmente.

-¿Que a sido eso? - se escucha que pregunta el piloto, voz a la cual ya pueden identificar.

-¿Que? no pude ver nada... - comenta el copiloto – estamos saliendo de la capa mas gruesa de la tormenta, tiempo estimado de lleg...

El copiloto no termina de dar su informe cuando la nave se estremece de manera brusca, mas de lo normal, haciendo que todos sus ocupantes se muevan en sus lugares.

- ¿¡Que mierda!? ¡Algo acaba de golpearnos! - dice el piloto, bastante exaltado.

- Tal vez una roca – añade el copiloto, teoría no muy descabellada, dada la tormenta que hay fuera.

Sin embargo, tras las palabras del copiloto algo vuelve a golpear a la nave, esta vez de manera mas brusca.

- Mierda, tenemos que salir de aquí, esta tormenta es muy fuerte – comenta el piloto, menos asustado por el segundo golpe, aceptando la teoría de su compañero.

- Estamos saliendo de la zona critica de la tormenta en este momento. Visibilidad recuperada, 50%. Tenemos contacto con el centro urbano. ETA: 60 segundos... no veo mas rocas, la tormenta es considerablemente menos potente en este sector. – dice aliviado, pero inmediatamente la nave se vuelve a estremecer, ahora mas fuerte que antes, haciendo que incluso unos chispas salten dentro de la cabina de los pasajeros. Todos se mueven en sus asientos, de no ser por los cinturones estarían dando tumbos por por toda la cabina, pues la nave se mueve al punto de perder el control, o eso parece. Al impacto lo acompaña un sonido ensordecedor. Todo se vuelve un caos.

- ¡Esto no son malditas rocas! - comenta el piloto, nuevamente exaltado – ¡abortamos, ponte en contacto con casa!

- ¡La radio no funciona a esta altura! ¡Tenemos que subir! - responde el copiloto.

- ¡Tu comienza a llamara a casa, yo voy a poner este pájaro de vuelta! - ordena el piloto.

- ¡Aquí Alfa! - grita el copiloto a la radio - ¡Abortamos misión! ¡Estamos recibien-!

El copiloto no termina de concluir aquella frase cuando se vuelve a oír un fuerte estruendo, ahora acompañado por otro mas fuerte. La nave ya no tiembla ni da tumbos, si no que comienza a girar de manera frenética, haciendo imposible orientarse. Para colmo de males, la única luz que hay en la cabina se apaga, dejando a todos a oscuras. Lo único que pueden hacer los soldados es tomarse de sus cinturones y rezar, mientras los pilotos tratan de arreglar la situación.

- ¡Aquí... Alfa...! - grita el copiloto con dificultad, ademas de que ya es difícil oírle - ¡Recibimos fuego hostil! ¡mi copiloto a muerto! ¡Perdimos un motor! ¡Necesitamos ayuda! ¡Estamos cayendo! ¡Repito, re... fu... il! ¡Ayuda!

Aquellas palabras desesperadas es lo ultimo que se puede oír en la nave. Tras eso, otra estruendo se vuelve a oír, mientras la nave sigue girando de manera brusca, antes de que todo se calle de golpe y se haga una completa calma...

...James lentamente abre los ojos, es el primero. Le duele el cuerpo, aunque al volver la vista ve que esta en una pieza. Aun tiene el recuerdo en la cabeza de lo que acaba de suceder, y de la calma que se hizo de golpe. El ver la manos moviéndose frente a sus ojos le hace caer en la cuenta de que aun esta vivo, desorientado, pero vivo.

Mira la cabina, esta vacía, salvo por Foley, que esta a su lado, despertando también, en las mismas condiciones. Por un momento podrían pensar que se quedaron dormidos durante el viaje, que aquello que recuerda no es mas que un mal sueño, muy real, pero solo un sueño.

