Partida Rol por web

Esta es tu escena personal. Cualquier pensamiento o acción privada la pondrás aquí. Todo lo que hagas en grupo, lo narrarás en la escena común

El príncipe te lleva a una habitación privada, alumbrada con unas antorchas y que tiene una mesa y dos sillas bastante toscas.

Bueno, ahora estamos entre compañeros de Clan. Conozco a tu familia mortal desde hace bastante tiempo, y también escuche historias acerca de tu conversión. ¿Quién te abrazó? ¿Qué relación guardas con tu sire? 

Viendo la expresión apenas perceptible de impaciencia que denota tu rostro, dice:

No te impacientes. Para soldados prescindibles ya tengo a la manada de bestias Gangrel y a los ruidosos idealistas de los Brujah.

Tu eres mucho más importante que todos ellos, y por ello necesito conocer algo más de tu pasado. Una vez tenga toda la información que necesito, sabrás el por qué de mis preguntas

La expresion de Karl se torno sorpresa al conocer las preguntas del principe, no esperaba tal curiosidad, pero bien es cierto que no era un secreto su conversión. Aunque los hechos en si si podian darle problemas a Karl si alguien los revelase, por lo que no era muy dado a contarlos abiertamente.

- Mi señor vuestra curiosidad me... alaga, fui abrazado por unos de los lideres del brazo armado de la cruz negra, como ya sabra. Y mi relación con mi sire, bueno solo conozco mi historia, pero he de admitir que fue tirante en un principio... En la actualidad no tenemos apenas comunicación.

Karl no formulo ninguna pregunta, nodebia y no queria, el propio principe se explicaria. En cualquier caso para realizar preguntas hay que tener algo de informacióny Karl no la tenia, se conformaria de momento con saber que no contaba más de lo neceario.

Una sonrisa de disfrute y relajación se vislumbro en su rostro al oir hablar al Principe de ese modo, sin duda se preguntaba que hacia él llamado junto a ese grupo de... cainitas de segunda, bueno almenos no eran de los bajos clanes y no se le ocurria otro modo de que hubieran sobrevivido hasta ahora.

Parece ser que aun tirante, estas muy orgulloso de tu naturaleza Cainita. ¿Has cometido alguna vez un Amaranto?

No temas, no habrá represalias por tu respuesta. Sólo responde a la pregunta, y en caso de que no ¿Serías capaz de cometerlo si supieras que no te ocurriría nada?

Los ojos del Príncipe relampaguean a la luz de las antorchas. Casi parece que sus ojos dan luz a las antorchas en lugar de ser al contrario.

El interrogatorio del principe me acorrala cada vez más y mis temores se aporan de mi, puede que si respondo inadecuadamente salga perjudicado de esta estancia...

Rapidamente me soprepongo a la situación y recobro mi seguridad en mi mismo, frunciendo el ceño y mirando directamente a los ojos del Principe le respondo:

- No he cometido nunca Amaranto mi principe, y no se me ha pasado por la cabeza hacerlo. Hago una pausa teatral, como si ya hubiera terminado de responder a la pregunta formulada por el principe, más continuo hablando.

- Pero comprendera que existen situaciones a las cuales aun no me he enfrentado, las cuales me podrian hacer desear e incluso realizar Amaranto. Desconozco cuales pueden ser esas situaciones, adelantadome a su siguiente y logica pregunta, pero no muchos estan a salvo de verse tentados o empujados por la venganza a realizar tal acto.

Me siento en la mesa pues parece que la situación se puede poner tensa.-Con permiso.-Digo al sentarme. Segun lo que responda el principe, y coloco mis manos entrecruzadas a la altura de la boca. Impidiendo que el principe pueda ver la reacción en mi rostro, y con mucha educación aparto la silla y me siento.

El príncipe ve la alerta en los casi imperceptibles gestos de tensión en los músculos de Karl, y comienza a reirse

Relajate, hijo. Me gusta tu forma de pensar, pero no tengas miedo a lo que puedas responder. Te explicaré más detalladamente lo que busco de vosotros, y en especial, de ti.

Herr Allbrecht fue enviado a Viena por mi a modo de representante. Mantuvimos un contacto más o menos constante, utilizando un ghoul de mi entera confianza a modo de mensajero, de modo que me informaba semanalmente de los secretos que descubría. Su última carta fue de  hace unas tres semanas, y noté en su escritura una cierta angustia y premura por escribirla, ya que su grafía era demasiado estirada y de un solo trazo. En ella me comentó sus sospechas acerca de la presencia en Viena de un LaSombra llamado Vittorio Lachetti, un mecenas veneciano. Los principales ataques por Slatcha en Viena se sucedieron un mes antes de su llegada, y dejaron de registrarse ataques a la semana de llegar. 

