Partida Rol por web

 Porque toda Dama necesita poder conversar a solas con otras señoritas

 aquí tendréis que decidir entre otras cosas que sabéis la una de la otra

Estupendo.

Bienvenida ^^

Iremos poco a poco adaptándonos.

En principio, nos llevamos bien ¿no?

Jijiji... lo haremos durante el safari, así será divertido ir desvelando poco a poco, tú como buena mujer necesitas cotillear y conocer ese misterio...

yo como buena mujer he de compartirlo :P

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Ya en el hotel, mientras Molly ayudaba a instalarse a Lady Cottonwell, pudo por fin hablar con ella con libertad.

Milady, lo de la cena de esta noche...imagino que no cuentan conmigo, dado que pertenezco al servicio, lo cual me parecería apropiado en cualquier otra parte...pero aquí, entre todos esos hombres, no me parece del todo correcto dejarla sola. Es decir, sé que no estará sola, Lord Cottonwell cuidará de Milady, pero no podrá estar pendiente toda la velada, y me preocupa. Estoy segura que no le ha pasado inadvertida la mirada y el gesto de ese guía al verla...

- Molly querida dijo la señora sonriendo, había pensado exactamente lo mismo. No te preocupes, creo que mi marido estará de acuerdo en que me acompañes. ¿Recuerdas aquel vestido tan bonito que te regalé en tu último cumpleaños? Creo que ha llegado el momento de estrenarlo. ¿Qué te parece? dijo sonriente haciendo a Molly una caricia en la cara, muestra de su afecto por la joven. Al fin y al cabo no era mucho más joven que ella misma.

Un rato después de su conversación con la doncella, Dorothy entró en la sala de estar donde estaba su marido.

- Edmund, cariño. ¿Podemos hablar un momento?

Edmund ha pasado la tarde hablando con los guias sobre el viaje y los preparativos mientras tu y Molly desempacabais varias cosas, en el hotel tu y Edmund si estais en la misma habitación, aunque solo sea porque no sabias que estariais en un hotel para pedirle otra cosa.

Cuando entras en la sala de estar Edmund se gira hacia ti secandose el sudor de la frente

-te juro querida que nunca pense que aqui hiciera tanto calor. El clima en la India es calido, pero esto parece una broma de mal gusto, pero me han dicho que en la sabana al menos no sera tan húmedo-

- Es cierto, la verdad que a veces se hace insoportable. Pero seguro que en poco tiempo nos acostumbramos. dijo acercándose a besar a su marido en la frente sudorosa, tras limpiarla con un pañuelo limpio. Edmund, ¿te parece que venga Molly conmigo a la cena? Sin duda estarás muy ocupado y no habrá demasiadas damas con las que entablar conversación, no quiero estar bostezando en una cena tan importante, a causa del aburrimiento. Tiene un bonito vestido que le regalé ideal para esta ocasión, y aunque es una doncella, es muy educada e inteligente como para no hacerte quedar mal. ¿Qué opinas querido?

Edmund se queda pensativo un momento, pero te da la impresión que es mas para guardar las formas que porque se oponga

-bien, estará la mujer del señor Luggard, con la que podrás hablar, ellos también acaban de llegar a este país según tengo entendido-

Se queda un momento mas dudando -¿se ha traído ese vestido? bueno, no tiene muchas oportunidades de usarlo, supongo que estará bien si te acompaña a la cena, espero que no se ponga nerviosa si le sirven como si fuera una señora-

Finalmente sonríe y te da un breve beso en los labios -ves a decírselo tu, yo tengo que revisar las facturas de esos dos guias, parece que hayan comprado equipo para la reina de inglaterra-

- Gracias Edmund querido. dijo volviendo a besar a su esposo esta vez algo más ardientemente. Iré a avisar a Molly. Estará entusiasmada. Gracias.

Dorothy volvió a la habitación feliz y canturreando, cuando se acercó a Molly le comunicó: Vendrás a la cena con nosotros querida, así que date un buen baño, que esta vez te servirán como toda una Señora.

- ¿No es estupendo? dijo emocionada. Podrás estrenar aquel vestido tan bonito que te regalé.

Molly se ruborizó sólo de pensarlo. El vestido en cuestión era ciertamente bonito, pero la hacía sentirse un poco expuesta y fuera de lugar...De todas formas, no olvidaría comportarse con recato como correspondía a una doncella. Se recordó a sí misma que si iba a la cena no era para divertirse, sino a acompañar a lady Cottonwell. Respondió con una tímida sonrisa:

Muchas gracias Milady. Espero no desentonar demasiado. Voy a darme ese baño y la ayudaré a arreglarse.