Solo pueden escuchar un pitido ensordecedor en sus oídos, pero no necesitan oír para notar que nada de aquello fue un sueño, pues al volver la vista hacia la izquierda ven que sus compañeros están fuera de la nave, corriendo de un lado a otro. No llevan las mascaras, pero si los cascos, y pueden reconocerse entre ellos sin necesidad de ver los nombres en los uniformes, aunque a la distancia ahora eso no sea posible. Algunos están inclinados sobre algo en el suelo, es difícil saberlo, pues la nave se encuentra casi apoyada sobre su costado derecho, por lo cual la puerta se encuentra mirando al cielo, a aquellas nubes ocre que sobrevuelan el paisaje de aquel planeta.

Ambos, confusos y doloridos, aunque enteros, tratan de incorporarse, tratando torpemente, aun desorientados, de desabrocharse los cinturones.

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06/10/2010, 06:43
Pvt. Saul Frost

En ese momento, Frost asoma por la única puerta, con su fusil en mano, con la cabeza descubierta, salvo por un trozo de su casco colgando de la oreja izquierda. Al ver a ambos conscientes parece decir algo, como si maldijera, mientras entra a la nave y se acerca, con dificultad, a ambos, ayudandoles a desabrocharse los cinturones. Les habla a ambos, o les grita, pues no pueden oírlo, el zumbido continua mientras Frost intenta comunicarse, y mientras lo hace, de fondo, comienzan a escucharse otros sonidos, cada vez mas claro, tomando lugar, y expulsando a aquel incesante y ensordecedor zumbido. Primero parece oírse un disparo, luego otro... luego un grito, un insulto de uno de sus compañeros, y luego mas disparos. Los sonidos se suceden una y otra vez, mas deprisa, hasta que finalmente el zumbido desaparece y pueden oír con claridad que es lo que esta sucediendo.

- ¡Tenemos que sacar el culo de aquí! ¡Nos están acribillando! - es lo que sale de la boca de Frost, o al menos lo que ambos llegan a oír, una vez vuelven a tomar conciencia por completo.

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06/10/2010, 06:44
Director

El intercomunicador de la nave vuelve a encenderse, y a través de él escuchan nuevamente las voces que habían oído antes.

- Todos los sistemas en linea y funcionando al 100%. Tenemos permiso para despegar. Estén preparados. Señor Morello, cuando quiera. - dice una de las voces, aquella que se había mantenido seria antes y lo hace ahora, y que parece pertenecer al copiloto de la nave.

Inmediatamente, la otra voz se deja escuchar por el intercomunicador, manteniendo aquel tono mas distendido, incluso bromista, del cual había hecho gala anteriormente.

- Buenos días pasajeros – dice – bienvenidos a “Aerolíneas Alianza”, les habla su piloto, Adrian Morello, aunque pueden llamarme “Iceman” o “Sr. Iceman”. Antes de despegar, quisiera darle las indicaciones básicas. Como podrán adivinar, no esta permitido levantarse durante el despegue, así que por favor les pedimos que esperen hasta que la nave se encuentre estabilizada antes de levantarse al baño. Es indispensable también que mantengan sus cinturones abrochados. En caso de una emergencia, las salidas están a ambos costados de la nave, y debajo de sus asientos se encuentran los salvavidas. La cena se servirá en tres horas, y podrán optar entre pollo o carne roja, acompañada de una gran variedad de ensaladas. Desafortunadamente no habrá servicio de películas durante este viaje. Si tienen cualquier otra pregunta, por favor diríjanse cualquiera de nuestras serviciales y hermosas azafatas. Les recuerdo que esta prohibido fumar tabaco en la nave.

Se escucha una muy breve pausa antes de que el piloto continúe hablando, sin dejar de usar su tono bromista.

- Solo para su información, y para que se queden tranquilos, les avisamos que este viaje durará, aproximadamente, unos diez minutos. En estos momentos la cámara en la cual nos encontramos se esta vaciando para equilibrar la presión, algo muy sencillo, como podrán deducir. Luego de eso, seremos lanzados a una velocidad de alrededor de doscientos kilómetros por ora. Posteriormente, la nave acelerará unos cientos de kilómetros mas para luego entrar en la atmósfera de Ardo, proceso en el cual la temperatura exterior aumentara unos miles de grados sobre la superficie de la nave. Una vez pasada la atmósfera nos esperan vientos de alrededor de doscientos kilómetros por hora, como mínimo, cargados de arena y piedras del tamaño de melones, para luego dejarnos, si los motores no se atascan y fallan en un descenso de cientos de kilómetros por hora y con visibilidad prácticamente nula, en el sector S-7, lugar de arribo.

