Partida Rol por web

Cuestión de identidad

Y entonces desperté (personaje 2)

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01/09/2008, 20:30
Director

Abres los ojos. Una sensación de entumecimiento, y un cosquilleo desagradables, atraviesan tu conciencia. Has estado durmiendo, no sabes exactamente cuanto tiempo. Una luz cenital, probablemente de luces de emergencia, llena la sala con un color entre grisaceo y anaranjado. Miras a tu alrededor. Parece una habitación de hospital. Pero no hay instrumental médico, ni tampoco parece haber anaqueles. Solo una cama con sábanas que, parecen, estar limpias. Tampoco hay ventanas, ni sillas para acompañantes. Solo la cama, una cámara pegada en la pared, una especie de pantalla de ordenador apagada, y una puerta. Desde donde estás, acostado, no puedes saber si está abierta o cerrada.

Tampoco hay un espejo en la habitación. Y ese hecho sin importancia hace que tu mente se de cuenta de otro de mayor gravedad. No recuerdas como te llamas. Ni siquiera recuerdas tu cuerpo.

Sientes una repentina sensación de vértigo y ansiedad. El lugar donde estás tendido es una cama, sí, pero se te antoja dura, incómoda.

No sabes quién eres. Ni qué día es hoy. Ni cómo te llamas. Tampoco sabes qué haces aquí, ni cómo es tu cuerpo. Te sobrepones a duras penas al vértigo. Algo debes hacer. La cuestión es qué.

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03/09/2008, 08:36
Rubia

La cabeza me da vueltas y tengo la extraña sensación que algo o alguien pugna por taladrármela. Siento la cabeza abombada, como si mi cerebro estuviese a punto de explotar, algo así como una olla a presión. Mis ojos tardan en adaptarse a la luz, parece como si los hubiera tenido cerrados por mucho tiempo. ¿Dormía tal vez? No lo se. Quizás sí, quizás no. ¿Y si alguien me narcotizó? Intento recordar pero no lo consigo.

Observo todo a mi alrededor, tratando de encontrar algo que me sea familiar, pero nada. ¿Dónde estoy? No lo se, aunque parece un hospital. ¿Un manicomio tal vez? ¿Será que algo le pasa a mi cabeza y por eso me han encerrado?... Tengo que saber, necesito saber. ¿Quién soy?

Me llevo las manos al rostro, intento reconocer su forma. Tanteo mi cuerpo con la misma intención, busco reconocerme. No hay espejos ni nada en ese lugar para verme el rostro, entonces reparo en la pantalla del ordenador, allí podré ver mi imagen reflejada. Soy mujer, de eso no cabe duda, pero ni siquiera recuerdo cómo es mi rostro.

No sin esfuerzo me incorporo, pero el mundo no deja de darme vueltas, siento náuseas, ganas de vomitar y me tapo la boca. Camino a la pantalla, me observo, aunque distorsionado está mi reflejo, pero me observo. Ordeno mi cabello enmarañado y miro la cámara de la pared, le hago un gesto con el dedo. Me observan... ¿Soy una prisionera?

Camino hacia la puerta, debo salir, necesito salir, quiero respuestas y encerrada en esa habitación no creo que las encuentre.

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03/09/2008, 22:54
Director

La pantalla está apagada, y la cámara de video no te sigue cuando te mueves. Parece que nadie te observa, aunque no podrías asegurarlo. Tu reflejo, está vagamente distorsionado. Eres una mujer, sí. Joven, y crees que bastante hermosa. Pero necesitas mas datos. Tocas tu cabello, efectivamente enmarañado, y notas una terrible migraña. Casi como si alguien te hubiea golpeado la cabeza. Pero no hay heridas, ni descubres golpes cuando te palpas. El pelo, recuerdas. Es largo. De un rubio ligeramente castaño. Bien cuidado, estás segura, sería un pelo bonito.

Te acercas a la puerta, aunque la nausea parece complicarte mucho una acción tan sencilla como esa

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03/09/2008, 23:06
Rubia

Tomo la manilla de la puerta e intento girarla para abrir de ésta, pero otra vez las náuseas me lo impiden. Siento como si sudara, pero lo extraño es que no es de calor, sino de frío.

Observo mis manos y el color de mi piel. Es de un color chocolate, soy mulata. Siento la boca seca, tengo sed. Recorro otra vez la habitación con la vista, en busca de una jarra con agua, una llave o algo, pero nada. Tomo la manilla con fuerza y tiro de ella, parece no querer ceder.

-¡¡HOLA!! -grito mientras golpeo la puerta esperando que alguien me oiga.

