Partida Rol por web

De entre las cenizas -Cap I [El Sabor del Desierto]

Parody [Ciudad]

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24/02/2015, 13:33
Director

La escena es sin duda desalentadora, una sala amplia con su perimetro en sombras, aun con las antorchas que dan luz en sitios puntuales. Es de dia y aun asi poca luz entra en este lugar. Una mesa de comensales, larga y fuerte se encuentra en el medio de la misma y al fondo sobre un trono, una sombra que no puede ser mas que el mismo Hannibal. Vuestras miradas miran la sala con detenimiento y os percatais de que la parte trasera a él debe ser una especie de ventanal, ahora oscurecido, ya sea por pintadas o por las telas que lo cubren, pero sin duda un sitio de honor desde donde ver todo lo que ocurre en su Circo.

Veis como hay alguien frente a la bestia, una figura con un extraño sombrero que de repente es empujado por una mujer con un extraño corte de pelo. El hombre de la mascara os indica que camineis y por algun motivo sentis como si estuvierais caminando hacia vuestra muerte. No os han despojado de las armas, lo que quiere decir que tenerlas o no tenerlas es algo que les da igual, la presencia de Hannibal se hace cada vez mayor y cuando por fin estais delante de el podeis sentir la ira que embarga su rostro, un rostro que para nada parece humano. El ser que es Hannibal se levanta dejando su cuerpo ante vuestros ojos, uno muy similar al de las bestias que habeis visto en la ciudad maldita. Y no podeis evitar tragar ante semejante bestia. Con sus manos sueltas frente a el y toda su musculatura al aire libre os dais cuenta de que no es la fortaleza o los hombres lo que realmente inspiran miedo, es el... la bestia de Hannibal... sin duda, los rumores que le dieron su apodo no pueden ser mas que ciertos, pues podeis ver restos de huesos humanos alrededor del trono.

Oscar mira a un lado y se da cuenta de que el hombre que acaban de desplazar es Isaias. El resto aunque notais el gesto de Oscar, no sabeis a que se debe y la formidable figura enfrente vuestra no os permite desviar la mirada.

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24/02/2015, 13:40
Hannibal

Una voz gutural sale de la garganta del Hannibal. - Vaya... vaya, los hijos prodigos han vuelto. - La ira y la amenaza de una muerte dolorosa estan mas que marcadas en cada palabra. Pasea su mirada por vosotros antes de volver a hablar. - Hablad... y hacedlo rapido... la arena esta falta de voluntarios y vosotros le ireis bien. - Os dais cuenta de la manera en la que mira a Andriel y casi estais seguros de que mientras vosotros acabareis en la Arena, Andriel es posible que acabe en otro sitio... probablemente peor que el vuestro.

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01/03/2015, 09:37
Isaías

Bueno, bueno. Aquí tenemos al hijo pródigo. Esto resolvía el problema. Aunque me quedaba sin comisión. Capullo, eres capaz de bromear incluso en situaciones como esta. Saludé con un movimiento de cabeza y una media sonrisa cínica a mi colega Eagle. Eché una mirada a sus acompañantes, a ver si reconocía alguno, seguro que sí, en este mundillo se conoce a toda la tropa, más o menos.

De forma disimulada, pasito a pasito, procuré apartarme, aunque fuera un poco, de la zona de la mascotita del mutante. Pero daba igual, si esa cosa saltaba, me pillaría igualmente. Ahora sonreí a Rose, a quien tenía al lado, y le susurré al oído.

-Monada, si yo caigo, te vienes conmigo. Cada uno tiene que jugar su juego, si esto sale bien nos podremos tomar una copa juntos. Guarda tus uñas.

Atento y vigilante. Me dispuse a escuchar la conversación, esperando que esas ratas tuvieran algo positivo que decirle a Hannibal. Yo no estaba con ellos, era una tercera parte. ¿Eso me salvaba del desastre? No lo sabía.