Se hace otra pausa, y luego la voz mas seria se hace escuchar de nuevo.

- ¿Has terminado? - pregunta.

- Casi – responde la otra voz.

Tras eso se hace un silencio en la nave. Todos escuchan como el aire comienza a ser succionado fuera, en el tubo de lanzamiento, a la vez que las puertas de la nave se cierran rápidamente y de manera hermética. Por unos respiradores comienza a entrar aire a la nave, a la vez que todos los pasajeros se mueven en su lugar, preparados para el lanzamiento.

- Bien – vuelve a decir la voz “bromista” - espero que sus dudas hayan sido aclaradas. Por favor, pónganse cómodos en sus asientos y disfruten del despegue. Vamos a poner algo de música para que puedan relajarse durante el trayecto. Buenos días damas y caballeros, y que tengan un buen viaje.

Inmediatamente, luego de esas palabras, la nave desciende de manera brusca unos centímetros, haciendo a todos sobresaltarse. Una luz roja se enciende dentro de la cabina de los pasajeros, única fuente de iluminación que tiene el interior de aquel cacharro.

- ¡vamos! - dice la voz, al mismo tiempo que la nave es eyectada por aquel tubo de manera brusca, haciendo que el estomago de todos sus ocupantes se revuelvan - ¡Amo esta parte! ¡Amo esta canción! ¡Dios, amo este puto trabajo! - dice aquella voz, bastante mas excitada que antes.

Por las pequeñas ventanas que hay en las puertas laterales de la nave pueden ver como se mueven a través del tubo de lanzamiento a gran velocidad, y rápidamente este queda atrás, dando a lugar a la inmensidad del espacio. Sienten como los cuerpos se hacen ligeramente mas livianos, y de no ser por la música que entra a través de los parlantes de los intercomunicadores de la nave, a todo volumen, e inundando completamente la cabina, aquella imagen podría ser muy relajante. De todas formas, la nave se mantiene muy poco tiempo en aquella posición tan indefensa, pues rápidamente gira y vuelve su rumbo hacia Ardo, el destino. Aquel planeta se ve inmenso a través de las ventanas, incluso con la nave de frente, aunque son pocos los privilegiados en la cabina que tienen la posibilidad de ver aquel paisaje, arrimándose a las pequeñas ventanas de las puertas.

-Estamos mas cerca de lo planeado – dice la voz del copiloto.

-Entonces esto va a ser mas corto, lastima. Aumentando la velocidad en un 300% - contesta el piloto.

-Tiempo de entrada en la atmósfera reducido por el cambio en la distancia y velocidad. ETA: 60 segundos.

-Excelente, tenemos tiempo para nosotros, nena.

-Oh, por favor, no...

La voz del copiloto no termina de lamentarse cuando la nave comienza a dar vueltas sobre su eje. De repente los cuerpos vuelven a hacerse pesados, mas pesados que antes, debido a la fuerza centrifuga, lo cual les hace sentir una ligera sensación de mareo.

- Iceman, los jefes están observando – reprocha el copiloto

- ¡Vamos, no seas aguafiestas!

- Estamos entrando a la atmósfera.

- Bien, a trabajar – dice el piloto, ya mas tranquilo, al menos en comparación a como estaba segundos atrás.

- Todo está en orden, preparándonos para entrar.

- Esta es la parte fea... - se lamenta el piloto.

La imagen del planeta Ardo, pintado de un color ocre casi en su totalidad, se dibuja completamente frente a ambas ventanas, acercándose rápidamente. Segundos mas tarde aquella imagen se borra por un destello blanco que enceguece a todos los que están observando hacia fuera, obligandoles a cubrirse la vista con las manos, mientras la nave tiembla bruscamente.

