Partida Rol por web

Crimson Island (+18)

19:00 Hotel

Cargando editor
18/06/2019, 10:57
Christian Paul

Pensé seriamente el ayudar a ese anciano a buscar lo que encontraba... No, en realidad no. Bueno, si esto es una pérdida de tiempo, me voy entonces de aquí. ¿Sabe cuál es el camino de vuelta más rápido? Me gustaría tomar un barco o un avión de vuelta para dejar esta dichosa isla.

Cargando editor
20/06/2019, 23:42
Robert Ricks

-Aviones dudo que encuentres alguno en esta isla. No hay aeropuertos. Tendrás que dirigirte al puerto. Tal vez quede algún barco que no se haya marchado aún. A la gente no suele gustarle quedarse en la isla de noche... Buena suerte.

Con aquellas palabras y sin nada más que hablar con aquel hombre, volviste a bajar las escaleras con intención de marcharte. Después de todo había sido una pérdida de tiempo. Al llegar de nuevo a la planta baja, cuando te dirigías hacia la salida, te vino a la mente que aquella puerta estaba cerrada. Era muy probable que necesitarías la llave. Pero de pronto, un gran sonido de un mueble cayéndose resonó en el hotel. Por un instante pensaste que sería el viejo, pero no era posible. Aquel sonido había venido del sótano. Por el lugar que tú habías entrado. ¿Tal vez el viejo te mintió y el dueño sí que estaba allí?

Cargando editor
21/06/2019, 14:58
Christian Paul

«Bueno, gracias igualmente. Iré a ver si todavía queda un barco libre.» dije, tratando de aparentar educación y simpatía, cuando en realidad ese viejo me traía sin cuidado. Se me daba bien poner buena cara a extraños para ganarme su confianza. Bajé por las escaleras en dirección a la entrada.

Escuché caer un mueble en el sótano, de donde había venido, lo cual me extrañó bastante. Sin embargo, pensé en lo abarrotado que estaba ese sótano, con tantos cacharros y objetos inútiles, y era lógico que cualquier cosa se pudiera caer de pronto. Seguro que un mueble se había partido, roído por las ratas o las carcomas que seguro poblaban esta mierda de hotel. Sabiendo que el hombre tenía las llaves de este hotel, volví a dirigirme escaleras arriba, hablándole al anciano a medio gritos para que me escuchara. «¡Señor! ¿Puede abrirme la puerta de la entrada? ¡Estaba cerrada cuando entré aquí!»

Cargando editor
24/06/2019, 20:38
Robert Ricks

El anciano, que seguía rebuscando, te miró de nuevo pero volvió a lo suyo.

-No tengo la llave del hotel. Estaba cerrado cuando llegué. Tuve que entrar por la parte de atrás, pero me parece que estaba un poco inestable. Casi no lo cuento. En cuanto pasé, se derrumbó una viga y casi me dio en la cabeza. Debí entrar por la ventana abierta que daba al sótano. Te recomiendo salir por allí.- De pronto el hombre volvió a levantarse y pasó a tu lado para ir a otra habitación.- Te recomiendo usar una linterna o tu móvil para ver. Estaba muy oscuro por ahí y por eso decidí entrar por la puerta trasera.

Tras aquello, el hombre abrió otra habitación más y se puso a rebuscar en esa.

Cargando editor
24/06/2019, 22:18
Christian Paul

Miré al hombre, un poco decepcionado al saber que él también había entrado por el mismo sitio que yo, ya que esperaba que me pudiera abrir la puerta y no tener que volver a ese trasterucho oscuro y polvoriento. Tenía que buscar algo con lo que hacer luz, como había sugerido el anciano, así que me puse con ello mientras bajaba de nuevo las escaleras.

Notas de juego

¿Tengo un móvil para iluminar y no se me ha ocurrido usarlo? XD Uso el teléfono entonces.

