Partida Rol por web

Suspire ante las palabras de Derek. - Oye si prefieres te dejo en la arena a que se te coman los bichos esos que has dejado atras...

Ante el tema de piromana o incendiaria no metio bola, siguiendo las ordenes de Keira, que le miraba de vez en cuando con cierto gesto extranado. El tema del cuchillo provoco una mirada mas larga que termino en una sonrisa, antes de pasarle el cuchillo a la chica.

Ante las palabras de Keira, suspiro. - El del rifle ha ido fuera, seguramente estara echando un vistazo... - Desde mi posicion era muy facil ver la zona de la entrada del refugio.

Miro entonces a Dante. - Algun detalle mas? - Mas el susodicho piromano, nego con la cabeza mientras esperaba por si alguno habiasi visto mas, quedando la mirada al final en Isaias y Teela.

Abri los ojos como platos al ver la enorme cuchilla que me presentaba y ademas parecia afilada, no era para nada como la que tenia en la bota. No, esa tenia pinta de doler y la mia apenas cortaba el pan duro, ya ni te cuento para abrir algunas de las latas de los soldados.

Mire la cuchilla, luego a la mujer que me lo daba, me pase la manga de mi sucia camisa por la cara, dejando unos leves manchurrones de polvo humedos. Acerque la mano y la cogi con cuidado, mirandola como si fuera lo mas bonito que hubiera visto nunca. - De nada... - La respuesta parecia automatica, como si en algun momento, alguien me hubiera ensenado modales.

La bajo y miro directamente a la amazona. - Pero... pero aunque sea eso... todo eso... me llevareis con vosotros verdad... - Su mirada se desvio en direccion a Ania, que era la que mas directa habia sido en sus palabras en ese sentido. - No quiero quedarme aqui, por fuerte que sea...

Me ergui levemente, me relami los labios e intente parecer un poco mas fuerte, porque ella decia que lo era, pero yo no queria quedarme sola, ni queria quedarme aqui.

Asenti ante lo de las lagrimas, pero aun asi intente aguantar, intente aguantar todo lo que pude, pero al final una se escapo, mientras se notaba como buscaba impedir que mas salieran, sorbiendo mocos y al final me pase la mano. - Se me ha metido algo... de polvo... si polvo... - Sorber mocos. - Voy... a ver afuera... yo... vigilare... si.... vigilare...

La guerrera asintió a las palabras de Erik para cuando Helena terminó de hablar sonreírle con cierto afecto y revolverle el pelo.

- Por supuesto. Fue lo primero que te dije, ¿recuerdas? Que te llevaríamos con nosotros. Es mi promesa y la cumpliré.

Le guiñó un ojo a la niña para después regresar su atención a Rea.

- Ahora, voy a ver de callarle la boca a mi amiga, ¿si? Le gusta mucho usarla y va a ser divertirlo callarla durante unos instantes...

Río buscando sacarle hierro al asunto, aunque claramente estaba preocupada por la loca de Rea. Se levantó y fue hacia allí.

- Vamos preciosa, voy a meterte algo en la boca y voy a lograr callarte un poco... Ya sabes, piensa que fue esa cosa larga y blanda que te aplastó y así morderás con más ganas... 

Hizo hueco para que Ania se acomodara también, mirándola y haciéndole una indicación con la cabeza de que ya estaba preparada, después puso aquel trozo de madera en su boca y lo sujetó con fuerza. 

Observó como Erik desarrollaba su trabajo y su expresión continuó calmada e impasible, como si todo aquello no fuera mucho con ella, aunque al ver la sangre no pudo sino sonreír con cierta añoranza.

Una vez terminó con Rea, apartó el trozo de su boca y le acomodó el pelo.

- Bueno preciosa, te dejo en buenas manos. Ahora me voy a ver qué cojones más hago.

