Partida Rol por web

Podiais sentiros afortunadas.

Estabais en una carcel mugrienta y sobresaturada, los guardias os habian dejado algun moreton en el trasero pero no habian ido mas lejos. Ademas teniais una celda con una cama para las dos y la puerta cerraba bien cada noche.

En otras metian hasta seis chicas juntas, quitando la cama para que entraran mas o su puerta quedaba mal cerrada y sufria un accidente. Accidente era la forma en la que los guardias llamaban a las violaciones. En algunos casos eran ellos mismos los que causaban esos accidentes por diversion o previo pago, dejando a presos sueltos del ala de los hombres para que se desfogaran con las chicas.

Asi que, podiais sentiros muy afortunadas.

Xhara dejaba que Ava se quedara en el lado de la cama que quisiera, tenia suerte de que la hubieran puesto con ella pero la escamaba aquel trato de favor. Ella era una ladrona que habia metido la mano donde no debia, no una dirigente mafiosa o la hija de un politico para que la trataran tan bien.

Incluso tenian un bater propio, todo un lujo.

- Hoy no pienso salir al patio.- dijo por hablar de algo.- Despues de la pelea de ayer, seguro que hoy alguien quiere la rebancha.

Se colocó pegando a la pared, así se sentía más segura, aunque se irían turnando para ocupar ese lugar. Se puso el pelo tras las orejas mientras observaba aquella jaula, ¿por qué a ellas? No podía negar que estaba agradecida, era más seguro y más cómodo, pero puede que haya algo o alguien tras todo esto.

- Entonces me quedo aquí a hacerte compañía, necesito descansar.. estoy cansada.

Se estiraba mucho las mangas, como si escondiera algo.

- ¿Por qué nos habrán metido aqui a las dos? ¿Crees que quieren algo de nosotras?

Xhara se encogio de hombros.-Sexo no quieren, ya nos lo habrian reclamado.- dijo sentandose en esa especie de asiento que estaba pegado a la pared.- y otra cosa... no se me ocurre.

- Yo estoy aqui por robar en la casa de un senador, nada menos... yo pensaba que era la de un estafador, me confundi de piso, un error tonto.- Aseguro y despues sonrio.- Pero esto no esta muy mal, comparado con algunos sitios donde he dormido es hasta bueno.

- Por eso lo digo, esto está bastante bien para lo que hay. Al menos tenemos la puerta cerrada y no pueden entrar cuando les dé la gana.

Miró hacia la puerta unos instantes, pensativa.

- Vaya.. eso fue mala suerte..

Comenta acerca de la manera en la que entró en la prisión.

- A mi me delataron, quizás me hicieron un favor.

Sigue sin mirar a la chica, se pasa el puño de su jersey por la nariz, como si le picara.

- Mal gesto...- comento Xhara.-Intenta que no te lo vean. Si saben que tienes alguna... necesidad, te tendran pillada por las pelotas.- dijo rascandose la cabeza. Volvia a picarle el pelo, podia ser caspa o nervios... esperaba que no fueran piojos otra vez.

-El caso es que te vas a poner peor, temblores y eso, va ser mas complicado de taparlo.

Miró a Xhara cuando hizo aquel comentario cuando se rascó la nariz, que en verdad era que le picaba, pero parece que la había calado.. que sabía lo que era. Tendría que disimular mejor si no quería buscar problemas.

- Lo sé, pero lo tengo controlado.

Miró hacia el pasillo a ver si pasaba algún guarda.

- Lo peor ha pasado ya, no estoy tan.. como puedas pensar.

Dijo a la chica aclarándole.

- Si no puedo controlarme, hago esto

Se sube las mangas y le enseña los cortes, es su forma de calmar su ansiedad. Pero los enseña durante unos segundos, no quiere que se los vean bien. Ya están cicatrizados.

- No dirás nada.. ¿verdad?

La miró preocupada.

No le enseño nada que no hubiera visto antes. Levanto las manos como si se rindiera.- Eh, soy muchas cosas pero no delato a mis compañeros, menos cuando duermo con ellos.