Cargando editor
26/06/2019, 22:16
Director

Esta vez, usando el móvil para poder alumbrarte, bajaste las escaleras. Esta vez no tuviste ningún problema para ver el pasillo en el sótano con unas pocas salas. Solo había unas tres y, una de ellas, parecía abierta. Junto a la puerta había una silla tirada en el suelo. Seguro que era la silla con la que te tropezaste antes. Así que, esta vez, sin ningún problema, la esquivaste y entraste de nuevo en la habitación. En esta ocasión pudiste ver, gracias a la luz, la habitación completa. Todo estaba igual que habías estado palpando en la oscuridad antes. Pero cuando te dirigiste hacia la ventana, te diste cuenta de un pequeño detalle. Casi lo podrías haber pasado por alto, pero si no lo hubieras ojeado antes, no te habrías dado cuenta. En el escritorio, donde estaba el libro que viste sin título ni portada que finalmente dejaste allí tirado, no había nada. Es decir, el libro había desaparecido. En su lugar, justo donde se encontraba, había una huella de una mano hecha con lo que parecía un líquido rojo. Y parecía reciente. Pero no solo eso, sino que al girar tu rostro hacia la ventana te diste cuenta de algo. La ventana estaba cerrada.

Cargando editor
27/06/2019, 22:25
Christian Paul

«Vaaaale, esto comienza a espeluznarme un poco...» No podía ignorar el detalle de que el libro ya no estaba allí, y definitivamente esa mano antes NO estaba ahí. Parecía... sangre. Y eso no molaba un pelo. Tratando de controlar los nervios, hice varias cosas. Primero, traté de abrir la ventana, antes abierta. Esperaba que no estuviera cerrada con un pestillo o algo parecido, porque eso significaría que el viento no habría sido el culpable en absoluto. Segundo, grité fuerte hacia las escaleras para ver si el viejo me escuchaba. «¡Señor! ¿Seguro que no había nadie con usted aquí?» dije, esperando que mi voz resonara por las escaleras. Tercero, miré la señal de mi móvil, para ver si podría llamar a alguien que me explicara qué cojones estaba pasando aquí. Y por último, busqué a mi alrededor algún objeto con el que romper la ventana en caso de que fuera necesario, o un trapo para poder romperla yo mismo con mis puños sin tener que cortarme. 

Cargando editor
30/06/2019, 23:46
Director

Al mirar la ventana no te fijaste en que tuviera ningún pestillo echado. Sin embargo parecía de esas ventanas que, una vez cerrada, solo se podían abrir desde dentro. Después miraste la cobertura del móvil y, lamentablemente, no había nada de señal. Era incluso posible que en aquella islucha no hubiera señal en toda su superficie. Pero en el momento en el que te pusiste a buscar algo con lo que romper la silla, de pronto te sobresaltó la puerta cerrándose sola de un portazo. En ese instante escuchaste como si alguien recogiera la silla que había en el suelo y atrancaba la puerta con ella. Y un escalofrío te recorrió cuando escuchaste algo al otro lado de la puerta.

-Shhhhhhh....

Y tras ese sonido que te mandaba callar, comenzaste a escuchar pasos que se alejaban de aquel lugar.

Cargando editor
01/07/2019, 09:51
Christian Paul

Abrí los ojos como platos, quedándome callado mientras fuera quien fuera hacía un sonido que me dejó los pelos de punta. Sin saber muy bien qué hacer, esperé a que los pasos se alejaran de la puerta, y con cuidado abrí la ventana poco a poco, sin hacer ruido. Solo por si acaso, quizá eso viniera bien luego para salir más rápido. Busqué en la habitación entre los trastos (con prisa, pero sin hacer un solo ruido), cualquier cosa que me pudiera ser útil luego. Armas, linternas, baterías, pilas... cualquier cosa que me pudiera servir. A estas alturas me importaba una mierda robar, puesto que de todas formas nadie lo echaría de menos. Con el corazón en un puño, mientras rebuscaba en la habitación, me mantuve atento por si escuchaba algo fuera de lo normal. 

Esta isla era de locos.