Cuando terminó de hablar con Rea miró a Erik

- ¿Algo más en lo que ayudar, jefe? Después de todo no puedo encargarme de Derek, aunque me lo hayas dicho, ya está la otra con él.

¿Cómo leches había dicho que se llamaba? Bueno, daba lo mismo. 

La herida sangrante del conductor con verborrea mantenía a Keira enfocada y en silencio con su eterno ceño fruncido. El azul de sus ojos se desviaba en ocasiones hacia donde operaban a Rea, provocando que la joven se mordiera los labios bajo la tela, inquieta.

No pareció reaccionar con desagrado ante el apelativo que le había dedicado su paciente, quien parecía disfrutar de lo lindo tomándole el pelo a su amigo. Se preguntaba qué edad tendrían. También se preguntaba si con cuatro agujeros más seguiría igual de parlanchín... Por suerte para él, el hecho de mantener la pierna en alto ayudó a que la hemorragia remitiera, y la muchacha ahora se disponía a limpiar y desinfectar los orificios ayudándose del material que tenían disponible. Agradecía la asistencia de Zack, a quien asintió con cierto alivio cuando éste le confirmó que la entrada estaba vigilada. No lo conocía lo suficiente como para poder emitir un juicio sobre él, pero lo cierto es que hasta el momento el hombre de la cresta sólo le había facilitado las cosas. 

Un nuevo vistazo en dirección al médico. ¿Estaría también herido? A simple vista no lo parecía... Esperaba que no lo estuviera.

La extraña pregunta que formuló Dante le hizo agudizar el oído. Esperó a que alguno de ellos aclarase las dudas que habían quedado en el aire, pero al ver que nadie lo hacía se vió obligada a preguntar después de Zack:

- ¿Qué había en el aire? - Miró al "mastodonte barbudo", y luego al resto en general. No tenía ni idea de lo que hablaba y, francamente, no se veía en situación de poder preocuparse de más cosas aquella mañana. Hacía unas horas sólo le quitaban el sueño una veintena de salvajes y un par de escorpiones gigantes. Ahora todo eso se había quedado en poco...

Fue un inapropiado comentario de Rea lo que ocasionó que un rollo de venda le bailara graciosamente entre las manos a la rubia, que se masajeó las sienes con frustración al ver el rulo dibujando una estela al llegar al suelo. No sabía si echarse a llorar, reir, gritar, salir de allí por pies o hacerlo todo a la vez... Sus ojos, clavados en un punto fijo, parecieron bullir cuando sintió la imperiosa necesidad de aclararse la garganta, desviándolos hacia Derek como si éste la hubiera distraído con su cháchara justo en el momento en el que comentaba lo de "afearse", haciéndolo su chivo expiatorio.

...Esto es ridículo.

Tragó saliva y respiró profundamente mientras recogía la gasa con renovada dignidad, satisfecha por la cobertura del pañuelo. No entendía cómo había acabado en aquella situación, ni tampoco tenía ni idea de cómo salir de ella... Pero no tenía otra. 

Esta vez el desconsuelo de Helena logró partirle el corazón, y la joven se tomó un momento para dirigirse a la pequeña, asegurándose de quedar a espaldas de Tanner:

- ...Helena, cariño - Se descubrió por primera vez el rostro para dedicarle una sonrisa cálida y algo cansada a la menor, enarcando las cejas - La chica pelirroja está durmiendo aquí al lado. ¿Por qué no vas junto a ella e intentas dormir un poco? Seguro que estás cansada... - Había dulcificado notablemente el tono, pero no dejaba de sonar natural, pues le tranquilizaba el hecho de que la niña quisiera abandonar el repentino hospital de campaña en el que se había convertido aquel dormitorio. Tras esto volvió a jalarse el pañuelo hasta los ojos con la intención de continuar con su tarea; al fin y al cabo, apestaba a sangre y a humanidad allí dentro - Toma... - Le tendió un paño húmedo, estirándose hacia ella - Límpiate la cara y descansa un poco, ¿vale? No te preocupes... Nosotros te despertamos luego.

