Partida Rol por web

Cuando abrís la puerta, lo ves a el, con una chaqueta de cuero. Pantalones oscuros y sus botas. Su rostro perfecto se refleja apenas con la luz, dándole a sus ojos oscuros un toque suave, pero como de una fiera a la vez.

El te mira, con una sonrisa y las manos en los bolsillos.

-Sabia que te habías mudado, e imagine que podrías necesitar ayuda... ¿Puedo ayudarte?-

Te pregunta encogiéndose de hombros, con la leve sonrisa surcando su rostro.

Abrí los ojos de par en par. ¿qué hace aquí?... Eh, hola, sí... sigue.  Ahora si me  tomo por sorpresa y cada vez que alguien lo hace me deja sin palabras...

Le muestro la sala. A quien engaño,  es un lugar vacio lleno de cajas, y una silla. Si quiera pude llevarme la cama... y sólo eso.

El toma algunas cajas, levantándolas como si fuesen pañuelos. Con una velocidad increíble las acomoda todas en fila contra la pared, en varias columnas mientras abre la primera y te muestra su contenido.

-Bien entonces...dime ¿Donde va esto?-

Te dice de manera suave, con una leve sonrisa. Dejando la chaqueta de cuero a un lado, mientras se arremanga la camisa blanca que lleva puesta.

Mmm es muy temprano. Bueno, las cajas estan basicamente marcadas, las de la habitacion estan en rojo, las de la cocina en azul y las verdes es lo nulo que tengo en la sala... (solo hay dos), y bueno... es eso.

Tomo una caja azul y saco un par de ollas...

Supongo que ya sabias donde me habia pasado. Comentó. prefiero estar lejos de mi familia, por si... bueno, las cosas no salen bien.

De repente me sentía más cómoda hablando con él. Es extraño, cómo si de repente me cayera bien.

¿no te aburres de vivir en una cueva?, es decir, ¿no es mejor vivir en un apartamento?

El se ríe, mientras comienza a acomodar las cosas con calma y dedicación. Al parecer no le molestaba hacer aquello.

-No vivo en la cueva por que no tenga dinero o eso... Primero es un sitio seguro, te oigo llegar a ti o a cualquiera a dos kilómetros de distancia, conozco la zona como la palma de mi mano... le resultaría difícil a alguien intentar atraparme o tenderme una trampa aquí. Ademas de que es un sitio tranquilo. - Me encojo de hombros – Ademas, esa cueva me la dio un amigo y yo se la cuido...Su gente la encontró hace cientos de años, así que eso la convierte en suya en la medida en que alguien puede reclamar algo como suyo. Solían utilizarla los Mingoes, eran una pequeña tribu de la nación de los iroqueses y eran de los últimos que quedaban cuando se aplico el Acta de Traslado de los Indios en 1831. Tanacharisson era amigo mio y decidió no trasladarse a la reserva. Después de que obligaran a marcharse a los últimos miembros de su tribu el se escondió en la cueva... Paso el tiempo y Tanacharisson vio como su gente y su cultura eran destruidas irrevocablemente. Hasta que decidió que ya tenia bastante. Se pinto para la batalla y arremetió contra el Fuerte Meigs en una misión suicida. Sin embargo antes de partir me pidió que cuidara su hogar, ya que al fondo están los huesos de algunos de sus antepasados y no quería que los blancos lo profanaran...-

Le digo mirándola de reojo con una leve sonrisa, antes de seguir acomodando sus pertenencias en la sala. Seria mejor ayudar allí y en la cocina y dejar su cuarto a ella. No quería que se pusiera histérica.

¿1831?... wow, eres viejo.. me sorprende, sabia que podían vivir muchos años, pero él no se veia tan viejo... bueno, nunca pense.. trato de explicarme, en realidad soy muy renuente a hablar de eso, pero lo unico que sabía de ustedes es que salían por la noche a cazar, y bueno, y lo que me dijo mi madre... me quede pensativa al darm cuenta que estaba contandole eso que me negaba a decirle.  Yo fui producto de una violación, como sabes, y para mi madre soy el recuerdo de su trauma...

Coloco los platos poco a poco.

Nunca pense hablar con tigo como lo  estoy haciendo. Le sonrio.

Sentís su mirada en vos durante unos momentos, como si te estuviese admirando antes de que desvíe la vista.

-Tengo 217 años gatita... - Suspiro – No todos los vampiros somos malos... se que no fue algo bueno que la violara, pero de no ser así no habría salido algo tan bello como tu... Y también me alegro que me lo estés contando... Eso quiere decir que confías un poco mas en mi...-

Te responde con una sonrisa, mientras acomoda algunos adornos.

Me sonrojo. Caray no entiendo que me pasa, estoy con muchos sentimientos encontrados, él es un vampiro, pero tiene sentimientos y por primera vez desde que lo conozco no esta actuando como un depravado...

Bueno, 217 años es mucho tiempo. Murmuro.

Mientras abro la nevera.

¿Bebes cerveza?

No se porque de repente me siento interesada en saber más..

Me sonrío. Mientras me acerco a ella, quedándome a unos pasos.

-Pues si, bebo...y si son muchos años. Pero soy un vampiro nena, y no puedes decirme que aparento la edad que tengo...-

Le respondo en tono suave, manteniendo la sonrisa.

No respondo nada, y le paso una cerveza y abro otra.

