Partida Rol por web

 -Soy Angelo. Un gusto conocerte -respondería a la pregunta con una sonrisa igual de amable, antes de tomar una actitud un poco más seria ante tus dudas sobre porque debías dejar de bailar. -. Verás... Es que justo ahora el sitio podría volverse un poco peligroso...

 Pero sus advertencias serian inútiles cuando el asalto se puso en marcha antes siquiera de que él lo empezase, dándose cuenta de que el mundo era un pañuelo y las coincidencias podían pasar más de lo esperado.

 El hombre miraría con curiosidad como, pese a todo, no dejabas de lado tu bondad al ayudar a quienes se quedaban en el camino para que retomasen la carrera hacia la salida, quedando más pronto que tarde a solas en aquella sorpresiva situación.

 -Es cuando algo sale muy bien -explicaría con una sonrisa, riendo un poco por tu reacción ante la radio para luego escuchar tu confirmación de que formabas parte de todo aquello, lo cual si bien era sorprendente no lo fue tanto como que además decidieses tomarle de la mano para llevarlo a dar ayuda. -. Oh, pues... ¡Claro!

 Ver el otro rostro de Aoi daba a la científica mucho en que pensar, más estaba acostumbrada tanto a las máscaras que ver al chico adoptar una actitud más fría le resultaba hasta cómodo sabiendo que seria un trabajo sin arrepentimientos. En todo caso, la mujer seguiría al chico al interior de la bóveda para llenar las bolsas, pero lejos de detenerse en aquellas que le había entregado la mujer tomaría también varios de los sacos grandes y los llenaría hasta el tope, todo mientras se escuchaban los pasos de alguien acercándose a toda velocidad a la sala...

 Luego de atravesar un par de pasillos cuya seguridad había sido reducida a cero debido a la huida del personal, Jess llegaría acompañada a la sala de oficinas donde se encontraba la bóveda abierta, misma que en esos momentos estaba siendo saqueada por Aoi y Sayomi con varias bolsas.

 En el caso de la pequeña, esta no había llegado al sitio sola, sino que había traído de la mano a un hombre que con un traje negro de esos de empresario, con corbata también negra y una camisa gris debajo. Sus rasgos más característicos definitivamente era su cabello bi-color, de unos flequillos rojos por delante mientras el resto caía recogido en una coleta negra hacia atrás. Adicionalmente, sus ojos también eran poseedores de unas iris color ruby.

 -¿Qué rayos...? -se preguntaría Sayomi, chasqueando los dientes antes de continuar llenando una gran bolsa con los billetes. -. No tenemos tiempo... ¡Jess, carga esto!

 Confiando en que la niña seria capaz de llevar una única bolsa cuyo peso doblaba el que cargarían Aoi y ella, Sayomi dedicó su atención al desconocido de traje.

 -Oh, entonces ustedes son el resto del grupo... ¡Bien jugado! Se me adelantaron por poco al atraco: si hubieran tardado más no habrían encontrado ni un billete en esa bóveda, ¡Ha, ha, ha! -se carcajearía el hombre.

 -No eres un héroe... ¿Qué es lo que quieres? -le interrogaría la científica.

 -Bueno, Jess dijo algo de ayudarles con el robo y ser todos amigos, así que... ¿Por qué no? -concluiría con una sonrisa.

 Decidiesen lo que decidiesen, debía ser cuanto antes teniendo en cuenta que el tiempo continuaba corriendo.

Para sorpresa de mis compañeros seguramente, llegaría a la bóveda acompañada de un hombre que seguramente ninguno de nosotros había visto antes, cogidos de la mano... Aunque parecía que quien tiraba era yo de él y no él de mi -¡Jess estar aqui como mando con palo decir!- diría sonriendo refiriéndome al walkie-talkie.

Aunque no podría evitar mirar a Sayomi cuando dijo ese "¿Que rayos...?" y chasqueaba la lengua... ¡Eso significaba que algo le habia molestado! -¿Pasar algo Doc...?- preguntaría mirándola preocupada... ¡Si algo le pasa a mami yo debo de buscar solucionarlo cuanto antes! Aunque dijo que no teníamos tiempo de algo y que cargara eso -¡Jess cargar!- diría, yendo directa a la bolsa... Y aunque se viera muy grande y pesada, la cargué sin ningún problema y llevándola con poco esfuerzo -¿Querer Jess llevar más?- preguntaría también.

