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Danza Macabra. x Cuarto Episodio: El Matrimonio de Iñigo

4. La Bruja

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25/04/2012, 22:55
Don Antón

Aquello no podía ser, no iba a dejar que aquel muchacho se muriera. Cerró los ojos y trató de recordar lo que le habían enseñado, como extraer una flecha sin dejar la punta dentro y sin que el herido se desangrase. De pronto lo vio todo con mas claridad, solo tenía que cogerlo desde la base, lo mas cerca posible del cuerpo y tirar de una vez, luego poner un trozo de tela en la herida y rezar.

- Tiradas (2)
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26/04/2012, 12:03
Samuel Sánchez

El manejo de la espada de Aleixo me había dejado embobado, le había cortado la pierna al comerciante sin apenas inmutarse, en un corte limpio y certero. La mayoría de esas heridas eran una auténtica chapuza, el enemigo gritaba como un cerdo antes de desangrarse, pero aquella herida era digna de admiración.

No había tiempo que perder, el barbero se desangraba en el suelo mientras el resto trataba de salvarle. Menuda estampa, ahora teníamos que salvar al médico de sus heridas. Me acerqué corriendo y me arrodillé junto a él.

- Haré lo que pueda, mi señor - dije haciendo un examen preliminar de sus heridas.- Vamos a ver...

- Tiradas (1)
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26/04/2012, 13:01
Roderigo

¡No puedo, don Antón! -dije mordiéndome previamente los labios-, no puedo dejar morir a Hernán así frente a este caduco truhán, aunque sólo sea por unas palabra que incluso quizá sean mentiras... ¡Imposible!

Acto seguido, volví a intentar la renimación a Hernán

- Tiradas (1)

Notas de juego

Joer...

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26/04/2012, 13:22
Aleixo d'Ocampo

Aleixo estaba callado. Los demás voceaban a su alrededor presos del pánico al ver morir al compañero pero el caballero permanecía arrodillado frente al atacante. Si moría, el secreto de Doña Luisa moriría con él. 

Taponó la herida del pecho para evitar que siguiera perdiendo sangre. Pero quizá lo hizo con demasiada fuerza y finalmente sonó como si una de las costillas dañadas terminase se quebrarse. 

- Al diablo... con este ya no hay nada que hacer.

- Tiradas (1)

Notas de juego

Una pifia en sanar... ¡qué desastre!

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26/04/2012, 18:40
Samuel Sánchez
- Tiradas (6)

Notas de juego

Jarl!! otro pj pa Soraheart :S

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26/04/2012, 20:01
Don Antón
- Tiradas (2)

Notas de juego

5 puntos le curo... Aunque uno es un critico, podían ser 9 puntos lo que le curase...

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26/04/2012, 22:30
Roderigo

Si alguno que yo creyera muerto tras asestarle tantas puñaladas como dedos tenía en la mano salió vivo algún día, y créanme sus mercedes que tal que así ocurrió una vez antaño, de la misma forma pensaba que Hernán podía salir de ese letargo de virotes...

¡Aguanta, desgraciado! -le susurraba mientras volvía a practicarle los auxilios de la mejor manera que podía.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Anda! que olvido.

Balin, devuélvele la vida a Hernán, aunque sólo sea por el alegrón por lo del Atlético! xD Enhorabuenarrr

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26/04/2012, 23:48
Director

Notas de juego

Haré cuentas cuando tire Aleixo (aunque me imagino que tirará para Matías) pero en cualquier caso creo que le dejáis casi casi salvado.

Y sí, semana redonda xDD

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27/04/2012, 14:46
Aleixo d'Ocampo
- Tiradas (1)

Notas de juego

Perdón por el retraso... pero he estado un pelín ocupado.

Pregunta jefe... la pifia anterior en Sanar, ¿tiene algún efecto negativo? Quiero decir... ¿aún puedo hacer las seis tiradas de rigor para intentar salvar a Matías y que hable?