No, me lo enseñó mi padre contestó a Ania una vez terminada la operación con Rea por lo visto había una gran tradición de médicos en la familia se limpió las manos, su mirada se perdió en un punto indeterminado, no era el momento para recordar, realmente nunca lo era… suspiró y negó con la cabeza al tiempo que dedicaba una sonrisa triste a la joven que le había hecho la pregunta.

Saldrás de esta… llevó sus ojos hasta los de la mujer que acababa de tratar, ignorando sus comentarios, sabía que eran una forma de sobrellevar el dolor pero no te muevas, sé que te duele, pero no puedo ponerte nada que te haga dormir durante un rato hasta asegurarme de que todo está bien le dijo mientras tocaba su frente con suavidad, volviéndose a incorporar tras sus palabras dedicadas en voz baja.

Echó un vistazo a su alrededor, no le habían hecho caso y Keira habían atendido a Derek mientras Azra había pasado de Teela… a la que miró cuando habló Ania, ayuda a Teela a quitarse el chaleco, necesito examinar ese ruido, pero mientras voy a terminar de ayudar a Isaias… le estaba empezando a doler la cabeza, había demasiada gente en aquel sitio… y tú también estás herida Azra le dijo cuando le preguntó si podía ayudar a algo más no quiero que empeores, vamos a necesitarte si esos tipos regresan, así que descansa hasta que pueda examinarte suponía que no le gustaría hacerlo, y probablemente no le haría caso, pero estaba intentando pensar en términos globales.

¿Va bien? ¿necesitas que te eche una mano? Se detuvo detrás de Keira, colocando de manera inconsciente una mano en su hombro, mirando por encima del mismo, parecía que se apañaba bien de momento cualquier cosa me dices ¿vale? Pidió antes de agacharse junto a Isaias…

Examinó el trabajo que había hecho la chica y asintió con la cabeza está muy bien hecho, ahora sólo tenemos que coser la parte por dentro y poner un estimulante, con eso será suficiente hablaba ahora también para el herido será rápido prometió mientras se ponía a ello dando explicaciones a la joven que estaba a su lado, la verdad es que no podía negar que le encantaba enseñar, y además se le daba bien, siempre había sido así… Cumplió lo prometido y cuando terminó de administrar el estimulante asintió a Isaías… quieto lo más tiempo posible, dale tiempo a que el estimulante haga su función volvió a limpiarse las manos con esa botella de alcohol con múltiples usos.

Se puso de pie, y antes de acercarse a Teela, bebió un trago de agua, y luego se echó un poco en la cara mientras se quitaba el sudor de la misma, para finalmente colocarse junto a ella, prácticamente tumbado para colocar su oreja en el pecho de la chica… ensombreciéndose su expresión al cabo de unos segundos , aunque cuando se incorporó, intentó transmitir calma tienes líquido en un pulmón, fruto de algún tipo de hemorragia interna informó con sinceridad te lo voy a sacar y cuando ya no quede, te daré un estimulante para que se cierre la herida del interior quizás si que iba a necesitar finalmente a Azra tendréis que sujetarla también y ayudarme con la ropa se lo dijo a ella y a Ania por si acaso, aunque será menos doloroso se arrodilló y sacó de su bolsa una jeringuilla de tamaño considerable, normalmente la usaba para extraer líquidos de las articulaciones, algo habitual, pero serviría, sólo tenía que pinchar en el sitio adecuado has hecho bien en avisar antes de que fuera peor, enseguida sentirás alivio… preparó una aguja lo suficientemente larga para llegar hasta su objetivo, por suerte las costillas se marcaban claramente...

Ania atrapó al vuelo los ojos asustados de la chica y los retuvo con ella mientras le sonreia confiada. Algo cansada, pero confiada. Asintió con suavidad a la par que escuchaba a Azra. Bueno, la niña sería quien decidiria con quien quedarse. La nueva le dió un buen consejo y Ania le indicó con un gesto de cabeza que le hiciera caso.

