Partida Rol por web

.- Estupendisimo Don Bianco-. dijo con un tono encantador, que nada le pegaba, al menos para quién la escuchaba con normalidad.

Sin embargo, tan pronto como empezó, termino.

.-No voy a llamarte las pelotas, esta claro que voy jodida. Así que iré al grano.

Quiero cuatro cuerpos. Si sigues en las luchas a muerte, no creo que te cueste mucho. Tres hombre y una mujer fea me sirven.

Y luego, y luego te deberé un favor, como el que me debiste hace años por lo del Conde Larrey, por lo de sus dos hijos menores-.

La cosa estaba clara, estaba desesperada, y el puto psicopatía los sabía. Y si algo tenia claro es que cómo aceptara su mal expuesto plan, es que tenia pensado joderla luego.

Puede que afuera alguien le estuviera pidiendo su cabeza. Y aquel eunuco era capaz de dársela sin miramientos, si con eso salía beneficiado.

De echo, lo poco que había comentado por teléfono le llevaba a pensar que tenían problemas con las autoridades, y les estaban presionando para cambiar de negocio o lugar para ejercerlas.

Seguramente los tiros andarán por ese lado. Ya se vería.
 

- Claro que si, desgraciado. Cuanto todo se calme podremos desafiar nuestros hígados mientras nos ponemos al día. Cuenta con ello –

Corto la comunicación y me pongo serio. Aunque ha sido agradable que algo salga bien en esta misión para variar, lo que me ha contado no me gusta un pelo. ¿IAs Salvajes? ¿Formateadores? ¿Pero en que coño nos hemos metido? Me giro hacia todos y les informo de todo lo que me ha contado Vincent.

- Las buenas noticias – Resumo tras contarlo todo – Es que no nos han identificado por lo que hecharle el muerto a cuatro mierdecilas puede ser nuestra mejor opción. La mala… que nos hemos metido en algo gordo y tenemos a varias facciones que pueden estar interesadas en nuestro culo. Teniendo todo esto en cuenta, creo que deberíamos ponernos en marcha cagando leches si queremos salir de aquí con vida –

El resto se pone en movimiento para hablar con sus contactos, estoy verdaderamente interesado en lo que el contacto de Alden tiene que decirle. La idea de dejar aquí mi nave me sigue revolviendo el estómago.

Así mismo le insisto a “Kat”.

- A ver si el zumbado ese puede conseguirnos 3 cuerpos, creo que con el que tenemos aquí ya podríamos hacer algo y evitamos “dejar cabos sueltos” – Me giro al resto - ¿Cómo conseguimos que los focos caigan sobre ellos? - La verdad es que estoy en blanco

Cuelgo la transmisión con Regine y suspiro con bastante alivio. "El Escurridizo" está en posición de hacer honor a su nombre, si logramos pasar toda la seguridad del hangar.

- Es lo que nos pasa por trabajar por dinero, no tenemos escrúpulos, ¿no? - le digo a nuestro conductor - Ya se que no es demasiado, pero, si habéis estado atentos a lo que decía mi contacto, parece que nuestra nave se ha librado como por arte de birlibirloque del bloqueo magnético que tiene puesto gracias al jaleo que se ha montado con el tiroteo, pero no os preocupéis, el bloqueo no parece ser específico, pero de momento lo mejor será esperar para hacer nuestra huida triunfal, parece que espaciopuerto está a reventar de agentes, deberíamos desviar antes la mirada.

Levanto los hombros con la resignación cuando Roy pregunta por el procedimiento a seguir para desviar la mirada sobre los cuatro cuerpos, aquellos que todavía no hemos conseguido.

- No lo se, compañero, de momento no tenemos los cuerpos, pero siempre podríamos preguntar por el incidente y ver que sabe la gente del lugar, luego podríamos ir a los cuerpos de seguridad con alguna mentirijilla, diciéndoles que la juerga está por un sitio aleatorio alejado del espaciopuerto, al parecer seguimos siendo ciudadanos normales y corrientes podíamos haber visto algo y tengamos información que podamos ofrecerles - digo acercándome al piloto y bajando algo la voz para no interrumpir la llamada de Kat -. Quizá eso nos de el tiempo suficiente para salir por piernas con nuestro amado transporte - añado palmeando suavemente el hombro de Roy para intentar tranquilizarle.

-Conseguir tres o cuatro cuerpos no es problema-digo por el comunicador-Si el amiguito de Kat no quiere colaborar, podemos cosecharlos nosotros mismos entre la escoria de esta estación espacial. 

Hago una pausa debido a un ataque de tos. Por el ruido que hago, todos deben sentir alivio de que yo esté ahora mismo en la azotea.