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02/03/2015, 12:55
Oscar Walder, alias “Eagle Eye”

Mientras subíamos las escaleras escuché un comentario que no era nada alentador. Aquellos gilipollas se lo podían haber ahorrado. No es que supiera que mi vida colgaba ahora mismo de un hilo, pero prefería que la gente no me ayudase a recordarlo. Aún ahora no me explicaba como un tipo como Hannibal había conseguido el poder que había conseguido si estaba rodeado de un panda de capullos como aquellos dos. Para colmo, los trofeos a modo de calaveras que adornaban la entrada a lo que era su morada no ayudaban a relajar la tensión creciente.

Uno de los guardias nos hizo seguirlo a través del “circo” como lo llamaba aquel demente, aunque más bien era un matadero. No se conocía de nadie que hubiese sobrevivido a aquellas pruebas destinadas simplemente a saciar el saismo de aquel loco. Pero aquello parecía alegrar a los congéneres de aquella miserasble ciudad…si es que podía recibir aquel nombre. Un tipo con máscara y risa sarcástica nos esperaba detrás de una enrme puerta reforzada. Su voz sonaba metálica detrás de aquella careta metálica que llevaba.

Por fin entrábamos en el “palacio” de Hannibal. Tenía un aspecto lúgubre y oscuro. Las ventanas estaban pintadas de forma que no entraba ni un miserable rayo de luz. Y para colmo, las escasas antorchas que ardían en algunos soportes apenas llegaban a ilumonar la zona circundate como temerosas de dar más calor del que le correspondía. Sentí un escalofrío en mi espalda. Ni siquiera nos habñian quitado las armas… Y eso solo podía significar una cosa!! Que entre las sombras debán de haber tipos apuntándonos en esos precisos momentos desde todos los ángulos.

Mientras avanzábamos de forma lenta, como temiendo acercarnos más de la cuenta observamos como un par de tipos eran apartados del estrado, lo que nos permitió ver en todo su esplendor a nuestro anfitrión. Su aspecto era muy similar a los enormes mutantes que nos habíamos encontrado en la ciudad. Pero este parece más peligroso, más salvaje. Mientras terminábamos de acercarnos, miré por el rabillo del ojo a aquellos dos que habían apartado sin demasiados miramientos!!! Isaias!!! Joder!!! ¿Qué coño hacía él aquí? Hacá tiempo que no lo veía pero de pronto se me antojaba extraño que nos viésemos en aquellas circunstancias. ¿Estaría de mi parte o de la de aquel monstruo deforme? No creía que se hubiese unido a alguien de la calaña de Hannibal, pero uno nunca se sabía que podía pasar cuando el hambre acucia...o tu vida está en juego. Ni siquiera lo miré demasiado para no levantar sospechas aunque me daba la sensación de que algunos de mis compañeros no habían dejado pasar por alto mi mirada…

La voz de Hannibal me hizo centrarme a mi pesar, en la presencia que ahora nos miraba imponente. Sus palabras parecían dichas sin ninguna maldad, pero con su apsecto y su repugnante voz, sonaba a una amenaza en toda regla. Puesto que nadie parecía dispuesto a hablar, decidí actuar el primero.

- Has sido engañado!!! Mejor dicho… has sido traicionado!!! Parte de la escolta que llevábamos eran asiáticos que creo que pertenecen a otro clan y creo que tenían cosas mejores que hacer. Y desde luego entre sus planes no estaba el llevarte ese cargamento de armas.

Lo dejé en el aire en espera de la sentencia de Hannibal o de que alguno de mis compañeros quisiera añadir algo más.

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10/03/2015, 17:39
Andriel

Eramos carnada y solo faltaba que la bestia inhumana que teniamos delante decidiera quien iba a ser el primer plato... O asi me hizo sentir la voz de aquel al que ahora rendiamos cuentas, teniendo muy claro que en el peor de los casos yo iba a padecer mas que el resto. Trague saliba y me obligue a no hacer ni decir nada que pudieraempeorar nuestra precaria situacion
Oscar queria hablar, que lo hiciera. Aquel piquito de oro suyo le habia costado ser envenenado y le corria prisa acabar rapido...era hora de pagar el pato. Por mi parte me limite a asentir en silencio hasta que la descabellada idea del tirador salio de sus labios. Abri los ojos de par en par al ver donde nos estaba metiendo aquel idiota aunque guarde silencio...tal vez no se le ocurriera lo mismo que a mi al respecto aunque dudaba el tener tanta suerte
Lo que estaba claro era que, si saliamos con vida de aquella sala, Oscar se iba a llevar un buen rapapolvo por mi parte, si acaso no le cortaba la lengua