Luego de eso, escucharía tanto a Angelo como a Sayomi hablando... y cuando Sayomi preguntase, respondería sonriendo -¡Jess traer nuevo amigo! ¡Angelo también venir atraco banco, pero nosotros primero, y entonces Angelo poder ayudar y todos conseguir dinero y todos poyotásticos!- diría contenta, pues en mi inocencia pensaba que si queríamos hacer lo mismo, podríamos ayudarnos todos entre todos y hacer que el atraco quedara genial.

A partir de ahí, yo me quedaría esperando a ver que más me decían de hacer.

No se esperó aquello ni en un millón de años pero... ¿podía culpar a la niña? No, solo era una mente inocente metida en un mundo de mierda. Le recordaba a el y eso le jodía bastante la fachada fría que portaba. Le puso la mano en la cabeza a Jess y miró al tipo grande. - Pilla de las bolsas de la cámara. Declaró sin problemas, después de todo iban a dejar bastante sin recoger por el simple hecho de ser eficientes y no había minutos que perder en ese punto.

Estaba decidido a preguntar más en el coche que no en un sitio siendo rodeado de policías, por lo que no dudaría en hacerle una señal rápida a Sayomi para salir corriendo junto con Jess, que esperaba que aceptaran. - Síguenos como puedas, pero es peligroso quedarse mucho más tiempo aquí. Le dijo al nuevo, sin esperar a que terminase de recoger lo que debía recoger pues mucho tiempo no tenían.

Fiarse no se fiaba ni un pelo del tipo, podría ser perfectamente un héroe camuflado haciéndose el tonto para atraparnos y por eso mismo no se quería quedar quieto en el interior del banco junto a el. Había que correr como el plan dictaba.

  La doctora negaría ante la preocupación de la pequeña.

 La forma de Jess de anunciar su llegada provocaría otra leve risa por parte de Angelo, quién ante las indicaciones de Aoi no tardaría en adentrarse a la cámara para tomar varias de las bolsas ya cargadas con dinero, mostrándose sorprendido no solo por la confianza con la que Sayomi le encargó a Jess cargar lo más pesado, sino por la capacidad de la niña de hacerlo sin problemas.

 -Adelante, yo los alcanzo -aseguraría el hombre cuando Aoi decidió no perder más tiempo y ponerse en marcha, siendo que Sayomi asentiría e iría detrás de él tras hacerle una indicación a Jess para que les siguiera.

 El camino hacia la salida trasera estaba despejado, siendo que llegarían a la zona del estacionamiento donde se encontraba previamente estacionado el auto que usarían para huir. A lo lejos se podían escuchar las sirenas de los oficiales, quienes aparentemente habían llegado por el frente como suele ser lo usual, por lo que parecían tener el camino despejado para huir.

 Pero antes de poder llevar a cabo vuestro plan de escape, podrían escuchar como unas figuras se acercaban a toda velocidad por la salida luego de haber cargado el dinero en el auto, siendo que tras entrar haciendo unas volteretas en el aire aterrizarían tres figuras una al lado de otra.

 -¡Alto allí, villanos! -señalaría dramáticamente una de las figuras, tratándose de un hombre con traje completamente rojo. -. ¡Vuestros días de crímenes acaban aquí! ¡Entreguense ahora, o sufran la derrota bajo el poder de... "R of Red"!

 -"¡B of Blue!" -se presentaría una chica.

 -"¡G of Green! -le seguiría un hombre de verde.

 -¡El Equipo de Héroes Multicolor acabará con ustedes! -repetirían entonces todos a la vez, posando dramáticamente.

 Por supuesto, cabía mencionar la ausencia de los otros dos héroes que aparecían en la imagen, así como el hecho de que los trajes de R, B y G estaban un poco bastante maltratados, como si hace no mucho hubiesen formado parte de una batalla.

 -Ohh, son ese nuevo grupo de héroes que casi muere intentando atrapar a una villana nivel Tartaro... -comentaría Angelo con sorpresa, siendo que el hombre los había alcanzado de un momento a otro sin apenas hacer ruido, y eso que llevaba consigo varias de las bolsas de la caja fuerte.

