Partida Rol por web

William se sobresaltó al escuchar los disparos. Luego aferró su rifle y, sin pensarlo demasiado, salió corriendo hacia la dirección de los disparos:

- ¡Voy a enterarme de que demonios está pasando! ¡Vuelvan al campamento a advertir a los otros!

- Espere señor Harthower. No debemos separarnos. - digo mientras aferro el rifle.

- Usted manda señor Cottonwell. - digo. ¿Qué quiere hacer?

William no hizo ni caso al aviso del viejo soldado. Tampoco tenía pensado esperar a que el lord organizase un debate sobre lo que se debía hacer o dejar de hacer. ¡Estaban en una selva y no en un maldito salón de te!

El guía desapareció entre los matorrales.

Las palabras ofensivas contra los franceses de Cottonwell, la visión de los muertos y los disparos distrajeron a Fondec. Fue tarde cuando vio que William se alejaba para ir corriendo hacia allí, corriendo y sin cautela.

-No creo que sea una buena idea lo que ha hecho- dijo a los que aún estaban con él- puede acabar como estos pobres desgraciados.

-¡Espere señor Harthower!- …grité en vano, ya que antes de acabar la frase William ya había desaparecido entre los matorrales… -¡Maldición!, solo nos faltaba esto…. Perder a nuestro guía- ...deje mientras me dirigía hacia Dean y me cercioraba de que mi rifle estuviera bien cargado.

-Señor Costigan, no podemos dejar a ese hombre a su suerte y tampoco podemos tardar en regresar al campamento, será mejor que vayamos tras él, averigüemos qué diablos son esos tiros y volvamos al campamento…… al ser posible todos- ...sabía que Dean era un soldado ingles y como tal, no permitiría tampoco abandonar a Bill, aunque este hubiese cometido un acto temerario, así que sin más, me puse a seguir el rastro de Bill… -¡Vamos, no hay tiempo que perder!-

Te lanzas a una loca carrera en pos del origen de los disparos, estos durante un momento parecen aumentar de intensidad, pero conforme pasan los minutos se van reduciendo rápidamente

Salís tras los pasos de Bill, es bastante sencillo seguirle en tanto el vaya hacia el sonido de combate, aunque según avanzáis los disparos se van haciendo mas espaciados y dispersos

William corría acompasando su respiración para no agotarse. Siempre había presumido de su excelente forma física y aquella era una gran ocasión para demostrar que estaba hecho un mulo.

- Así lo haremos LordCottonwell. Vamos, siganme sin separarse. - digo saliendo en pos de Bill. Permanezcan detrás mía por si acaso.

No muy convencido de que la mejor idea era la de seguir los disparos, que Costigan y el lord parecían estar dispuestos a seguir, el doctor se colocó detrás de ellos y les siguió los pasos lentamente y manteniendo una distancia prudencial con el resto. Sin precipitarse.

Tu rápida carrera apenas te hace jadear un poco cuando finalmente llegas al bosque de donde se originaban los disparos, bastante mas frondoso que aquel en que habéis encontrado los cuerpos.

Los disparos cesaron casi por completo hace un par de minutos, sigue sonando algún disparo aislado pero ahora parece tranquilo.

De repente se escucha un ruido a tu derecha y sale corriendo un soldado frances hacia ti.

Pese al deseo de cautela de Fondec se ve obligado por el ritmo que marca Lord Cottonwell, es seguirle o quedarse solo por lo que avanzáis a un paso ligero pero precavido

El rastro de Bill es fácil de seguir, no ha hecho nada para ocultarlo y se dirige directamente hacia un bosque, bastante mayor que aquel donde encontrasteis los cuerpos colgados, y del que ahora sale el sonido de algún disparo aislado, parece que la batalla ha terminado y siguen algunas escaramuzas, o así lo interpretáis.

El guía se giró sobre su cintura para apuntar al recién llegado.

- Quieto ahí franchute o te vuelo la tapa de los sesos. ¿Qué demonios está pasando aquí?

No era una bravuconada. Como el francés hiciera cualquier amago de escapar o de atacarle le descerrajaría un tiro a bocajarro sin pensárselo siquiera. William no tenía intención alguna de acabar colgado de un árbol boca abajo.

El Frances se detiene en seco, tiene los ojos desencajados por el miedo y ahora te das cuenta que ni siquiera se había dado cuenta de que estabas ahí, se detiene y mira tu rifle un momento, el esta armado con uno muy parecido, luego empieza a hablar rápidamente en frances, o tal vez en belga, no entiendes nada, pero señala con insistencia la copa de los arboles a su espalda.

De repente su pecho es atravesado por una lanza que lo atraviesa con una facilidad pasmosa empalándolo en tierra, te mira un instante antes de morir aferrando la lanza en su pecho. La lanza ha venido desde atrás y arriba, mas o menos de donde señalaba, aunque ahí no ves a nadie

Le obligaron a apretar el paso más de lo que quería. Aún así, intentaba no llamar la atención e ir el último.

Pero parecía que la batalla había terminado, apenas sonaban ya disparos. Pero eso no iba a hacer que Fondec se abalanzara sobre el terreno para averiguar qué pasaba. Echó un vistazo, sí, pero sin moverse demasiado de donde se encontraba.

Durante un momento los ojos del guía se abren de par en par. Luego su instinto de supervivencia tira de la adrenalina para sacarlo del peligro inminente, haciendo que se lance hacia los matorrales dando una voltereta mientras cae entre ellos intentando evitar ser empalado. Su cerebro repasa las posibilidades con la intensidad y velocidad que provoca el pánico primigenio a la muerte. Si el atacante ya ha utilizado su lanza es improbable que pueda atacar nuevamente desde la distancia... siempre y cuando sea uno sólo.

Sabe que su misterioso oponente tiene ventaja: lo ha visto y William a él no. Así que lo primero que intenta es adentrarse en la espesura para alejarse de la posición inicial. La sangre le martillea en las sienes y le nubla la vista. 

Te das la vuelta y empiezas a retroceder por donde habías venido sintiendo como un sudor frio te recorre la espalda, te das cuenta de que la selva a tu alrededor esta terriblemente silenciosa, ya no se escucha ningún disparo o grito, pero tampoco se oye a ningún animal, y casi te parece sentir sobre ti una siniestra mirada sigiendote mientras buscas la cobertura del bosque durante un par de minutos que parecen hacerse eternos.

Casi por sorpresa ves delante de ti la linde del bosque y mas alla a tus acompañantes que avanzan hacia ti a paso vivo, al parecer sin haberte visto.