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12/03/2015, 14:50

El asunto no mejoró. Estaban acabados. Rusty prefirió no decir nada, era mejor con el ojos y el dedo en el gatillo que con las palabras. Aquel mugriento sitio le costernaba, aunque menos que la presencia de Hannibal, ¡cuánto odiaba a ese monstruo asqueroso y mezquino! Le encantaría vaciar el cargador de su pistola en la cara deforme de aquel cretino...Pero definitivamente no era una buena idea. Miró hacia un lado tratando de evitar la mirada inquisitiva del jefe mirando las paredes manchadas y las vigas oxidadas. Esperaba que algunos de los chicos saliera con alguna genialidad o tendrían que luchar por sus vidas en la arena. ¡Cómo odiaba ese sitio!

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17/03/2015, 11:47
Director

Las palabras de Oscar resuenan en el espcio, provocando un pequeño eco, suenan ligeramente histericas y por lo poco que podeis ver mal recibidas por la bestia que teneis delante. Su mueca ya de enfado, se vuelve y se queda mirando a Oscar como si fuera un insecto realmente molesto. Da un par pasos hasta quedarse practicamente sobre el, mientras vosotros sin poder evitarlo os retirais ligeramente a la espera de un golpe que sesgara la vida de vuestro compañero.

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17/03/2015, 11:49
Hannibal

La bestia abre la boca y con cada palabra pequeñas gotas de saliva te golpean. - A ver si me ha quedado claro insecto... ¿¿ME ESTAS DICIENDO QUE NO HABEIS PODIDO PROTEGER EL CARGAMENTO DE UNA PANDA DE JODIDOS ASIATICOS?? - Con cada palabra su rostro baja un poco y se acerca mas al tuyo, hasta quedar a escasos centimetros, deonde claramente puedes ver como la parte blanca de sus ojos empieza a tornarse de un tono rojizo por la raibia y la sangre bombeada. Intentas hablar pero nada sale de tu boca, solo un leve gemido, que parece mas comico que otra cosa... cuando la voz de Valkyria, rebajada, acojonada matiza ligeramente tus palabras.

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17/03/2015, 11:52
Valkyria

- El jefe de la expedicion eligio la ruta de la costa... la que pasa por la ciudad en ruinas... - Todos la mirais, pues su voz se alza poco mas de un susurro, mientras mira hacia Hannibal usando toda su fuerza de voluntad para no acojonarse del todo. - Unas bestias enormes nos atacaron y derribaron el convoy... despues los asiaticos saquearon lo que pudieron y se dieron a la fuga... al menos los que quedaron.

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17/03/2015, 11:55
Director

Veis de pronto como uno de los individuos que habia en la sala se adelanta haciendo aspavientos. - No se de que coño esta hablando esta zorra jefe... la expedicion fue por el interior como vos dijisteis. Un camino mas largo pero menos peligroso. - Ves como se queda ahi un individuo de estatura media, negro y con muchos tatuajes, al que le falta parte de su oreja izquierda. Parece creer que esta a salvo, tanto que se queda a escasa distancia de su jefe mientras os mira con verdadero veneno en sus ojos.

Hannibal le mira, os mira y de pronto mas rapido de lo que sois capaces de seguir con los ojos su puño se cierra sobre su cuello.

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17/03/2015, 11:57
Hannibal

- Te lo adverti. Rose te lo advirtio. Se acabaron las advertencias... - De un tiron brutal le arranca la armadura que lleva en el cuerpo, provocandole cortes por casi todo el cuerpo para acto seguido lanzarlo contra la jaula al lado de Isaias. Durante un instante no pasa nada, el teniente intenta levatarse cuandod e pronto una garra enorme le engancha por detras y lo estampa contra la jaula, una y otra vez hasta que el cuerpo se parte y tiene el tamaño necesario para pasar entre los barrotes. Los intestinos y la parte baja del cuerpo caen al suelo desparrandose por delante vuestra. El olor es nauseabundo pero nadie dice nada.

