La vuelta a la rutina, el trabajo mal pagado, el cuidar de ti y de los tuyos se ha vuelto monótono. Sabes que ese loco despertó algo en ti que ni tu mismo sabias que tenias. Pero no es algo para ir mostrando en todas partes, además... con antecedentes... acabarías de nuevo en el trullo sin apenas darte cuenta.
Dejo tu residencia a tu antojo
Cobras menos de 400€ al mes en tu mierda de curro, sumando al de tus padres apenas llegais a los 1500€ para poder manteneros toda la familia y pagar el alquiler del piso.
Pon tu ficha en la ficha de personaje y si falta algo ahora es el momento de solucionarlo. :D
Miro la puerta del piso y abro apoyando el peso de mi cuerpo sobre el pomo.
Hoy también he tendido turno doble y estoy rebentado-Hola, hay alguien?-Cada dia digo lo mismo al entrar, y como cada dia me siento en el sillón del comedor a la espera de que Raquel y Edu vengan a decirme como les ha ido el dia.
Yo también pienso en ello, todo parece como antes pero la rigidez de mi espalda no dice lo mismo. Aparto la mano de mi cuello i saco de mi cabeza los recuerdos de lo que pasó ese dia, ni siquiera me habia dado cuenta de que tenia la mano allí.
Los dos pequeños se te acercan joviales como cada día, empiezan a contarte las vivencias del colegio, sobreponiéndose uno al otro, total que no entiendes nada de ninguno de los dos
Sonrio ampliamente, notando como me tira la piel del cuello y me rio.
-Mas despacio que no me entero de nada. Que tal si me lo contais mientras hago la cena?
Nuestros padres llegarán en un rato del trabajo, es mejor si preparo yo la comida para que ellos no se tengan que preocupar. Hoy los niños cenaran pronto.
Me levanto y en la cocina miro que hay en la nevera
Poco hay en la nevera, un par de huevos, frankfurts, algo de fruta, y sobras de la noche anterior.
Suspiro al ver la nevera, contando los dias que quedan para fin de més.
-Estoy un poco cansado así que hoy hay lo de ayer con salsichas, vale?
Calculo mas o menos lo que queda para ver si con lo que hay da para los 4, mientras troceo los franktfurts.
Da para los 4 si usas todos los frankfurts que quedan.
Miro el reloj de la cocina para ver a que hora vuelven nuestros padres y empiezo a preparar los ingredientes para la cena. Intento que más o menos esté todo para cuando nuestros padres lleguen.
Mientras cocino voy hablando con mis hermanos.
-Bueno, ahora ya me podeis contar lo que ha pasado hoy. Poco a poco.
Los pequeños se miran entre ellos y empiezan a hablar los dos a la vez
Intento pillar todo lo que puedo que digan estos dos mientras espero a que lleguen nuestros padres.
Apenas pillas nada... si ella grita, el pequeño sube más la voz, eso se convierte en un concurso de gritos y tus oídos sufren ese colapso de sonidos
Intento aguantar durante un rato los gritos para ver si se tranquilizan pero al final mis oidos se hartan.
-Raquel, Edu estais gritando, parad ya. A ver, Raquel primero tu, después cuando acabes habla Edu, vale? Bien.
Mi voz ha sonado bastante mas alta de lo que esperaba pero de otra forma no hubieran hecho caso.
Los críos se miran y ríen, después es Raquel la que empieza
- Hoy en el cole hemos hecho los regalos para los papas antes de las vacaciones de navidad...
- Yo también - interviene el pequeño
A partir de ahí vuelven a solaparse explicándote el regalo que han hecho con manualidades. Logras medio entender que unos han hecho un dibujo de Papa Noel con algodón, purpurina y hierba seca y el otro un árbol de navidad con saco y regalos... o era un Papa Noel con algodón y un saco de regalos y el árbol con purpurina y hierba seca... Las palabras vuelven a mezclarse en ese pequeño griterío descontrolado. Pero ahora hasta incluso te parece divertido poder mezclar ambas cosas y entender lo que buenamente puedas.
Asiento mientras los escucho atentamente y sonrio por los regalos que han hecho. Miro de reojo la nevera para ver si hay sitio para colgar los dibujos.
-Hey que os parece si le hacemos una sorpresa a mamá y papá cuando lleguen y les enseñais los regalos? Seguro que les encanta.
- Si, si, si!!! - gritan los dos contentos.
Cocino la cena mientras espero a que mis hermanos preparen los regalos y a que nuestros padres lleguen.
Pequeñines, les encantan las fiestas.
Oyes a lo lejos unas llaves que intentan meterse en la cerradura de la puerta, los pequeños empiezan a revolotear, corretean por la casa no sabiendo si esconderse o esperar sentados la entrada de tus padres.
Espero a que se abra la puerta y digo en voz alta. -Hola. Que tal ha ido el dia? Los pequeñajos tienen una sorpresa para vosotros.
Entonces espero atento a escuchar las respuestas y reacciones de nuestros padres.
Tus padres entran y tras tu saludo se quedan en la puerta esperando a ver la sorpresa. Los pequeños cogen de la mano a tus padres y casi los arrastran hasta la mesa de la cena donde están los "regalos".
Tras abrirlos, la estampa se torna muy familiar, tus padres cogen en brazos y abrazan y besan a tus hermanos mientras ellos les explican como lo han hecho y que se les quedaban los dedos pegados con la cola blanca y demás anécdotas del colegio. No les dejan de prestar atención ni un segundo.
Les dejo un rato mientras acabo la cena y al cabo de un rato les digo.-Podria alguien poner la mesa, por favor? La cena está casi hecha.
La sonrisa no se me va, me encanta ver a los pequeñajos tan contentos.