Llego a las gradas y busco con la mirada a mi hermano. La Debora me ha ido detrás todo el camino, no se porque la guarra esta me sigue, pero tampoco me paro a darle conversación. 

Que se joda, no es mi amiga y que no espere que le invite a un cubata porque me venga detrás.

Veo que Paco se acerca cojeando y arrugo la nariz. Pero es que encima le sigue la rarita de tercero, esa que se sienta sola al fondo de la clase porque nadie quiere hablarle. La verdad que la chica es mona para estar con alguien como Paco, pero algo raro tendrá si se conforma con él.

-Mi botelleo lo tiene mi hermano, no sé dónde coño está Borja... Así que a mi no me digas...- digo de mal humor. Yo quería una copa ya.

La puta de la Mari Tere ni me espera. Ya le podrían dar por culo si no fuera una estrecha. Corría hacia las gradas como si repartieran gorras o algo. La engancharía de los pelos y le cantaría las cuarenta, pero mejor dejarlo para luego. A ver si Borja ya ha llegado con el botelleo. Y es cuando veo a Paco, con una rubia muy sonriente al lado. Creo que esa me suena de clase... O a saber...

Escucho la bordería de la Mari Tere y ahí la cara se me ilumina. Hostias que venía el buenaco de Nico... Ese me lo trinco, sí o sí...

-Pueh el Borja se ha ido a su casa a poh el botelleo, sabeh... Asin que no tardará... Pohque si me hace ih a buscale, se va a enterah el puto pringao...

Ohtiah, pijo, si ya le dije yo que era mucha botella pa el. Pero como eh un dehconfiao... Ande habeih ido, que no oh eh vihto en el Badulake. Y loh demah andehtán?

Intento no mirar la cara de Estefi. A ver si con un poco de suerte les salta al cuello y terminan las tres en comisaría y yo tranquilito me termino de emborrachar. 

Estefí mira con recelo a ambas, al ver que tus "amigos" son dos chicas. Y entre las dos chicas, se encuentra la Reina. Te agarra bien del brazo, acercándose.

- Mi Paco está lesionado, asi que no puede seguir vuestro ritmo. Pero yo me quedaré con él - dice ella, decidiendo.

El ritmo que sigo lo decido yo. Vuelvo a la conversación con las dos jamelgas. Entonhceh sabéih cuanto má o menoh llegará el Borja?

-Poh, acho, s'acaba de ih, echa cuentah... Menudo impaciente, que te invite tu novia a unoh cubatah mientrah- le señalo a la rubia. Se pierde y encima viene exigiendo. Bien le podrían dar por culo, ¿qué dónde nos hemos metido? Cuando se ha largado... La mala suerte era haberlo vuelto a encontrar.

¿La rubia repeiná esta me está mirando mal?- miro de reojo a la tía que está del brazo del Paco.- Como la enganche de los moños, va a mirar mal a quien yo me se...

De mirar a las chicas, Estefi pasa a mirar a Paco, un poco seria. Parece que no le ha gustado nada que le "quites autoridad".

- Pero tienes el tobillo mal, Paco. A un tio mio en el pueblo tuvieron que amputarle un pie porque se lo torció huyendo del cabrero local, y lo dejó estar. Pero a lo que iba...- niega- Ellas irán a los suyo - vuelve a mirar a las chicas- Habiendo otro chicos solteros...No te preocupes por el alcohol, que yo te puedo dar como bien te ha dicho tu amiga...- te agarra bien.

Buena idea, tráeme uno en lo que ehperamos al Borja... y máh yelo pal pié.

Le digo a Estefi con una gran sonrisa en la boca.

Borja había venido un poco nervioso todo el camino. La eslava había accedido a ir con él. Tras coger el botelleo de su piso, se dirigió con ella para las gradas. Jaime tambien había ido con ellos, pero con el tenía confianza y menos mal que pudo hablar con el por el camino, en lo que volvían. Sino hubiera sido un poco incomodo solo con la eslava.

Al llegar busco a Debora y el resto. Con tanta gente todos de blanco, parecía tarea dificil. Al rato parece que los ve a lo lejos, y efectivamente. Paco estaba del brazo de la chica de tercero que a veces pasa por clase, y que parece no tiene muchos amigos. Al final el mas tonto fue el que ligó. Si Paco puede, yo también. Si Debora no me hace caso pasaré página e iré a por otra. No puedo ser virgen eternamente.

- Hola....Ya eshta...- miro las bolsas y las dejo en el suelo.
 

