Partida Rol por web

Tercer Asalto (Se mantienen las iniciativas)
[Orden de iniciativas: Robyn (19), Tognus (16), Polidoro (16), Martín (15), Akash (9), Helshara (4)]
Robyn (ilesa)
Viendo que su estrategia ha funcionado una vez, la hechicera decide perseverar en ella sabiéndose momentáneamente a salvo de las iras del gigantes y capaz de continuar debilitándolo desde una distancia prudencial [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 49 (CD 21+), éxito, ataque de toque a distancia: 11+8 (CA ?), golpe, tirada de daño: 1+5]. Una nueva esfera de ácido alcanza a Akash, abrasando su carne.
Tognus (ileso)
Confiado con su reciente éxito, el belicoso enano no ceja en su empeño y continua asestando hachazos a diestro y siniestro contra su malherido oponente [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 94 (CD 51+), éxito, tirada de ataque 1: 15+18 (CA ?), golpe, tirada de daño: 7+9 +3 eléctrico; tirada de ataque 2: 18+13 (CA ?), golpe, tirada de daño: 4+9 +1 eléctrico]. Sus enérgicos golpes destrozan hasta tal punto las robustas piernas del gigante que éste cae de rodillas incapaz de tenerse en pie.
Polidoro (ileso)
Dispuesto a cobrarse sangre con sangre, el joven gigante de piedra redobla sus esfuerzos para doblegar al guardián del mausoleo [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 99 (CD 51+), éxito, tirada de ataque 1: 6+16 (CA ?), golpe, tirada de daño: 2+10; tirada de ataque 2: 3+11 (CA ?), fallo]. Su martillo de guerra logra impactar nuevamente contra Akash pero éste, prevenido, logra esquivar sin esfuerzo aparente el segundo golpe.
Martín (ileso)
Todavía en el aire, el clérigo opta por sumar sus fuerzas a las de sus aliados [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 23 (CD 31), fallo, tirada de daño: 4+3+2+6]. Sin embargo, su conjuro se desvanece y el anciano Martín se precipita contra el suelo tras el arrodillado gigante. Afortunadamente su caída no le ha arrojado al abismo, como le ocurrió a la maza de Akash, pero el coloso se interpone ahora entre él y el resto de sus camaradas. Tendido en el suelo, el clérigo trata de convocar a las fuerzas elementales para que acudan en su auxilio [prueba de "concentración": 2+12 (CD 10+15), fallo]. Por desgracia, la caída le ha dejado sin aliento y las palabras de la invocación rehuyen a su aturdida mente.
Akash (herido)
Arrodillado pero no vencido, el gigante parece sacar fuerzas de flaqueza y concentrar sus esfuerzos en el que ha demostrado ser el más temible de sus adversarios [pruebas para superar el porcentaje de fallo mágico de Tognus: 94,9 (CD 51+), éxito y fallo, tirada de ataque 1: 20+/? (CA 27+1-3+4+4), golpe, tirada de daño: 11; tirada de ataque 2: 20+/? (CA 27+1-3+4+4), crítico, tirada de daño: 30]. La lluvia de puñetazos que descarga sobre el infeliz Tognus es de tal magnitud que el enano apenas puede hacer nada para evitar ser vapuleado. Sin embargo, Akash no se olvida del pequeño gigante de piedra y también tiene para él algún recado [pruebas para superar el porcentaje de fallo mágico de Polidoro: 44,9 (CD 51), 2 fallos, tirada de ataque: ? (CA 28-1-1), fallo]. Por fortuna, Polidoro logra retroceder a tiempo de evitar el demoledor puño de su antagonista.
Helshara (ilesa)
Consciente de que su amigo enano no podrá resistir otra acometida como ésta, la sacerdotisa de Pelor se encomienda a su dios para que le de fuerzas en la batalla [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 70,75 (CD 41+), 2 éxitos, tirada de ataque 1: 12+16-2 (CA ?), golpe, tirada de daño: 3+8+4; tirada de ataque 2: 4+11-2 (CA ?), fallo]. Su devoción se ve recompensada cuando su maza logra superar las defensas del malherido Akash, golpeándole con fuerza en el antebrazo cuando éste trata de protegerse del ataque.

