Partida Rol por web

[D&D 3.5] Sin Noticias del Thog.

Capítulo 1. El Thog del Yelmo de Hierro

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10/10/2019, 09:48
Narrador

Verano del año 623 de la primera edad de la Historia. (¿Verano? Sí, verano. No siempre tiene que ser en invierno y hacer frío). Salón del trono de Karak-Belgarosh.

Estaba siendo un buen año de cosechas. Los enanos de las llanuras habían traído suficiente grano a la ciudadela como para pasar tres largos inviernos sin demasiadas complicaciones. Eso eran buenas noticias para el Karak de Karak-Belgarosh. Rovanan se había convertido con el tiempo en una sabia dirigente, cuando tras la muerte de su padre y fundador de la ciudadela, se produjo su entronación. Rovanan no solía meterse con los asuntos que no le incumbían, aunque en una ciudadela enana como aquella, pocos asuntos eran los que no le incumbían a ella directa o indirectamente. 

Ahora que Tarkhan se había marchado de su lado, pues sus labores se habían mutiplicado tras su ascenso, tuvo que buscar al fin un marido de verdad. Cierto era que había aprendido mucho de su primer amante. Aquel amarillo era un ser muy inteligente que supo corregirla en muchas ocasiones y que la recondujo por el camino adecuado en un sinfín de ocasiones más. No obstante, redescubrir el sexo con un miembro de la raza enana, había sido para Rovanan toda una liberación. Siempre recordaría con cariño el esfuerzo con el que aquella pequeña pichita amarilla trataba de complacerla, pero no podía negar que el buen martillo enano era otra cosa...

Desde la muerte de su padre, su madre la Thogsi Tordwa se había convertido en una de sus principales consejeras y la pequeña Yoon-Shun, ahora ya anciana, en la mago del Kark. Fuera como fuera, desde que Karak-Belgarosh estaba siendo dirigido por mujeres, había ganado en relevancia, convirtiéndose en uno de los krakados de mayor relevancia de todo el reino de Taerghodar. De hecho, desde que Rovanan gobernaba en el krakado, muchas eran las alianzas que había forjado con thogs, clanes enanos de las llanuras e incluso con un principado élfico.

Uno de los principales aliados de la Karak Rovanan era el Thog Dûndran del clan del Yelmo de Hierro, cuya ciudadela se situaba al sur de las montañas Sangrientas, a no mucha distancia de Karak-Belgarosh, siendo una posición estratégica muy importante a la hora de contrarrestar las amenazas de los llamados "demonios" y una posición comercial también importante, al encontrarse situado cerca del paso del Picotazo. Dos semanas atrás se había interrumpido la comunicación entre las dos ciudadelas y por ello Rovanan decidió enviar un avezado grupo de exploradores a recabar información.

Podrían haber mandado a alguien mediante las artes arcanas, si... podrían. Sin duda alguna más de uno se preguntaría porque no se decidió así. Que era raro que el thog Dûndran no diera señales de vida, sí, lo era, pero bien podía ser que él y los suyos se hubieran cogido una cogorza de mil pares de cojo...

El caso era que Rovanan había invertido gran cantidad de recursos en el estudio de un extraña aparatejo que un buen día apareció en la cima de la montaña semienterrado en la nieve y maltrecho. Se trataba de una especie de barco volador que funcionaba con mecanismos muy complejos, engranajes, magia y una piedra que levitaba... al menos eso era lo que Rovanan había entendido de las explicaciones de su capitana, la barbuda enana Misty. Era el momento de aprovechar aquel artilugio y ver si la inversión realizada tenía sentido.

Notas de juego

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10/10/2019, 10:31
Rovanan

Sentada sobre el trono que otrora fuera de su padre y escoltada a su derecha por su marido el Kark Consorte Thortuk Cabeza Martillo, la Thogsi Tordwa y la Mago del Karak Yoon-Shun, Rovanan Karak de Karak-Belgarosh presidía la reunión en la que un extraño grupo de extraños personajes iba a recibir una importante misión de exploración y en caso de ser necesario, también de rescate.