- Bueno, secreto por secreto.- dijo asomandose por las rejas a ver si aparecia algun guardia, cuando se aseguro de que no se acerco a su compañera.- No lo flipes ni nada, ¿Vale? pero... me gustan las chicas... mas los chicos pero bueno, no se... creo que las dos cosas. Y no, no te he tocado ni pienso meterme mano mientras duermes, no voy de ese palo.

Escuchasteis pasos en el corredor y dejasteis de hablar. Eran pasos pesados y seguros de buenos zapatos. El olor a colonia de marca te decia que un pez gordo se acercaba. No era un abogado, al menos no uno de los que podiais pagar.

En un par de minutos estaba ante ti.

-Buenos dias señoras. Soy Patrik Lembert, director de proyectos del mejor canal de television de la tierra. Vengo a informarle que mi compañia las a comprado al penal y en brebe seran trasladadas a las instalaciones de un nuevo programa que hara historia. Es una oportunidad unica, el mayor premio en creditos jamas entregado, podran comprar su libertad, exclavos propios, todos los lujos y caprichos que quiera, ademas tendra la oportunidad de ser grandes estrellas... o morir ante una camara y ser recordadas por siempre.
 

Respiró tranquila cuando dijo que no diría nada sobre su pequeño problema, pero cuando ella le confesó el suyo, la miró fijamente, sorprendida por lo que le había dicho. Era normal la reacción que comentaba la muchacha, cuando te dicen que les gusta la persona de tu mismo género, pienses que te van a violar, y no lo pensamos de las personas del otro género. Pero ella sonrió levemente, que ni se había planteado eso de que quisiera hacer algo con ella.

- Tranquila, no te preocupes..

Iba a decir algo más cuando escuchó los pasos, alguien se acercaba y se detuvo frente a ellas. Le miró de reojo, dejaba que el pelo le tapara la cara, ella miraba hacia su compañera hasta que comentó que se las llevarían de allí, eso llamó su atención.

Le miró y escuchó atentamente, podrían vivir de lujo o morir en la arena.

- Y.. allí tendremos nuestra propia celda?? No nos tratarán como aquí.. ¿verdad?

Preguntó, aunque hasta ahora no se podía quejar, pero no sabía cuando podría acabar todo esto.

Xhara escucho y arqueo una ceja.- Nos han comprando como ganado no esperes mucho de ellos, nisiquiera creo que tengamos opcion de negarnos a ir.- dijo hablando con su compañera e ignorando a aquel hombre.

-Lo unico que me escama es que venga alguien como el a comunicarnoslo cuando les seria muy facil mandarnos una nota o hacer que los guardias nos lo dijeran.

El hombre hablo de nuevo.

Vera, nuestro concurso esta basado en un antiguo circo romano, ustedes seran gladiadoras modernos. Vencer les dara creditos con los que comprar comodidades o placeres, aparte del incentivo de poder matar al margen de toda ley. Cualquier crueldad que imagine podra llevarla a cabo, de hecho se le premiara por ello.

No obstante,  tendra que asegurarse de estar siempre en plena forma para dar el maximo en el espectaculo posible. Esto se reflejara en una cantidad extra de creditos por sus victorias pero no todo es bueno. Esta la parte de los castigos. Los perdedores quedaran a merced de los ganadores y seran estos los que decidan que hacer. No podran negarse a nada... a nada.- recalco esperando una reaccion.

- Pero.. pelearemos contra chicas, no? No contra chicos..verdad?

Cuando preguntó eso tenía los ojos muy abiertos, preocupada, porque sabía que si lo hacían contra hombres, aquello sería su fin, terminarían de esclava de alguno de esos o muertas.

- Luchas de chicas en cyberbarro... ¿es eso?.- pregunto Xhara. Queria sentarse junto a la otra chica y consolarla... imaginaba que la cadena no se quedaria en eso, pero despues de haberle dicho aquel secreto, temio que pensara que queria aprovecharse de la ocasion y se quedo en su lugar.

