Partida Rol por web

Los miembros de Kalimdor se reunen con los de Lordaeron.

Maldicion!!! Por mas que rastreo la zona no encuentro nada....

Conozco a compañeros capacez de seguir el rastro a un lobo semanas despues de que este haya pasado. Mis aptitudes no son tan buenas, pero siendo tan minucioso y con la ayuda adicional del Tauren si no he encontrado nada tiene que ser por algun motivo...

Puede ser que el asesino al que nos enfrentamos sea un gran experto en no dejar marcas... o quizas es que directamente no deja marcas...

¿Que clase de criatura no dejaria marcas? ¿Quizas una voladora?

Si volaba por magia no creo que encuentre nada, aunque quizas hayan indicios del conjuro por la zona. Si volaba impulsada por alas quizas el viento que lanzaba mientras hacia el picado o se mantenia atacando nos pueda decir alguna cosa.

Tendre que seguir buscando... esta vez fijandome bien en los pequeños detalles... hojas desplazadas por corrientes de aire... hierba doblada sin pisadas... pequeñas ramas rotas de arboles cercanos...

... tambien tendre que observar el cadaver

Si le ha atacado una criatura voladora, las heridas estaran hechas de arriba hacia abajo... y claramente señalaran al agresor en una posicion elevada. No seran en ningun momento pruebas definitivas, pero ayudara a descartar la teoria.

Si le tenemos que poner alguna trampa a la criatura, al menos sabremos donde mirar...

Lastima que quemaran el cadaver... Dirijiendome al guardia le digo:

- ¿Quien examino el cadaver del guardia antes de quemarlo?... me gustaria que me respondiera algunas preguntas

Saludos Alkarik, es bienvenida una cara amistosa entre tanto barullo.

El paladín estrecha la mano al elfo y al tauren.

Veo que hemos llegado al mismo sitio, ¿qué habéis descubierto?

El guardia te contesta:
- Los sacerdotes incineran a los cadaveres, para evitar posibles alzamientos tras la muerte.

El próximo cadáver que aparezca dejadlo intacto, si se levanta yo mismo lo volveré a llevar a la tumba.

El guardia sonrie:

- Eso, maese orco, explicasedlo a los clerigos del templo.

Sin dejar de buscar indicios por los alrededores, levanto una ceja ante la respuesta del guardia...

- ¿Quieres decirme que nadie se ha fijado en el cadaver antes de quemarlo? ¿Que lo habeis incinerado sin llegar a mirarlo?

Maldigo para mis adentros... pero solo por un instante. En seguida me doy cuenta que un simple soldado no tiene por que conocer esos detalles...

Intento tranquilizarme y le digo...

- No pasa nada... pero tendremos que hablar con los clerigos que lo incineraron.

Dicho esto vuelvo a mi busqueda de alguna prueba de que alguna criatura voladora minimamente grande haya pasado por la zona.

Al elfo nocturno ante sus últimas palabras

Espero que, por lo menos, podáis sacarle algo a los malditos sacerdotes... no son muy proclives a ser sociales con los demas.

Aunque no permito que las palabras de Darus me distraigan de mi tarea, me permito una sonrisa...

No son muy proclives a ser sociales con los demas... y menos con los extranjeros. Tienes toda la razon, Darus. Espero no tener que llegar a la situacion de permitir a Rhuptus use su "diplomacia".

Pese a mis pensamientos, no digo nada ahora que estan los guardias presentes.

El guardia se os queda mirando:

- Bien señores, si no necesitan nada mas de mi, me voy a seguir con mi patrulla. Hasta luego, y buena suerte.

Creo que los clérigos,deberían haber hecho algo más que incinerar los cuerpos,al menos ,espero que recuerden,qué tipo de muerto obtuvo la víctima,antes de ser quemada,por el fuego.Menciono,al percatarme que no hemos sacado nada de información,con lo que me apresuro hacia el templo.

- Los sacerdotes nos dijeron que la victima murio desangrada, que la herida fue echa por una garra como de un oso, eso fue todo lo que logramos sonsacarle.

Algo se te ha pasado por alto y ahora acabas de verlo. La glorieta tiene una puerta de madera pequeña, unas escaleras para subir a la plataforma central, supuestamente. El caso es que en la arena que hay enfrente de la puerta esta goteando sangre. Levantas los ojos hacia lo alto y te cubres con la mano para no deslumbrarte. Desde lo alto puedes ver un reguero de sangre cayendo. Es un hilo muy fino.

Eso ya nos lo han dicho,no sabrías decir algo más útil,si se trata de un oso,o alguna otra criatura más peligrosa,digo mientras pierdo mi mirada,observando el lugar.

El enano se encoge de hombros

- Fue lo unico que logramos averiguar.

Para enfatizar lo dicho por el enano

Theros tiene razón... ayer no nos dieron muchos más detalles sobre el cadáver y las circustancias de su aparición, esos sacerdotes.

Pues vamos, ¿a qué esperáis para contarnos lo que os dijeron? El orco estaba impaciente, su sangre hervía de impaciencia, pues él era un guerrero consumado, y la tranquilidad le resultaba incómoda.

Concentrado buacando pruebas, Alkarik no prestaba mucha atencion a lo que decian sus compañeros sobre los clerigos... hasta que de repente se paro delante de la pequeña puerta de la glorieta. Levanto los ojos y por fin lo encuentro... algo que no encaja.

Sin dirigirme a nadie en concreto digo:

- Veamos que tenemos aqui...

Me arrodillo y tomo un poco de arena junto a la puerta y me la acerco a la nariz...

- Sangre

Busco con los ojos al Tauren y le señalo un fino reguero de sangre cayendo desde lo alto.

- Veamos de donde sale esta sangre

Intento subir por donde sea mas facil para comprobar de donde sale la sangre.