Partida Rol por web

Ya fuera de la sala, Terenthius se aleja un poco de los guardias, esperando que Verhanna le siga.

Dime entonces, quizás alcancemos a averiguar algo antes de que se vayan los "concejales".

Ahora ya más tranquilo, Terenthius hace incapié en la última palabra.

El concejal que parecia mas relajado tiene todas las papeletas para tener algo raro que esconder, ha sido el unico en no incomodarse ante nuestra presencia, quien si no un demonio que se cree poderoso haria eso? me entiendes por donde voy no??

El concejal Elijah será entonces...

Tendremos que ir a investigarlo entonces. Debemos esperar a que terminen su reunión entonces, luego iremos a hablar con Elijah...

Su voz es tranquila y su rostro se muestra pensativo.

Aunque parece tener muchos guardias, quizás no sea tan fácil obtener una "entrevista" con él...

Me parece bien, veamos que podemos sacar, como estaran nuestros compañeros, espero que hayan sacado algo en claro

Al cabo de un rato largo las puertas se abren de nuevo. Aparece Anne ante vosotros.

- ¿Aun por aqui mis queridos huespedes? La reunion ha finalizado. Si quieren algo tan solo pidanmelo. Ahora si me disculpan voy a comer algo, ¿seran tan amables de acompañarme durante mi comida o ya han comido?

Por supuesto que le acompañaremos -dice Terenthius apresurada y cortésmente- Luego podremos partir en busca de algúna poca más de información sobre el tema.

Disculpe que me entrometa, pero ¿A qué se debió la reunión?

Su tono era algo incómodo, pues sabía que arriesgaba un resto con esa pregunta.

Verhana miró tranquilamente a la alcaldesa mietnras esperaba que esta contestara, su mirada tranquila, pero hacia una exploracion mas haya de los gestos, intentando ver algun gesto extraño en su rostro

- Hablaba con mis concejales acerca de vuestra visita. Les estaba comentando que por fin nos librariamos del demonio. Hemos estado planificando un nuevo plan de accion esta mañana. Comiendo os lo comentare.

Terenthius usa su mejor tono para hablar, aunque algo forzado.

Vamos entonces, señoritas -dice, mirando a ambas- Que el tiempo no es algo que a alguno de nosotros le sobre. Detrás de usted, señora alcaldesa.

Dice esto último haciendo una ligera reverencia mientras señala al comedor.

Y hace planes justamente cuando llegamos nosotros? Que extraño

Pensamientos extraños pasaron por la mente de Verhana mientras avanzaban hacia el comedor. Nerviosamente se empezo a morder una uña, intentando ver mas haya de los planes que veia y ver lo escondido

Entrais en el comedor, nada lujoso fuera de lo comun. La mesa ya servida con comida para 3 personas. La alcaldesa se sienta presidiendo y quedan vacias dos sillas una a cada lado.

- Tomad asiento por favor .- Os dice la alcaldesa despues de haberse sentado. En la mesa podeis ver fuentes con carne asada y verduras y una jarra con vino con un aroma realmente extraordinario.

Terenthius corre el asiento para Verhanna y se sienta en absoluto silencio, sin hacer el más mínimo gesto, se acerca un poco la fuente con carne asada y se sirve un poco de vino.

Disculpe que me apresure tanto, alcaldesa, pero... ¿Cuál sería este plan del que nos habló?

Verhana se posicionó detras de Terenthius esperando que la alcaldesa comenzara a hablar y contara su plan. Mientras con los ojos mantenia un estado de alerta

- Sabemos que el demonio tiene un patron. Siempre ataca a la misma hora. Antes lo hacia siempre en el mismo lugar. Pero conforme aumentó la vigilancia en ese punto el demonio atacó en otros menos defendidos. Actualmente no sabemos ya donde va a atacar y empezamos a desarrollar milicias urbanas. Patrullas de aldeanos y esas cosas. Pero es inutil, no tienen preparacion. Son carne de cañon para el demonio.

Terenthius hace una pausa para tragar un bocado.

¿Y la iglesia no ha hecho nada? Después de todo, las amenazas demoníacas son trabajo de los paladines. ¿No tienen alguna órden de paladines cercana a la ciudad?

- No me tire de la lengua acerca de la Iglesia, por favor. Solicitamos ayuda y lo unico que me consta que ha llegado fue ayer de madrugada, al poco de llegar ustedes dos, un discipulo de la Mano de Plata y un vulgar enano curandero. Solicitamos ayuda a Vientormenta y eso es lo que nos han enviado. 2 aprendices. La iglesia en esto no se quiere ver metida. Los sacerdotes del templo dicen que bastante tienen con encargarse de los cadaveres.

Terenthius se sonrie, casi lo único no forzado que ha hecho desde que llegaron a la ciudad.

Lamentablemente no es la fé la que mueve las montañas, es el poder. Tal parece que en la iglesia no tienen bien puestas sus prioridades, aunque supongo que será porque no han sufrido ninguna pérdida en sus filas aún. Supongo que los fieles seguirán sufriendo hasta que caiga alguien del clero, entonces se pondrán a trabajar...

Terenthius habla tranquilamente mientras acaba su plato.

Bueno, yo creo que ya será hora de partir, la información no llegará sola a nosotros, debemos movernos...

Si, quizas encontremos algo mas ahi fuera, por cierto a que hora exactamente suele atacar el demonio? Creo recordar que no nos la ha dicho