- Si, peleas entre mujeres, en el barro, pruebas de habilidad, circutos de obstaculos y tambien peleas con hombres. Vamos, señorita Ava, no ponga esa cara, sabemos que no es virgen ni mucho menos. De hecho, por eso mismo a sido requerida, el morbo de su historia va a darle unos buenos creditos extra.- dijo con una sonrisa amplia, igual que la de una yena.

- Piense que quedandose aqui lo pasaria infinitamente peor... creo que los guardias tenian una lista donde apuntar su turno con usted, nos costo mucho que las mantuvieran " a salvo ". Para nosotros es importante preservar el producto que compramos en las mejores condiciones.

Despues miro a la mujer morena.- Estoy aqui para comprobar que el producto es de calida, señorita. Sus fotografias y datos eran buenos, tienen salud y estan en buena forma, son jovenes y hermosas. Ahora estoy convencido de que daran un buen espectaculo.

Xhara se rio.- Le das un rodillazo en las pelotas a un tio y ya es tuyo, no es para tanto.- dijo quitandole importancia al asunto.- Mientras ganemos, estaremos bien... y si perdemos no estaremos peor que aqui.- Aseguro intentando que aquella chica rubia y fragil se sintiera algo mejor.- Ademas, estaremos juntas, no es como si fueras tu sola.

- Por mi, perfecto.

Escuchó a ambos y asintió a lo que le dijo Xhara, aunque no le hacía mucha gracia que esa gente conociera su pasado.

- De acuerdo, acepto, aunque no nos quedaba otra.

Dijo mirando al hombre, sabiendo que todo eso era mero formalismo, que aunque dijera que no, iba a ir. Miró a la chica y sonrió levemente, agradeciéndole que la apoyara.

Maravilloso, señoritas. Su buena disposicion me alegra y sera recompensada. Dentro de unas horas vendra nuestro equipo y las preparara para ser trasladadas a las dependencias de la cadena.- comento con una sonrisa amplia y siniestra.- Espero que den lo mejor si mismas. Mi cadena recompesa bien a quienes le aportan ingresos, tenganlo en cuenta.

Patrik se marcho por donde habia llegado dejandoos solas de nuevo.

Esperasteis todo el dia sin que apareciera ni un alma ante vuestra puerta. Se hizo de noche y la luz se apago. De nuevo Ava termino entre la pared y el cuerpo de Xhara, quien por alguna razon se afanaba en protegerla sin pedir nada a cambio...

De madrugada una luz potente en los ojos os hizo despertar sobresaltadas

- ¡Arriba reclutas!.- gruño la voz de un hombre al que no pudiste ver en un primer momento dado que estabais cegadas. No era un guardia, no vestia como uno. Practicamente iba vestido con un taparrabos y una hombrera de cuero.

Ocho hombres de la prision entraron y os sacaron a empujones, os cachearon a conciencia y os esposaron las manos a la espalda. A empujones os llevaron hasta las duchas, arrancandoos la ropa sin ningun miramiento antes de empujaros al interior de una ducha y obsequiaros con un manguerazo de agua a presion.

Parecian disfrutar mucho viendo como rodabais por el suelo, empapadas y heladas, golpeadas por un doloroso chorro de agua a presion.

Despues os levantaron y tumbaron en unas camillas especiales. Os recogieron el pelo y os pasaron un laser GBH del cuello para abajo, por toda la piel. Ni un solo vello sobrevivio a la tremenda abrasion del laser. Agradecisteis el agua helada de antes, dado que el laser ardia en vuestra piel, dejandola hipersensible y enrojecida al extemo.

Notasteis que os soltaban las manos.

- Poneros esto o la piel se os caera a tiras.- gruño el lider de aquel grupo de tortura, tirandoos unos monos negros con una cremallera delantera. Todo el mono estaba curtido por dentro por una crema, una especie de locion para quemados que os escocia horriblemente cada poro de la piel.- ¿Estais listas, princesas?