 -¡No se repetirá lo de la última vez! ¡Tal vez Bullet y Pink no estén aquí, pero su espíritu heroico siempre nos dará fuerza en su ausencia! -gritaría con seguridad el héroe de rojo.

 -Lo que faltaba, unos novatos... -se llevaría Sayomi los dedos al entrecejo. -. Acabemos rápido con esto...

Con una sonrisa, me iría siguiendo a Sayomi y a Aoi por el pasillo del banco hasta llegar a la salida trasera del lugar mientras que Angelo nos seguiría por detrás y nos alcanzaría. Allí fuera estaba el coche que había colocado Sayomi para que pudiéramos irnos... Pero antes de que nos pudiéramos meter en el coche... ¡Empezó a ocurrir un espectáculo!

¡Wooooh!- exclamaría viendo más que impresionada y alucinada de la entrada de esos personajes disfrazados de colores, por mucho que la ropa pareciera rota por alguna pelea... ¡Que volteretas más chulas, que entrada más impresionante, CUANTOS COLORES! Mientras hacían la entrada y esas posturas, me verían intentar imitar sus poses con adulación infantil... Y obviamente tampoco entendiendo que ese grupo venía a detenernos.

¡Guau, ser una pasada!- terminaría diciendo una vez terminaron de presentarse los Héroes Multicolor, acercándome a ellos con ilusión mientras que Angelo decía que salieron heridos enfrentándose a una villana nivel Tartaro, y ellos decían que faltaban un par de ellos... ¡Jo, ahora quería verlos a todos juntos!

¡Heroes Multicolor ser chulos mucho!- diría a ellos acercándome y mirándoles ilusionada -¡Piruetas ser guays, y trajes ser chulos! ¡Jess querer traje igual para amigos! ¡Querer conocer Bullet y Pink también! ¡Espero Bullet y Pink estar bien y poder conocer!- sonriendo como una niña, miraría a Sayomi que estaba diciendo algo de acabar rápido con ellos -¡Doc hacer foto Jess y Heroes Multicolor, Jess querer foto! ¡Por favor, Jess querer posar juntos, y luego foto con Doc también, porfaaaaaa!- diría con toda la inocencia e ilusión que una niña pequeña podría expresar, mirando tanto a Sayomi como a los héroes -Jess bailar, conseguir dinero para comprar comida Jess y amigos, tener amigo nuevo Angelo y ahora conocer Heroes Multicolor... ¡Ser mejor día poyotástico Jess vida!- clamé sonriente y feliz.

Bueno, lograron salir ilesos del lugar pero no se estaba relajando en absoluto pues les esperaban fuera todos unos esperpentos que daban más lástima que respeto y... Jess. Esa chiquilla estaba emocionada, ¿Podría usarla? Como poco les daría a los otros dos unos segundos de oro en los que poder actuar para acabar con estos pobres individuos. Su sonrisa despreocupada volvió a cubrir la cara de Aoi, sacando el móvil y palmeando la espalda de Jess. - ¡Venga ve! Yo hago la foto.

Miró a los Power Ranger marca blanca de supermercado y les animó. - Va, haced feliz a una linda y dulce fan. ¡Juntaos un poquitito más para que todos quepáis en la foto! ... DECID QUESOOOO Comenzó a enfocar e hizo una ráfaga de fotos para la pequeña Jess mientras rezaba por que Sayomi y el acoplado empezaran a planear rápido sus movimientos porque la tontería no les daría mucho más que la pobre sorpresa inicial. 

 -Esperen, ¿qué? -el hombre de rojo inmediatamente se mostraría confundido por como se desarrollaron las cosas, con la pequeña Jess entusiasmada por ellos mientras uno de los principales responsables del golpe la invitaba a ir por esa foto. -. ¡E-Esperen!

 -¡Red, es solo una niña! ¡No podemos hacerle daño! -comentaría Blue, notando la complicada situación en la que estaban.

 -E-Es imposible... ¡Seguramente ella no forma parte de esto, sí! ¡Solo la están usando para sus malvados fines! -aseguraría el líder del grupo en un intento de comprender aquello, siendo entonces cuando Jess ya se habría acercado a ellos y Aoi había preparado su teléfono para tomar las fotos. -. ¡Este no es momento para...!