-Casi puedo ver las caras que estáis poniendo pero tampoco estoy diciendo que apiolemos a tres padres de familia: simplemente le damos pasaporte a tres basurillas vendedores de droga, chorizos o lo que sea. Dejamos los cuerpos con algo de artillería y algún contenedor de datos en algún escondrijo, lo empapamos todo de queroseno y montamos un poco de jaleo antes de prenderles fuego. No sé, estrellamos un deslizador por ahí cerca, disparamos a unos cuantos drones... lo que haga falta para que toda la atención recaiga sobre ese sitio. Todos los que estén buscando a alguien en este lugar, como mínimo, alzarán la ceja al enterarse de que un edificio ha ardido con cuatro panolis armados dentro después de una ensalada de tiros. Eso debería centrar la atención en ellos antes que en nosotros.

(Dramatización)

-Si además metemos cuatro tonterías en el contenedor de datos con referencias a "entregas de datos" y nombres de sistemas cercanos, podemos liarles todavía más. En cualquier caso, relajaría un poco la vigilancia sobre las... un momento.

Me interrumpo un segundo y escruto las calles con los ojos entrecerrados.

-No es nada, perdón: solo un idiota meando contra la pared.

No sé cómo, pero parece que tenemos algo parecido a un plan y puede que podamos recuperar “El Escurridizo”. Ya todo me da igual y solo quiero salir de allí. Me doy cuenta de que un trozo de carne ha quedado entre mis dientes y aunque intento sacármelo con la lengua esto no parece funcionar por lo que hurgo con el dedo y cuando por fin se suelta, lo escupo sonoramente al suelo.

- De acuerdo, parece que vamos teniéndolo todo para hacer esto, pero ¿Cómo lo hacemos? Ya que no solo debemos preparar los cuerpos, debemos dejarlos en algún sitio que llame la atención de las fuerzas de seguridad para que los localicen. Si nos lo montamos bien, hasta podríamos alejar patrullas del espacio-puerto donde está mi pequeña, pero… tener que “esconder” así los cuerpos, nos obliga a acercarnos mucho a las patrullas que están actualmente buscándonos –

Me pongo pensativo por un momento.

- Yo podría piratear algún camión de reparto o basura para el transporte de los cuerpos. Cuanto menos llamemos la atención hasta llegar al punto de entrega mejor. Luego habría que llamar la atención sobre el lugar de alguna manera, una buena explosión. Salimos cagando leches de ahí y esperamos que encuentren los cuerpos. Sin embargo…–

Yo mismo me sorprendo de que esté pensando tanto ahora. Hay que joderse lo que se activa el cerebro cuando ve peligrar su culo.

-… No creo que debamos ir los cuatro, con que vayamos yo y alguien más valdría. Mientras el resto debería adelantarse para reconocer el terreno del espacio puerto. Recordad que no solo los cuerpos de seguridad, tenemos IAs salvajes y formateadores interesados en nuestro culo por culpa del “paquetito”. Mejor tener reconocido la via de escape. –

Mientras hablo no me estoy quito, estoy muy nervioso y solo quiero ponerme en movimiento.

- Me parece una genial idea, Roy - le digo a nuestro conductor -. Mientras tú y Drexler montáis el espectáculo de fuegos artificiales, Kat y yo podemos acercarnos al espaciopuerto y evaluar la situación antes de escapar. Pero antes que nada, Kat, ¿tenemos los cuerpos o no? - le pregunto a la rubia - Si no tenemos los cuerpos hay que ponerse en marcha a buscarlos y, muy a mi pesar, mancharnos las manos directamente. Ya sabéis lo que opino de cosas que no sean entregar un paquete, por suerte en Ecceron II no necesitamos hacerlo, tuvimos mucha suerte que aquel andamio cayera sobre aquel puesto de fideos y que nos dio la distracción perfecta para salir por patas sin disparar ni una sola vez, pero mucho me temo que esta vez será diferente. En el supuesto de que tengamos que hacernos con los cuerpos nosotros mismos, podríamos tirar de mendigos que haya en la calle, probablemente nadie los echará de menos.

La situación es peliaguda, espero que Kat conteste positivamente pues nos mancharemos las manos igual, pero al menos lo habrán hecho otros, dentro de lo malo, es lo único que logra aliviarme.

- Si tenemos los cuerpos deberíamos bajarnos un mapa de la periferia y entonces decidir que ruta vamos a seguir - añado -. Aunque lo más transitado de por aquí ahora mismo sea el espaciopuerto, los formateadores no tardarán demasiado en extender su dominio, así que deberemos ser discretos para evitar que nadie señale en nuestra dirección, hay que evitar la entrega superrapida, ya se que te encanta la puntualidad exagerada, pero esta vez tendrá que ser distinto, recuerda que piensas llevarte un vehículo de una de esas corporaciones de limpieza o transporte, no es lo mismo que "El Escurridizo", de la misma manera deberías hacerte con un segundo vehículo para llegar hasta el espaciopuerto, será mejor idea que el vehículo pueda acabar destruido junto con la explosión - explico a Roy -. Drexler, ¿mientras Roy prepara esa parte del plan, podrás conseguir algo de pólvora de la buena? Tendrá que ser suficiente para llamar la atención, pero no demasiada, no creo que queramos dejar un bonito cráter y que nos llamen terroristas por ello, tenemos que provocar la destrucción solo para despistar. Kat, deberías convenir un lugar donde quedar con César o con quien vaya a hacernos la entrega, si queréis yo mismo me encargaré de buscar una ruta más o menos segura, después de eso, nos iremos los dos al espaciopuerto y observaremos los movimientos de los cuerpos de seguridad, quizá Regine pueda ayudarnos a colarnos por alguna puerta trasera de ser necesario.

