Partida Rol por web

-He visto tus notas y te he visto combatir en el simulador. Además tengo entendido que andas liada buscando curro y quería proponerte uno. No sería la bomba, pero por algo se empieza.- Austin respiró hondo poniendo en orden sus ideas.

-Mas o menos la idea es esta, tengo el mando de una compañía y necesito gente diestra e inteligente. Lo tuyo serían los cazas. Tengo dos Zero. El contrato será de tres años con una...- dudó si decirle "propietaria" o apelar a lo referente a su trabajo suministrando comida. Sería mejor apelar a algo que no fuera una persona física. Era más coherente. -...compañía de alimentos independiente, aunque posiblemente del condominio. Tras ese tiempo ya se verá, pero el caza que tengas será tuyo.-

Te miró desconfiada: - ¿En propiedad? Preguntó incrédula.

¿Y si es mio, las municiones, mantenimientos, repuestos y demás, de quién correrán cargo? Con esta pregunta demostraba interés, pero aún así seguía sonando desconfiada.

-Si pasa a ser de tu propiedad, ¿quién crees que pagará la factura?.- Austin intentó algo arriesgado, pero podía merecer la pena. -A menos que sigamos como una unidad mercenaria independiente, no veo otra forma de pagarlo. Podríamos hacernos un hueco como mercenarios cuando acabe, tenemos talento y por eso quiero talentos.-

Haaaa. Comenta con la satisfacción del que entiende. - Te refieres que tendré un caza asignado para mi y que nadie más lo tocará.

Se lo piensa un rato y luego pregunta: - ¿Y la paga?

-¿No he cobrado yo todavía y ya quieres hacerlo tú?.- Dijo con una mueca burlona en la cara. Le gustaba esta chica. Pensaba en lo práctico. -Digamos que la paga será la correcta.-

- Pues bueno. Concedió. Soy tu Jefa de Cazas.

-Estupendo. ¿Ves esa nave de descenso?.- Inquirió Austin señalando la que le había dicho la princesa. -Pues allí nos vemos en cuarenta minutos.- Austin ya se iba cuando se paró en seco dándose media vuelta.

-Y si por el camino sabes de algún piloto en quién confíes, preguntale si quiere venir.-

Con un: - Vale. Te contestó a todo. La veías asentir, pero su voz se dio a conocer justo cuando terminaste.

No te confesó que le sobraba la mitad del tiempo, pero, te daba igual. Incluso mejor, así podría investigar más la piloto Laida.

Nada más llegar encuentras a la técnico, que amablemente se presenta: - A sus órdenes capitán. Miró tímida un instante hacia abajo y confesó: - Creo que voy a ser su Asistente Técnico Personal. Y se ofreció: - Si me acompaña, le indicaré el camino.

De camino a la nave Austin decidió romper el hielo.
-Entonces, ¿te ha contratado como técnico especialista la señorita Akumo?.
 

Lady Akkumo me ha contratado como su asistente. Da igual lo que tenga que hacer. Admitió con cierta alegría. Su sensualidad era demasiada para tu gusto.

-Comprendo.- Dijo Austin sin mucha emoción. -Vamos, no quiero llegar tarde mi primer día.-

Va con su equipo y demás.

Lo bueno es que ya va vestida con el mono de trabajo. 

No tardáis en llegar, pero, Lady Akkumo no llega aún. Te desespera la espera (cacofonía total).

La chica ha dejado sus cosas en el camarote, y por lo visto lo comparte o compartirá con 3 más. El tuyo es privado. - ¿Beneficios del Jefe de unidad? TE has dado cuenta que la nave está considerablemente modificada. Adecuada y retocada para albergar la unidad de una manera directa e independiente. Además tiene una sala táctica, junto al puente, en la que el capitán de la nave, puede usar también como escenario de control general, o asistir a las reuniones. Tiene un holotanque, como si fuera una Nave Capital, para un Estado Mayor, pero para no más de 2 trabajando allí (uno dentro y otro en los ordenadores control del sistema) y 5 en la sala. Cada uno de los 5 puestos tiene también presentación de datos y control, como si estuvieran dentro del holotanque. Además la nave pierde mucha de su capacidad de transporte de vehículos, para albergar gente de una manera más cómoda. Eso sólo quiere decir que es ... para misiones de larga duración, o tras las líneas enemigas ... o infiltrado. Para tu opinión, todo es lo mismo.

Austin no pudo por menos que silvar cuando vio todo lo que había allí adentro.
-Vaya...- se dijo a si mismo. -Una nave equipada y preparada para incursiones de larga duración no es lo que tenía pensado cuando me dijo que nos dedicaríamos a tareas de defensa.-

La nave estaba equipada además con un sistema de control como si fuera un centro de mando, lo que significaba, sin ninguna duda, que efectuarían asaltos lejos de una base de operaciones fija.

-¿Alguien sabe dónde está lady Akumo?- Preguntó en voz alta.

La "piloto" que habías reclutado te interpela:

- Mira que yo estaba por preguntarte lo mismo. Su tono orgullo y sensual se denota por el puente, donde ahora mismo os encontráis, tras salir de la "sala táctica".

Ambas mujeres se encuentran. Una, Laida, con el poder que ostentaba por el cargo prometido, hincha su orgullo. La otra, Midori, por la misión encomendada, de ser tu asistente personal se ofende por la intromisión de una "mierda de piloto" que parece despreciar de tiempo atrás.

- Batalla de egos entre contendientes femeninos ... y yo en medio. Piensas.

Austin sabia que la responsabilidad de un buen jefe no termina al finalizar la jornada de trabajo. Mantener el orden entre sus filas era tan importante como ganar una batalla. Austin se hizo el tonto como si no se hubiera dado cuenta.

-Esté donde esté y haga lo que haga tenemos que esperarla. Por cierto me encantaría presentaros. Laida Wells Capitán de vuelo, Midori Algretti Capitán de servicios especiales. Sois de carácteres muy parecidos y creo que trabajaréis muy bien juntas. De ello dependerá nuestra modesta compañía.-

-Así, las dos iguales y siendo mi mano derecha e izquierda no se dedicarán a pelear entre ellas concentrándose en lo mejor para la compañía.-

-Vayamos fuera a esperarla, tendremos tiempo de sobra de estar en las reducidas salas de la nave cuando zarpemos.-

Las dos eran un tanto orgullosas. Un tanto grande.

La piloto, tras tu comentario, empieza a caminar, con el pecho bien henchido y la barbilla alta, pero la otra queda extrañada y te retiene para preguntar: - Jefe ¿Servicios Especiales? Está tan anonadada que flipa. 

Mientras caminas, ves, que 10 segundos antes de la hora dicha llega la señora Akumo.

No le extrañó que tanto Midori como Laida se sorprendieran, pues lo hizo precisamente para eso. En cuanto Midori le sujetó por el brazo y le preguntó, Austin comprobó que Laida estuviera lejos de escuchar. Aún así se lo comentó en voz baja.

-Es otra manera de decir asistente personal pero sin que suene a "secretaria". Además, en una compañía mercenaria tu trabajo consistirá más en conseguir el material necesario que en recordarme mi agenda.- Con un guiño de complicidad Austin salió afuera con las otras dos, a tiempo de ver a Lady Akumo llegar a la nave.

-Lady Akumo, le presento a la capitana de vuelo y jefe de la lanza de cazas Laida Wells. Es una buena piloto de la academia que ha accedido a venir con nosotros.-

O sea, Jefa de Mantenimiento.

Te comenta entre susurros. Espera tu respuesta para soltarte.