Allbrecht tenía suficientes motivos para creer que los Slatcha se crearon en Venecia; pero para poder investigarlo, necesitamos un permiso para poder entrar en las ciudades estado italianas. Es por ello por lo que debes ganarte el aprecio de Vittorio, y también su confianza, para que podais obtener todos vosotros este permiso. Una vez lo tengais, usaremos a nuestros perros Gangrel y Brujah para rastrear Venecia en busca de los que están creando estos monstruos.

Trata de que el resto se comporte dignamente, ya que no dejaran entrar a gente bárbara en sus ciudades.

¿Alguna pregunta, Karl?

Karl se puso recto en el asiento mientras su principe hablaba, los lasombra de venecia eran posiblemente uno de los lugares menos apetecibles a los que viajar, y la rivalidad entre nuestros clanes se haria patente antes o despues.

- Ardua tarea me encomendais su majestad, sobretodo teniendo que cargar con esa bestia vikinga... Sonrio de medio lado mientras freno en mi lengua la palabra Gangrel.

Me incorporo y hago una reverencia, ya no es necesario que sigamos reunidos y no quiero suscitar curiosidad a mis "pares".

- Cumplire lo mejor que puedo mi cometido majestad. ¿Alguna sugerencia de como deberia abordar a Vittorio Lachetti? Me gustaria ir sobre seguro durante mi "negociación" con él.

Aguardo la respuesta del principe mientras pongo mis manos detras de mi espalda, el principe oculta algo, pero no sera ahora cuando me lo diga, quizas cuando yo tenga información sobre venecia pueda recabar porque ese interes por mi pasado...

Por lo que he podido deducir por Allbrecht, Vittorio es un perro ambicioso como el que más. Nunca te ayudará si no ve que puede ganar mucho más a cambio. Busca algo que el anhele y ofrecele mucho más a cambio. Si no es muy complicado, podremos satisfacerlo, pero en caso contrario, siguele la corriente hasta que tengáis los permisos y después veremos como dejarle con las posaderas al aire como a un vulgar despojo

Puedes irte con tus compañeros. Eres libre de contarles lo que consideres que ellos deben saber, así que confío en tus criterios para seleccionar tus contactos de confianza. Recuerda que los clanes son solo eso, clanes, y nunca sabes quién puede ser un excelente aliado a pesar de tener diferentes habilidades e intereses

Si me disculpas, yo tambien debo irme. Si necesito algo de ti te enviaré a un mensajero de mi confianza

Hago una reverencia y salgo de la estancia sin decir nada más, el principe me ha honrrado con esta misión... Y si salgo victorioso seguramente me gane un puesto en la corte.

Sonrio ampliamente mientras salgo de la estancia, pocas veces me he sentido tan "lleno".

El viaje a Viena resulta bastante tranquilo; las noches, aunque frías, son despejadas y la luna ilumina los caminos apenas transitados, permitiendoos mantener una buena marcha a caballo, los cuales están acostumbrados a montar vampiros y no incomodan el viaje en carruaje

Llegas con tu séquito a las puertas amuralladas de Viena un lunes a las 8:00 PM en caso de que Casio hubiera inventado los relojes. Para vosotros, hace poco rato que anocheció

Tras un leve intercambio de palabras con el guardián de la entrada, entras al paso en la ciudad

Me desperezo en el interior de mi carroza mientras uno de mis recipientes me avisa que ya hemos llegado y es de noche, justo como lo planee, pienso para mi mientras premio al recipiente por tan buenas noticias succionandole de forma placentera algo de su sangre, lo necesario como para terminar de desperecarme y despertar de mi letargo.

- Me gustaria dirigirme lo antes posible al refugio donde esta Vittorio, asi pues dirijase al lugar acordado cochero.

Digo desde el interior del carruaje, al hablar se puede ver como mis dientes estan llenos de vitae, y la sensación de placer se hace palpable en mi rostro. El poder, la sed y la posterior sensación al saciarse es tan... abrumadora.

Me siento en el respaldo y con cara de satisfacción espero a que lleguemos al lugar acordado.

Mi señor - dice tu siervo- No conocemos la morada de Vittorio. Sin embargo, creo que sería mejor opción ir a presentar nuestros respetos a Lotharius, el Príncipe de Viena. Quizá el pueda decirnos donde encontrar a este hombre

El cochero tiene suerte de que no quiero llamar la atención de forma desfavorable tiñiendo las calles con su sangre, de hecho es doblemente afortunado ya que desde su posición no puede ver la mirada asesina de Karl, que podria haberlo fulminado en el acto. No obstante el ruido de unos nudillos crujiendo le recuerdan su posición y un escalofrio recorre su espina dorsal previniendole de futuras ganas de hablar.

