Partida Rol por web

Bueno, sin duda era un muy buen discurso motivacional el que se marcaba Gabriel/Zeus, pues rápido se transformó en el.
-Descuida Sora, es cansancio no heridas. Y menos mal, no quería volver a comerse una de esas grotescas cosas... -Estoy listo, Zeus. Se puso la mochila a la espalda y vio como Sora se despedía de Keitaro. 

-Sora, tú y yo somos poderes muy contrarios... Que pueden ser útiles usados con cabeza con mucha eficacia en caso de necesitar unirlos. Aún así lo mejor será gritarnos nuestro curso de acción aunque sea de manera clave para no anularnos el uno al otro. Le sonrió, no dudaría en compartirle durante el viaje algunas sugerencias sobre palabras clave o gestos que utilizar en caso de necesidad, así como ideas de como entrelazar sus poderes y que fueran efectivos, tal y como crear nubes de vapor que cegasen la vista por ejemplo.

 - Fue quién nos ayudó a escapar... - respondería Sayomi cuando Jess le preguntó por la presencia de Gabriel en su antiguo hogar.

  - Si bien nada impedía que lo intentase, no podía correr el riesgo de agotar por completo mi cuerpo existiendo la posibilidad de que aún con mi ayuda el héroe de seguridad pública impidiese que se los llevasen - explicaría Zeus ante la otra duda de la niña. - Sin mencionar que de haberme mostrado en esta forma me habrían reconocido y sabrían que iba a por ellos, perdiendo el factor sorpresa en nuestro ataque... No hay dudas de que perdí aquella batalla poco luego de empezar, pero tampoco las hay de que ganaremos la guerra una vez lleguemos al laboratorio.

 Por otro lado, parecía que Sora no tenía absoluta confianza en el método de transporte que podría tener Zeus en mente, algo que el enmascarado entendería pero de inmediato aclararía.

 - Nada de eso: cuento con un método para trasladarnos que será más rápido que ir en auto, y todo sin la necesidad de hacer uso de mi quirk parasitario - aseguraría con un tono amable que buscaba transmitir confianza y seguridad, pasando a juntar sus manos delante de él cuando escuchó a Aoi comentarle a Sora sobre como organizarse. -. Excelente propuesta: tendrán tiempo de comentar los detalles en el camino, aunque yo mismo ya tengo un plan de como nos distribuiremos en el ataque, uno donde tomé en cuenta ese factor y su potencial.

 La doctora se limitaría a acariciar la cabeza de Jess con una mano cuando preguntó sobre lo que debían recuperar, sabiendo que de explicárselo no lo entendería ahora, sin mencionar que el grupo ya tenía muchas cosas en la cabeza para pensar también en sus asuntos personales.

 Ya con todos preparados, Keitaro desearía suerte a todos y se despediría con una mano levantada mientras dejaban el bar. Una vez afuera, no tendrían que esperar más de unos segundos antes de que Zeus demostrase su medio de transporte perfecto, dando un par de pasos por el callejón antes de empezar a subir por una plataforma que a sus ojos era invisible: al poner en pie a menos de medio metro del suelo este se detendría en el aire, generando una onda que recorrería una superficie que se extendía como un disco varios metros hacia adelante, misma que se repetiría por cada paso que daba sobre ella.

 - Adelante: es totalmente seguro -les invitaría el enmascarado tras pararse en medio de la plataforma invisible, esperando que todos fuesen subiendo. Una vez estuviesen todos encima, la plataforma temblaría un poco antes de "despegar", empezando a elevarse a una velocidad adecuada para que nadie perdiese el equilibrio pero a la vez no perder mucho tiempo, superando rápidamente la altura de los edificios de la ciudad antes de que Zeus volviese a adoptar esa pose con las manos en las espaldas a la vez que miraba hacia una dirección: en ese instante, la plataforma empezó a moverse.

 Cualquiera podría pensar que simplemente estaban volando, pero todo apuntaba que era algo un poco más complicado.

 - Oye, oye: ¿esto no podría delatarnos a... todo el mundo? -preguntaría Angelo, con una sonrisa que mezclaba emoción y preocupación.

 - Contamos con el factor tiempo: a esta altura para los pocos que puedan vernos no seremos más que unas silueta borrosa desplazándose a gran velocidad. En todo caso, no es como que durante el ataque al laboratorio podamos ocultarnos mucho -concluiría.

 Todo parecía apuntar a que llegarían a su destino sin problemas, siendo que mientras Angelo buscaba cuidadosamente uno de los bordes de la plataforma para sentarse y admirar la ciudad, Sayomi permanecía sentada más cerca del centro sujetando a Jess. Desde esa altura se podía apreciar gran parte de la ciudad, iluminada por miles de luces que opacaban a cualquier cielo estrellado.

 Pasados los minutos, nubes negras empezaron a juntarse anunciando llegada de una pronta lluvia, pero antes de correr el riesgo de acabar empapados la plataforma empezaría a descender habiendo llegado a su destino. Casi a las afueras de la ciudad, podrían descender sobre un tejado desde el cual observar el entorno.

 -Hemos llegado -anunciaría Zeus, con un tono de satisfacción mientras se paraba al borde del establecimiento para observar su objetivo. -. Es momento de acabar lo que ellos empezaron.