Partida Rol por web

Te asomas a la ventana, pero no hay ni rastro del hombre de la cicatriz. Cuando revisas las llamadas y los telefonos móviles, no ves nada extraño: las llamadas normales al trabajo, de tu número de teléfono, etc... Sin embargo, cuando enciendes el ordenador portatil de John, te das cuenta en seguida de que el disco duro ha sido formateado.

Pasais un buen rato dibujando el retrato robot y viendo fotos de sospechosos. Aunque hay algunos que se le dan un aire, ninguno es el hombre con el que te cruzaste.

Cuando terminas, Nigel te acompaña al "despacho" de Noble (si es que a una mesa cercada por un par de biombos se le puede llamar así, por si éste tiene algo más que decirte.

El inspector se encuentra hablando por teléfono en el preciso momento en el que llegas.

- ...sí, y es cirujano. Está muy pillado por los pelos, pero podría estar relacionado con lo de París - hace una pausa cuando te ve llegar, como si se estuviese preguntando cuanto has oido -. Bueno McVey, ya le llamo cuando esté usted menos ocupado.

Estás completamente seguro de que estaba hablando de ti.

De la gente que viene, conoces a algunas personas, ya que eran amigos íntimos de Jeena y Jhon. También aparecen algunos amigos tuyos, y los compañeros de trabajo de Jeena a los que, al trabajar en el mismo hospital, conoces en su mayoría.

Respecto a los compañeros de Jhon, la mayoría te resultan desconocidos y te suenan sólo de nombre.

El ambiente del entierro es deprimente. Un montón de desconocidos y unos pocos amigos le dan el pésame a William Graham. Poco a poco se van congregando personas, hasta llegar a sumar casi una centena... ¡Parece mentira que John y Jeena conociesen a tanta gente! Aunque, por supuesto, también han venido los amigos y compañeros de trabajo del propio William.

Según se va acercando la hora del entierro la gente parece más y más agitada, y el volumen de los murmullos va en aumento.

Cuando William recibe el saludo de Perkins, el editor del periodico de John, lo encuentra un tanto alterado.

Perkins se retuerce las manos nerviosamente. Sus gafas resbalan sin parar sobre el puente de su nariz.

- Pues... Este no es momento para... Este no es unbuen momento... Er... Es sólo que ayer por la noche alguien entró en el periodico... Ehm... Pero ahora creo que es el momento de darle el ultimo adios al pobre John y a su esposa... Podemos hablar de ello más tarde, si usted quiere.

Mario Coelo permanece atento a todas las personas que hay a su alrededor, pero todo parece ser lo que aparenta: gente que va al entierro de unos amigos y compañeros.

- Veo que Von Holden ya les ha puesto al día de los acontecimientos... La verdad es que nos han fallado los suministros de explosivos plasticos. La policía localizó nuestra sede hace tres meses y se incautó de todo lo que teniamos. Desde entonces hemos conseguido reacernos de algunas cosillas, pero ha sido imposible que nuestros contactos en la Spetznatz nos envíen explosivos... En fin, un problemón. Quizá si pueda conseguir alguna otra cosa...

- Mmmm... ¿Un Artic Warfare Magnum? Si, claro. De eso si que le puedo conseguir... lo venden en las tiendas. Si quieren, esta tarde se lo llevo. Antes no puedo, claro, tengo que comprarlo... Respecto a nuestro contacto en la policía inglesa... Me temo que falsificar informes es demasiado arriesgado, ya que podría ponerse en evidencia, pero quizá pueda "guiar" la investigación hacia un rumbo erroneo, o interpretar las evidiencias desde una perspectiva nueva para ver si despista a los polis. ¿Que idea tienen exactamente?

Ni se me habia ocurrido lo del GPS, pero dado que habeis llegado en avion... Y que el coche que teneis es de alquiler...

Como soy buena, voy a suponer que en la agenciade alquiler de coches tambien os dieron un plano de Londres.

Con cierta dificulatd, Mario conduce entre el denso tráfico de Londres a medio día, logrando no estrellarse contra ninguno de los vehículos que vienen en sentido contrario a pesar de que auqí la circulación es del revés. Finalmente, y tras dar un par de vueltas, llegais a la concurrida plaza de Picadilli Circus, en la que, por supuesto, no se puede aparcar.

Mario, reconvertido de guardaespaldas a a avezado chofer urbano, una vez llegados a Picadilly logra encontrar un hotel con Parking que no tiene mala pinta, aunque la entrada resulta un poquito hortera para los gustos de Andreas, que prefiere un estilo más clásico.

- Pues tengo noticias fresquitas, de última hora. Lebrun y el otro tipo de la Interpol (Mommsen creo que se llama) llegaron a Londre esta mañana, ya se han encontrado con Noble, y hasta han detenido a Graham como sospechoso del asesinato de su propia familia, impotándole de camino todo lo demás: los cuerpos decapitados, los asesinatos de las familias... vamos, todo el lote. Creo que se huelen algo de que tenemos un topo, porque han actuado con muchísima cautela, y de ahí que no les hayamos podido seguir la pista al minuto.

>>Además, no es que me sorprenda excesivamente que hayan sido capaces de relacionarlo todo, pero creo que lo están haciendo con demasiada rapidez. No queremos que la policía nos ague la fiesta del sábado...

>>De momento los visitantes no han informado de donde se hospedarán, y no nos consta que hayan hecho el check-in en ningún hotel, de momento. En cuanto sepa algo les llamaré para decirselo.

- Uhm.... Dejame que busque.....

Samule entra en una de las habitaciones y empieza a buscar cajas por todas partes. Al final aparece con un par de micrófonos pequeñitos y un transmisor grande.

- Es todo lo que tengo. Me refiero a que... bueno, la señal de los micrófonos de transmite hacia este transmisor grande, que la amplifica y la envía al otro microfono... o algo asi... no entiendo mucho de electrónica, la verdad. En fin que tienen que tener el aparato encendido y alguien controlandolo para que los micrófonos funcionen. No se si será de mucha ayuda.

La recepcionista teclea rápidamente en su ordenador buscando una habitación libre.

Mmm...la idea era que Mario tuviera una linea de tiro clara sobre Noble sin que comprometiese demasiado su situación. Si no sirve, habrá que buscar otro sitio o algo. Tu dirás.

La recepcionista localiza en seguida una habitacion, y te pide tus documentos.

- Habitación 210, en la segunda planta. Entrada hoy y salida el jueves... 140 libras, por favor - luego, te dedica una mirada sospechosa y añade -. ¿Serán dos personas? En ese caso, la segunda persona también deberá registrarse en el hotel cuando llegue...