Voy tirando y ya me dices...

Wow... cero éxitos. Ya no hace falta que me digas nada. :(

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27/04/2012, 15:12
Director

Durante algunos minutos se suceden los intentos  para evitar que Hernán muera, en el último momento, cuando pensábais que Hernán se reuniría con el Creador, gracias a los cuidado de Don Antón pero sobretodo, de Roderigo, lográis sacar de peligro al barbero, tiene el brazo destrozado y es probable que no pueda volver a usarlo, pero pese a todo vivirá.

No se puede decir lo mismo de Matías, pese a los intentos de Aleixo, quién se queda solo intentando salvar la vida del atacante, el espadazo que él mismo le ha dado es mortal. Nada se puede hacer por Matías, que expira en los brazos de Aleixo, llevándose con él  su secreto.

Si queréis descubrir qué está pasando, ya no podrá ser por él.

 

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27/04/2012, 18:53
Roderigo

Dándole unas cachetadas en la cara, como si le escuchase y estuviera escuchando y atendiendo a todo el proceso que le había devuelto a la vida, dejé entrever una sonrisilla; no por salvar la vida cuando a uno no le corresponde sino lo contrario, sino por comprobar que aún estaba en buena forma. También por que aquel grupo era competente a pesar de tan pésimos andares que llevaban hasta ahora.

Plas, plas -los guantazos eran sumamente leves y simbólicos.

Ya puedes despertar rápido, "barberil cirujano", que nos debes la vida y que a propósito que no se nos ha de olvidar... ¡Y que pesas mucho como para llevarte en brazos mientras sorteamos trampas, coño! -esta última frase lo decía con cierta jocosidad y euforia momentánea.

Rápidamente, el bueno de Roderigo se percató que aún estaban posiblemente ante peligros, o quizá tal vez cerca, y no era prudente estar allí mucho más tiempo.

Don Antón -dije girándome-, sería menester montarle en el caballo, pero como ahora no disponemos, demos marchar cuanto antes con él a rastras ¿no lo cree así? Más medicina no podemos darle. Sugiero que nos apresumeros a volver.

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27/04/2012, 20:57
Don Antón

Alexio no se opondrá pero no soy yo quien para decirle lo que debe hacer. Roderigo, cada vez estoy mas seguro de que sois un ángel enviado por el altísimo para protegernos. Yo solo no le habría salvado la vida-dijo poniendole una mano en su hombro con una sonrisa-será mejor que marchemos cuanto antes, es mejor que él esté en cama y cuidado lo antes posible.

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27/04/2012, 22:03
Roderigo

Miré la mano puesta sobre mí, la del noble. Giré levemente la cabeza y con ciertos ojos los mios puestos de reojos, puse cara de desconcierto. Cualquier otro que hubiera hecho eso no hubiera contado el desprecio o afecto que me estuviera mostrando (sin duda), pero, viniendo de aquella señoría, no podía rechazar tales palabras.

Bueno, bueno... -dije-, larguémon... ejem... vámonos de aquí, ¡pero ya, señor!

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27/04/2012, 22:07
Samuel Sánchez

- Buen trabajo - le dije sinceramente a Roderigo.

Menos mal que había conseguido salvar a Hernán, si la cosa hubiera dependido de mi el pobre estaría bien muerto. Aún estaba yo con la mosca detrás de la oreja, me seguía pareciendo raro que el tipo ese estuviera solo pero la verdad es que había pasado un rato y no había salido nadie.

- Antes de irnos será mejor registrar a ese rufián - dije señalando al muerto.- aunque se haya llevado lo suyo a la tumba a lo mejor lleva una carta o algo... aunque no creo que sepa leer... mientras tanto me adelantaré para comprobar que no nos ha dejado un regalito...

Me adelanté un poco en el camino, sin alejarme mucho, para asegurarme de que ese idiota no había dejado ninguna trampa preparada.