Capitana Misty... - La Kark realizó una leve reverencia con la cabeza, seguida de una reverencia con todo el cuerpo por parte de la capitana. - Piloto Tathtorn... - Se repitió el gesto por parte de ambos. - Ingeniero Ollas... - Y se emuló de nuevo la parafernalia. - ...Y Filbert... - De nuevo se reiteró el estúpido protocolo. - Una grave preocupación altera la paz de estos salones y es que el Thog Dûndran del Yelmo de Hierro, dejó cesó en su comunicación con Karak-Belgarosh hará ahora unas dos semanas. Hemos decidido en consejo del Kark, que alguien debe viajar hasta la ciudadela del Yelmo de Hierro y recabar información acerca del mutismo de nuestro aliado el Kark Dûndran. Por ello, hemos pensado en éste importante grupo de... - No encontraba las palabras adecuadas para describir al grupo. - ...de... - Tragó saliva y miró a ambos lados buscando ayuda en los suyos.

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10/10/2019, 10:49
Tordwa

...de avezados aventuraros y expertos exploradores... - Intervino la Thogsi. - Ya es hora de empezar a sacar rendimiento al aparetejo que hemos reconstruido con tanto esfuerzo, tanto de su parte... - Les miró uno a uno. - ...como de las arcas del krakado. - Puntualizo mucho la palabra arcas. - Deben demostrarnos que todo el oro invertido en su nave, ha sido oro bien invertido. De lo contrario, quizás los fondos destinados a su... - Carraspeó - ¿Causa? Serán desviados a partir de ahora a otros asuntos de mayor relevancia. 

La Thogsi se puso en pie. Parecía furibunda. Era evidente que bajo su punto de vista, los cuatro fantoches que tenía delante no eran más que una partida de vagos, que perdían el tiempo a diario en vez de colaborar en pos de engrandecer el krakado que otrora fue de su marido y que ahora estaba en manos de su hija. Nada sería más satisfactorio para ella en esos momentos que pegarles una patada en el culo a cada uno de ellos y acabar de una vez por todas con el estúpido y absurdo programa Tetanic y de hecho...

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10/10/2019, 10:53
Yoon-Shun

Lo que quieren decir mi Kark y mi Thogsi, no es otra cosa que, para que el programa Tetanic siga siendo una prioridad del Krakado, ustedes deben demostrar su utilidad. - Sonrió. - ¿Y qué mejor momento que éste? - Les preguntó de forma retórica. - Desde el consejo del Kark, se confía mucho en que puedan llevar a cabo la labor en un plazo de tiempo razonable y de forma satisfactoria. Estoy convencida de que así será. Tienen el apoyo del consejo del Kark y todo lo que necesiten pueden demandarlo y será atendido por éste consejo y proporcionado en la medida de lo posible. - Miró entonces al esposo del Kark. - Ahora el Kark Consorte, general de los ejércitos de Karak-Belgarosh atenderá a sus peticiones...

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10/10/2019, 10:57
Thortuk Cabeza de Martillo

Eso es... - Dijo entonces aquel enano. - Supongo que no podrán hacerlo solos. - Supuso Thortuk Cabeza de Martillo. - Supongo muchas cosas. - Sonrió. Era evidente que él tampoco confiaba demasiado en la tripulación. - Tienen un capitán, tienen un piloto y tienen un ingeniero. Y... - Miró al mediano. - Y le tienen a él... - Se encogió de hombros. Nadie tenía muy claro que pintaba el bardo en la tripulación, pero nadie parecía cuestionárselo demasiado. Había cosas que simplemente eran como eran y punto. - Necesitaran una tripulación, víveres, armas... - Sonrió mostrando su blanca dentadura. - ¿Qué?

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10/10/2019, 12:03
Filbert Lenguaguda

-Esto...-dijo alzando  la mano dubitativo.

-Creo haber entendido todo esto a la perfección, pero simplemente para estar seguro... ¿Que es eso de la nave?

preguntó con genuino interés. Lo cierto era que la cerveza enana era excelente, digna merecedora de su peregrinaje hasta aquel alejado lugar, pero era igual de cierto que a veces le hacía hablar de más y ser un poco más imaginativo de lo normal al valorarse a sí mismo de cara a los demás. LLevaba tiempo en el Karak y aún no tenía claro como había logrado que le admitiesen pues simplemente no lo recordaba. ¿Que mentira les había contado? ¿Que era un poderoso arcanista? ¿Un cazador de demonios...?

