Partida Rol por web

Cadaño nuestras espadas a Castilla ensanchan más

Una Taberna en Panamá

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10/11/2011, 00:29
Director

Tras pasar por aquélla pútrida isla de Cuba sin pena ni gloria, y ante la negativa de los adelantados que allí había- pocos, todo hay que decirlo- pensanste que Cuba era el lugar más aburrido sobre la faz de la tierra, pero no conocías Panamá...

Llegaste porque oíste en un Burdel de la isla decir a un tipo que en Panamá los hombres valientes con pericia en el manejo de las armas podían hacerse ricos rápidamente, pues Panamá era una ciudad creciente amenazada por indios que la atacaban constantemente y que el gobernador un tal Dávila, pagaba con plata a los que empuñasen un arma en defensa de la villa, pues se decía que los indios no dejaban construir ni que la ciudad creciera...

Ese tipo era un Hideputa!

Llevas semanas en Panamá y no es que no haya trabajo para un mancebo de tus posibles, sino que no hay trabajo para nadie más que de leñador o de artesano, trabajo que te repugna profundamente.

Tú no eres un parias, eres un hombre que alquila su ferro al que más pague en cada momento, pero ese momento en las Indias no llega.

En las tabernas se habla de grandes hazañas y expediciones en busca de oro, con hombres que vuelven ricos pero nada de eso es verdad, o al menos que tú sepas. Por lo menos de momento, ya casi has acabado con tu dinero en bebercio y joder que te pican los bajos de yacer siempre con la misma asquerosa fulana, sino encuentras quehacer pronto, tendrás que empeñar las armas para volverte de vuelta a España.

Estás de nuevo en la taberna, desgraciadamente, todavía sobrio pues intentas racionar el poco dinero que te queda, y ya no quieren fiarte pues el jodido Bartolo - el mesonero - es un cabrón muy listo y no se anda con chiquitas- se dice que tiene un hacha tras el mostrador para obligar a los parroquianos a pagar y echar a los que se pasan más de lo normal -.

Tu mesa está vacía, lo que es otro claro síntoma de que las fulanas también saben que estás sin blanca, esas perras detectan el dinero que un hombre lleva en el bolsillo tan sólo con mirarle.

A tu alrededor, un conjunto de la peor calaña de las Indias concentrado en un mismo lugar, pues los únicos que tienen trabajo y por ende, no tienen tiempo para perderlo , están trabajando y son la gente honrada, mientras que los maleantes por regla general o roban o pendencian o son también luchadores profesionales.

 

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10/11/2011, 16:08
Director

De Sevilla a Canarias, allí una parada de casi una semana y vuelta a embarcar. Pensabas desembarcar en Cuba pero una tormenta os hizo desviaros, casi no lo contáis, pero el buen hacer del capitán un tal López de Haya, salvo el barco y la vida de cuantos hombres y bestias iban a bordo.

Así que tuviste que cambiar el plan original, ya no ibas a Cuba sino que te viste en Panamá rodeado de lluvia y de barro en una cochiquera de cuatro chozas a la que llamaban ciudad.

La cerveza da asco, el vino no existe, la carne está dura y no has visto un cereal en las dos semanas que llevas en Panamá, para colmo no hay oficio para un hombre de tus aptitudes, todo lo más, es para cargar fardos.

Esta es la ciudad de los artesanos, los carpinteros y demás mierda. No para soldados, pero cuando habías perdido la esperanza y estabas ya meditando la forma de encontrar un pasaje de vuelta a España- aunque tuvieses que ir en un cofre - has escuchado en uno de los puestos de cuero del mercado- si se puede llamar mercado a esos cuatro puestos mal colocados que se caen a pedazos - que un tal Pizarro busca hombres, suele ir uno de sus hombres de confianza por todas las tabernas y posadas de Panmá buscando hombres.

Según has oído también , no está teniendo mucha suerte y parece que muy pocos son los que quieren enrolarse con aquél tipo. Ahí ves una oportunidad para tu futuro, aunque no tienes muy claro si ese tipo no será un loco que hará que maten a todos sus hombres o peor aún: que no cojan botín.