QUESOOOO 

 Pese a todo, los tres héroes posarían de forma coordinada y claramente planificada para el momento en el que Aoi empezó a tomar fotos una vez Jess se acercó a ellos. Ver la escena haría a Angelo soltar una leve risa mientras Sayomi solo suspiraba pesadamente, siendo esta última quién caminaría hacia el auto de huida para abrir el compartimiento trasero y empezar a lanzar allí el dinero.

 -No pienso tomarme una foto con un hombre en mallas ajustadas -se excusaría la científica, esperando que Jess se conformase con sus propias fotos.

 -Esperen... ¡Tú eres esa villana que detiene cosas con la mirada! -le señalaría Green, dejando de posar al percatarse de que entre los criminales había alguien importante. -. ¡Red, hay que acabar con ella ahora: es muy peligrosa!

 -¡Es cierto! -reaccionaría Blue, mientras el hombre de rojo continuaba haciendo poses con Jess.

 -¡No puedo... decepcionar a una niña...! -en ese momento "R of Red" estaba luchando una de sus mayores batallas... No decepcionar a un fan.

 -Qué conveniente, pero ya tenemos que irnos... -declararía Sayomi, dirigiendo una mirada a Angelo.

 El hombre solo suspiraría suavemente mientras hacía un gesto de desinterés con los hombros, instantes antes de moverse a un velocidad imposible de seguir por el ojo humano, apareciendo tras el trio multicolor para tomar a Green de un brazo y arrojarlo ferozmente hacia un auto cercano. Sin dar tiempo al resto del equipo a reaccionar, daría un puñetazo ascendente a la barbilla de Blue, haciéndole volar hasta estrellarse contra el techo y entonces caer nuevamente al suelo, inconsciente.

 -¡No, chicos...! -el líder no pudo hacer nada. Para cuando se dio la vuelta para confrontar al hombre de cabello bi-color, este le habría encajado el puño en el estomago, haciéndole perder el aire y dejándolo en el suelo retorciéndose mientras recuperaba el aliento.

 -Perdón, pequeña: pero ya habrá otro momento para tomar más fotos -le diría Angelo a Jess con una agradable sonrisa, dándole unas palmaditas en la cabeza. -. Ahora deberías llevar esa gran bolsa al auto para irnos. ¿No es así, Doc?

 Sayomi se limitaría a asentir, entrando al auto en el puesto del conductor para preparar la huída.

Perfecto, aquello había sido coordinación. Satisfecho mientras el nuevo integrante acababa el trabajo, bajó el móvil y corrió hacia el coche  para tirar en el maletero las bolsas que él mismo llevaba. Todo ocurriendo a la vez que aquellas pobres almas heroicas recibían una paliza. - Vamos Jess, sube, te enseñaré las fotos. Movió en su mano el dispositivo y le sonrió como quien le da un caramelo a un chiquillo como trampa. De esa manera a la niña le sería más fácil olvidarse de lo real para centrarse en las maravillosas fotos.

Se metió en el coche, hizo hueco para Jess en la parte de detrás y dejaría que el tipo se sentase de copiloto para que Sayomi lo juzgase por si misma.

- Mira Jess, ¿te gustan? Le enseñaría las fotos en cuanto estuvieran todos a salvo dentro del auto y ya en marcha. La cara de Aoi se había relajado con esto último y parecía ser el simpático ser de siempre, no como ahí dentro que por poco y con la mirada podía matar. -Podemos pedirle al jefe que las imprima en grande y así las colgamos en tu habitación. Le palmearía suavemente la cabeza, dejando que la niña mirase las fotos con calma. Habiendo un extraño en el coche, se abstuvo de decir el nombre de Zeus o Gabriel y esperaba que Sayomi se hubiera dado cuenta de ello, aunque como mujer adulta y reservada que parecía, no dudaba de que posiblemente pensase como el. 

Mientras que los Power Ranger hablaban, yo les miraba con completa inocencia sin tampoco entender del todo lo que comentaban... contenta de todas formas cuando parecía que Aoi nos iba a hacer fotos -¡Siii, foto foto foto!- iría diciendo sonriente, posando junto a los héroes con mis propias poses -¡Quesoooo!- diría también más feliz que una perdiz.