No, para nada, aunque evidentemente eres mas poderoso que otros. Sonrió. 

Lo miro con muchas preguntas ¿no te aburre vivir tanto?

Me sonrío, agarrando la cerveza y dándole un sorbo. Disfrutando de aquel sabor mientras sigo acomodando.

-Soy mas fuerte que otros, por que soy un Maestro. Por eso he podido enseñarte cariño – Le respondo en tono suave – Y no me aburro por que siempre tengo trabajo que hacer, aunque ahora, con tu compañía todo es mas divertido...-

Le guiño un ojo, aguardando a sus demás preguntas. Me agradaba estar así con ella y charlar sin que desconfíe de que voy a tirarme a su yugular, cosa que no quería hacer.

No  se que responder frente a eso de que con migo, todo es mas divertido... se debe sentir muy solo. Tomo mi cerveza y me siento a su lado   sonriendo. Dime, si eres un maestro, cómo fue que viste que yo no era un peligro, ¿porque me seleccionaste a mi?. No entiendo todavia porque a pesar de que trate de matarlo, me esta enseñando. 

Me sonrío, dando vueltas la cerveza en mi mano antes de dar otro sorbo. Si le dijera que me había parecido bella, no me creería. Si le dijera que me había parecido deliciosa, pensaría que deseaba beber su sangre. ¿como se lo explicaba sin que pensara mal?

-Mmm, como puedo explicártelo... Note que no tenias experiencia para tratar a los vampiros con solo mirarte cuando me hablaste... Pero vi como lo mataste...tienes las habilidades, pero nadie las ha entrenado, y ambos cazamos vampiros... ¿Por que debería matar a una criatura tan hermosa y habilidosa cuando puedo tenerla a mi lado para enseñarle y tal vez lograr besarla en algún momento?-

Le digo con una sonrisa, mirándola de reojo. Sabia que tal vez vendría la abofeteada pero todo valía la pena si ella me tocaba aunque sea con un golpe.

¿besarme? jajajaja ¿tienes sentido del humor sabes?.  es tan ridículo que es gracioso, caray, cuando pienso que esta convirtiendose en un hombre interesante de repente vuelve con sus depravaciones. Lo lamento Bones, no estoy de humor para eso, y tampoco creo que sea buena idea...

Me parece gracioso, y lo tomó normalmente, no con agresividad...

¿así que no lo sabes explicar?, bueno... eso es interesante. Sonrío y bebo de mi cerveza. Parece ser que eres un hombre con muchos enemigos, porque para qué entrenarias una cazadora.  Bebo de nuevo.

Suspiro. Sabia que iba a reaccionar así. Nunca me creería si se lo dijera. Bebo el ultimo sorbo de la cerveza antes de dejarla a un costado, poniéndome serio. Para ella era solo sentido del humor.

-No lo estoy diciendo en broma...pero por mas que lo dijera en serio no me creerías... - Le digo mirándola fijamente unos momentos para que notara que no bromeaba. - Y si...tengo bastantes...-

Vuelvo a mirar al frente. Apoyando las manos sobre el respaldo del sofá, con la mirada perdida en algún sitio de la casa.

Entiendo,digo  ignorando lo del beso, parece ser que tienes trabajo encargandote de tus enemigos. Tomo de mi cerveza. Lamento  haberme portado tan mal con tigo... bueno,  es que tengo mis restricciones.. ¿porque demonios estoy diciendo esto?, esta cosa esta muy rara?...  me esta agradando un vampiro... que horror!

Me sonrío, dejando la lata a un lado y acercándome a ella. Apoyando mi mano fría en su cálida y suave mejilla. Su piel me hacia estremecer. Me relamo antes de acercarme a sus labios y rozarlos con los míos

-No me importa si te portas mal conmigo...en cualquiera de los sentidos...-

Le susurro de manera seductora y suave. Antes de unir mis labios con los de ella para besarla. Saboreando de su piel y su calor que hacían que mi cuerpo se estremeciera por completo.

Cuando siento su mano encima de la mia, y recibo su beso no puedo dejar de sentir un corrientazo en todo mi cuerpo.¿porque demonios me siento así?

Es miedo, si, recuerdo a mi ex, así comenzó todo, luego de eso me obligo acostarme con él, y una vez logró lo que queria, y después de hacerme mucho daño, me dejó.

Pero él es un vampiro, y puede que.. oh no quiero pensar en eso.

Mi rostro es de total sorpresa una vez me ha besado. Hasta que logró lo que quería.

Ehh. Miro sin saber que decir. Eso no me lo esperaba. 

Bajo la mirada, pues me encuentro confundida.

Me sonrío, todavía con la mano sobre su mejilla y cerca de sus labios. Me relamí, su sabor era único y delicioso. Me moría por volver a besarla pero no iba a hacerlo. Tenia que contenerme por que no quería obligarla.

-Siento haberlo hecho...pero...me moría de ganas de saborear tus labios... Puedo sorprenderte con mas cosas pero no voy a obligarte a nada cariño...-

Le digo en tono tranquilo, y contra mi voluntad me pongo de pie. Seguramente querría que me fuera, dudaba que le gustara que me quedara allí Me quedo de pie a su lado, observándola Devorándola con la mirada. Jamas había sentido tanta necesidad de una mujer como con ella, pero jamas había forzado a una a estar conmigo y ella no seria la primera.