-OK, estamos dentro – dice la voz del copiloto, y tras aquellas palabras el destello se detiene, y por la ventana se puede ver un mar de nubes color ocre, entre el cielo y la tierra.

El cambio de gravedad se vuelve a sentir, haciéndose muy parecido al que había dentro de la nave, aunque se sienten apenas un poco mas pesados.

- Nos acercamos a la tormenta. Tiempo de arribo al sector S-7, tres minutos. Iceman, tenemos un exceso de velocidad de un 200% respecto a los parámetros recomendados - comenta el copiloto, siempre bastante sereno.

- ¿Tan poco? - responde “Iceman”, ya de vuelta tan excitado como antes

- Entrando en la tormenta.

- Esto va a ser interesante...

La imagen a través de las ventanas vuelve a cambiar. Sienten como la nave se acerca rápidamente a las nubes de la tormenta, y pueden sentir la velocidad a la cual lo hace. En un instante, el paisaje cambia a un manto ocre que no deja ver absolutamente nada. Tan solo se puede ver algo en el interior gracias a la luz roja que ilumina la cabina de los pasajeros.

- La tormenta tiene una intensidad mayor en un 70% respecto a lo planeado – comunica el copiloto

- ¡Así es como me gusta!

- Visibilidad nula, viajamos con los sistemas de navegación. Hay mucho polvo juntándose en la salida de enfriamiento del motor numero dos. Recalentamiento en un 35% por sobre los parámetros normales, y subiendo.

- ¡Oh, dios, vamos a morir! ¡JAJAJAJAJA! - añade el piloto, cada vez mas excitado.

- Sistema alterno de enfriamiento activado, valores volviendo a la normalidad.

- Oh, eres un aguafiestas ¿sabes? – comenta “Iceman”, decepcionado.

- No esta en mis planes morir hoy, Iceman, tengo una partida de poker esta noche.

- ¡Bah! Siempre pierdes, sería mejor morir ahora, como un héroe, ¿sabes?

- No, hoy me siento afortunado.

- Veremos...

El dialogo de los tripulantes de la nave da a entender que, pese a todo, aquello es de lo mas normal, aunque aun así no sea muy tranquilizador para los que visitan un planeta en esas condiciones por primera vez. Por un momento parece que la intención de los pilotos no es mas que asustar a los novatos, y no están muy lejos de eso, pues la nave se mueve bastante, y desciende a gran velocidad. Sin duda no se trata de un viaje demasiado tranquilo, independientemente de como se puedan interpretar las palabras del piloto y su compañero.

- ¿Has visto el tamaño de esa roca que nos acaba de pasar? El viento tiene que estar fuerte ahí fuera – comenta el copiloto.

- No te preocupes, tengo el casco puesto.

El manto de color ocre desaparece bruscamente, dejando a la vista un paisaje mas claro, aunque tan solo se pueden ver montañas, rocas, y un gran desierto que se extiende ampliamente a lo largo de ambas ventanas, aún a distancia ahí abajo, y que se corta rápidamente por la visibilidad reducida a causa de la tormenta. Ademas de un manto de arena, ahora mas fino, de vez en cuando se ve pasar alguna roca de considerable tamaño volando cerca de la nave, en dirección contraria.

- Volvemos a tener visibilidad. 40%. Seguimos usando los sistemas de navegación. Nos acercamos al punto de descenso. Contacto visual. ETA: treinta segundos – anuncia el copiloto.

- Bien ahí vamos.

La nave se acerca rápidamente al suelo, aunque ya es imposible ver claramente el destino a través de las ventanas laterales.

- Iceman, vamos a 150% por sobre la velocidad de descenso recomendada. ETA: veinticinco segundos.

- ¡Mira, mamá, sin manos! - comenta el piloto.

- Te dije que no esta en mis planes morir hoy, Iceman – reprocha el copiloto.

- ¿Y te había dicho ya que eres un aguafiestas? ¡Pues lo eres!

- Contacto en diez segundos, preparados – anuncia el copiloto, ignorando las ultimas palabras de su compañero.

