Partida Rol por web

Masaru terminó de cocinar junto a Daichi y, antes de volver, abrió la nevera y sus ojos se abrieron mucho por la sorpresa: ¡Una tarta de chocolate de forma rectangular de unos 80 centímetros ocupaba toda una balda!. Sacó la tarta y se encontró en la cobertura algún tipo de sirope que parecía un charco de sangre y una silueta de chocolate blanco en un extremo. Juntos parecía la escena de un crimen. También ponía las letras WELCOME en su centro. La tarta era una broma de mal gusto pero tenía una pinta estupenda y no podía simplemente ignorarla y guardarla. La sacó corriendo a la mesa del comedor y partió un gran trozo para ponérselo en el plato, acto sevuido, comenzó a comer con avidez. ¡Mmmmmh! ¡Qué buena está! ¡¡Mmmmmmmmmmmmmmmh!! Deberíais probarla - Dijo disfrutando cada bocado y apresurándose a por el siguiente

Puedo aceptar una cosa así, te he editado el mensaje para que sea para todos los de la sala.

La televisión de las salas en las que estáis se enciende y la estática deja paso a la figura redonda y achuchable de Monokuma y tiene un mensaje importante para vosotros.

- Quién sabe, Miko, pero si no tomamos datos cuando la oportunidad se nos presenta, lo tendremos más difícil más adelante.- Me sorprende que no sea más confiando en si mismo tiene buenas ideas. Con el grifo aún abierto lavo unas cuantas frutas, y con un trapo de cocina me hago un hatillo para llevarmelas al cuarto. Al fín teníamos una referencia sobre el mundo en el que vivíamos.- Bueno, tener las huellas de los demás, nos servirá para identificar al asesino en caso de que alguien caiga en la desesperación e intente graduarse. Aunque no quieran dárnoslas, estarán en la cara interior de las cápsulas. - Me seco las manos antes de ponerle la mano en el hombro.- Eres un chico listo, deberías tener menos miedo a decir lo que piensas y confiar en tus habilidades. Espero que nos veamos vivos mañana. 

Con mi maceta debajo de un hombro y la comida bajo el otro, me marcho a mi cuarto a atrincherarme. 

Ichida bebía de su Te ya mas tranquila, mientras escuchaba a los demás y sonrió al ver las capacidades de la gente. -Me gusta lo que decís. Es un modo de control, para que nadie haga algo innecesario. Estoy totalmente a favor. -Dio un sorbo apurando su taza.

-Pero supongo que eso queda para mañana, yo creo que hoy me retiro temprano. Buenas noches, amigos. -Se levanto hizo una leve reverencia y se marcho por la puerta.

-No miréis los vídeos -dije, como saliendo de un trance, después de permanecer en silencio largo rato-. Yo no lo he hecho. Ese puto oso sólo busca desquiciaros y que os preocupéis de salir de aquí cuanto antes, a cualquier precio. Probablemente lo que habéis visto ni siquiera sea real.

Escucho las palabras de Miko y hago un claro gesto de negativo, dejando escapar un suspiro.

-No deberías haber revelado tan pronto cuáles eran tus capacidades, sólo te pondrás una diana en la espalda. Aunque teniendo en cuenta que eres forense, por lógica muchos iban a intentar acabar contigo cuanto antes. La idea de las huellas dactilares me parece muy buena, pero quisiera proponer algo más efectivo: recoge nuestras huellas dactilares no sólo una vez, sino cada vez que se produzca un crimen. No descarto que alguno de los más avispados podrían quemar sus propias huellas dactilares antes de intentar cometer un asesinato para que no se les relacione con lo que pueda suceder. Sé que suena descabellado, pero teniendo en cuenta que aquí hay gente verdaderamente inteligente, toda precaución que tomemos es poca.

 Miko toma el café y la tostada que le había preparado Haga Daichi mientras sonríe brevemente ante los comentarios de Fukumori. Pero lo que dijo Striker-Tanaka le hizo helar la sangre por un momento:

- ¿M-mis habili-lidades? Oh no... oh no... es v-verdad. Si el ase-sesino recuerda mi talento, defini-nitivamente me querrá as... as... ¡Asesinar!

 Volviendo a su yo nervioso y mirando para todos lados en un manojo de nervios, mira el anuncio por Monokuma y rápidamente lo toma como una excusa para irse a su habitación.

- O-oh... miren la h-hora... ¡Bueno, buenas noches!

 Le da un rápido sorbo al café y un mordisco a la tostada y se va del comedor para dirigirse a su habitación.

-a mi tambien me parece bien lo de las huellas, asi podremos saber si alguien ha tenido relcion con el asesinato.

Veo a Miko irse y me levanto yo tambien recogiendo mi taza de te con tranquilidad y lo dejo en la cocina.

-bueno, me voy a dormir que ya es muy tarde, buenas noches a todos chicos

Salgo del comedor para ir a mi habitaicon

-¡Buenos, chavales, que yo también me piro! -me despedí de los pocos que quedaban allí, con un gesto de mano-. ¡Buenas noches!

Sin más, decido salir del comedor para dirigirme a mi habitación.

Cuando Matsuno se sentó junto con el resto aun con el susto en el cuerpo después de ver el horrendo vídeo. Se decidió a intentar probar bocado y beber un poco. Si iban a estar allí por largo tiempo lo iba a necesitar. Escuchó atentamente a las conversaciones que allí se sucedían y asintió cuando propusieron tomar las huellas de todos los que allí estaban. Desde su punto de vista, podía ser una forma de identificar a los posibles culpables si es que llegaban a cometer alguna atrocidad, cosa que deseaba que no sucediese.

