Partida Rol por web

- El interior está diseñado, al igual que el exterior, con la practicidad como preocupación principal. - El sobrio caballero dedica una sonrisa a su sire, inclinando la cabeza en primer lugar en su dirección, como muestra de respeto, y posteriormente al resto de la comitiva.- Aunque no difiero de la apreciación del señor Damjanich con respecto a su apariencia, el verdadero valor de la torre está en la solidez y fuerza de sus muros. Cualquier enemigo pagará un arduo precio si desafía este paso.

- Su posición remota, además, dificulta el reunir a la fuerza necesaria para amenazarla.

Con un gesto con el brazo, les invita a entrar en el lugar. - El señor Lenz me ha asegurado personalmente que todo está preparado para recibirles debidamente.

Ramírez, aún mas descompuesto por el paso del tiempo aparece de entre las sombras.
--Bienvenidos sean-- dice realizando una leve reverencia.
Tras esto queda en segundo plano al amparo de las sombras.

- Todo lo bien que hemos podido en un lugar como este. Los establos están preparados para los carruajes, el servicio avisado y el señor Damjanich aseguró que tenía el alimento dispuesto. – completo a Yago con educación y saber estar.

Espero a la comitiva dentro de la torre, por suerte Giancomo va adelante y puedo unirme sin acercarme demasiado al que supongo será sire de Yago.

-Bienvenidos damas y caballeros. Permitanos enseñarles la torre.

No es necesario que os marcheis si no quereis, pero eso lo hablaremos más tarde.

"¿Quedarme en esa pocilga en el culo del mundo? Ni de broma, pero me alegro que haya colado el falso elogio"

Al ver que varios de mis compañeros hacen referencia al "Señor Damjanich" saco pecho con orgullo.*

Todos nuestros esfuerzos terminaban hoy, así que ya no había que escatimar más recursos ni sangre. Un alivio. Podíamos sacrificar a la mitad del ganado residente si eso hacía disfrutar más a nuestros huéspedes.

- Si me hacen el favor de seguirme...

Hago un gesto con mi mano derecha señalando la puerta del edificio y encabezo la comitiva con la barbilla en alto.

En el recibidor nos esperaría un chico joven y sano de mejillas rosadas con un antifaz tapándole los ojos y todo un set de cristalería lista para poder ofrecer su sangre a los invitados.**

La "fiesta" de bienvenida va muy bien, veis que tanto Jervais como vuestros sires están complacidos, tanto por la tarea cumplida, como por la recibida, con unos buenos alimentos.

Jervais deja caer que recibió un mensajero vuestro que le informaba de las tablillas, pero como ya venía hacia aquí prefería recojerlas el mismo.

Finalmente, cada uno de vuestros sires os pide de ir a hablar a solas.

Sonrio ante Lazar, demostrando claramente que estaba orgulloso de el.

Muy buen trabajo Lazar, sabía que podía confiar esta tarea en ti. Sigo sonriendo. Así que te has ganado una buena recompensa.

He conseguido los derecho para tomar la ciudad de Kronstad, cerca del paso de Bran. Es una buena ciudad comercial, con lo cual puede que encuentres muchos viajeros y arte. Además está protegida por la orden teutónica, así que podrás reinar tranquilo.

Miro a Markus sonriente por haber hecho ese gran trabajo para el clan Tremere, con eso nuestra reputación mejoraría ya que Jervais era el chiquillo de Malgorzata y ella podría hacernos ascender fácilmente.

Gran trabajo Markus, no esperaba menos de ti. Digo afable. Te debo una recompensa por haber conseguido esta misión.

He podido reclamar los derechos de la ciudad de Balgrad, una de las más grandes de la zona. Además se de buena mano que el anterior príncipe dejó una biblioteca inmensa, la cual seguro que es un gran pasaiempo para ti.

Entramos en la sala y paso mis brazos por detrás de tu cuello, esperando que seas tu quien se lance.

Has hecho un gran trabajo Ramirez, sabía que no había nadie mejor en quien confiar. Te miro dulce. Además te has ganado una buena recompensa... He encargado un nuevo barco, hecho como los que me describias tiempo ha, para que lo puedas disfrutar.

Miro a Teodor sonriente por haber hecho ese gran trabajo para el clan Tremere, con eso nuestra reputación mejoraría ya que Jervais era el chiquillo de Malgorzata y ella podría hacernos ascender fácilmente.

Muy buen trabajo Teodor, he acertado eligiendote como mi representante en esta tarea. Te doy una palmada en el hombro. Te has ganado una buena recompensa.