Al escuchar a Sayomi, no pude evitar decepcionarme -¡Pooooooorfiiiiiiiiii!- le diría mirándola con ojitos tiernos a ver si con eso la convencía. Aunque luego vi al de verde señalar a Sayomi... y sonreí contenta -¡Doc también ser famosa!- diría contenta... aunque aún estuviera posando con Red -¡Jess no decepcionada, Heroes Multicolor molar mucho!- le diría a Red sonriéndole con alegría y dulzura. De esas sonrisas que te hacen saber que has hecho un buen trabajo...

Antes de que Angelo les pegase a todos y los dejase K.O de un golpe -¡Noooo, Héroes Multicolor!- exclamaría al ver como les iba metiendo puñetazos y lanzando a todos para irnos... ¡Nooooo, yo queria seguir haciéndome fotos y hablando con ellos, eran muy chulis! -¿Porque pegar Héroes Multicolor? ¡Si ser mucho amables!- preguntaría, acariciando la cabecita del rojo y haciéndole pat pat mientras que Angelo me respondía...

Al menos hasta que me dijeron que tenía que subirme -Jess ir... ¡Jess querer ver Héroes Multicolor otra vez, y con Bullet y Pink! ¡Jess esperar estar vosotros bien, chao!- como si nada me despediría de ellos... ¡Si me decían de llevar la bolsa al coche, yo debía de dejarlas en el coche, sobre todo si es lo que quería Sayomi que hiciera! Me subiría al coche y me pondría al lado de Aoi, viendo sus fotos -¡Si, gustar mucho!- respondería a lo de las fotos... antes de escucharle más -¡Guay, fotos grandes, fotos grandes!- exclamaría feliz pensando en decorar mi cuarto con las fotos. Pobrecitos los Héroes Multicolor... ¡Pero que noche más guay!

 Aquel pequeño momento acompañado por las palabras de Jess llenarían de felicidad el corazón de Red, un líder que claramente se esforzaba por mantener una imagen para su grupo que inspirase a los más pequeños: tal vez fue por esa pequeña satisfacción que pudo mantener la consciencia luego de aquel terrible golpe, sintiendo las palmaditas de Jess sobre su casco antes de que esta empezase a retirarse con el resto.

 -Ustedes... ¡Malvados! ¡Involucrando a una pequeña inocente en sus crímenes...! ¡Juro que los detendré a todos! -gritaría mientras el grupo terminaba de subir al auto tras cargar el dinero, siendo que Sayomi no tardaría nada en poner en marcha el vehículo para salir de allí a toda prisa.

 Al salir por la parte trasera pasarían junto a un par de patrullas que iban en dirección al banco, siendo gracias al diseño oscuro del auto y la adrenalina del momento que los oficiales ni siquiera se plantearon que pudiese ser ese el auto de los responsables del golpe.

 En todo caso, mientras Aoi se encargaba de entretener a Jess con las fotos, Sayomi se concentraba en conducir con la compañía del desconocido a su lado, a quién no tardaría en interrogar poco luego de haberse alejado del banco.

 -Reconozco un quirk peligroso cuando lo veo, y se que no me dará tiempo a atraparte con el mío antes de que hagas algo... Así que seamos directo con esto: ¿quién eres exactamente, y qué quieres? -preguntaría sin dirigir más que una mirada de reojo al hombre mientras conducía por las oscuras calles.

 -Cuanta desconfianza -bromearía Angelo, soltando una leve risa. -. Ya se los comentó Jess: estaba por atracar ese mismo banco, y dado que se me adelantaron pensé que podría darles una mano, y resultó que les simplifiqué mucho el trabajo, ¿no? -ciertamente, esa paliza a los héroes multicolor les quitó un peso de encima. -. Ando en la calle sin un sitio a donde ir: si tienen un sitio que ofrecerme a cambio de ayuda... Estaría encantado de aceptar.

Mientras dejaba a la niña disfrutar de las fotos, se centró en la conversación de Sayomi con el chico quien al parecer no tenía nombre aún. - La peque te ha llamado Angelo, ¿Es tu nombre supongo? Esperó respuesta. -Mi nombre es Aoi, supongo que buscas cobijo por lo que cuentas, el problema es que no está en nuestras manos la decisión. Suspiró. -Doc. ¿Se lo presentamos a el y que decida qué hacer? Tampoco es que tengamos mucha más opción, se encuentra en el coche con nosotros. Se cuidó en todo momento de no dar ni un solo nombre que no fuera el suyo propio, arriesgándose sí, pero ya qué más daba. Las cámaras le habían pillado de lleno en un banco. 