Cargando editor
03/07/2019, 22:22
Director

Abriste la ventana sin ningún problema y luego comenzaste a rebuscar por toda la sala. Solo había trastos y más trastos hasta que llegaste al escritorio la la mancha de la mano. Abriste los cajones y, en uno de ellos, debajo de unos papeles inútiles, encontraste una linterna. Al cogerla, probaste para ver si funcionaba, y efectivamente se encendía. Alumbraba bastante bien, pero no sabías cuanta batería podría quedarle. Parecía que todo se había vuelto en calma, pero de pronto, un grito se escuchó en el piso de arriba. Lo más probable era que fuera del anciano que habías conocido. Cualquiera que te hubiera cerrado la puerta, parecía haber aterrado o atacado al anciano. ¿Sería un asesino? No era extraño en un lugar tan raro como ese.

Cargando editor
04/07/2019, 15:21
Christian Paul

«Mierda, mierda, mierda...» Estaba acojonado. Quiero decir, la mancha roja ya me había puesto los pelos de punta, pero ahora el grito del anciano me había aterrado por completo. Con la linterna en la mano empecé a pensar qué cojones hacer. No era ningún héroe, y el grito no había sonado a algo muy bueno. Estuve dudoso de si ir en su ayuda o no, pero al final... No sé. No lo conocía, no le debía nada. Agarré el marco de la ventana muy fuerte, casi hasta que me hice daño en las manos, sintiéndome un poco mal por el anciano. Pero desde luego no quería saber qué era eso que le había hecho gritar. Así que atravesé el marco de la ventana hacia la calle de nuevo, y me fui corriendo de ese maldito y escalofriante hotel, buscando de nuevo el lugar para irme de la maldita isla. Si al anciano le había pasado algo o no... No me importaba. Solo quería salir de ahí y volver a mi casa, con mi familia.

Cargando editor
07/07/2019, 23:05
Robert Ricks

Lograste salir sin ningún problema por la ventana. Y una vez en el exterior de nuevo, fuiste hacia la parte delantera para alejarte de aquel lugar lo más rápido posible. Pero de pronto, algo te llamó la atención. El grito de aquel hombre.

-¡No! ¡No puede ser! ¡No!

De pronto un gran estruendo sonó mientras veías como un cristal del piso superior se rompía y el anciano salía disparado por esta. El hombre acabó cayendo como un peso muerto, casi al lado de ti. Cayó bocabajo, dejando algo de sangre cuando su cabeza golpeó el suelo. Pero ni siquiera tuviste que comprobar su estado, pues viste una gran mancha de sangre en su espalda, rodeando el mango de un cuchillo que tenía clavado en la espalda. Entonces alzaste la mirada a la ventana. Algo de luz salía de allí. Posiblemente la linterna del anciano. Y pudiste ver una silueta. Una silueta de alguien. Quien fuera que acabara de hacer eso.

Cargando editor
08/07/2019, 03:07
Christian Paul

Vale. Hora de largarse. Esto no molaba un pelo. Sin detenerme a mirar quién era el chalado que acababa de matar al anciano, cogí el cuchillo por el mango y me lo llevé conmigo. Quizá fuera de utilidad más tarde. Y después de eso corrí como alma que lleva el diablo hacia el puerto de la isla, para salir de una puta vez de esa tierra infernal. 

Maldigo el día en que me enviaron ese correo para abrir el puto restaurante.

Cargando editor
11/07/2019, 23:17
Director

Comenzaste a correr por el camino que llevaba hacia la ciudad. Sería necesario pasar por allí si querías regresar al puerto según podías recordar en el mapa. El camino estaba rodeado de bosque, por el cual habías acabado llegando a aquel hotel. Las copas de los árboles se mecían por el aire mientras un silencio algo asfixiante por aquella situación se notaba en el ambiente. Y mientras seguías corriendo y corriendo de pronto escuchaste algo que de nuevo hizo que tu corazón volviera a acelerar.

-Shhhhhhh...