Durante la "intervención" a Rea no dijo nada, tenia que concentrarse en su tarea. Luego se levantó y se frotó ambas manos con suavidad, se habían ensuciado ligeramente con el polvo y la sangre que manchaba las ropas de la herida. - Tenía pensado llevarme a Helena conmigo cuando volvieramos a Parody - su tono era bajo, suave y hasta casi parcia una pregunta dirigida a la amazona - No sabía que tu también querías encargarte de ella.. -

Cuando Erik le habló se acercó a Teela sin rechistar. Sus pies se plantaron enfrente de ella, ambos separados y bien firmes contra el suelo. Recordaba lo que habia hecho aquella loca cuando el viejo de los perros cayó en aquel agujero. Seguramente podría impedimentos. Alzó levemente las manos, quedando en suspensión unos segundos a modo de silenciosa petición "Dejame ayudarte y acabaremos antes". Luego procederia.

Esperó a que el medico diera más instrucciones antes de continuar - no sabía que se podía hacer eso... lo de sacar liquido de un órgano del cuerpo - Ella había aprendido que si uno se entrenaba... podía detener el movimiento de un órgano, el corazón en concreto, golpeando el punto exácto y con la fuerza precisa. Pero aquello era... - ¿y que estimulante le vas a dar? ¿sirve cualquiera? -* hablaba mientras iba acomodando a la paciente y se iba recolocando ella

Azra se encogió de hombros ante las palabras de Ania, como si éstas le resultaran indiferentes. 

- Cuando la encontré prometí llevarla a Parody para que tuviera una mejor vida. Así que, si quieres llevártela una vez estemos allí eso es cosa tuya. - Arqueó una ceja - ¿Encargarme de ella? No soy la más indicada para ello, creo que es bastante evidente.

Sin más, continuó con sus tareas. 

El comentario de Rea la hizo reír. Pensó en decirle que para cosas guarras hasta le venía mejor la mandíbula dislocada, pero no quería arruinar sus ilusiones de joderla un poco. Ahora mismo, todos necesitaban una victoria, por pequeña e insignificante que fuera.

Vi helicopteros en las granjas... - confirmó, exhalando. - ¿Tú los viste por aquí?

Teela abrió los ojos cuando la chica se le acercó, dejándose palpar pero atenta a sus movimientos. Pintaba mal que tuviera que revisarlo Erik, pero no estaba tremendamente adolorida, ni sentía que se estuviera muriendo, así que tan malo no sería. Ante las indicaciones de esta, asintió. Confiaba en que si no era lo correcto, Erik intercedería. Y si lo era, tocaría aguantarse el tenerla inmovilizada. A menos que fuera de vida o muerte, claro, pero ya calcularía riesgos de abrirsela otra vez más adelante.

A regañadientes, se quitó el chaleco antibalas, recibiendo cualquier ayuda que obtuviera para ello. Si era necesario, era lo que tocaba. Lo dejó a su lado, eso si, cosa de tomarlo y correr si era necesario, aunque ahora mismo ni tomar cosas ni correr fueran actividades que ansiara o se le dieran muy bien. A pesar de que notó como la mirada del doctor auguraba un mal pronóstico, Teela se mantuvo tranquila.

No te preocupes, no muerdo - le sonrió a Ania, con una mirada calmada. Apreciaba aquel gesto a forma de petición, precisamente porque no habría sido necesario - Hagan lo que tengas que hacer - dijo borrando su sonrisa, intercalando su mirada entre esta y Azra, para que supieran que hablaba en serio. Iba a aguantar tanto como pudiera sin moverse, pero si no lo lograba, y acababa dislocándose algo, la culpa sería solo suya por retorcerse. Era buena aguantando dolor, y su entrenamiento para torturas ayudaba, pero este último era sobre todo mental y moral, y no la convertía en insensible o inmortal - Los tres - miró al doc, asintiendo cuando estuvo lista para lo que fuera que iba a hacer este con la aguja, que tenía pinta de ser todo menos placentero.