Yo estaría mirando las fotografías sonriendo... ¡Habían quedado muy chulas! -¿Jess haber hecho buen trabajo?- preguntaría con cierta curiosidad y con una gran sonrisa queriendo saber si, además de llevarme a un nuevo amigo, y unas fotos muy chulas después de conocer a los Héroes Multicolor, podía rematarse el día con unas palabras de que lo hice bien.

Entonces escucharía a la doctora decir aquello -¡Doc no decir eso, poder Doc ser poyotástico y Doc ser increíble! ¡Nada poder contra Doc!- diría, dándole mi voto de confianza a la doctora... ¡No tenía ninguna duda de que si Angelo y Sayomi peleaban, ganaría la doctora! Aunque eso tampoco importaba... ¡Porque aquí éramos amigos y los amigos no se peleaban! Yo iría escuchando con curiosidad las respuestas de Angelo -¡Angelo llegar y primero todo decir baile Jess ser excelente! Él decir yo dejar bailar porque él venir golpear banco... ¡Igual nosotros! Y Jess invitar ayudar... ¡Todos amigos felices poyotásticos!- diría contenta y satisfecha, complementando algo más lo que él dijo.

¿Angelo también estar calle? ¡Poder invitar casa!- diría contenta... aunque al ver que Aoi también hablaba de eso, me callaría y dejaría que ellos hablaran de eso. Es verdad, era casa de Gabriel... ¡Él nos diría si le deja estar o no! -Angelo, ¿que hacer quirk? ¡Ser chulo! Momento aparecer momento desaparecer otro sitio... ¡Ser guay!- preguntaría con curiosidad, mirándola con ojos ilusionados queriendo saberlo.

 -Oh, no me he presentado con ustedes, ¿no? -señalaría el hombre cuando Aoi preguntó por su nombre. -. Sí, ese soy yo. No es que no pueda conseguir techo y comida en otra parte, pero siempre he pensado que nunca esta de más estar acompañado -aseguraría.

 Lo que comentaba Aoi era cierto: si bien Angelo había demostrado sus grandes capacidades, y parecía tener cierto objetivo en común con ustedes, era el líder de aquel espontaneo grupo el que tenía la última palabra.

 -Precisamente es la única opción que tenemos: no parece tener intenciones de matarnos si rechazamos su oferta, pero no quiero tentar nuestra suerte... -respondería Sayomi, escuchando entonces como Jess preguntaba a Angelo sobre su poder: naturalmente, la científica prestaría especial atención mientras le veía de reojo.

 -Bueno, es más complicado que eso. No es que desaparezca, ¡es que me muevo muy rápido! También tengo mucha fuerza, resistencia... ¡El carisma es natural! ¡Ja, ja, ja!

 Pese a lo orgulloso que se escuchaba Angelo hablando de sus capacidades, y seguramente lo mucho que le molarían a Jess, la expresión de Sayomi decía que no era el tipo de persona que más le agradase.

 En todo caso, luego de haberse alejado de la atención policial podrían dejar la ciudad del arraco y tomar camino hacia la guarida.

 Luego de un largo recorrido en auto, esquivando oficiales y la mirada del público, llegarían a un sitio cercano donde podrían dejar el auto y llevar entre las sombras el dinero a la guarida.

 Al abrir la puerta, se encontrarían el bar siendo atendido por Keitaro, quien les recibiría con una mirada curiosa al ver una cara nueva 

 -Fiu... este sitio no está nada mal -comentaría Angelo 

 -Parece que les fue bien... -se limitaría a decir el bartender.

Estaría escuchando con atención las palabras de todos en general, más que contenta después de todo lo que habíamos hecho -¡Jess esperar Gabriel aceptar Angelo! ¡Muchos amigos juntos!- diría contenta sobre el asunto de si el jefe nos daría el permiso o no para quedarnos a Angelo. Aparte, escucharía a Sayomi decir que esa era la única opción que teníamos... o algo así que realmente no entendí.