He conseguido los derechos de la ciudad de Schaasburg, una de las 7 más importantes de la zona para que reines allí.

Cuando entramos junto, hago una mirada maternal hacia mi chiquillo, aunque mi falta de piel no deja entrever demasiado.

Ah joven Yago, has sido un chiquillo excepcional consiguiendo llevar esta tarea a su exito, te debo una buena recompensa por ello.

--Ha sido un calvario estar aqui en mitad de la nada, lejos del mar y de ti-- dice triste y cabizbajo en árabe.
--Pero por fin estas aquí.-- dice dandole un tímido abrazo.

La fiesta va tan bien como cabía esperar, dados los recursos disponibles; el caballero suponía que la alegría de los reunidos se debía más a la Prestación de la que se habían librado entre ellos que a cualquier éxito o plan futuro en la región, pero para Yago eso no eran más que matices casi irrelevantes.

Yago no se sentía del todo satisfecho, pese a todo. La sensación de que podría haber hecho más le pesaba, pero dada la compañía en la que se había encontrado, hubiera necesitado más tiempo y recursos...

Acompañó a su cadavérica Creadora a una de las habitaciones que habían preparado en la torre; la condujo, de hecho, a una de sus favoritas personales, y que esperaba que la agradase e hiciera sentir cómoda: su pequeño estudio, con sus libros cuidadosamente ordenados en estantes, sus notas y sus copias de las tablillas debidamente enrolladas y clasificadas.

Un lugar no muy distinto a la celda de un monasterio, al que tanto estaban acostumbrados ambos.

- Sin duda, las circunstancias han requerido un esfuerzo excepcional por mi parte. - respondió con una cálida sonrisa a su Sire. Puede que no tuviera mucha carne sobre los huesos, pero Yago llevaba estando a su lado el tiempo suficiente como para reconocer cada uno de sus rictus. - Pero no hubiera tolerado un resultado que acabara en su decepción, dama Troglodytia. - Y le hizo una educada inclinación. - Verla satisfecha es ya en sí una gran recompensa, pero escucharé lo que tenéis que decir, para seros de más valor en el futuro.

-Oh, sire. Es una gran recompensa - ¿Donde está el truco? - Trataré de estar a la altura como siempre.
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Realmente no sé que pensar. Es mucha recompensa para lo que hemos hecho y también significa que ahora Vykos y Radu podrán cobrarse favores más interesantes...

Cuando Aurel me pide hablar a solas, le sigo el rollo con cierta indiferencia aunque claramente satisfecho en mis adentros

"Ahora quieres algo de mí después de que te haya hecho el trabajo sucio... será un placer rechazarte en la cara"

Sin embargo, el motivo de la charla es el de otorgarme un premio. Un principado nada menos!

"Por fin se me reconoce y llega el momento de subir otro peldaño, ya llevaba demasiado tiempo estancado en el mismo estrato social y empezaba a preguntarme cuándo avanzaría."

- Así que esta es tu forma de pedir disculpas por deshacerte de mí todo este tiempo?

Respondo, todavía algo agrio al cumplido de mi sire.

- Muy bien, lo acepto.

"Así de fácil"

- Pero dime, por qué no tomas tu el liderazgo esta ciudad? ¿por qué cedérselo a tu chiquillo? ¿A caso no te tienta la idea de gobernar una ciudad o es que has recibido una recompensa mucho mayor de Jervais?

Le interrogo, desconfiado.

Agradezco las palabras de mi sire con un gesto de respeto.

-Gracias Giancomo, espero que uestra deuda haya quedado saldada, y sin embargo, debo deciros que las deudas de alguno de vosotros no habrian de quedarlo, puesto que los enviados no han llegado a comprometerse tanto como el resto con la mision, es más, si por el pirata hubiera sido, la mision habria fracasado...

Acepto tu abrazo sin problemas y lo correspondo.

Ahora podremos estar un tiempo sin problemas junto, de nuevo en el mar. Te sonrio, esperando que aceptes mi regalo.

Sonrio a mi chiquillo, que es lo que realmente era. Para ser un vampiro tenía unos valores morales incorruptos y una buena educación.

He conseguido los derechos para una pequeña aldea de la zona, y quiero que sea para ti, te mereces un pedazo de este mundo donde poder pasar tus noches y poder seguir tu entrenamiento y estudios con tranquilidad.

Sonrio ante la aceptación de Markus.

Solo falta una cosa para poder terminar el trato. Acerco mi brazo y retiro mi ropa de el. Necesito que me demuestras la confianza en mi, reforzando nuestro vinculo, y tras eso, la recompensa será completamente tuya.