De nuevo aquello que habías escuchado en la sala, ahora acababas de escucharlo detrás de tu propia oreja. Al girarte por aquello, no viste rastro de nadie ni nada. Sin embargo, sin tiempo que perder, pensando que podrían ser paranoias, te volviste a girar para seguir corriendo y, de pronto, te percataste que frente a ti, tirado en el camino, había un libro. El mismo libro que habías visto en el hotel. Un libro con una huella sangrienta en su portada.

Cargando editor
14/07/2019, 16:53
Christian Paul

A esas alturas estaba acojonado. Totalmente. Notaba cómo poco a poco la ansiedad se apoderaba de mí, y lo único que quería hacer era correr y correr, intentando despistar a lo que fuera que me estaba siguiendo. No pensé muy claramente cuando lo hice, pero sin ninguna razón real de peso cogí el libro del suelo y seguí corriendo. No sabía si podría decirme algo, o si podría utilizarlo para algo. Mirándolo desde el lado racional, probablemente era una estupidez de alguien que no pensaba ya con claridad, pero en su momento pensé que quizá pudiera hacer algo con él. 

En cualquier caso, seguí corriendo en dirección al puerto. Quizá pudiera llegar antes que lo que sea que me estaba persiguiendo. Mantuve el cuchillo arrancado de la espalda del anciano apretado en mi mano. Necesitaba algo de seguridad en esta mierda de día y de isla y de su puta madre. Y ese cuchillo podía darme la seguridad de que al menos no estaba desarmado.

Cargando editor
16/07/2019, 23:16
Director

Tras coger el libro, seguiste y seguiste corriendo sin detenerte. Hasta que, sin saber en cual momento, aquella sensación que tenías de que alguien te seguía desapareció. Aquellos ruidos y susurros se convirtieron en silencio. Por un momento parecía que todo había pasado. Miraste a tu alrededor, buscando cualquier cosa extraña que vieras entre los árboles, pero no había nada. Por lo que por un instante pudiste descansar tranquilo.

Fue entonces cuando el libro que acababas de recoger te pareció importante. Entonces lo abriste y comenzaste a pasar hojas y hojas. A simple vista parecía ser un libro de cuentas del hotel. Escrito a mano posiblemente por su dueño. No parecía haber nada hasta que, finalmente, llegaste a las últimas hojas.

Cita:

Últimamente ocurren cosas extrañas en el hotel. Los inquilinos se han quejado de susurros que escuchan cuando están a oscuras en su habitación y tratan de dormir. Otros dicen que sienten como si les observaran cuando están en la ducha. Yo mismo lo he notado cuando bajo al sótano para hacer inventario. Juraría que éste libro desapareció de mi escritorio y, varias horas más tarde, volvió a aparecer donde lo había dejado. No se si será por lo que me cuentan los inquilinos que me estoy volviendo paranoico, pero si de verdad está pasando algo tan extraño, quiero documentarlo aquí.

Sí está ocurriendo algo. Está ocurriendo algo muy extraño. He visto sangre en el cristal de mi habitación. Una huella de alguien. Espero que sea una broma, pero tengo miedo. Y cuando he tratado de salir del hotel, la puerta se ha cerrado de golpe. No se si podré salir de aquí. Robert. Si encuentras este libro, vete de aquí para no volver nunca. Huye. Aquí no hay nada bueno.

Todo se repite. Una y otra vez. Todo vuelve a ocurrir. Las huellas, los susurros. Las puertas que se cierran. No se cuanto tiempo más conservaré mi cordura.

Cargando editor
17/07/2019, 15:59
Christian Paul

Cerré el libro, tragando saliva. Así que esto ya había pasado... Era escalofriante. Las palabras del dueño del hotel me dejaron con un sudor frío en la espalda, y una sensación de angustia creciente. Quería gritar, golpear cosas, pero me contuve. No habría sido buena idea revelar mi posición de una forma tan estúpida después de perder a... lo que quiera que fuera. Pensé en lo que me dijo el abuelete, y en que su hermano era el dueño. Parece que lo que estaba buscando lo tenía yo ahora en mis manos. Tarde, ya que había muerto sin descubrir nada de su hermano. En estas anotaciones no se dejaba nada en claro respecto a su paradero o a su destino, pero podía suponer que había encontrado un final similar al viejo Robert. 