Después de eso, le preguntaría sobre que quirk tenía -¡Guau, Angelo tener muchos poderes a la vez! ¡Ser mucho guay!- diría contenta, aunque aún mirándole con curiosidad -¿Donde estar "pero"?- preguntaría entonces seguramente para su sorpresa, aunque yo seguía sonriendo de normal con simpatía -Doc Sayomi siempre decir cuando yo preguntar porque yo gomitar usar quirk "Gran quirk siempre tener gran pero"... ¡Y Doc Sayomi nunca equivocar!- diría con curiosidad, mirándolo fijamente con una sonrisa por si respondía.

Luego del viaje en el que yo me quedaba embobada viendo las lucecitas de los coches de policía y de aparcar, me ofrecería a llevar todas las bolsas que habían... ¡Aunque pudiera ser incómodo, yo podía y quería ayudar! Y si no me dejaban, minimo llevaría la bolsa enorme que me dieron la primera vez, y trataría de llevar las bolsas de Sayomi... y tomándola a ella de la mano por supuesto. Al ver a Keitaro, saludaría -¡Hola Keitaro!- diría sonriendo, soltándome para acercarme y darle un abrazo de saludo al camarero... ¡Abrazar es lo que hacen los amigos! -¡Golpe banco ir poyotastico! Jess poder bailar para ayudar, ¡todos mirar! Sayomi y Aoi coger bolsas y yo llevar. ¡Y Jess conocer y traer nuevo amigo! ¡Y hacer fotos con Héroes Multicolor, gente de color muy guay!- le explicaría a Keitaro sonriendo con alegría -¿Estar Sora? ¡Querer ver también! ¿Vosotros también misión ir poyotástica?- preguntaría al final con una gran sonrisa.

No dijo nada más sobre el tema en el trayecto de vuelta, ¿Había algo más que comentar? Se dedicó a jugar con Jess al veo veo con cosas de la carretera para entretenerla mientras llegaban a la guarida. Los poderes de Ángelo eran cuanto menos peligrosos, rapidez, fuerza y resistencia. Era como un Ferrari blindado con un guardabarros de pinchos que podía arrasar todo en un segundo sin que te dieras cuenta. Eso no era algo con lo que meterse y menos con la diferencia de poderes que tenían actualmente. Dejó caer las bolsas y su mochila, comenzando a ordenarlas para que no cortasen el paso de nadie y el lugar se viera pulcro. Parecía acostumbrado a esas cortesías.

-Oh, ¿No has acompañado en misión a nadie? Fue lo que dedujo de ver a Keitaro en la barra mientras trabajaba en dejar las bolsas bien colocadas. Al terminar, le puso la mano en la cabeza a Jess y le sonrió. - Tienes razón, siempre hay un pero. Hasta yo lo tengo. Guiñaría un ojo en señal de complicidad y le regaló una sonrisa a la niña antes de sentarse en la barra indicándole que le había escuchado, no le había contestado a la niña hasta ahora pues no quería abrir conversación sobre eso en el coche ni mucho menos. 

Sacaría el móvil y le enseñaría la mejor foto de Jess posando a Keitaro. -¿Podría hacerme fotógrafo y todo, eh? Se echó a reír levemente antes de guardar el móvil después de que el chico lo viera. Podía notarse que el humor de Aoi ese día era muy diferente al del anterior, posiblemente por el puro cansancio y la situación estaba apático y más serio de lo que él mismo era habitualmente. -A ti que se te da tan bien hacer cafés, ¿Sería mucha molestia que me hicieses un Lungo? Sin azúcar por favor. Miraría a Ángelo y lo invitaría con un gesto a sentarse junto a el en la barra. -Keitaro, ¿prepararías algo para el? Si gustas de ello, claro. No quería condicionar a nadie a hacer algo que no quisiera y se podía notar por su tono y su forma de actuar que no le gustaba ordenar si no pedir sin garantías de recibir. -¿Hace mucho que delinques?

 -Ssshh... Eso es un secreto -respondería el hombre a la duda de Jess sobre el "pero" de su quirk, guiñando el ojo con una sonrisa.

 Ya en la base, el bartender escucharía con genuina curiosidad todo lo que le comentaba Jess, entendiendo la presencia de Angelo en aquel sitio pero mostrándose algo confundido cuando le habló de tomarse fotos con héroes.

