Partida Rol por web

El agente recibe el impacto de la bala en su pierna izquierda lo que provoca que caiga al suelo rodando con unos espectaculares y dolorosos golpes hasta quedar tendido entre tierra y hojas secas.Parece afectado hasta cierto punto porque de nuevo hace el amago de levantarse.

El grandote se abalanza sobre Deimos intentando golpearle con la porra que está desenvainando de su cartuchera - maldita rata te voy a matar!! - su golpe por poco que no acierta en toda la cara de Deimos pero al último instante topó contra el borde de la puerta que se cerraba...

Era el momento del contraataque de Deimos.

Deimos se limitó a dar un paso hacia atrás casi imperceptible para esquivar el ataque de John que fue a dar contra el marco de la puerta.

   - Casi, pero te faltó atinar.- Comentó con una sonrisa cargada de ironía.- No te preocupes que ahora te enseño.-

Cogiéndole con rapidez del antebrazo se lo retorció aprisionándoselo con fuerza mientras lo apartaba y le lanzó una patada en la parte baja del estomago para apartarlo de él.

Soltándole el brazo, se decidió a ponerse en guardia adquiriendo una postura marcial de Choy Lee Fut. No quería matar a aquel podre desgraciado, pero tampoco se podía permitir perder el tiempo, así que aquel estilo de combate rápido, repleto de golpes blandos pero contundentes le seria muy útil en esa ocasión.

Lanzándose hacia adelante, comenzó a azotar con golpes rápidos al segurata con  una gran precisión, obligándole a ponerse a la defensiva. Se movía a una velocidad sorprendente, sobretodo teniendo en cuenta su gran constitución y peso. Gracias a los giros de su torso, aprovecho la energía cinética de su cuerpo para aplicar mas fuerza en los golpes.

Finalizó su serie de ataques, con un giro en el aire lanzando con fuerza una patada que impactó el pecho de John proyectándolo hacia atrás.

Al llegar junto al mustang y encontrar el maletero abierto el corazón me da un vuelco. Lanzo una mirada paranoica al rededor, pero no hay nada, solo el viento silbando entre las ramas, y la gente de más allá, moviéndose bajo la luz de las farolas.

Sin perder un momento introduzco medio cuerpo en el maletero, abro una de as puertas desde allí y me apresuro a ocupar el asiento del conductor. Lo primero que hago es fijarme en si mi maletín sigue donde lo dejé. En caso afirmativo saco el subfusil P90 y lo dejo sobre el salpicadero.

-No me des la murga con esto, cacharro, -murmullo para mi mismo mientras me inclino bajo el volante, -te  lo pido por favor.

De un tirón desencajo una placa de plástico tapizada de cuero y gomaespuma, y saco un manojo de cables. ¿Cuales eran? Me pareció haberlo visto en nosequé película. Pelo algunos de ellos con los dientes, pruebo un par de combinaciones y al fin, -brrrrrm, - el motor ruge y sus vibraciones animan la carrocería.

-Esto va a estar bien. -Sonrío más confiado en mi mismo. Piso el embrague, doy la marcha atrás, acelero al máximo y de un volantazo me alineo con la carretera. Apoyándo un brazo en el respaldo y mirando por el parabrisas trasero, continuó marcha atrás hasta la entrada del Cube para recoger a Deimos.

Enfrentarse a un agente nunca era buena idea, pero dejar vivir a uno herido era una idea aún peor. El loco apuntó para aprovechar la situación. El agente no sabía desde dónde podía ser atacado ya que no sabía dónde estaba escondido Salomón. Eso, sumado a su herida, daban una oportunidad inigualable. Salomón entonces soltó una ráfaga, con suerte una o más balas acertarían en el agente, incapacitándolo o eliminándolo por completo.

Stein ve como el loco sigue disparando y el mismo apunta de nuevo mientras corre pero a la otra pierna para que este un poco mas fuera de combate, sabia que no lo iban a matar nunca y que eso volveria hacer la chica destruida y podria aparecer en otro cuerpo el agente.

Bajo el aluvión de proyectiles que se le venían encima ,el agente corre a protegerse tras el tronco de un árbol.
No obstante las ráfagas de los dos rebeldes le atrapan en su intento por huir haciéndole tambalearse mientras las intenta esquivar.
Finalmente es alcanzado por partida doble y llega a refugiarse tras el tronco, pero solo por puro azar ,ya que es el lugar dónde ,mas bien, cae al suelo.

El Mustang ruge furioso y atronador al entrar marcha atrás en el callejón. Deimos no puede girarse para admirar la genial maniobra de Pixel que esta apunto de rayar todo el lateral del carro contra un container.
En cambio Pixel si puede ver con claridad a Deimos por el retrovisor dándole de hostias al segurata John en lo que parece ya algo personal.

John no sabe de donde le caen una somanta de hostias en cadena que acaban con su culo en el suelo.
Medio tambaleándose consigue levantarse para intentar golpear a Deimos.
Pero hoy John parece el jugador de fútbol que chuta dos veces seguidas al poste y no se come un rosco .Su ,ya de por si torpe golpe ,pasa por delante del rostro de Deimos sin rozarlo siquiera.

La voz de Liu suena nerviosa - En cuanto el calvo meta su culo en el coche,salid pitando por el camino asfaltado que cruza el parque y sacad de ahí a los otros ... ....tienen un agente encima, vamos os buscaré una salida!! -

- Resistid chicos ,por las cercanias del parque debe haber una posible salida, los otros están al caer con el Mustang...

