Partida Rol por web

El frío recorre todo mi cuerpo como un millar de agujas. Sabía que debía levantarme y salir de aquí, pero era mucho más fácil de decir que de hacer.

Stanley intentó levantarse, pero volvió a resbalar. El frío se había metido dentro de él y hacía que no dejara de castañear los dientes

Kaalim no logra esquivar a tiempo el aliento del dragón blanco. Nota como sus músculos y huesos se congelan tras el impacto, mientras maldice en silencio. ¿Como podía haber bajado la guardia de esa manera? intentar hablar con el dragón había sido, simplemente, una auténtica estupidez. Al menos ahora sabían que debían luchar contra la criatura.

-¡Maldito seas mil veces!- dije, esta vez en la lengua común- ¡Que Bahamut te haga arder en su aliento eterno!

Y acto seguido lanzo mi aliento de fuego hacia la criatura.

Sentí cómo el frío recorría todo mi cuerpo, y tuve la sensación de que el corazón se me iba a salir por la boca, ya que estaba palpitando muy rápido para recuperar una temperatura normal

Aún tiritando, clavé mi espada en el suelo helado y me apoyé en ella para levantarme. Conseguí mantenerme en pie, alzando mi arma, preparado para el combate, caminé hacia el dragón

Mal descargó el aliento de fuego sobre el dragón de hielo y a pesar de que logró esquivar parte del daño todos pudisteis ver como el fuego le hacía graves heridas. Estaba claro, aquella criatura tenía un punto débil bastante esperable. El fuego le hacía más daño de lo normal.

Gracias al aliento de vuestro compañero el suelo dejó de ser resbaladizo y tan solo se encontró algo mojado, ahora erais libres de poneros en pie con total tranquilidad y de atacar al dragón sin tantos problemas.

Ahora teníais más esperanzas de las que que parecía.

No quedaba otra que combatir. A Kaalim le empezaba a quedar poco poder, pero en este combate era necesario. Invocando de nuevo su poder mental, alza su mano y apunta hacia el dragón, mientras de la yema de sus dedos sale un rayo de fuego que se dirige directamente hacia el dragón... sin embargo, en el último instante, el animal esquiva el golpe.

El Orco se levantó del suelo rápidamente, esperaba poder devolver a aquella inmunda criatura el daño que le había causado. Con un poderoso movimiento del brazo hizo girar la cadena sobre su cabeza y lanzó un fuerte golpe contra la cabeza del dragon. 

-¡¡¡UUUUUUUUUUAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAGGGGGGGGHHHHHHHHHH!!!.... Ukkk Glad-isshhhhggg-

El guerrero se levantó del húmedo suelo y se movió por la fría sala para intentar flanquear al dragón.

Con el escudo por delante enfrento al dragón. "Que se centre en mí" pienso "al menos el resto no tendrá que preocuparse de la cabeza".
-¡Cuidaos de sus garras y de la cola!- grito, una sonrisa se dibuja en mi rostro- ¡Luchar contra un dragón es como luchar con cinco bestias a la vez!

Me preparo para esquivar su ataque y lanzar mi contraataque.

El suelo se había derretido. Eso nos ayudaba, aunque el combate seguía siendo difícil.

Levanté la espada con fiereza e intenté que se clavara en el cuerpo del dragón. Su piel era dura, pero esperaba poder alcanzarle

La Dama Roselina se quedó atrás pues se encontraba muy malherida, así que tan solo se puso en pie y le dio el relevo a su compañero orco. Seifer, ahora lo tenía más sencillo y logró ponerse en pie y clavarle su espada entre las escamas. Kaalim también reaccionó rápido y lanzó un poderoso rayo de fuego pero que se estampó contra la puerta que había al otro lado.

Stanley se levantó y tomó posiciones, Urkk hizó lo mismo pero no tuvo que moverse pues con su cadena logró alcanzarle desde más lejos, además tuvo suerte y logró estrangular al dragón haciéndole muchísimo daño. El dragón hizo un gesto brusco y se deshizo de las cadenas y luego dando un paso rápido se abalanzó sobre el orco, pero tuvo mucha suerte y logró esquivar cada uno de sus ataques.

Finalmente Mal logró encajar un pequeño corte entre las escamas, aunque le alcanzó el daño fue sumamente débil.

El dragón está desesperado porque está sufriendo, nuestros ataques son efectivos pensé mientras me movía para acercarme de nuevo al dragón y volver a golpearle

Stanley consiguió afianzar su posición y tener al dragón en su punto de mira. Dijo las palabras arcana y notó como la energía recorría su cuerpo y como una pequeña bola de fuego se materializaba en la punta de su espada y la lanzaba contra el dragón.

El combate continuaba, y a pesar de que Kaalim empezaba a perder sus energías, no podía dejar de ayudar a sus compañeros. Un dragón blanco era un rival formidable, a pesar de la edad de este ejemplar.

Aún sentía los efectos del frío extremo recorriendo mi cuerpo como para pensar en meterme en un combate contra un dragón, pero ardería en los infiernos antes de permitirme un segundo más de aliento.

Así que voy avanzo hasta el combate pero en lugar de golpear con la espada únicamente la uso de distracción para terminar por intentar derribarlo antes de que alce el vuelo.

El orco balanceó las cadenas alrededor de su cuerpo mientras gritaba improperios contra aquella criatura en su lengua materna. 

-Kadal bau Sialan, memiliki beberapa kemarahan saya-

La Dama se abalanza sobre el dragón pero al tratar de derribarlo ella termina en el suelo por segunda vez. Seifer también intentaba golpearle pero sus escamas le protegían del daño de su espada, el único que parecía ser de ayuda era Kaalim que desde la distancia lograba hacerle bastante daño con sus ataques de fuego. Stanley no se quedaba atrás y usaba su filo mágico para encajarle también un duro golpe.

Pero el que puso fin al dragón fue Urkk que logró encajarle un duro golpe con su cadena armada y lo dejó completamente muerto en aquella caverna de hielo derretido.

El camino ya estaba despejado, puesto que la criatura del frío había sido vencida y ahora podríais avanzar por la siguiente puerta para explorar la nueva planta en la que os encontrabais.

Habíamos acabado con ese dragón de una manera que se podía considerar rápida. Esa criatura era un enemigo muy peligroso y, por fortuna, no habíamos sufrido ninguna baja.

¿Continuamos?