Desde su llegada siempre que le consultaban cosas simplemente adoptaba una pose seria y asentía como si prestase toda la atención del mundo. Su labia ayudaba a eso, pero parecía que las cosas se estaban poniendo serias y le interesaba saber donde se estaba metiendo.

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10/10/2019, 14:29
Jilip Ollas

Jillip no terminaba de entender por que le decían ingeniero, o quien era Ollas, pero si su Kark lo decía cuando lo señalaba seguramente lo era. El Kark era todo para un enano, y más cuando tenía pinta como la de esa Kark... estaba casi tan buena como la capitana. 

Mientras la Thogdsi hablaba Jillip revisó su bolsa y encontró el anotador mágico que se escribía sólo y leyó para si. "Eres Jillip Ollas y eres un Ingeniero Aeronaval altamente calificado..." el anotador era inteligente, escribía con su letra para que entendiera, si el cuaderno lo decía entonces debía ser cierto. "Cuando pregunten que se necesita, porque lo harán, no olvides el grabado profético..." además de mágico en inteligente el anotador era adivino, sabía lo que pasaría en el futuro, rebuscó en la bolsa hasta encontrar una tablilla con un bajorelieve en piedra. En la misma había anotaciones en tinta roja en su letra y unos trazos que convertian a una figura borrosa en Misty. Observó el grabado y miró los pechos de la capitana, debía admitir que si bien los trazos le hacían justicia seguía prefiriendo el original. Había unas palabras escritas al dorso de la tableta "Cuando muestres el grabado lée exáctamente esto..." repasó las líneas en un murmullo casi inaudible mientras asentía.

Cuando el consorte de la Kark preguntó que necesitaban Jillip agitó la mano, ignorando totalmente la pregunta del mediano principalmente porque no la había entendido. - Yo, yo, tengo algo que pedir... - dijo mientras miraba el reverso de la placa. - Cuando muestres el grabado lée exáctamete ésto... - comenzó - He estudiado las estrellas y revisado las profecías, y de las entrañas de la Tetanic he extraido esta tableta. En ella puede verse a la maravillosa capitana, al valiente Jillip, y al delicioso Filibert en su barril de salmuera, Tathorn puede ser cualquiera de los otros dos, a veces tira rayos y es calvo y a veces se cae por la borda. Necesitamos otro Tato... preferentemente de los que tiran rayos. - leyó seriamente el gnomuerto mientras intentaba señalar las figuras del otro lado. Cuando terminó dejó la tableta soble la mesa y señaló los dos Tatos - Según el anotador mágico y la tableta profética necesitamos uno de estos... y prefiero al que tira rayos también. 

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10/10/2019, 19:10
Tarkhan

Se abrió de golpe la doble puerta de la sala del trono. Un hombre no muy alto ni muy bajo, de piel amarilla, con un estilizado bigote y una sonrisa gatuna apareció con gesto enfadado. Si, estaba sonriente, pero a la vez enfadado. Uno se podía preguntar cómo era posible tal cosa. La respuesta obvia: porque podía.

Se han hablado cosas muy feas en esta sala. - Tarkhan se quedó unos momentos pensativo, se retorció el bigote con dos dedos y entonces continuó. - Bueno, no se han hablado. Quizás se han insinuado o... - No, nadie había hablado de su picha en on. Tan solo había sido el estúpido narrador. Ese tipo era casi tan insoportable como tener que leer una de las mierdas de ese escritor mediocre, Anarion el Kafir... Si, Tarkhan los odiaba a los dos... - ¡Bueno, no se ha dicho, ni se ha insinuado, ha sido el maldito narrador! 

No hizo falta magia. Pese a que Tarkhan era el dios de la magia no necesitaba conjurar para cambiar la realidad. Al fin y al cabo era un jodido dios. Y los dioses de vez en cuando obran milagros y esa iba a ser una de aquellas ocasiones. Tarkhan se marchó y nadie recordaría que estuvo allí.

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10/10/2019, 19:26
Narrador

Verano del año 623 de la primera edad de la Historia. (¿Verano? Sí, verano. No siempre tiene que ser en invierno y hacer frío). Salón del trono de Karak-Belgarosh.

