Partida Rol por web

Yo sabría pilotar este trasto aunque está un poco obsoletodice el ingeniero jay, que se encontraba un poco distraido observando la configuración de los motores en la sala de máquinas.

Y así quizás jarno podía divertirse en la segunda torreta. Porque... esa bola peluda no estará pidiendo ocuparla, ¿no? Tarde... tarde la bola peluda se subió a la torreta, y Jay no sabe si sería seguro intentar echar al ewok de allí. Seguro que muerde.

Bueno, al diablo con todo... añade Jay acomodándose en el puesto de copiloto para liberar a Jay de alguna tarea como manejar los escudos o los sensores o algo así.
R2, conéctate al computador central de la nave

En el momento en que Jay ocupa el puesto de copiloto, le echo una miradita de reojo y, en silencio, me limito a señalarle el control de los escudos deflectores. Y con la diestra libre, activo la comunicacion interna del carguero y digo.
El Imperial se pone nervioso. Es hora de aliviarle un poco los nervios gente. Espero que estéis preparados. Esto comienza... !Ahora!
Empujo con la zurda hasta el fondo la palanca de potencia y nuestro carguero salta hacia delante abalanzandose sobre los ties.
Y con la diestra sobre la palanca de control, ya se tensa mi índice derecho sobre el gatillo de las armas. Parpadea en el Hud la retícula de mis lasers frontales hasta que, al fin, se estabiliza en rojo sobre el Tie que ocupa la posición central.
Y yo, no lo dudo y abro fuego.
Desde los costados de babor y estribor, dos ráfagas lasers, surgen en dirección al Tie imperial. Y antes de que lleguen a impactar, yo ya estoy gritando.
¡Esos artilleros, disparad ya!. ¡A ver si los fundimos en la primera pasada!

Perpleja ante la confianza con que la pequeña bola de pelo toma los mados de la torreta, Zeenah regresa corriendo a la cabina y apenas llega a tiempo de sentarse y abrocharse el cinturón antes de que comience el baile.

Wowa!!!! - El ewok grita de júbilo y comienza a disparar, fuera de sí, contra el caza Tie, con una mirada entre sádica y divertida, todo salpicado por gritos y lo que parecen una especie de gorgoritos.

El espacio infinito.
La gran inmensidad.

Un centenar de estrellas pasan a una increible velocidad frente a vosotros
a medida que el transporte se dirige hacia su objetivo, el sistema Roche.

Vuestra misión, recuperar y escoltar todo lo concerniente al Proyecto Shantipole,
y al personal encargado, hacia unas coordenadas cifradas en un holodisco.

Esos puntos en los que se convierten las estrellas en el espacio se paran de golpe.
Parece que habéis llegado a las inmediaciones del Cinturón de Asteriodes Roche,
pero ni un simple pedrusco vaga a vuestro alrededor.

Cuando comenzáis a ver como os aproximáis al Cinturón,
¡una patrulla TIE hace su aparción!

Tres cazas TIE se aproximan por vuestra cola pidiendo que les acompañéis sin rechistar.

Asombrado Luther ve como el pequeño ser peludo se le cuela entre las piernas y se sienta en una de las torretas. - Supongo que sabra lo que hace o si no es que esta loco. Estas razas alienigenas no se sabe ni lo que piensan - Asi que volviendo a la cabina miro la situacion y viendo que tanto el piloto como el copilot estaban en sus puestos se sento rapidamente y se abrocho los cinturones de seguridad - Borradlos del cielo antes de puedan enviar cualquier mensajes de localización a su nave nodriza. ¿Esta nave dispone de algun tipo de contramedida para anular sus llamadas? -

Pero que coj... de pantallas son estas? ¿las han comprado en el Space-O-Mart???? Esto es inusable a esta distancia gruñe Jay consciente de que la configuración de las pantallas le supera. Eh, jarno, pásame los mandos de los cañones frontales. Limítate a evitar sus ráfagas. o si lo prefieres déjame a mi pilotar y te encargas de pantallas y de los cañones frontales

El baile ha empezado y aquí estamos. En una maldita cafetera acortando distancias con un trio de Ties que deben estar a punto de soltar una tormenta de lasers.
Gotas de sudor me caen por la sienes mientras compruebo como la distancia se va reduciendo entre ellos y nosotros.
Y cuando ya mi diestra se ciñe sobre la palanca de control para hacer un viraje cerrado por si tuviera que evadir alguna rafaga laser, llega Jay y me dice que cambiemos de asiento.
No puedo evitar soltar una ronca carcajada antes de replicar.
¡Pero hombre!. ¿Te parece el momento adecuado para cambiar de posicion?. Haz lo que puedas y ya veremos como salimos de esta. Creo que nos toca ir improvisando.

El aviso de los Imperiales parece haber causado un efecto llamada en vuestro piloto que cambia el rumbo de la nave en dirección hacia los TIE.

Tras unos segundos de maniobra, encaráis a vuestros 'escoltas', momento en el que el Ewok aprovecha para realizar un disparo contra uno de los cazas, al que no coge desprevenido.

Los TIE reaccionan ante vuestra hostilidad - ¡¡¡CARGUERO DESCONOCIDO, IDENTIFIQUESE Y CESE EN SUS ATAQUES!!! - ruge la radio mientras recibís un par de disparos por los otros dos cazas.

Luther empezo a ponerse nervioso ya que no veia demasiado convencidos ni al piloto ni al copiloto de la chatarra en la que viajaban - ¡Maldita sea Jarno haz una maniobra evasiva o estamos perdidos! -

Arqueo una ceja sorprendido al escuchar a nuestro durmiente particular.
¡Hombre, bienvenido de vuelta al mundo de los vivos!.
Nuevamente se escucha por toda la nave, mis carcajadas al mismo tiempo que el fuselaje tiembla a causa de los impactos de los lasers.
Y tras mirar hacia mi derecha, compruebo que es a Jay, a quien le toca sudar ahora la gota gorda.
Entre dientes mientras agarro con firmeza los mandos, añado.
Tranquilo Jay. Si acabamos convertidos en una nube de gas en medio del espacio, son cosas que pasan
Y a juzgar por la miradita que ahora me echa Jay de reojo, no parece que le haya gustado mucho mi filosofía no.
Compruebo en el Scanner la posición de los Ties y añado.
Atentos esos artilleros. ¡Voy a virar a estribor!. Cuando tengáis a tiro a esos Ties, ¡combinad vuestra andanada y tratad de fundir a alguno!
Y dicho esto, es hora de comprobar que tal reacciona nuestra nave en esta situación tan divertida.

El ewok hace una especie de gesto marcial al escuchar a Jarno y sigue disparando, frustrado por no darle a las malditas manzanas voladoras de la noche flotante.