A paso ligero el soldado sigue los pasos de Pepe y se coloca en la posición inmediata a la que ha tomado este. Coloca la mochila bajo el asiento y el rifle en una posición para que no se dañe en el viaje. Mira a Pepe y con algo de sudor perlando su frente le sonríe.
- Es como montar en la jodida montaña rusa eh? -
Carrick no sabe si hace el comentario para suavizar los nervios de su compañero o los suyos propios. Odio estos malditos trastos...
Subo al aparato y enciendo uno de mis cigarrillos mientras me acomodo en el asiento al lado de Carrick.
Bueno, allá vamos otra vez.
Una vez todos estáis acomodados en el aparato, el avión rueda por la pista pesadamente cogiendo velocidad antes de elevarse. El vuelo es relativamente rápido, menos de una hora, y transcurre en dirección norte sobre territorio inglés. Al anochecer aterrizáis en Edimburgo, en una base militar aliada y de allí tomáis un transporte militar al puerto. Allí, flotando apaciblemente entre los barcos de pescadores y de recreo, se encuentra la negra mole de un submarino. El camión se detiene en el muelle, donde el comandante de la nave os espera.
Bajáis todos del vehículo con una mirada de interrogación en vuestros rostros. El teniente Miller se acerca al marino y le saluda marcialmente.
-Teniente Miller, soy el comandante Graves -escucháis-. Mi tripulación y yo estamos a su disposición.
Una aclaración, a Trayus se le fue un poco la olla y pensaba que ibais a ser arrojados en paraca sobre Noruega. Realmente viajaréis en submarino hacia los fiordos ;););)
Bajando del camion miro con asombro la mole que flota en el agua, siempre me parecio cosas complicada el lograr que esos aparatos bajaron tan profundo y luego... y e aqui lo complicado, volvieran a subir. Casi cosas de magia se podria decir... Reflexionando en voz alta señalo a Pepe:
¿Asi que viajaremos en esa ballena? Vaya...espero que no pase como con el S - 33.... Seria una lastima.
Y dirigiendome a mis compañeros les digo:
Carrick, Angus,¿conoceis la historia del S-33?
Bueno... al menos tendremos tiempo de revisar bien todo el equipo en el viaje, quien sabe, quizas saquemos algunas libras a los marineros en esta barquichuela...
Angus se encogió de hombros:
- Ciertamente, si la sé no la recuerdo, asi que te escucho compañero - Dijo con una sonrisa.
-Algo me dice que si vamos a subir ahí, no queremos escuchar esa historia - dice mirando a Larkin, y luego suelta una pequeña risotada - adelante, cuéntala.
Carrick se aferra a la correa de su mochila. Si los aviones le daban pánico, aquella muerte enlatada submarina le provocaba unos escalofríos peores que los de estar una docena de veces al día en el punto de mira de los fusiles enemigos.
Carrick se cuadra ante el comandante y saluda marcialmente.
-Señor -
Jajajajajaja, Ciertamente Carrick tiene razón. Hagamos un trato, os contare esa historia cuando pisemos de nuevo tierra firme y todo haya salido bien. La verdad es que los submarinos me da más mal rollo que los aviones, nunca he viajado en uno de esos, dicen que la primera vez es la que más te hace polvo.
Cierto, no lo recordaba, hablar de problemas en la mar antes de embarcarse en un navío, suele dar mal fario y no es plan de empezar con el pie izquierdo.
Solo espero que la presión no nos afecte mucho después el viaje, no somos lobos de mar como estos marinos, y no hemos hecho inmersiones, al menos yo...
Y con cuidado me enciendo un cigarrillo, el último puede ser en un par de días más o menos. Dentro de los submarinos, el aire es escaso, y cierto es que pueden estar hasta cinco dias sin salir a superficie a renovar oxigeno, pero el aire ya estará bastante cargado cuando estemos bajo el agua y no creo que se permita fumar...