Así que aquí estás, en una de esas tabernas en la que está lo peor de la Villa, sentado en una mesa en un rincón en la penumbra, tomando una jarra de una cerveza floja calentorra y esperando enterarte de algo.

Notas de juego

Sólo al director de momento.

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10/11/2011, 20:02
Claudio Domínguez
Sólo para el director

-Aqui estoy en una tierra lejana, he dejado lo poco que tenía es España para aventurarme en esta tierra y poco a faltado para costarme la vida. He oido que un tal Pizarro está buscando gente, pero según dicen no es una persona de mucho fiar, pero al fin y al cabo para eso estoy aqui, por eso me alisté, para empezar una nueva vida, y eso siempre cuesta trabajo al principio.- En eso andaba pensando Claudio mientras se bebía una cerveza en una taberna. El viaje en barco lo dejó bastante mas escuálido de lo que es en condiciones normales. No obstante levanta la vista de la jarra de cerveza, escupiendo a un lado, no está muy buena, y pone atención mirando y escuchando dentro del local para localizar a alguien que esté en la misma condición de él, o en todo caso localizar a alguien que le informe a donde se tiene que dirigir para alistarse en el grupo de Pizarro.

Notas de juego

Si necesito tirar por algo, dímelo.

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10/11/2011, 23:00
Ignacio Lopez de Ayala
Sólo para el director

- Este hidepu de calor me esta matando, y fablando de matar, y de hidepu, el comerciante vendeaperos, es uno de ellos y no de los pequeños. En Castilla con este dineral hubiese tenido para el doble de aperos y para el triple de fulanas y vinos. Que el destino no  me tiente muxo pues no tardando me regreso.

-Al menos las armaduras parecen guenas y el arcabuz no parece malo tampoco.

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10/11/2011, 23:20
Director

En ese instante entra en la taberna un tipo alto, de porte distinguido con una barba bien arreglada , espada al cinto y de aspecto de ser de los de buena familia, aunque sus ropas dejan bastante que desear: probablemente algún viejo castellano venido a menos. Si bien es ciero que ese hombre impone, pues se hace el silencio en la taberna o quizás sea que los parroquianos ya le conocieren o pura casualidad.

Tras él anda un tipo bien vestido aunque con peores modales aparentemente, eso sí, el hombre lleva una especie de pergamino que no habéis visto nunca, os fijáis en sus manos, son suaves y delicadas. Aquél tipo no es ni un artesano ni mucho menos un guerrero, sino más bien un escriba.

El hombre de aspecto guerrero empieza a hablar.

 

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10/11/2011, 23:24
Diego de Almagro

- Buen día tengan todas sus mercedes. Muchos de vosotros sabéis ya de mí, soy Diego de Almagro, español de nacimiento como casi todos vosotros. Al igual que muchos, me vine a las Indias buscando riqueza y gloria, y nada de eso he encontrado aún.

Se escuchan murmullos de asentimiento.

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10/11/2011, 23:57
Ignacio Lopez de Ayala

Ignacio piensa para sus adentros, que igual hay suerte y su mala racha y aburrimiento se acaban.

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11/11/2011, 08:43
Claudio Domínguez

Claudio asiente con la cabeza lo que dice este personaje que acaba de entrar en la taberna.-Tambien yo me encuentro en la misma situación que vos, y aunque no llevo demasiado tiempo aqui paréceme que no es esto lo que nos decian allá en la patria.- Exclama Claudio en voz alta y clara para que pueda oirme este hombre. No podía permitirse el lujo de dejar pasar oportunidades por malas que fuesen y le parecía que podría haber alguna en este asunto.