La nave rápidamente aminora la marcha, haciendo que todos se muevan en sus asientos debido a la inercia. El angulo cambia, y la nave toma una posición horizontal, a diferencia de como estaba descendiendo hasta el momento. El manto de arena continua fuera, pero según pueden ver, pocos metros mas allá de la zona de descenso tan solo hay muros de piedra, indicando que están descendiendo en medio de algo parecido a un valle, o tal vez una grieta en una de las caras de la montaña.

La nave desciende ahora lentamente, tratando de tocar tierra, aunque se mueve y tiembla bastante.

- El viento se amontona aquí. El efecto bolsa hace que no tengamos mucha estabilidad. Sargento, todo listo para descender – avisa el copiloto.

- Y rápido, antes de que nos estrellemos – comenta el piloto, mas tranquilo, pero manteniendo su tono característico.

Inmediatamente tras esas palabras, la luz roja del interior de la cabina cambia a verde, y las puertas se abren bruscamente. Una fuerte corriente de aire entra por ambos lados, y la nave se estremece bruscamente. Por suerte los trajes ayudan a no sentir el frío, ni la arena.

- Gracias por viajar en “Aerolíneas Alianza”. Que tenga un buen día – bromea el piloto.

Pavlo da la orden y uno a uno los soldados comienzan a saltar del vehículo, con cierta dificultad, debido al movimiento de la nave, la fuerza del viento, y la distancia hacia el suelo, de metro y medio un gran salto con vientos de esa magnitud. De todas formas todos logran salir y hacer contacto con el suelo de Ardo sin problemas. Apenas tocan la plancha metálica sobre la cual se posa el Mohawk, las imanes de las botas hacen su trabajo, manteniendo a los soldados pegados al suelo, casi literalmente. Cuesta mantener el equilibrio, y hay que hacer mas fuerza de lo normal para caminar, pero son soldados entrenados y no tienen problema para ello.

- Muy bien sargento, nos posaremos por sobre la tormenta para poder iniciar comunicaciones de rango medio. Recuerde el protocolo. Avisaré en cuanto podamos comunicarnos. Suerte. - dice el copiloto.

- ¡Y compren recuerdos! - añade “Iceman”.

Inmediatamente las puertas de la nave se cierra y esta comienza a ascender rápidamente, adentrándose en aquel manto de niebla y perdiéndose de la vista. En pocos segundos ya no hay rastro de ella.

Finalmente en tierra, y ahora solos. Si bien el sonido provocado por el viento se hace notar, es un silencio casi agradable comparado con lo que se podía oír dentro de la nave, durante el descenso. Se encuentran todos de pie sobre una plataforma metálica, bastante grande, la cual parece estar sobre una de las caras de la montaña, tal como decía el informe de la misión. La plataforma esta incrustada en una grita, por lo que de un lado hay un muro de piedra interminable, que va hasta el pico de la montaña, y por el otro una caída de varios cientos de metros, y un paisaje que da a un desierto interminable, cubierto de rojas, y que apenas se deja ver a través de la tormenta. Al final de la grita, en la punta, la torre se levanta como un gran tubo de acero clavado en la montaña, el cual se extiende hacia arriba, hasta que tan solo su silueta se puede ver entre la tormenta, asomando por el pico de aquella formación rocosa.

En el suelo metálico, unas luces rojas indican el camino hacia la entrada de la torre, o al menos hasta el ascensor de carga que lleva a la sima, lugar de destino, según el informe de la misión. A un lado, estacionado, y sobre unos rieles que bajan por sobre la misma cara de la montaña en la cual se encuentra, esta el transbordador que luego tendrían que tomar para ir a la excavación que hay en la base, y donde los tienen que recoger una vez terminado el trabajo.

Notas de juego

Plano básico del lugar.

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06/10/2010, 09:54
Jécnor Ráccor

Tras el turbulento viaje y ya en tierra firme sigue presente el hecho del turbulento viaje. Las nauseas no afloran de milagro, no solo por las piruetas de la nave si no por los bruscos cambios de presión, atmósfera, gravedad y demás.

Con unos lentos y costosos pasos avanza un poco respecto al resto, merodeando por una zona que hasta el momento parece tranquila y segura.