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05/09/2008, 08:48
Director

Miras tu piel. Aunque de un tono broncígeno natural, no eres mulata. Probablemente europea, latina. No sabes si española, griega o italiana. De una zona del sur, eso seguro.

Recorres con tu mirada la habitación en busca de una llave, o de agua, mientras te apoyas en la puerta. Su tacto metálico, grueso, te estremece, brevemenente. Coges la manilla, la mueves. Pero nada. No llegas siquiera a terminar el movimiento. Te agarras la barriga mientras intentas evitar las arcadas. Por primera vez te das cuenta cabal de tu absoluta desnudez.

A pesar de todo golpeas la puerta.
- -¡¡HOLA!! -gritas mientras golpeas, esperando una respuesta.

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05/09/2008, 10:24
Rubia

Me doy cuenta que estoy completamente desnuda, algo que debido al aturdimiento y éste maldito mareo no me había percatado. Regreso a la cama, le saco las sábanas e improviso un atuendo de vestir con una de ellas. Rasgo un poco de tela por aquí y otro por acá y al final consigo armar algo muy parecido a un sari, túnica, vestido o como quiera llamársele... no será el último grito de la moda pero al menos cumple su objetivo.

Las náuseas no cesan, pero intento controlarlas. Vuelvo a mirar por los rincones de la habitación, no pierdo la esperanza de encontrar algo que me sea de utilidad para abrir esa puerta. Miro en la cama a ver si hay un interruptor o algo que me sirva para llamar a la enfermera, pues supongo que deberá existir una y o al menos alguien... ese lugar, aunque algo descuidado, necesita de alguien que lo mantenga.

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08/09/2008, 02:18
Director

Al observar la cama de mas cerca, te fija en que hay un brillo metálico en la cabecera de la misma.

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08/09/2008, 03:59
Rubia

Frunzo el ceño.

-¿Qué será eso? -me pregunto y me acerco.

Al examinar lo que hay en la cabecera veo que se trata de algo metálico, es pequeño, pero quizás me pueda servir para quitar la cerradura o algo, así que lo tomo, aunque no tiro de él por temor a que pudiera estar sujeto de algo.

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10/09/2008, 07:38
Director

Te acercas lentamente a la parte metálica sobre la cabecera de la cama, y te das cuenta que debe ser algún tipo de cajón metálico que se encuentra medio disimulado en la cabecera de la cama. Parece cerrado.

En ese momento un maremagnum de voces responden a tu grito de hace unos segundos, para tu sorpresa.

No llegas a entender lo que dicen, son gritos, de hombres y mujeres, seguidos de golpes en lejanas puertas. Habrá unos cuatro. O eso crees

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: ¿?
Resultado: 74

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12/09/2008, 00:54
Rubia

Estoy intentando abrir el cajón cuando de pronto empiezo a oír voces... gritos mejor dicho y golpes de puertas. Parece ser que allí hay más gente encerrada como yo.

Miro la puerta, estoy a punto de lanzarme a golpearla también, pero me detengo. Miro la pared...

-¿Y si hay alguien al otro lado? -me pregunto y empiezo a golpear la pared, esperando que si existe alguien en la habitación de al lado me escuche-... Hay quienes dicen que las paredes tienen oídos -me digo-... ojalá sea cierto.

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12/09/2008, 07:38
Director

Vas golpeando en la pared, y de pronto te das cuenta de algo inesperado.

Hay una parte de la pared que tiene un sonido distinto. Como a hueco. Está en la parte izquierda de la habitación, a unos dos metros de la puerta. Mientras, los gritos del otro lado siguen sonando, y ahora logras percibir las voces. Hay otras dos mujeres, y otros dos hombres.

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100
Motivo: percepcion
Resultado: 64

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12/09/2008, 18:14
Director

Notas de juego

Abro nueva escena. Gritos de desconocidos. Puedes postear alli, pero unicamente lo que gritas, y el tono. No puedes postear allí ni tus gestos, ni tus pensamientos, ni tus acciones. Solo lo que dices y como lo dices.

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14/09/2008, 06:33
Rubia

Pego mi oído a la pared y puedo oír la voz de una mujer que parece tan confundida como yo. Le respondo, aliviada por oír la voz de alguien más. De pronto se escucha la voz de un hombre, parece estar en la misma situación que nosotras y aunque no nos vemos y las paredes de ese lugar separan a unos de otros, comenzamos a hablar.

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16/09/2008, 15:57
Rubia

Una de las mujeres preguntó sobre cómo estaban nuestras muñecas. Observo las mías, nada raro veo en ellas, no parecen haber estado atadas como dijo ella.

Miro también mis brazos en busca de piquetes de aguja o algo. Me noto algunas marcas, al parecer me han estado medicando. ¿Pero por qué? ¿Quién? Me tomo la cabeza con ambas manos, sigo respondiendo a los demás, en parte es un alivio saber que no estoy sola y que hay más en la misma situación que yo.