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11/11/2011, 10:59
Diego de Almagro

Toma un pergamino de los que lleva su escriba y tendiéndolo en alto grita para que todos puedan oirle y sin contestar a Claudio dice:

- HÉME AQUÍ CON UN CONDUCTO DE SU MAJESTAD CARLOS POR EL CUAL AUTORIZA A QUE SE FORMEN MESNADAS EN SU REINO, LLEVA LA FIRMA DEL GOBERNADOR DE ESTA VILLA QUE ADEMÁS AUTORIZA A QUE MARCHEN CON NOSOTROS CUANTOS HOMBRES LO DESEEN ASÍ COMO TODO EL MATERIAL DEL CUAL PUEDA DESPRENDERSE LA VILLA Y SEA NECESARIO EN ESTA EMPRESA. PUES ESCUCHAD, QUE FRANCISCO PIZARRO  DEL QUE MUY PRONTO OIRÉIS HABLAR Y YO MISMO, MARCHAREMOS CON TODOS AQUÉLLOS QUE QUIERAN PARTICIPAR EN AQUESTA EMPRESA EN UNA MARCHA ALLENDE EL MAR DEL SUR A UN LUGAR AL QUE LOS INDIOS LLAMAN PIRÚ, DONDE LAS FUENTES MANAN VINO Y LAS CASAS ESTÁN HECHAS DE ORO. ASIMISMO, COLABORA EN ESTA EMPRESA EL ADELANTADO HERNANDO DE LUQUE, UNO DE LOS PRIMEROS DE ESTA VILLA DE PANAMÁ-  murmullo generalizado, unos hombres niegan con la cabeza como sino creyeran una palabra y otros abren los ojos como platos ante la sola mención del oro.

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11/11/2011, 13:12
Claudio Domínguez

De nuevo vuelve a sonar el nombre de Pizarro. Todo lo que se ha dicho de este hombre no suena muy bien, pero Claudio desesperado por la situación, y encontrarse solo en estos lares, decide hablar con este hombre para apuntarse a esta expedición. Se levanta de la silla, y se dirije andando con paso resuelto hacia Diego -Mi nombre es Claudio Dominguez, soldado de profesión, aunque me pongo a su servio para cualquier cosa que sea menester.- Le dice Claudio mientras le hace un breve saludo con la cabeza.

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11/11/2011, 19:34
Ignacio Lopez de Ayala

-Heme aqui, Ignacio Lopez de Ayala, español de la villa de Vitoria, y deseoso de tocar casas de oro, et beber vino en las fuentes, jeejej.

-Apuntome a tal expedición.

¿ qué habrá para aquellos que se unan ademas de peligros et durezas?

 

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11/11/2011, 20:27
Diego de Almagro

Saluda a Claudio con la cabeza y le hace un gesto señalando a Queitano

- Bienvenido Claudio, ¡ Éste hombre será el primero en estampar su firma esta noche! y por todos los santos , espero que no sea el único - al escuchar a Ignacio sonríe visiblemente satisfecho - Y ya son dos los valientes, no hay oro para compensar a un hombre que lo da todo en una idea, pero a falta de algo mejor... ¡será oro lo que tengáis !- muchos hombres empiezan a aplaudir y algunos se levantan y se ponen a la cola para apuntarse -Estampad vuestras firmas ahora mismo y se os dará comida y cobijo mientras dura nuestra empres. Don Francisco dará una parte a cada peón, parte y media a cada ballestero o arcabucero y dos partes a cada caballero!!- dice al escriba - ¡ Queitano! que estos hombres estampen su firma.

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11/11/2011, 21:08
Ignacio Lopez de Ayala

-aquesta mi firma et mi arcabuz.

-¿ donde esta mi oro, et donde esta el punto de partida, et la fecha de la marcha?

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11/11/2011, 21:12
Claudio Domínguez

Voy detrás de Ignacio, me pongo delante de Queitano y me dispongo a firmar. -Me he visto obligado a aprender muchas cosa en mi vida, pero por desgracia el arte de escribir y de la lectura no han sido una de ellas. Así que aqui teneis mi pobre firma.- Cojo la pluma y empiezo a escribir y aunque he practicado mi firma en muchas ocasiones todavía no sale todo lo clara que debiera. Dejo la pluma en la mesa, y me pongo a mirar al resto de la gente que animada parece que van a alistarse a esta expedición. No obstante los treinta y seis años que tengo y todos los reveses que me ha dado la vida me dicen que esto huele a palabras de mercachifle a 30 leguas de distancia, y que mas vale que me ande con cuidado, pues ando en tierra extraña con gente extraña.