Me siento en la grada, con mi tobillo en alto, la bolsa de hielo sobre él y mi cabeza sobre el regazo de Estefi. (si ella tiene a bien)

Mira Ehtefi, este eh Jaime, eh un fuera de serie!!! lo mejóh de la facultah, un hombre de palabra y amante de la familia. Y ehte eh Borja, que se ha pegao una jupa a traeh el solo lah bebidah por dehconfiao... aaaay zagalicoooo. Y ehta eh... Susana eh rusa (pero no de la mihma rusia) y viene tambiéh a primero, pero no sale nunca, así que eh su primera fiehta ehpañola. 

Ale, pueh a qué ehperamoh, a bebeh!!

Estefi queda que no cabe en sí del gozo, cuando ve que apoyas tu cabeza en su regazo. Y te acaricia el pelo de forma posesiva. No osa moverse de alli por ninguno de los motivos, así que saluda con la mano a los chicos que le presentas, y mira regular a Suzana y su delantera.

- Un placer...- dice entre dientes, y resoba más pelo.
 

Miro de reojo a Estefi, desde luego está tan loca o más de lo que decían los otros veteranos. A lo lejos veo a mi hermano y le saludo que se acerque. Él lleva mi botellón y, lo que es más importante, trae a Sergio.

-¡Hola Nico!- le doy un beso cariñoso en la mejilla.- Chicos, este es mi hermano, Nico... Está en tercero de arquitectura en la UCAM- le cojo la bolsa y la dejo en el suelo.- Y su amigo Sergio, son compañeros de clase...- pongo una sonrisa coqueta a Sergio y me acerco a darle los dos besos de rigor. Los poso de forma suave y apoyándome en sus fuertes hombros. 

Ay, madre... Que bueno que está...

El hermano de Mari Tere os mira, extrañado de lo variopinto de vuestro grupo. Va vestido de forma pija: con polo de ralph lauren y pantalones chinos, todo a juego y conjuntado. Acorde con todo, va bien repeinado.

-Buenas gente...- dice, mientras sus ojos recorren sin remedio los dos escotazos de Débora y Suzana.- Pues sí, muy buenas...

El amigo del hermano de Mari Tere parece mucho más sobrado. Lleva una camisa con un par de botones de arriba desabrochados y los picos de la camisa subidos en actitud chulesca.

-¿Qué pasa chicas?- les guiña un ojo. Parece ir sobrado de confianza y tira un beso a Suzana de manera descarada, como si de un estrella de cine se tratara.

Eh, Que pasa!!!

Digo saludándoles desde mi confortable pero esquizofrénico apoyo.

Mientras que Sergio te ignora, seguramente porque no parece prestaros mucha atención a los chicos, Nico te tiende la mano.

-Hola, tío, ¿la noche bien?

Con un gesto de "heeeelp" no visible para Estefi pero en un tono de completa naturalidad digo.

Algo loca para mi gusto*, pero interesante... Pieh fríoh (señalando al hielo sobre mi tobillo) y cabeza caliente (señalando la generosa cadera de Estefi)

Miro como mi hermano saluda a Paco. Siempre ha sido una persona muy abierta, hablándose incluso con los indeseados. Luego miro a Sergio y le hago la radiografía. Joder...- pero... Ahí andaba algo mal... ¿Le está mirando el escote a la zorra de la Débora? ¿¿¿Hola???

-¿Te pongo un ron cola?- me pego de inmediato a Sergio, poniéndome en el campo de visión entre él y la zorrona de la reina. Me doy prisa en servir 3 cubatas cargados y los reparto entre Sergio y mi hermano.- ¿Y qué tal la vuelta a la uni?- le sonrío coqueta a Sergio, tocándome el pelo.

Solo veo tetas. Tetas, tetas, tetas, y que señoras tetas. Las de la morenaza no están mal. Pero las de la que tiene pintas de guiri son épicas. Mari Tere, bueno, un perrito faldero, siempre es agradable saber que existe una alternativa B que siempre está ahi si en la noche no encuentro nada mejor. Pero esta noche tengo algo delante que es mucho mejor.

- Gracias, guapa - le digo a Mari Tere, con media sonrisa interesante. Que babeé por mi- Pss - le digo ante la vuelta de la uni.- Ha costado después del verano, Ibiza fué increible - bebo. Vuelvo a mirar a las dos ejemplares "peras con patas", y en especial a la que tiene una talla maxi. - ¿Y vosotras? Aún no se vuestro nombre.

Nico sonríe a Paco sin pillar bien de qué habla. Luego mira de reojo a Estefi y bebe del cubata que Mari Tere le ha pasado.

-¿Tú no bebes nada?- pregunta Nico a Jaime, extrañado y viendo que todos se echaron un cubata ya menos él.- Te invito si quieres...- le tiende el suyo sonriente.