Hannibal mira a la oscuridad de la jaula como si pudiera ver lo que ocurre alli dentro, los ruidos de algo masticando huesos y carne llegan con claridad, se estan dando un banquete sin ninguna duda. Cuando esta satisfecho os devuelve la mirada antes de darse la vuelta y acercarse de nuevo a su trono. De pronto una voz metalica resuena a vuestro lado.

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17/03/2015, 12:02
¿?

- La proxima vez que elijais portavoz, recordad que sepa decir las cosas importantes y que no chille como una niña... o no tendreis tanta suerte. -

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17/03/2015, 12:03
Hannibal

Hannibal se sienta y os mira. - Desde mi punto de vista no habeis terminado el trabajo. Teniais una mision muy sencilla, ir y coger la municion, transportala y protegerla hasta llegar a mi. Habeis fallado y eso suele implicar la muerte en la Arena. - Un silencio sepulcral se adueña del lugar, mientras sois capaces de sentir el bombeo de vuestro propio corazon.. ante lo que parece una sentencia de muerte segura. - Pero habeis tenido los huevos de venir aqui... y explicarmelo. - No hace falta que mencione los trozos de cadaver fresco que pueblan la sala. - Averiguareis quien me ha robado, lo encontrareis y lo matareis... y si aun queda algo del botin me lo traereis. Hacedlo y no me cobrare vuestras vidas... falladme. - Una sonrisa de las que hielan la sangre acompaña al gesto de sus brazos abriendose, indicando la Arena.

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17/03/2015, 12:07
Rose

Sonrie al oir tu amenaza y te mira caso con lujuria. - Acerca tu mano a tu arma... por favor. Asi podre cortarte y follarte, y volver a cortarte mientras te follo sin contemplaciones. - Su mirada lo deja claro, le gusta matar y no vas a cojonarla con una amenaza asi. La vida no significa nada para esta dura zorra.

En ese momento empieza la ronda de conversaciones y ambos escuchais atentamente lo que tiene que decir Hannibal.

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17/03/2015, 12:11
Rose

La voz de Rose rompe con la ultima sentencia de Hannibal, este la mira pero no parece enfadado. - Jefe. - Hannibal asiente como dandole permiso para hablar. Rose coge a Isaias y le empuja para que quede a la vista de todos. - Este capullo es un problema y ha escuchado lo que has dicho, asi que porque no lo metemos en el saco con los demas. Al fin y al cabo la niña histerica* es su amigo, estoy seguro de que les gustara pasar mas tiempo juntos antes de acabar en la Arena. - Una sonrisa afilada y sadica cruza el rostro de esta monada.

Notas de juego

*ese eres tu Oscar ;)

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17/03/2015, 12:14
Hannibal

El jefe de la ciudad asiente con un brillo malicioso en los ojos. - Asi sera. Iras con ellos y tu suerte quedara atada a la de ellos... puedes negarte sin ninguna duda. En cuyo caso acabaras en la Arena inmediatamente. Este dia esta siendo la mar de aburrido y necesito algo de entretenimiento. Tienes pinta de duro, asi que dime... que sera... ¿Arena o ir con tu amigo a follar ojos rasgados?

Os dais cuenta de que Hannibal es una bestia, una terrorifica, pero no solo por su mala leche y su tamaño desproporcionado, sino porque no solo sabe usar sus musculos sino tambien la astucia... lo que os hace daros cuenta del lio en el que estais metidos.

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18/03/2015, 22:10

Tranquilo jefe, regresaremos con la carga y nos cargaremos a esos hijos de puta asiático, desearán no haber nacido.

Rusty se sorprendió al oírse a él mismo, habían ganado algo de tiempo. Le dolía las quijadas, había apretado con fuerza la mandíbula por la tensión.  Aclaró la garganta.

Partimos en cuanto nos de permiso, no fallaremos.

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21/03/2015, 09:12
Isaías

La zorra era dura, perversa, un escorpión de dos patas con buenas tetas. Casi me la estaba poniendo dura. Si no fuese porque Rose era peor que un reptil mutante hambriento, me daría ese revolcón con ella. Y luego le cortaría la garganta. O ella a mí, claro. Tal para cual, era un buen apéndice para su jefe, aunque imaginaba que el día que le fallase, Hannibal se la follaría y luego se la comería. Quizá ya hacía lo primero.