- Presentemos nuestros respetos pues, si os place COCHERO.

Vuelvo a recostarme en el como asiento del carruaje y suspiro, un acto reflejo de su vida humana quizas, mientras sonrie de medio lado. Esperaba ahorrarse la visita al principe, al menos de momento, asi podria evitar a sus "compañeros". Deseaba comenzar las negociaciones sin que se viera relacionado con ese grupo de indeseables.

Resignado cierro los ojos y espero pacientemente a la llegada al palacio del principe.

Llegas casi de madrugada a la Catedral de Viena, justo cuando una fiesta acababa de terminar. Los últimos rezagados van saliendo por la puerta de la catedral. Un soldado te ve y sonríe

Por fin llegas, Karl. Un poco más y tenemos que ir a por ti. ¿No sabes que siempre hay que presentar los respetos al Príncipe de la ciudad donde llegas?

Dicho esto, se da media vuelta y sigue conversando con su compañero.

Te hacen pasar a la sala Principal, donde algunos Nosferatu están limpiando los despojos de lo que debieron haber sido los ganados sacrificados de la fiesta. Al cabo de un rato, el príncipe Lotharius de Viena aparece por la puerta

Bienvenido a Viena, Karl. Jürgen me avisó de tu llegada. ¿Qué puedo hacer por ti?

Haciendo una pronunciada reverencia me inclino ante el principe y le saludo de manera cordial.

- Muchas Gracias su majestad por atenderme aun siendo tan tarde, pido disculpas ante mi falta de modales.

Me incorporo y camino un par de pasos hacia el principe, de manera natural y sonriendo un poco prosigo.

- Os pido,humildemente, permiso para permanecer en la ciudad de Viena durante el transcurso de unos negocios que tengo con algunos cainitas en vuestra ciudad. Asi como orientación y consejo.

Espero erguido las palabras del principe, debi llegar antes y poder charlar tranquilamente con él, bueno siempre podemos hacerlo mañana cuando me haya instalado en la ciudad.

Por el refugio no os debeis preocupar, ya que os alojaré en una de las habitaciones de invitados. Una de ellas está ocupada, pero por si acaso reservé la grande para una visita de más alta alcurnia. Acompañadme

Te lleva por varios pasillos hasta que se detiene en mitad de uno de ellos. Apoya la mano en la pared y empuja de ella con fuerza, dando paso a una habitación oculta con varios ataudes

Aquí podrás descansar sin problemas. Debo irme ahora, pero volveré mañana por la noche.

Dicho esto abandona la sala, bloqueando de nuevo la entrada

Sin añadir nada mas saludo al principe con un ademan y me dirijo hacia mi "cama", muchas cosas acontecerian mañana y queria estar listo para todas ellas.

Duermo placidamente y me dejo llevar por el sopor que producen las priemras horas de sol, mientras ideas y ensoñaciones del productivo dia de mañana se agolpan en mi mente.

Al salir de tu habitación a la noche siguiente, te encuentras con una muchacha joven y bella, que te entrega una nota de Lotharius

Vittorio me ha enviado invitaciones para una fiesta de Gala en su palacio en Viena. Será un nido de víboras LaSombra, pero confío en que tu asistencia sea útil para tu misión. Y ahora, bebe de mi regalo, pero no la mates, puesto que no me quedan más virgenes. Un vikingo salvaje me desfloró a casi todas y ahora tengo que buscar nuevo ganado

Sonrio un poco mientras leo la nota, el principe debe estar molesto por mi tardanza anoche, no me preocupa demasiado ya que mis negocios discurren lejos de este palacio y ahora mismo no le debo lealtad a él, pero debere andarme con ojo de volver a molestarle... Puede que le defienda en la reunión de esta noche y le de algo de la información que alli recupere. Quizas asi vuelva a ganarme su favor.

Miro a la chica mientras le acaricio el cuello, su frescura e inocencia me embargan y me alimento de ella más de lo que necesito. Pero dejandola viva y consciente.

- Ha sido un placer hermosa dama.

La dejo postrada en la cama donde he dormido y me dirigo a la fiesta del Lasombra con mi carruaje a toda prisa.

El viaje es corto. El palacete de Vittorio no está lejos, y llegas cuando la gente aún está comenzando a acudir.

El salón es muy lujoso, con varias obras de arte en las paredes, estupendas arañas de estilo italiano y multitud de espejos, posiblemente diseñado para que sus compañeros LaSombra no se sientan demasiado a gusto en esa casa y así evitar tener más alimañas de las necesarias bajo su techo

Aún no se ve a Vittorio, pero hay varias personas en la sala, algunos haciendo círculos