Las palabras de Zack atrajeron mi mirada, mientras la nueva preguntaba y por fin Teela hablaba sobre lo que era importante. Isaias aunque bajito, tambien dio su parecer, admitiendo que recordaba los bichos voladores pero no habia visto nada aqui. - Diria que era el mismo modelo, pero no pude verlo mucho tiempo... y a diferencia de aquella vez no parecia por la labor de destrozar nada, solo esquivo esa cosa y se alejo... usandola como cobertura. - Me encogi de hombros. - Ni idea de si estara aun por aqui, pero con el silencio que hay, deberiamos poder oirla llegar... creo...

Un aparato volante*. Solo una vez habia visto uno y ya se podia considerar un hito en si mismo.

Escupi el trozo de madera cuando habian terminado y miraba a las dos rubias... con una sonrisa ligeramente lasciva pero sobretodo de las que decian que sino soltaba una borderia, lo haria en breve y no seria recatada justamente.

Las palabras de Erik hicieron que bufara levemente, con el consecuente dolor en el proceso, seguido de un pitido algo mas alto por culpa del tubito que salia de su pecho. - Ahora ya ni moverme... tu si que sabes como fastidiar Erik... - Mire a las dos rubias. - Me parece que esta vez os tocara a vosotros comer y moveros, a la proxima prometo daros yo bien duro... - Saque la lengua lascivamente para acabar riendome, acto que a su vez acabo cortado por un gruñido de dolor.

Lo pillo... lo pillo... quietecita y calladita...

Abrumada mientras salia de la habitacion con tantas muestras de cercania. Las palabras de Keira la pillaron por sorpresa, pero ver a las dos "tipas duras" hablando sobre llevarla a un lugar seguro e incluso una de ellas de buscarle un sitio dentro de la misma Parody, acabaron por provocar que se escucharan unos leves quejidos, que acabaron con sus manos sobre los ojos mientras se alejaba hacia afuera de la habitacion. Estaba claro que eran demasiadas emociones para la pequeña Helena.

Sus ojos se fijaron en Keira y asintio en cuanto a lo de irse a dormir con una chica de fuera.

Lo que tu digas doc... - Isaias asintio y se dejo hacer, para luego caer en un serio mutismo mientras pensaba lo ocurrido desde el punto de vista de un ser que llevaba vagando por el yermo demasiado tiempo. Estaba claro que no estaba dormido y de que el dolor le mantendria despierto, pero parecia haberse evadido lo suficiente tras las palabras a Dante, mientras este simplemente hacia de apoyo para el loco del sombrero.

Teela soporto el tratamiento, no con poco dolor e incluso en algun momento se noto como su cabeza daba algun que otro bamboleo como si la inconsciencia intentara arrastrarla, para asi evitar que su cuerpo aguantara el tormento de ir extrayendo liquido de un lugar donde no deberia estar. Aun asi, con las formas de Azra y de Ania, no llego a perderla demostrando que el dolor no le era ajeno. Al terminar la guerrera sudaba profusamente y tenia algun que otro temblor tras la situacion acaecida... que sin duda ahora le estaba pasando aun mas factura, aunque el peligro por el momento estuviera salvado gracias al estimulante.

La chica que habia estado pendiente de las diferentes operaciones,no dudo en ausentarse y volver con algunas telas mas pesadas que aunque no servian de mucho, sin duda darian calor. - Por si acaso... - Se las tendio a Teela.

Acabe dejandome hacer y cuando las heridas se cerraron se noto como un alivio notable en mi persona. Mire a Keira, luego a Erik cuando se acerco a esta y acabe por apoyarme de tal forma que seguramente acabaria durmiendome, pero era notable que habia perdido sangre aunque eso no me mataria.