"Piensa, Christian, piensa. Lo primero que tienes que hacer ahora es ponerte a salvo. No debe quedar mucho para llegar a los muelles, y cuanta más prisa te des en llegar, antes podrás salir de esta mierda de isla. Y no tardarás en volver con Pauline. Sí... Seguro que te está esperando con una deliciosa tarta en el frigorífico. Y Elizabeth..."

Con esto en mente, cerré el libro y lo guardé conmigo. Dudaba que tuviera mucha mayor utilidad, ahora que lo pensaba fríamente, pero lo quería conmigo, quizás como un recordatorio de que no debía bajar la guardia. Algo me estaba persiguiendo, y esta isla había dejado de ser una mierda de isla para ser una trampa mortal. Con decisión continué mi camino hacia los muelles, tratando desesperadamente de salir de aquí cuanto antes.

Cargando editor
19/07/2019, 22:14
Anthony Smith

Mientras seguías avanzando hacia el pueblo para cruzarlo y así llegar al puerto, de pronto se escuchó un ruido entre los árboles. ¿Había regresado? Pero pronto lograste comprobar que no se trataba de eso. De entre los árboles apareció un chico corriendo y con cara asustada.

-¡Ahhhh! ¡Ahhh!- Sin ver por donde iba, acabó chocando contigo y cayendo al suelo. Su primera reacción fue arrastrarse hacia atrás mientras lograba procesar con quien había chocado. Pero al verte, su cara se tornó en sorpresa.- ¡Se... señor! ¡Ayuda, por favor! ¡Esther...! ¡Esther está...! ¡El santuario...! ¡Había algo y... Esther se está atrapada! ¡Por favor, ayuda!

Cargando editor
20/07/2019, 13:19
Christian Paul

Escuché algo en los árboles y casi grito del terror. ¿Había vuelto a por mí? ¿Me había encontrado? Vi que algo salía de los árboles y chocó conmigo, y caí al suelo, maldiciendo entre dientes. Al levantar la vista vi a un chico asustado, que balbuceaba pidiéndome ayuda. Por si acaso mantuve el cuchillo escondido a mi espalda. 

«¿Qué haces? ¡Mira por dónde corres, estúpido!» El chico estaba aterrado, y no podía articular palabra adecuadamente, pero dijo algo de un santuario y de una chica atrapada. No podía traerme más sin cuidado en esta situación. «Oye mira, tengo prisa chaval. Tengo que coger un barco antes de que se haga de noche. Siento no poder ayudarte, pero seguro que todo sale bien, ¿eh?» dije, mientras me ponía en pie y seguía camino al puerto. 

Cargando editor
22/07/2019, 23:00
Anthony Smith

El chico rápidamente se puso en pie y fue detrás de ti, todavía alterado. Trató de ponerse delante de ti para evitar que siguieras ignorándolo.

-¡N...no, señor, por favor! ¡Estábamos en el santuario, cuando el suelo se hundió y...! ¡Esther se cayó al sótano! ¡Traté de sacarla pero no respondía! ¡Y entonces vi esa... cosa! ¡Tenía... tenía unos ojos rojos y brillantes! ¡Pero al mismo tiempo parecía una sombra! ¡Era como si me siguiera! ¡Como si se hubiera vuelto mi sombra! ¡Mira!

Entonces el chico se alumbró a si mismo de forma que pudiste ver su sombra. No había nada fuera de lo común. Una simple sombra que la propia ley de la física demostraba como algo común. Entonces el chico volvió a apartar la luz.

-¡N... no estoy loco! ¡Le juro que vi eso! ¡Por favor, señor!