Estaba siendo un buen año de cosechas. Los enanos de las llanuras habían traído suficiente grano a la ciudadela como para pasar tres largos inviernos sin demasiadas complicaciones. Eso eran buenas noticias para el Karak de Karak-Belgarosh. Rovanan se había convertido con el tiempo en una sabia dirigente, cuando tras la muerte de su padre y fundador de la ciudadela, se produjo su entronación. Rovanan no solía meterse con los asuntos que no le incumbían, aunque en una ciudadela enana como aquella, pocos asuntos eran los que no le incumbían a ella directa o indirectamente. 

Ahora que Tarkhan se había marchado de su lado, pues sus labores se habían mutiplicado tras su ascenso, tuvo que buscar un  un nuevo marido con el que asegurar su descendencia. Había aprendido mucho de su primer amante y había disfrutado mucho del sexo con él. No era cierto lo que decían de las pichitas amarillas. El tamaño medio del pene de un anzano superaba la media humana en no menos de cuatro centímetros y medio.

El miembro erecto del nuevo marido de Rovanan podía satisfacerla, pero nunca como lo hizo el pene de Tarkhan, si, el jodido pene amarillo de Tarkhan, que además era grande, juguetón y sabía a tutti frutti.

Siempre recordaría con ansia y deseo el esfuerzo con el que aquella polla gorda amarilla trataba de complacerla, y por desgracia, ninguna pichita enana alcanzaría nunca el eficiente nivel sexual del mejor amante que pisó y pisará sobre Gea, Tarkhan el gran mago anzano.

El resto de la narración puede seguir como se narró en un buen principio.

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10/10/2019, 19:41
Tathtorn

Aquello sí que era un dios de verdad, con un ariete amarillo entre las piernas tan grande como una gran sierpe dorada, no como ese sobrevalorado semidiós Guideon con su lanza.

Volviendo al salón del trono, las deliciosas judías blancas que había almorzado habían hecho destrozos en el estómago senil de Tathtorn. Una ventosidad, de cuerpo de aire y corazón de viento, se abrió camino dentro de él, deslizándose con gran fuerza y prisa. Tathtorn, maestro de lo arcano, sabía bien que cuando un pedo tocaba su puerta, no debía cerrarla: tenía que dejarla bien abierta. Dejó que tronara en sus nalgas en pleno discurso Jilip, que soplara, que gimiera y que girara en el aire mientras el gnomo que se creía enano trataba de leer con dificultad sus propias notas.

Fue un pedo que, haciendo honor a la verdad, sólo podía calificarse de monstruoso.

Cuando hubo terminado Tathtorn aspiró con gran fuerza por la nariz y asintió satisfecho.

¡Seeeeeh! ¡Ese ha sido de los buenos!

Y a continuación soltó una larga y profunda carcajada. 

https://soundcloud.com/taliesin-arparrabiosa/risa-de-ank1

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14/10/2019, 16:47
Tordwa

¿Qué es eso de la nave? - Miró a Filbert con el ceño fruncido. - ¡El estúpido aparatejo ese con el que surcáis los cielos, mentecato! - Le reprobó la pregunta al mediano. 

No era difícil hacer enfurecer a la thogsi. Su parecer acerca de la nave recuperada era muy claro y de conocimiento público. Un enano no debía abandonar la tierra firme. La roca era el elemento de su raza y mientras sus pies estuvieran posados firmemente sobre éste, podía tener el control de la situación. Pero cuando sus pies se encontraban sobrevolando el cielo, muy posiblemente, los problemas llamarían a la puerta de aquel temerario enano.

Pero tú que vas a saber si eres un estúpido mediano... - Refunfuño para sí. - Sigo sin entender que diantre pinta abordo...

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14/10/2019, 16:52
Rovanan

¡Madre! - La Kark llamó la atención de la Thogsi y ésta dejó de blasfemar por lo bajo. No obstante, su mirada siguió clavada en el mediano del grupo, mientras su mente elucubrara todo tipo de maldiciones contra él. - Entiendo lo de la tableta esa que mencionáis, pero... - Se encogió de hombros. - No se quién es ese quinto tripulante. Ahora bien, si necesitáis algún... - Buscó la palabra adecuada. - "marinero", más abordo, igual mi esposo pueda proporcionaros algún soldado de la guardia. 