Miré a Rose. Frío, tranquilo, no sueltes la lengua. Estás a un paso de salir con vida de esta. Aspiré el aire denso cargado de sudor, amenazas, miedo y perversidad. Estaría bien liarla aquí. Abrirle otra raja a Rose, y volarle la cabeza al bestia de su amo. Pero recordé que yo tenía un pellejo que salvar, el mío propio, visualicé la boca y el culo de West, y decidí que prefería vivir un día más. Encaré al Canibal.

-De acuerdo. Les reventaremos el culo a esos amarillos. Pero hay algo que estábamos discutiendo cuando llegaron estos capullos. Mis honorarios. ¿De cuántas chapas y munición estamos hablando?

Eagle tenía sus problemas, que ahora eran los míos. Tenía que sacar algo de esto, si me iba el cuello en ello. Qué diablos, ya me lo estaba jugando.

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24/03/2015, 09:37
Oscar Walder, alias “Eagle Eye”

Mis palabras habían resonado en la quietud de la sala y si había esperado alguna reacción de alguno de mis compañeros esta se limitó a bajar la cabeza y meter el rabo entre las piernas. Sonreí por unos instantes. Aquellos malnacidos eran unos bocazas dispuestos a insultarte y a bravuconear, pero a la hora de la verdad ninguno tenía los cojones de afrontra la puta realidad. Incluso la rubia bocazas agachaba la mirada acojnada!!! Panda de maricones!!!

Pero la realidad se convirtió en una mole maloliente y asquerosa que a escasos centímetros de mi cara comenzó a gritarme como una histérica. Ante eso, hasta yo no pude hacer otra cosa que achantarme y recibir la lluvia de salivazos, evitando a toda costa que aquello me revolviese el estómago y vomitase a ese degenerado. Para mi sorpresa fue Valkyria la única con las narices necesarias para matizar mis palabras. Claro que ella jugaba con ventaja!! Seguro que la muy zorra se había follado a Hannibal alguna vez. Aún así, si esperaba que se lo agradeciese de alguna forma iba apañada. Aquella perra me pagaría tarde o temprano todo lo que había dicho y hecho.

Otro individuo hablo y afortunadamente para mi desvió su atención de mi persona. La imagen de lo que sucedió a continuación, me hizo agradecer en silencio haber conseguido ese pequeño objetivo.

Tras sentarse un poco más relajado, Hannibal nos propuso un nuevo plan. Eliminar a los malditos asiáticos que habían complicado aquella situación. Era un plan adecuado y desde luego inevitable. Pero en mi mente estaba la cara del asiático que me había lanzado la granada. Asentí con convicción. Cualquier cosa era mejor que quedarse allí.

La mujer que estaba al ldao de Isaias quiso meter a mi amigo. No sabía que coño hacía allí pero desde luego lo acababan de enrrolar a la fuerza en aquella misión. Aún así era un cambio agradable. Aunque no se podía decir que fuéramos amigos, estaba claro que sería mejor compañía que algunos de los presentes. Yo por mi parte solo quería salir de allí para acabar mi trato personal con los miembros de la Hermandad.

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26/03/2015, 12:28

Rusty respiró agobiado. De momento, se habían librado de la arena. Hannibal es una bestia y no le gustaría enfrentarse a ese elemento cuerpo a cuerpo. Miró a ese personaje nuevo que iba con ello. Lo miró de arriba abajo: otro hijo de puta más al grupo para machacar asiáticos. 

Se impacientaba y estaba deseando de irse de allí. Cuando cojones se iban a marchar.

Bueno, jefe nos marchamos y vamos de caza.

Lo que necesitaba era dejar de ver su fea cara. La misión no le entusiasmada pero de todas maneras era bueno volver al trabajo y dejar aquel deprimente lugar. Poco a poco se iba acercando a la salida, respiraba pausadamente, temía el carácter voluble de Hannibal y cuanto menos hablaran y estuvieran delante mejor.