Desde la perspectiva que me aporta una dilatada experiencia en batalla, tomo conciencia de que el infeliz Akash no tiene ninguna oportunidad de imponerse a nosotros en este combate. Por desgracia, parece que el coloso todavía no quiere darse por enterado y eso le cuesta al bueno de Tognus recibir una pequeña paliza.

Me preocuparía si no supiera que mi amigo enano tiene una resistencia fuera de lo común, que incluso aventaja la propia. Pero aunque no tema por su vida, eso no significa que no me enfurezca que hagan daño a los míos. Nadie mejor que mi martillo de guerra para encontrar una forma de manifestar esta furia.

Robyn hizo un nuevo pase mágico y materializó un nuevo y resplandeciente orbe de un líquido verde y brillante. Trazó un arco en el aire con el brazo y el proyectil se precipitó contra Akash y estalló salpicando gotas de ácido corrosivo.

Helshara tomó impulso y lanzó un golpe devastador con su maza.

-¡Pelor, no me abandones!

El castigo recibido es grande,  pardiez este ser es un reto a tener en cuenta, pero aun asi por fin veo como cae de rodillas, es un comienzo, asi que esto hay que ponerle fin lo antes posible, por que si siguemdilatandose en el tiempo puede ser perjudicial para nosotros, asi que me pongo en faena y descargo mi mal genio sobre el gigante azul.

Un primer golpe destructor que hace que se dibuje una sonrisa en mi cara, pero cuando pretendo descargar el segundo algo en mis ojos indica el panico

Cuarto Asalto (Se mantienen las iniciativas)
[Orden de iniciativas: Robyn (19), Tognus (16), Polidoro (16), Martín (15), Akash (9), Helshara (4)]
Robyn (ilesa)
Infatigable, la hechicera vuelve a invocar un nuevo orbe de ácido [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 86 (CD 21+), éxito, ataque de toque a distancia: 8+8 (CA ?), golpe, tirada de daño: 8] y su infalible magia vuelve a materializarse en una corrosiva esfera que abrasa la carne del malherido Akash.
Tognus (herido)
Vapuleado pero todavía en pie, el tenaz enano arremete de nuevo contra su atacante decidido a poner fin a un combate que ya se le antoja demasiado largo [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 62 (CD 51+), éxito, tirada de ataque 1: 5+18 (CA ?), golpe, tirada de daño: 6+9 +2 eléctrico; tirada de ataque 2: 1+ (CA ?), pifia, tirada de daño: 9+9 +2 eléctrico]. El feroz hachazo se hunde entre las costillas del gigante pero al tratar de asestarle un segundo golpe, el hacha encantada se hunde en la carne del gigante equivocado.
Polidoro (herido)
Viendo que la situación de su amigo enano cada vez es más desesperada, Polidoro arremete con violencia contra el acosado guardián del mausoleo solo para ser golpeado accidentalmente por su aliado. Haciendo caso omiso del dolor y de la descarga eléctrica que sacude sus miembros, el gigante de piedra blande su martillo de guerra contra su verdadero enemigo [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 67 (CD 51+), éxito, tirada de ataque 1: 16+16 (CA ?), golpe, tirada de daño: 7+10; tirada de ataque 2: 2+11 (CA ?), fallo]. Su martillo de guerra golpea de nuevo a Akash, consiguiendo atraer sobre sí la atención del gigante azul.
Martín (herido leve)
Algo contusionado por la dura caída pero en pleno uso de sus facultades mentales, el anciano clérigo se arrastra por el suelo para alejarse de su enemigo al tiempo que invoca contra él una abrasadora fuerza elemental [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 55 (CD 51), éxito; tirada de daño: 2+5+5+5+6; TS de Reflejos de Akash: ? (CD 20), éxito, daño recibido: 11; TS de Reflejos de Tognus: 7+6+2+2, (CD 20), fallo, daño recibido: 23; TS de Reflejos de Polidoro: 17+4 (CD 20), éxito, daño recibido: 11; prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 45 (CD 51), fallo, TS de Reflejos de Helshara: 9+3 (CD 20), fallo, daño recibido: 23]. El gigante siente la lengua de fuego que se precipita sobre su espalda y trata de apartarse de su camino pero no puede evitar que la explosión le alcance. Quienes no prevén los efectos de la destructiva magia de Martín son sus compañeros, que también sufren en sus propias carnes el poder abrasador de su conjuro.
Akash (agonizante)
Con el cuerpo cubierto de cortes, hematomas y quemaduras, el coloso se encuentra en una situación apurada, pero lejos de darse por vencido saca fuerzas de flaqueza para vengarse de los enemigos que tiene al alcance de su mano [pruebas para superar el porcentaje de fallo mágico de Tognus: 72,4 (CD 51+), éxito y fallo, tirada de ataque 1: ? (CA 27+1-3+4+4), golpe, tirada de daño: 16; pruebas para superar el porcentaje de fallo mágico de Polidoro: 86,3 (CD 51), éxito y fallo, tirada de ataque 2: ? (CA 28-1), golpe, tirada de daño: 12; pruebas para superar el porcentaje de fallo mágico de Helshara: 31,17 (CD 51,31), 2 fallos, tirada de ataque: 1+ (CA 26-8-2), pifia; ataque de oportunidad de Polidoro: 1+ (CD ?), pifia]. El defensor del mausoleo golpea con saña tanto a Tognus como al joven gigante de piedra. Cuando trata de hacer lo propio también con Helshará, ésta rehúye el ataque y Polidoro ve la oportunidad de asestar un golpe definitivo a vuestro adversario. Por desgracia, la impulsividad de vuestro compañero se hace resbalar en el charco en el que se muestra la sangre de Akash con la vuestra y queda tendido de bruces mientras el martillo de guerra escapa de entre sus manos.
Helshara (herida)
Acusando los golpes y quemaduras sufridas, la sacerdotisa de Pelor continúa encomendándose a su dios para que el combate toque a su fin antes de que Akhas o Martín os maten a todos [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 20,41 (CD 41+), fallo y éxito, tirada de ataque 1: 6+7+2-2 (CA ?), fallo; tirada de ataque 2: 8+2+2-2 (CA ?), fallo]. Sin embargo, la deidad debe estar distraída en estos momentos con otra cosa pues ninguno de los golpes de su devota parecen causar el menor daño en la gruesa piel del gigante azul.