Entonces alguien menciona el cajón. Es cierto, estuve intentando abrirlo pero al oír las voces dejé de hacerlo... y la pared.

Sin dejar de hablar y responder a las consultas de los demás, empiezo a buscar el modo de abrir ese cajón. Sigue cerrado, tiro de él con fuerza y busco algo que me ayude a violar la cerradura y a la vez busco algo todavía más contundente que me ayude a romper la pared, porque estoy segura que en esa esquina, donde el sonido era hueco, puede estar mi salida.

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17/09/2008, 18:56
Director

No hay asidero para tirar con fuerza del cajón, puesto que este carece de pomo o de asidero alguno. Tal vez con algo para hacer palanca... o tal vez haya un resorte en otro lugar.

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18/09/2008, 23:40
Rubia

Busco por todos lados algo que me pueda servir para abrir el cajón. Levanto el colchón de la cama, intento darla vuelta, a ver si hay algo que le pueda sacar y me sirva para hacer palanca o algún mecanismo oculto que abra el cajón... algo debe haber... eso espero.

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19/09/2008, 09:43
Director

Se trata de una cama bastante mediocre, y no tienes dificultad en quitar el colchón. Debajo una tabla de luterma actúa como somier. Puedes, si lo deseas, obtener uno de los alambres de la cama, para usarlo como improvisada ganzúa... al menos así podrás saber si sabes utilizarlas. Al menos sabes que existen, lo que ya es algo.

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19/09/2008, 16:40
Rubia

Consigo sacar un pedazo de alambre y lo doblo en la punta para hacer una ganzúa, que aunque precaria, espero que me sirva. No se de dónde es que se hacer esas cosas o saqué ese nombre, no recuerdo nada de mí ni de mi vida, mucho menos de cuáles son o dejan de ser mis habilidades, pero si no lo intento nunca lo sabré.

Meto la punta doblada en el lugar que se supone debe meterse la llave y empiezo a mover el alambre en círculos y de un lado a otro, esperando oír ese click que me indique que el´seguro ha sido sacado.

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19/09/2008, 17:05
Director

Aunque el material no es el mas adecuado, notas que no es la primera vez que haces algo así. Y te tomas tu tiempo. Lentamente vas recorriendo la abertura, hasta que escuchas un sonido. Ligeramente vas tratando de enganchar el alambre en un reborde, o de mover de arriba abajo el mismo para "engañar" al cierre.

Y finalmente, cuando estás a punto de desistir, oyes un chasquido, y el cubículo se abre.

Dentro hay un aparato muy extraño. Y por lo que parece está roto. El aparato es médico, de alguna manera. Tiene un indicador, que probablemente recogiera los datos físicos, y toda una serie de diodos, cables, vias... cuya longitud es suficiente para que la imagen de tu cuerpo en la cama, rodeado de todo ese instrumental médico, se te aparezca en un flash repentino y atronador.

Te ves en la cama. Y estás chillando. Todos esos cables están en tu cuerpo, miras hacia arriba y solo ves la consola llena de números y datos que no puedes reconocer. La imagen es de una fuerza tremenda, y el mareo se apodera de ti

- Tiradas (1)

Tirada: 1d100(-20)
Motivo: Abrir cerraduras
Dificultad: 34-
Resultado: 38(-20)=18 (Éxito)

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19/09/2008, 20:58
Rubia

-¡Lo conseguí! -exclamo al ver que el cajón se abre.

Dejo el alambre a un lado, tengo la impresión de que no es la primera vez que hago algo similar, pero no me detengo a analizar demasiado la situación, me interesa más saber lo que hay al interior del cajón.

Lo que me encuentro es realmente raro, parecen objetos en desuso y/o defectuosos, instrumentos de medicina por lo que parece, lo que me reafirma más que estoy en una especie de hospital... ¿O será un sanatorio mental?

De pronto siento algo así como una punzada en el cerebro y una serie de imágenes comienzan a sucederse en mi cabeza, cuál de todas más inquietante. Me veo en una cama, esa cama, con todo ese aparataje sobre el cuerpo, es horrible, la visión es traumática. Me siento mareada y tengo que afirmarme con ambas manos de la desarmada cama, mis piernas se doblan y caigo al suelo de rodillas.

-¿Qué es todo ésto? ¡Dios! ¿Dónde estoy? ¿Qué me han hecho? ¿Qué me pasa?

Siento el pecho apretado, la sensación de angustia me embarga y comienzo a sollozar mientras me tomo la cabeza a dos manos y comienzo a balancear el cuerpo adelante y atrás.