Me bajo del camión el primero debía ser quién recibiria al oficial del submarino según me bajé me quede enbobado mirando aquel enorme submarino o lata de sardinas como decían mucho, nunca me había subido a uno, pero bueno...siempre hay una primera vez, avancé decidido hacía el submarino donde se encuentra el oficial de la nave y le saludo marcialnmente
-Entendido mi comandante -Hago una breve pausa -Cuando antes nos pogamos en marcha mejor, la vida de nuestros muchahcos pende de un hilo y tenemos poco tiempo
Finalmente me relajo un poco mirando directamente a los ojos del comandante, un hombre experimentado sin duda alguna.
En fin, habrá que meterse en ese cascarón. Qué se le va a hacer.
- A sus ordenes, mi teniente. Listo para subir a bordo.- dice Pepe poniéndose a la disposición del oficial. En cuanto comenzasen a subir al aparato José iría tras ellos.
Espero que no nos ocurra lo mismo que al C3 en la Guerra Civil, no quiero que un puto submarino alemán nos pille y nos mande a tomar por saco.
Carrick agarra todo su equipaje, que a parte de la mochila comprende el rifle de precisión que siempre le acompaña y se dispone a subir a bordo en cuanto Miller de la orden pertinente.
Justo antes de meterse en el submarino, le vienen recuerdos de todo lo que dejó atras antes de embarcarse en esta guerra. Sonríe para sí mismo, y marcha completamente concienciado de que todo lo que hacen sirve para algo.
¿Cúanto tiempo pasaremos ahí dentro? se pregunta una y otra vez. No había puesto un pie en la pasarela que daba al interior del submarino y ya estaba deseando salir de él.
McCann subió silencioso al submarino tras hacer el saludo pertienente al Teniente. Iba pensando en la misión, en el rumbo que habia tomado su vida y en todas aquellas cosas que un hombre proximo a una misión como esta pueda pensar... No sabia si volverían.
Una ves dentro, se reunió con el resto, en silencio, mientras seguia pensando. Todos aquellos que habia matado en este tiempo le esperaban en el otro lado, como un coro de bienvenida al saludo de: Bienvenido, Hermano.
Viendo como todos mis compañeros embarcan con duros semblantes, tomo en mano mis pertenencias y me incorporo a la marcha. Solo espero que lleguemos pronto a nuestro destino. La espera, es algo que nunca se aguanta bien cuando eres combatiente de primera linea...
Bueno chicos, ¿¿Que pacha?? ¿¿Damos guerra?? ¿¿Sacamos a esos pobres diablos de allí? Vaya lo que esta durando el viaje en submarino... jajajjajaa. Demosle cañaaa.
- Os parecerá una chorrada, compañeros. Pero tengo ganas de dejar el viaje y meterme de lleno en la harina. ¿No odiáis la calma antes de la tempestas? - comenta Carrick impaciente y ávido de acción.
Más relajado al ver que el viaje marcha bien, se dirige a Larkin.
-Tal vez ahora es buen momento para contar la historia del S-33. Lástima no tener unas cervezas y unos panchitos... - comenta sonriendo.
Uno a uno, los miembros del comando van entrando en el submarino. El interior está iluminado con luces rojas y es estrecho, claustrofóbico y mal ventilado. Os llevan a la sala de descanso de los marineros mientras la tripulación comienza los preparativos para la inmersión. Oís ruidos metálicos y chirridos como si el submarino se quejase al ponerle en movimiento. Suavemente notáis que la nave comienza a desplazarse. Oís como se cierran escotillas y compartimentos mientras los marinos se dan órdenes unos a otros a voz en grito. El suelo a vuestros pies se inclina hacia un lado a medida que el submarino comienza a sumergirse en las aguas británicas rumbo a Noruega.
¿Algún comentario o acción o seguimos?
Avanti compañeros, demosle ritmo a esto.
Estaba claro que el viaje iba a resultar muy largo. Un espacio reducido, rodeado de hombres y sin un trago que llevarse a la boca. Al menos mis cigarrillos me acompañarán durante el trayecto, aunque no pierdo la esperanza de que algún marinero tenga alcohol en algún lugar y sea un buen anfitrión.
Por mí seguimos adelante.
Por mí también yo ya subo al submarine junto con el Comandante
Por mí seguimos! Venga chicos, que se acerca la hora H...