Martín grita con cólera de viejo que deja escapar un caramelo en una cabalgata:

-¡Me cagó en la puta! ¡La magia está aquí más zumbada que el coño de la Bernarda! Arreglaré el entuerto antes de que haya bajas.

El combate alcanza cotas de locura cuando en un momento dado comienzan a lloverme golpes desde todas direcciones. La agresión comienza cuando me interpongo accidentalmente en el camino de Tognus y éste me propina un terrible hachazo en la espalda.

Intento ignorar las sacudidas eléctricas que recorren mi espina vertebral y consigo asestar un martillazo a Akash pero mi acalambrado cuerpo me juega una mala pasada cuando trato de conectar el segundo golpe.

Apenas tengo ocasión de maldecir mi mala fortuna cuando una llamarada explota frente a mis ojos. Trato desesperadamente de apartarme del camino abrasador del fuego con tan mala suerte que termino tendido de bruces en el suelo y perdiendo mi martillo en el proceso.

Mientras trato de levantarme soy dolorosamente consciente de que estoy a merced de Akash y que si éste golpea mi espalda descubierta puedo acabar muerto o, peor aún, tetrapléjico.

Me arriesgaré a realizar lizar una nueva explosión sobrenatural. Si para cuando atacara ya ha caído el gigante, lanzó un hechizo de nivel 0, curar heridas menores para estabilizar al defensor enano. Me levanto como acción de movimiento. En ambos casos. Si el gigante no ha caído me aparto 5' del gigante con lo que me resta de movimiento. Si sí ha caído me acerco a mis compañeros para auxiliarlos.

Helshara apretó los dientes y sacudió la mano para descargar un conjuro rápido antes de reanudar sus ataques contra Akash.

¡Mierda! -repitió Robyn.

La agente de los Ruiseñores cogió un puñado de escamas de serpiente de uno de sus saquillos de componentes de conjuro y se detuvo, esperando el mejor momento para lanzar un sortilegio que terminara de equilibrar la balanza a su favor. Eso si conseguía hacerlo funcionar. O si no se descontrolaba de forma inesperada, como acababa de ocurrir con la explosión de Martín.