Esquivando el ultimo golpe del segurata, Deimos aprovecho y agachándose dejó que la porra pasase inofensivamente por encima suyo, mientras superaba las defensas de John y realizando un giro bordeando al tipo lo acompaño con un experto molinete de brazos.

Con una mano le aferró el brazo del arma desde atrás, y con el otro realizó un golpe seco en la parte alta de la espalda proyectando a su adversario contra el culo del coche.

Saltando por encima del guardia caído, Deimos corrió hacia la puerta del acompañante y se introdujo rápidamente en el interior del vehículo.

   - Bien echo chaval.- Le comentó sonriente.- Ahora dale caña a este trasto que tenemos que dar alcance a esos dos...-

Llevándose el teléfono al oído llamó a la operadora.

   - Liu, ¿Donde se encuentran Salomón y Stein?- Preguntó con voz apremiante.- Pixel y yo estamos en el coche y iremos a apoyarlos.-

- Aiii - suspirando - Deimos cariño porque tengo la sensación siempre de que cuando tu vas yo ya he vuelto... ... ya le di la ruta a Pixel mientras te dedicabas a hacerte el macho - un instante de silencio - a que esperáis? Largo de ahí!!

Piso al máximo el pedal del acelerador. La ruedas traseras se queman contra el asfalto levantando una humareda y dejando una mancha negra. Nuestro bólido se tuerce primero hacia un lado, y luego hacia el otro, y en cuanto vence la resistencia natural del suelo, se lanza hacia adelante como un caballo desbocado.

-¡Ja! Y yo pensando que estarías en apuros. -Me río, -ese tío no va a olvidar esta noche en mucho tiempo. ¡Necesitará muelas de repuesto!

Nuestro motor atronando el vecindario, un movimiento en zig-zag y entramos directamente en la pista que atraviesa el parque. Dirección oeste sur-oeste.

- Si es que es por eso precisamente por lo que me pones tanto querida.- Respondió a la operadora bromeando con una risa entre dientes.- ¿Que puedo decir? No pude evitar ponerme a repartir hostias para que pudieses verme mover el culo de una de las maneras que te gusta.-

Mientras intercambiaba comentarios insinuantes con Liu el coche salió disparado hacia delante derrapando por el suelo de una manera que delataba que Pixel era un tipo experto en esas lides.

   - ¡Ja! Hace falta algo mucho mas potente que un patán de discoteca para ponerme en apuros muchacho.- Respondió a Pixel con compadreo.

El silencio y la penumbra del parque se rompe con la aparición a lo lejos del Mustang,su inconfundible rugido le delata mientras circula a toda pastilla por la pista de tierra destinada a peatones y bicicletas.Los faros barren vuestra zona por un instante,lo suficiente para iluminar al imponente Stein,fusil en mano disparando hacia el interior de la arboleda.

Os metéis a toda mecha en el parque por una pista de tierra destinada a peatones y ciclos.Los faros del Mustang barren una arboleda bastante espesa y profunda que se extiende hacia el interior de la gran zona verde.
En una de tantas ráfagas de luz que proyecta el automóvil aparece la silueta de Stein,fusil en mano y disparando... los destellos del arma os permiten ubicarlo entre la espesura.

Deimos tuvo un ligero sentimiento de alivio al ver que Stein estaba lo suficientemente entero como para disparar el rifle con eficiencia. Aun así no vio ni rastro de Salomón y eso le preocupó en sobremanera. Ciertamente su parlanchín compañero podía llegar a ser molesto como un grano en el culo, pero aun así seguía siendo parte del grupo y había llegado a cogerle incluso un poco de cariño. Si es que eso era posible...

   - Frena el coche Pixel.- Le dijo con un gruñido.- Es nuestro billete de salida y si lo metemos en esa espesura probablemente quede embarrancado...-

En cuanto el vehículo frenó lo suficiente Deimos sacó su fiel revolver y abriendo la puerta con fuerza salió del coche.

   - Es evidente que necesitan apoyo pesado.- Comentó bromeando con ironía.- Pixel, tu encárgate de que Stein y Salomón lleguen al coche sanos y salvos, yo de mientras intentare distraer un rato al agente.-

Y sin mas comenzó a correr hacia la espesura. Su corazón palpitaba con la velocidad de la emoción. Un agente era un peligro en mayúsculas pero se había entrenado a conciencia para poder enfrentarse a situaciones limites como aquella.

O eso esperaba...

Sus compañeritos habían llegado, era hora de irse a casa. Sin embargo Deimos en lugar de esperarlos en el auto salió corriendo adentrándose en el bosque. Quería una presa que no era de él.

_Ey, tú, ladrón de agentes, vuelve ya por donde viniste y espéranos en el auto, este agente es nuestro, no tuyo.

Salomón descendió de la copa del árbol en la que estaba oculto e hizo un rodeo ocultándose tras los troncos de los árboles hasta llegar a algún lugar desde el cual se pudiera ver tras el tronco donde había caído el agente. Una vez que lo localizara acabaría con él, en el estado en el que estaba no sería un rival demasiado peligroso, si es que se podía subestimar a un agente.

_Grandote, ve por el otro lado, si lo rodeamos no podrá volvera escapar -dijo a Stein-.

- Vamos el agente no es de nuestra incumbencia, ahora tenemos que salir Salomon o podran venir mas de uno, muchachos arranquen.

 Mientras Stein corria hacia el auto rapidamente.