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11/11/2011, 21:40
Ignacio Lopez de Ayala

Ignacio saluda a ese que dice llamarse Claudio, y se presenta, a su manera:

 

-Pareceme que hermanados por la aventura estamos, sois de la vieja et gloriosa España, ¿verdad?. Aqui hay un siervo de la antigua Catilla y nueva España nacido en la villa de Vitoria.

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11/11/2011, 23:45
Queitano do Riveiro

Después de que el Sr. De Almagro leyera en voz alta las expectativas y recompensas de esta expedición, veo algunos guerreiros, alzarse de sus cadeiras y venir a hablar con el mesmo Sr. Don Almagro., que acto seguido y con un gesto hacia mi persona, me indica que alguno de ellos quedo convencido del trato, así pues me dispongo con mucho cuidado a sacar el pergamino donde están los ya rexistrados en questa aventura.
…Y usted es…. dice él: “Claudio Domínguez, soldado” acto seguido apunto su nombre y profesión que defiende, le corresponde una parte de lo pactado…f ff firrme aqquií… le indico el lugar donde ha de hacer la rubrica con mi dedo índice..y y usteted es….dice él: Ignacio López de Ayala, arcabucero, le corresponde una parte y media de lo pactado…igualmente le escribo su nombre y le hago indicación de donde ha de poner su estampa.
Según van haciendo lo que algunos llaman firma, le hago indicación de donde han de ponerse para que dejen espacio a algunos otros hombres mas que vienen a apuntarse a questa expedición. Popor favor hechechense a un lado y dedejen pasar a los de attràs.

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12/11/2011, 00:35
Claudio Domínguez

-De la vieja, gloriosa y decadente España vengo yo.- Le digo a Ignacio, un personaje curioso que me saluda un poco despues de haber estampado mi firma.- Desesperado me veo para tener que coger este trabajo, no se yo si no me he de arrepentir en demasía de haber dejado mi España, y a mi Berta.- Vuelvo a mirar por la taberna mirando el ambiente que se ha formado en un momento.- Mucho se ha hablado de este tal Pizarro ¿Que habeis oido de él?, pues por mi parte solo oí habladurías sin consistencia y de poco fundamento de que es un hombre de poco fiar, que sus locuras han costado la vida a muchos hombres, pero ya digo que son solo habladurías.

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12/11/2011, 01:05
Ignacio Lopez de Ayala

-Non cognosco a dicho zagal.

 

...adios mi España querida dentro de mi alma te tengo metia...

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12/11/2011, 11:50
Director

Mientras habláis , el tal Diego va de mesa en mesa irrumpiendo en las conversaciones ajenas, intentando un tipo de reclutamiento que se os hace harto agresivo, pues no se limita a quedarse de pie con esl escriba esperando a que la gente se aliste, en casi todos los casos es lo mismo, pregunta a los comensales si quieren ser ricos.

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12/11/2011, 11:52
Diego de Almagro

Se acerca a una de las mesas en la que un chico muy joven, está en brazos de una protituta muy gorda.

- ¿ Qué edad tienes muchacho ? - pregunta al joven

-Acabo de cumplir diecisiete señor- contesta el susodicho

- ¡ Ya eres todo un hombre ! ¿ conoces el oficio de las armas ? ¿ podrías blandir una espada o un arcabuz?- pregunta insistentemente

-no señor, mi padre es cantero y vinimos aquí en busca de una oportunidad, no conozco el oficio de las armas..- dice

- ¿ Tienes dos brazos y dos piernas y quieres ser rico chaval? - risotada general

-¿ y quién no ? - pregunta

- Claro, ¡ ese es el quid ! ¡ hay sitio para todos ! vamos muchacho, - señala el papel bajo Queitano - ¡ Estampa tu firma ahí mismo y yo te haré rico !

El muchacho sonrie, aparta a la gorda con el brazo derecho y levantándose corre a inscribirse.