Observando bien la Torre que se alzaba justo al norte se giró hacia Tanaka, el ingeniero que debía de realizar el diagnóstico, y le ofreció una mueca de ánimo; Ahora es cuando tocaba comenzar con su parte, algo sencillo a lo que seguro estaría ya acostumbrado, a diferencia de alguno de nosotros.

Las inclemencias del clima y la fuerza de las botas se hicieron notar en un soldado como este, de escasa fuerza y constitución, mientras meditaba un ¿Por qué no me abre hecho ingeniero?.

Mientras regresaba a la formación, con pose pasiva y rifle en descanso no quitó vista de su superior esperando la orden que diese paso al avance hacía nuestro destino inmediato: La Torre.

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06/10/2010, 21:57
Pavlo "Hammer" Kyonz

El agarre de los imanes de las botas mantienen a Pavlo en el suelo, firme, mientras con una mano sostiene el rifle y con la otra indica a los niños que tomen refugio en la base de la torre.

La luz rojiza del sol a través de la arena que los cubre, las luces rojas del ascensor... las luces rojas de situación en su visor. Parece una puta y mala peli de monstruos, piensa.

- Vamos muchachas, a cubierto, vamos!!

Una vez están todos allí, como constata en el visor táctico de su HUD, observa al grupo.

- Mitchell, Yevgeni, Velazquez, ustedes se quedan acá a mantener la posición, alertarnos si sucede algo, esas cosas. Los oidos abiertos, los ojos atentos. No quiero estupideces. La voz de Pavlo suena rasposa y artificial en las radios, pero transmite la seguridad de un veterano.

El sargento sacude su cuchillo militar en la funda, y corrobora que la pistola se encuentra a mano, preparada, lista. Lo mismo hace con el casco. Paso a paso, asegurandándose de que sus botas se afirman bien y lo mantienen vertical contra el fuerte viento, entra en el ascensor. El resto, arriba. Literalmente. Tanaka, me hace el favor de poner en marcha este trasto?

Mientras el ingeniero revisa el panel del ascensor, Pavlo les da un última advertencia a los tres que deja en la base. No corten el contacto de radio, y nos reportaremos cada diez minutos. Si los vuela el viento por ir a echar una meada, no los va a ir a buscar ni su abuelita. Entendido?

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07/10/2010, 00:11
Paul Foley

Paul se desabrocha los amarres y recoge todo su equipo, luego ayuda a James a salir si hace falta, y se pone el casco con la mascara de filtracion si hace falta, se asoma por la salida y observa el terreno circundante, para localizar donde esta el emfrentamiento y posibles posiciones defensivas. si ve a algun enemigo, o alguien le dispara, el hara lo mismo.

Mientras dice: -Cabronazos, ahora como coño voy a volver a mi cita con las emfermeras, esta me la pagaran cara, a ver como le esplico yo esto a las tias mas cachondas de la Yamato, en fin, tendre que apechugar con lo que venga, ..... Bueno venga James, vamos al tajo que hay que regresar.

 

Notas de juego

es decir, movimiento hasta el borde de la salida y cubrirse, despues disparar.

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07/10/2010, 03:20
James Edward

 James se revuelve en la nave agarrando cualquier material extra que puedan necesitar, algo fácil y rápido como bengalas de localización, o chequear si alguien se ha hecho ya con el botiquín. En cuanto su situación se lo permite, conecta el intercomunicador e insta con voz tan calmada como puede a sus compañeros

 Reporten situación, como habrán podido comprobar la situación es harto desfavorable, comenzamos la maniobra B-14 de repliegue frente a emboscadas. Que alguien encuentre un jodido escondrijo o nos van a freir a tiros. 

 Saliendo de la nave se toma un largo segundo en observar el campo de batalla, qué o quienes les están atacando, parapetado por la propia nave intenta identificar a sus hombres, y ponerse en contacto uno a uno, ver como están las cosas y a dónde pueden huir. 

 Foley, no se despegue de mi lado, estoy intentando encontrar una via de escape, necesito que me cubra, que cuide de mi, ¿entendido?