Quinto Asalto (Se mantienen las iniciativas)
[Orden de iniciativas: Robyn (19), Tognus (16), Polidoro (16), Martín (15), Akash (9), Helshara (4)]
Robyn (ilesa)
Retrasando su iniciativa.
Tognus (agonizante)
Manteniéndose en pie gracias únicamente a su inconmensurable tozudez, el guerrero enano persevera en luchar a pesar de haber llegado más allá del límite de su resistencia [prueba para superar el porcentaje de fallo mágico: 58 (CD 51), éxito, tirada de ataque 1: 5+18 (CA ?), golpe, tirada de daño: 8+9 +3 eléctrico; tirada de ataque 2: 11+13 (CA ?), golpe, tirada de daño: 2+9 +5 eléctrico]. Sacando fuerzas de flaqueza, Tognus se lanza a por el gigante convertido en un heraldo de la muerte y repartiendo hachazos a diestro y siniestro. Nada puede hacer el debilitado Akash para defenderse de la furia imparable del enano y termina desplomándose de espaldas con dos profundos tajos cruzados en el pecho a través de los cuales se le escapa la vida.

El joven gigante de piedra casi parece sorprendido cuando en vez de recibir el golpe de gracia descubre que su adversario ha sido derrotado por el heroico Tognus. Se pone en pie y, cojeando, recupera su leal martillo de guerra.

Por su parte, el incorregible Martín se disponía ya a conjurar un nuevo infierno flamígero sobre los combatientes, que probablemente hubiera acabado costándoles la vida a todos ellos, cuando ve caer derrotado a Akash. Replanteándose sus opciones, decide tratar de reparar de algún modo el daño causado y acudir en auxilio del pálido y tembloroso enano [conjuro lanzado: "curar heridas menores", daño sanado: 1].

Helshara suspiró aliviada cuando Tognus abatió al gigante en una oleada de hachazos. No sabía cómo el enano se tenía en pie, y menos como era capaz de seguir peleando después del castigo que había recibido. La sacerdotisa de Pelor extrajo de su cinturón una varita y echó a correr hacia las puertas del Mausoleo de los Dioses.

-¡Rápido, al interior! -dijo Helshara y haciendo gestos para que la siguieran-. Os curaré allí dentro, espero que mi magia funcione allí. ¡Aguanta, Tognus!

Por fin cae el gigante azul y en ese momento noto que la vida se va yendo,

compañeros despues de esta ardua tarea apoyo la propuesta del  Helshara, entremos en el templo y veamos si dentro funciona la magia, por que a mi me quedan tres asaltos para caer al suelo.

ademas esperemos que lo que acabamos de hacer haya sido lo necesario para acabar con este asunto y no para ayudar a la muerte a entrar en este sitio y nos la haya jugado, que si encima de lo sufrido, bayamos sido utilizados me cabrearia mucho

Menudo espectáculo. ¿Quién iba a pensar que las cosas se pondrían tan feas para nosotros? Supongo que predecirlo era tan difícil como imprevisibles son las acciones del excéntrico Martín. Con él la vida está repleta de emociones peligrosas y tal vez por ese motivo nunca me he cansado de su compañía.

Recojo del suelo mi perdido martillo y me lo echo al hombro. No estoy ni de lejos en mi peor momento pero reconozco que me he llevado una buena tunda y hasta puede que tenga unos cuantos huesos fisurados. Incluso una costilla rota o dos a juzgar por el dolor punzante que se me clava cada vez que mis pulmones cogen aire.

El escozor de las quemaduras tampoco ayuda y me siento tentado a usar algún juguete mágico para aliviar el malestar. Sin embargo, Helshara sostiene la teoría de que dentro del mausoleo las cosas irán mejor y no me cabe ninguna duda de que sabe mucho más que yo. Así pues, decido aguantar un poco más y registrar el cuerpo de Akash antes de ponerme en camino al edificio. Tal vez Tognus tuviera razón y el difunto guardián tuviera alguna llave del mausoleo o algo parecido.