 -Fui con Sora a conseguir contactos, pero acabamos rápido y yo regrese a la guarida a traer unas armas que conseguimos; ella se fue a una cita con alguien que conocimos durante la visita al mercado negro, pero ahora debe estar haciendo unas compras por la ciudad -explicaría el chico con naturalidad, antes de que Aoi se le acercase a mostrarle las fotos. La expresión de sorpresa del chico seria genuina, sin pensar realmente que podrían detenerse en pleno atraco a tomar unas fotos, aunque al reconocer a ese grupo de héroes su expresión volvería a una más habitual, entendiendo lo fácil que pudo haber sido convencerlos de que posasen para unas fotos con una niña.

 -Oh, tranquilo: no soy amante de las bebidas -comentaría Angelo cuando Aoi le ofreció pedir algo, siendo que Keitaro simplemente asentiría y se pondría a preparar la bebida del peli-azul mientras este sacaba conversación con el pelirrojo. -. Bueno... La verdad es que retomé hace poco. Estuve un tiempo sin cometer crímenes porque alguien me tenía puesto el ojo encima, pero ya me hice cargo y puedo volver a buscarme una vida por mis propios métodos, ¡Ha, ha, ha!

Miraría a Aoi con curiosidad cuando le hizo esa pregunta al camarero -Keitaro ir junto Sora a hacer cotactos... ¿No acordar? ¡Jess poder ayudar memoria!- diría sonriendo respondiendo la pregunta por Keitaro, aunque él también le respondería, aunque luego miré al camarero cuando decía que estaba haciendo Sora -¡Sonar plan divertido! No saber que ser "hacer compras", pero sonar poyotástico. ¿Quien ser alguien que conocer?- preguntaría y comentaría con una sonrisa, por si él podía responder.

Me sentiría contenta de ver que las palabras de la doctora eran verdad, como Aoi me decía que tenía razón, y Angelo me decía que si tenía pero era secreto... ¡Entonces había acertado y Sayomi tenía razón! ¡Tener razón era muy genial!

Luego de eso, disfrutaría de enseñarle a Keitaro las fotos que me hice con los héroes, posando la mar de divertida junto a ellos con una gran sonrisa -¿Jess poder probar café?- preguntaría con curiosidad... siendo que seguramente la doctora diría un rotundo "no", porque eso sería lo que menos necesitaba: un chute de energía -Jiji... Ser palabra graciosa. Luuuuuungo- diría divertida sin saber del todo que era eso, pero decirlo y como sonaba era gracioso.

Escucharía con curiosidad a Angelo hablar de si mismo, mientras andaba dando vueltas un poco hiperactiva -¿Ahora Jess que hacer?- preguntaría en general a todos con curiosidad. Era de noche, técnicamente debía de irme a dormir supongo... Pero tampoco fui a dormir porque tocaba robar... ¿Entonces que haría? -¿Jess poder jugar fuera? ¡Jess nunca poder jugar fuera con noche! ¿Tener pelota o juguete que Jess poder jugar?- preguntaría con curiosidad, aunque sobretodo mirase a Sayomi, que era la que sentía que debía de darme permiso para esas cosas.

Asentiría a Keitaro y reiría un poco. - Lo preguntaba ya que los veía tan acaramelados que no pensé que seríais fáciles de despegar. No lo decía con nada de malicia, al contrario, le parecían tiernos en cierto modo aunque la primera reacción fue muy fuerte por la situación en la que se encontraban. -¿Um?... Café... Hmh. Con lo hiperactiva que parece, a lo mejor la deja dormir más rápido de lo que uno cree. Aunque era algo que no recaía en el por lo que dejó que Sayomi respondiera a la niña.

Escuchando a Ángelo, algo le salió de ojo. -Tienes carisma y una cara bonita. Solo tienes que ir a Kabukicho y entrar en un host club a pedir trabajo... A no ser que tu alma sea tan negra que adores delinquir. Sonreiría divertido mientras le daba un sorbo a su Lungo. - Cosa que sería muy interesante y hasta divertido. Y no mentía, aunque no era para nada su tipo ideal de conocido. Las personas sin alma eran útiles.

Jess entonces quiso ir al parque, ¿cuanto hacía que no pisaba uno? le daba pena la pequeña, parecía muy ilusionada por ello así que se terminó el café y le puso la mano sobre la cabeza con gentileza mientras miraba pidiendo permiso sin decir nada a Sayomi. -Solo será un rato, la niña lo merece.