Ya es suficiente de sobarme, ya sabes que no eres mi tipo... puedo solo... o medio solo al menos... - Una leve sonrisa, aunque se notaba que agradecia la ayuda.

Levante la mirada y me fije en las formas de mi "doctora" - Tu eres mas mi tipo, pero... apenas puedo moverme... te dejo que te desahogues con mi gemelo malo... si te da por ahi claro... - Le di un golpe a Zack, se notaba que era una forma muy particular de dar las gracias, antes de cerrar los ojos.

Observó como Helena se iba y como rompía a llorar evitando que el resto la vieran. Entendía cómo podía sentirse y que las lágrimas parecían calmar a ciertas criaturas, así que simplemente la dejó que estuviera sola y fuera poco a poco asimilando todo cuanto había acontecido. 

¿Heli qué? ¿Qué tipo de pájaros eran esos? Nunca he escuchado ningún animal que se llame así o nada que surcara el cielo... ¿Qué mierda habían tomado o de qué mierda hablaban?

Azra permanecía sobre Teela, sujetándola de tal manera que Erik pudiera hacer sus funciones, ejerciendo más presión y fuerza sobre el cuerpo de ésta cuando se movía a consecuencia de las atenciones del médico. No buscaba dañarla de ningún modo, simplemente inmovilizarla para que la intervención no fuera más peligrosa de lo que ya parecía por sí sola.

Una vez terminó con aquello se limpió las manos y se acercó a Rea, acomodándola con algunas telas para que tuviera la cabeza en reposo.

- Vamos preciosa, descansa un poco. - Le dio un beso en la mejilla - No te acostumbres, que mis besos valen mucho alcohol.

Le guiñó un ojo asegurándose de que se quedara calmada y cuando hubo cerrado los ojos se levantó para sentarse junto a Dante y usarlo de apoyo para apoyar su cuerpo.

- Si no te importa, voy a usarte un poco más hoy... ¿Cómo estás, llamita? Y por cierto, ¿qué tipo de bicho es ese que llamáis helicóptero? 

Keira detuvo su actividad al notar la presencia del médico tras ella...

- ...Todo bien - No llegó a darse la vuelta, pero notó su hombro relajarse al contacto con su mano y su pulso dispararse con la celeridad de una bala. Y aún así, asintió a sus palabras con aparente entereza antes de que éste se marchara, enfrascada en sí misma... 

El peculiar agradecimiento por parte de Derek logró sacarla una vez más de su ensimismamiento, haciendo que la rubia alzase una ceja y desviase su atención hacia Zack por un momento.

- ...Cualquiera diría que tu gemelo "malo" es el "bueno" - Respondió al conductor con una sonrisa audaz bajo la tela - Es él el que está de una sola pieza - Devolvió el cuchillo a su dueño, quien continuaba visiblemente preocupado por su amigo. No había que ser un lince para intuir el fuerte vínculo que había entre aquel dúo... - ...Está bien. Sólo necesita descansar, nada más - Le dijo al hombre de la cresta mientras se lavaba las manos - Si puedes cúbrelo con una manta o algo para evitar que pierda calor...

Recogió parte del material médico, atenta a la conversación que había de fondo pero sin llegar a intervenir. Al menos no de momento. La mención de la aeronave la intrigaba, pero su mente aún seguía demasiado distraída como para poder centrarse en una sola cosa...

Finalmente dejó escapar un suspiro y se puso de nuevo en pie, contemplando la operación de Teela con gesto grave; parecía una muñeca de trapo. Estuvo tentada a decir algo, pero se mantuvo en silencio, algo indecisa... A excepción de Teela, los heridos de mayor gravedad parecían haber sido atendidos y ya sólo quedaban las lesiones de menor importancia, así que aprovechó un momento de distracción para llevarse consigo los paños sucios fuera del dormitorio, acomodando uno limpio sobre su propio hombro...