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27/04/2012, 23:55
Director

En donde pones el pie y hasta donde alcanzas a ver, no hay nada anormal. Podéis continuar sin peligro, al menos en este tramo del "camino"

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28/04/2012, 09:46
Samuel Sánchez

Volví de mi corta incursión comprobando que no había ningún impedimento en el camino, se ve que el comerciante tenía que estar loco de verdad aunque hay que reconocerle que casi se lleva a uno de los nuestros por delante.

- Mi señor, el camino está despejado - le dije a Don Antón.- Yo llevaré al herido - después me giré hacia Aleixo, que continuaba junto al muerto.- ¡Eh! ¿Qué hay de ese? ¿Lleva algo encima que nos sirva de algo?

Finalmente me agaché para recoger al barbero, que aunque no había llegado a despertarse, parecía que había ganado la batalla contra la muerte. Le agarre y me lo eché al hombro para poder continuar.

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28/04/2012, 16:53
Aleixo d'Ocampo

Alexio no se opondrá pero no soy yo quien para decirle lo que debe hacer.

- ¿A qué me tengo que oponer buen vizconde? - preguntó el Caballero mientras volvía a ponerse en pie y guardaba su espada en la correspondiente funda. - Puede que guerrear sea mi cometido en esta tierra... más no soy propenso a discutir. No son la misma cosa...

Aleixo comprobó que el barbero volvía al mundo de los vivos con sorpresa... no habría dudado en darle la extrema unción y haberle considerado finado. Bien por Roderigo... puede que fuera un vil ratero, pero una vida era una vida.

- Me pregunto cómo alguien puede atacar a un grupo de cinco apostado tras unos matojos y con una ballesta por ofensiva. ¿Habrá sido algún tipo de estratagema para...? - las palabras murieron en los labios del santiaguista. Si aquello era un atentado directo probablemente era porque alguien quería evitar que cualquier información que la bruja hubiera podido darles llegase.. ¿a dónde? ¿Significaba que estaban en la senda correcta de cara a averiguar la verdad de la futura señora del señor de Castrojeriz?

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28/04/2012, 19:21
Roderigo

A la pregunta de cómo cinco tipos eran amenazados por uno con una ballesta que formuló Aleixo, el rufián de Roderigo pensó para sí cosas no muy entendibles si se dijeran con palabras; más bien pensamientos ociosos para los menos cultos y habladurías para los más sabientes.

Es posible que...no lo hiciera por propia voluntad... -pensé. Este paquete puede que fuera embrujado obedeciéndo órdenes de alguien... quizá de esa bruja, o quizá... ¿eh?

Me dí cuenta que aún llevaba mi daga sacada. La guardé ipso facto como D'Ocampo hizo con su espada en seguida me puse de pié.

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29/04/2012, 13:16
Samuel Sánchez

Los nobles volvían a entregarse a la cháchara y demás oficios poco útiles en aquel momento. Se ve que tenían prisa por marcharse, y era lo que había que hacer, no fuera a ser que apareciesen más indeseables con ballestas, pero no hay que olvidarse de las cosas que apremian.

Como no me habían hecho ni puñetero caso (así son los señores cuando les interesa) deposité el cuerpo de Hernán cuidadosamente cerca de un árbol y fui hasta donde estaba el rufían tendido y ensangrentado.

- A ver que llevas encima, cabronazo - dije en un susurro mientras registraba cuidadosamente el cadáver.

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29/04/2012, 22:20
Director

Encuentras en el hombre la ballesta, un carcaj con 8 virotes, un saco de tripa de cerdo en el que hay 16 monedas de plata, un odre prácticamente vacío y un pañuelo de color morado.

Además el hombre lleva una daga con incrustaciones de oro , una pieza digna casi de un Rey o al menos, de un comerciante muy muy muy próspero.

Ni siquiera los judíos son tan ricos, tu desde luego sólo habías visto oro en una iglesia hasta ahora.