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14/10/2019, 16:54
Narrador

Mientras todo eso se decía, resonó en las paredes de la sala del trono, el trueno procedente del bueno de Tathtorn. El agrio aroma de su ventosidad empezó a expandirse por la sala provocando una mueca de desagrado en casi todos los presentes. A los más sensibles, incluso les provocó alguna que otra lágrima, pues aquella flatulencia era ácida como una cebolla recién cortada. Fuera como fuera, el silencio resultante tras la acción del sinvergüenza y senil enano, duró tan solo el tiempo que duró el aroma. A partir de ese momento nadie más hizo comentario alguno a tal ilustre ventosidad, digna de haber sido recogido en los anales de la historia enana y de hecho así fue, pues no mucho después de aquello se redactó la sexta ley del Kark.

La Sexta ley de Karak-Belgarosh dice así: "No podrá volver a ingerir alimentos pesados, como alubias, garbanzos, col, cereales y otros tipos de alimentos que ayudan a la creación de flatulencias, aquel que en presencia del Kark, la Thogsi o algún miembro de la corte del Kark, encontrándose éste en lugar cerrado y en especial en la sala del Trono, dejara escapar sus vetosidades, más si el reo de dicha pena, se recreara con ello satisfecho por su tan cuestionable hazaña".

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15/10/2019, 11:49
Misty

Misty se había resignado hacia tiempo a lo inevitable. Aquella panda de tarados que tenía por tripulación era lo que le había tocado, eran buenos enanos (incluso el gnomo (incluso el mediano)), pero a más de uno le faltaba un hervor. Cuando aprendió que la conducta de sus muchachos no era culpa suya, sino que eran así por naturaleza, dormía mejor por las noches. Cuando todos hubieron hecho el ridículo ante la Kark y demás integrantes de la reunión, la capitana seguía manteniendo la compostura como si la cosa no fuera con ella.

-Callad -dijo a sus chicos. Y sus chicos callaron, porque una cosa era la Kark y otra su capitana y su capitana podía hacerles cosas más horribles que la soberana de Karak-Belgarosh-. Así es, necesitamos tripulación, dos serán más que suficientes, unos guerreros competentes por si fuese necesario abrirle la cabeza a alguien. Y un artillero, que pueda disparar la ballesta que vamos a instalarle a la nave, porque en las alturas podemos encontrar de todo. Necesitaremos provisiones para dos semanas, un mapa de la región y algunas cuerdas, porque los enanos tienden a caerse por la borda con mucha asiduidad. No tema, Kark, pues cumpliremos con esta misión y volveremos con noticias del Thog.

Hizo una reverencia y se fue.

 

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16/10/2019, 23:06
Tathtorn

Tathtorn asintió vehementemente ante las sabias palabras de la capitana. 

La capa se agitó mientras su dueño giraba sobre sus talones y acompañaba a Misty hacia la salida, pero ambos hechos no tenían nada que ver: la capa se hubiera agitado de todas formas. Era una capa encantada, con experiencia, fabricada según contaba la leyenda de los pelos de la barba de un gigante de las tormentas. Agitarse era su razón de ser, no en vano los sabios magos de Anza la llamaban la capa que se agita. Era una buena capa que Tathton había adquirido junto a un catálogo de lencería de esos que se enviaban por correspondencia en un sobre discreto. 

A decir verdad, lo que había adquirido Tathtorn era el catálogo de lencería, la capa venía de regalo. 

 

Pero mejor que no se lo contéis a ella.

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16/10/2019, 23:40
Thortuk Cabeza de Martillo

Thortuk Cabeza de Martillo hizo como que cogía una pluma invisible, la impregnaba de tinta invisible que estaba contenida en un tintero invisible y extendía un pergamino, como no también invisible. 

- Dos guerreros capaces, si... - Hizo como que apuntaba algo con su pluma invisible en el pergamino invisible. - Un artillero, si...- Aquello también hizo como que lo apuntaba. - Montar una ballesta, si... - Y repitió el gesto invisible. - Provisiones para dos semanas. - Asintió con la cabeza y mojo la pluma invisible, en el tintero invisible y apuntó con letra invisible en el pergamino invisible. - Eso lo veo lógico, si. Y cuerdas. Muchas. Y un mapa... - Aquello último no lo escribió. Su letra invisible era muy grande y ya ocupaba todo el pergamino invisible, así que eso lo recordaría en su cabeza. - Si no necesitan nada más... Señores... - De​​​ esa forma sutil, les invitó a salir de la sala. -  Tengan muy propicios días.