- Yo estoy de acuerdo, la verdad. Togosaki Miko ya se ha retirado pero si mañana me lo pide le ofreceré mi ayuda, tanto con el maquillaje como si precisa mis huellas.

Después recogí la mesa y agradecí que Masaru y Daichi hubiesen preparado la cena. Recogí la bancada de la cocina y también me llevé algo de fruta por si tenía más hambre después, pues no había probado mucho de la cena después de aquello.

- Bueno, todos se retiran ya... Yo también me iré a mi cuarto a descansar. Hasta mañana.

Después de eso, la muchacha abandonó el comedor.

Mientras está en la cocina recogiendo las cosas, disimuladamente se coloca dos guantes de plástico de cocina y lava los platos, no sin antes meter la taza de té de Ichida Irisu en el interior de la bolsa de plástico con cuidado de no remover ninguna huella dactilar. Coloca en un paño la taza y un par de piezas de fruta y las tapa para que no se vean. Hace como que va a tirartlos guantes basura al terminartpero se los guarda y finalmente sale de la habitación siempre actuando con normalidad y despidiéndose.

Había estado comiendo la tarta en solitario hasta mucho más allá de lo que era sano, pero la tentación del chocolate le había podido.

Hubiera supuesto un alivio que alguien quisiera un trozo de tarta antes de que Masaru acabase con casi toda, pero no fue así, así que se la había prácticamente acabado y, en consecuencia, iba a tener una noche pesada.

Yo soy el siguiente en irme - Dijo con la boca llena de chocolate como si fuese un crío.

Buenas noches, chicos.

Se levanto con algo de esfuerzo y se tambaleó a la puerta.

Aunque en un principio venía con la idea de conocer un poco a los demás, me mantengo al margen observando, no se me ocurría manera alguna de romper el hielo y la mayoría estaban ya hablando entre ellos.

Sin embargo cuando entra el chico de la planta no puedo evitar oir lo que dice, bueno supongo que ni yo ni nadie, asi que cuando alguno más se une a la conversación me acerco hacia ellos, pero de nuevo no veo manera de integrarme en la charla asi que me limito a escuchar.

- Por cierto, el cura se ha hecho con una soga y poleas que había en la biblioteca, supuestamente para custodiarlas, pero no creo que sea de fiar. 

Cruzo una mirada con Haruki.

Al poco parece que todos empiezan a despedirse, vaya es más tarde de lo que pensaba, ¿pasaba el tiempo allí de otra manera acaso? 

- Sí, nosotros también nos vamos, buenas noches chicos.

Y salgo del comedor dirigiéndome hacia mi habitación. Seguro que han pensado que soy un poco raro, la verdad, yo lo pensaría.

Dentro de toda esta pesadilla he de admitir que con el abrazo de Daichi me sentí mucho mejor fue reconfortante sentir el apoyo de alguiealno pude evitar devolverselo con fuerza aunqie no demasiada, me pareció divertido como intentaba imitar a Maxweel, a pesar del momento tenso se me escapo una pequeña risa al oirlo recitar esos pasajes.

jajajaj gracias, enserio necesitaba algo asi.

También sentí pena por Matsune no puedo ni imaginarme lo que estaba pasando en su vídeo era parecido al mío.

Esperemos que sea eso y que los vídeos sean mentira tu padre vamos a dormir para estar frescos para mañana a pensar un para salir de aquaquYo también me ofrezco lo de las huellas dactilares, mañana se lo volvemos a proponer. Yo me voy a dormir ya intentar descansar vosotros también ¿vale?

Avanzo por el comedor despidiéndome de todo el mundo mientras me dirijo a mi habitación.

Vuelves a tu habitación

Registro el comedor de arriba a abajo en busca de pruebas que me ayuden a resolver el crimen.

Entras en la cocina y te das cuenta de que sigue faltando uno de los cuchillos que el día anterior faltaba, en primer lugar pensabas que alguien lo estaba utilizando para preparar una deliciosa tarta; pero ahora sabes que tiene que tener algo que ver con el caso. Apuntas este importante detalle en tu PDA.

Estás agotado, vas a quedarte en el comedor buscando más pistas; pero sabes que no vas a encontrar nada más, sólo lo haces por no moverte.

¡Obtienes una prueba! Clica aquí para ampliarla y guardarla.

Se enciende la tele y aparece Monokuma con un mensaje

Una vez pasada la noche, decidís reuniros todos en el comedor para desayunar y pensar en lo que vais a hacer hoy.

Maxwell es el primero en entrar, se notaba su cansancio de una noche de oración y preocupación; apenas había pegado ojo, no por el alma de Suzuki, a fin de cuentas, ella ya estaba muerta y era una criminal; sino por el caso de Yuichi, el cual con su estupidez continua había hecho cabrear al oso y ahora ya no estaba allá.

-Monokuma. ¿Donde está Yuichi?. Exijo que sea devuelto sano y salvo a este lugar.

Personalmente no sabía qué potestad tenía para exigirle nada a un oso robótico parlante con control total sobre las instalaciones en la que él se encontraba encerrado. Pero si Monokuma aparecía, sin lugar a dudas, él iba a luchar... con argumentos.