Partida Rol por web

Volvéis de madrugada, acasi con la salida del sol a la "Ultima Posada".

Al llegar os abre Bura Grumm la madre y os hace pasar dentro. Os prepara un tentenpié y tras tomarlo os vais a la cama. A mediodía, os despertáis, coméis y después os deja solos en el salón para que decidáis como afrontar la situación del fuerte.

Terminando la comida, Kili empieza a reflexionar en voz alta.

- Tenemos todo el tiempo del mundo para revisar la zona, acaso preparar trampas e intentar compensar nuestra desventaja.

-No hay forma de que les tendamos trampas dentro de la fortificación.-contestó la elfa, pensativa- Lo más inteligente sería hacerles salir: si llevan a la familia Grumm consigo podemos tenderles una emboscada en el lugar del encuentro, y si les dejan en ese lugar, habrá menos hombres que les vigilen y será más fácil entrar y salvarles... Aún así, qué haremos si conseguimos traerles de vuelta? Lo más fácil es que vengan a la posada si algo les sale mal...

Tharas, que estaba ahí con vosotros pero que no había abierto la boca desde que salísteis de la fortaleza donde tenían prisioneros a los hijos de los Grumm, por fin habló.

- Os recuerdo lo que dijo Grog el semiorco: quieren oro y joyas para llenar el baúl (1 m. de largo por 0,50 m. de ancho y 0,50 m. de alto) y tenemos una semana para llevárselo al puente del Fontegrís en dirección a Bree, de la que nos quedan 5 días. Si no, los hijos varones morirán. Si al día siguiente no lo llevamos, las hijas...- dijo callándose por lo que les podía pasar a las chicas sobre todo porque una de ellas era la prometida de su amigo Troty.

- No nos han pedido que vayamos todos a la entrega del dinero, ni creo que lleven a los rehenes a la entrega... yo no lo haría, o por lo menos no llevaría a todos. Aunque tampoco creo en su palabra y no me fio de que nos entreguen a los rehenes- comentó meditabundo-. Podríamos dividirnos y mientras yo y otro- dijo mirando a Arthanatan-, les damos el dinero, los demás, asaltáis la fortaleza- comentó-. Como dice Laya, no les podemos dejar que se escapen pues tomarían represalias. No ahora, pero sí en un futuro. Tenemos que acabar con ellos de una forma permanente.

- Si dividen sus fuerzas podremos acabar con ellos, o por lo menos tendremos más posibilidades- propuso-. De todas formas es una propuesta, si tenéis alguna otra es hora de que la digáis- dijomirando a los presentes

- Puede ser la única forma. En su guardia son demasiados ... me gusta el plan. ¿Que opinais?

-Me alegro de que pensemos igual. Tenemos tiempo de sobra para preparar nuestro ataque. Aún así, me preocupa su superioridad numérica. -la elfa meditaba sobre las opciones que tenía. Un sólo error en su plan significaría la muerte de los rehenes, algo que no le hacía sentir nada cómoda. Necesitarían una distracción para entrar en la fortificación.

- Tendriamos que preparar algunas trampas para evitar que huyan a caballo y den la alarma.

-Bueno, estamos en una taberna, aquí tiene que haber alcohol suficiente para preparar algún tipo de artefacto incendiario.-comentó la elfa, para sí misma-Podemos utilizar cualquier combustible líquido, algún recipiente que se rompa con un golpe y como mecha utilizaremos tiras de algodón empapadas también en alcohol. Haré una prueba para asegurarme de que funcionen. Aunque de trampas tengo menos idea, puedo ayudarte a montarlas si me explicas como

El enano medita unos instantes, mirando el alcohol de la taberna.

- Para los que vengan por el rescate, tal vez lo mejor sería excavar un hoyo en el camino. Taparlo bien y poner una estructura de madera que se pudiese derribar tirando de una cuerda.

El alcohol, una pena  malgastarlo. Tal vez aceite para prederlo en caso de que huyan y evitar que den la alarma, como segunda o primera trampa.

Ssi esperan oro, creo que deberíamos buscar un baúl y que algo salgo disparado cuando esos bastardos lo abran. Gilthanas es más habilidoso, tal vez se le ocurra algo.

Y ya de puestos, tal vez algunas hierbas para que el agua del otro campamento les provoque somnolencia o malestar.

Son ideas, no sé si realmente funcionarán, pero si no cambiamos las posibilidades que tenemos en contra, esto acabará mal.

Tharas negó con la cabeza mirando a Laya- Si piensas en usar el fuego cuando ataquemos la fortaleza, yo no lo haría. Creo que al rescate no llevarán a los rehenes y por lo tanto estarán en la fortaleza. Por lo que prenderla sería matar a los hijos de los Grumm. Si es para los que vienen después... no sé cuando arrojárselas, pero prdría funcionar- comentó.- Tenemos suerte, pues la familia Grumm destila el mejor y más fuerte aguardiente del norte... que hacen los humanos- se corrigió mirando a Kili.

- Lo de las trampas, puede que funcione, pero no tendríamos tiempo de hacer un agujero lo suficientemente grande como para que se cuelen los caballos. pero podríamos hacer otras trampas... no sé ¿qué opináis?- preguntó el elfo a los allí presentes.

- Tharas, tal vez podríamos  esconder bajo un plamo de tierra algunos toneles de aguardiente en el camino y prenderlos cuando los jinetes se detuviesen en el lugar apropiado. Coger algún prisionero, extraer información sobre sus defensas ... y cruzar los dedos.

-Tharas, no pensaba bombardear la fortaleza. La empalizada también es de madera, no? Además, sólo con tirar alguno de estos artefactos al suelo provocaríamos una buena distracción. En medio de la confusión, creo, sería más fácil que entráramos a sacar a la familia, que al fin y al cabo es lo más importante. Yo pienso que lo mejor sería intentar sacarles primero de allí, mostrarles el sendero de bajada (quizá Troty quisiera hacerse cargo de eso) y una vez sepamos que están a salvo, podemos cortar el sendero e intentar acabar con los que aún queden en la fortaleza.  Aunque sí que es verdad que podríamos guardar parte del combustible que tengamos para quemar el lugar hasta los cimientos cuando hayamos terminado.

Tharas, pensativo, medita sobre lo que les han dicho sus compañeros. Tras unos segundo el elfo les contessta.

- Tenemos una ventaja, ellos no saben que nosotros intentaremos atacarles en su propia fortaleza. Si entramos tirando un barril, puede que les desorientemos, pero seguramente lo primero que hagan sea ir a por los prisioneros y tomarlos como rehenes- comentó.

- Yo probaría a entrar sin que se note. Ir por la parte trasera de la fortaleza, liquidar al vigía, si es que hay alguno, e infiltrarnos en la misma sin que se den cuenta. Dentro nos damos prisa para que no cojan a ninguno de la familia Grumm como rehenes, todo rápido y silencioso.

- Después, con el resto de la comitiva que se ha ido a hacer el intercambio, les esperamos dentro y... ahora sí, le podríamos montar un par de trampas para que caigan en ellas.

Tharas miró a sus compañeros para ver qué opinaban.

- Para ser elfos, me gusta como pensais. Casi como enanos.

-Entonces ya está decidido. Sólo tenemos que preparar lo que necesitemos para poner las trampas. -comentó la elfa, contenta con el plan. Con un poco de suerte y mucho esfuerzo, conseguirían salvar a la familia Grumm y poner fin al chantaje.