Miro a todos mis compañeros, espero que les convenza el plan, suelen ser muy brutos y el trabajo debe ser demasiado fino. Sonrío.

- ¿Y bien? ¿Estáis listos? - les pregunto.

Aun no había terminado de hablar.  Desde el otro lado de la linea escucho  chillidos, lloros, y… “gemidos”.

Casi hubiera preferido colgar el teléfono en el acto, no tenia claro si Cesar estaba en una reunión de trabajo, o en su casa. Seguramente las dos cosas.

Cuando le preguntaron por los cuerpos por tercera vez en menos de un minuto. Levanto el pulgar. Esa parte estaba resuelta. Solo esperaba a saber que suplemento le iba a costar al grupo, o a ella misma aquella transacción.

En cuanto tuviera la ubicación seria sencillo. Llegar con un vehículo grande, tipo recogida de basuras. Cargar los cuerpos, cerrar el trato, quedando con el culo al aire para un futuro no muy lejano, y salir por patas.

Los pies planos estaban buscando gente que estuviera relacionada con las IAs Salvajes. Seguro que Drexler, que era la cosa mas dura en esta parte del espacio podía averiguar donde había algún nido de ellos, o dónde se rumoreaba que se movían.

Se dejaba un vehículo para que “petara” en cuanto alguien se acercara a ver quienes eran los que estaban dentro, y listo. Cualquier madero sumaria dos y dos. Total, era lo único que esos imbeciles podían sumar siempre.

Entro por la puerta con el cañón apuntando al suelo. Hago un gesto circular con el dedo seguido de un pulgar positivo. Todo en orden ahí fuera. 

-Muy bien: Gobston y yo nos agenciaremos un vehículo. Algo voluminoso. El sector de descarga de mercancías TR-6-A está cerca de aquí, se puede llegar andando. Una vez lo tengamos, podemos ocuparnos del asunto de conseguir los fiambres. Unos cadáveres surtiditos para atrezzo de un zambombazo se sacan de cualquier parte. Es más,  ni siquiera hace falta que estén muertos : unos panolis esposados o drogados servirán igual. 

Compruebo la carga de mi fusil de asalto. Cuarenta proyectiles. Dos cargadores más en mis bolsillos. 

-La explosión no es problema. Si mangamos un antigravitatorio podemos ponerle el piloto automático para que suba bien alto y luego se estrelle contra el sitio adecuado: un bloque de conexión de energía, por ejemplo, generará fuegos artificiales de sobra para lo que queremos. 

Estar tanto tiempo encerrados en esta ratonera comienza a ponerme nervioso y siento una fuerte urgencia por salir de allí.

- Como tenemos mas o menos claro que hace falta un vehículo, si os parece bien en lo que os ocupáis del resto de los detalles, voy consiguiendo el vehículo. -

Verifico a “Stacy” para asegurarme de que esté cargada y a punto y me dirijo a la salida.

- Entonces un vehículo grande para que quepan 4 cadáveres de manera discreta. Llevo el comunicador, si necesitáis que traiga algo más, armas, info, pañales, solo decídmelo –

Abro la puerta, el aire fétido me impregna las fosas nasales, pero coño, es aire. Casi siento como la adrenalina empieza a bullir dentro de mí. Coloco la escopeta junto a mi cuerpo y me pongo encima una gabardina, no hace falta ir llamando la atención con la escopeta en la mano y me preparo para patearme las calles.

Roy no espera por nadie. Decide salir a las atestadas calles de la Periferia en busca de un vehículo que les pueda servir. Puestos a pedir se imagina algo rápido pero espacioso, con buena maniobrabilidad y, ya para soñar despierto, resistente. Joder, y si tuviera capacidad gravitatoria ya sería la leche. Mientras se abre paso a través de una multitud de despojos humanos que apestan a sudor y alcohol, esquivando los omnipresentes drones publicitarios e ignorando el olor a fritanga de los puestos callejeros de comida, piensa que un vehículo de reparto podría cubrir esas necesidades. Al menos en parte.

Ahora bien... ¿dónde va a encontrar alguien que reparta algo en la periferia?
 

Kat cuelga el teléfono, le habían dado las coordenadas.
Echa un vistazo y ve que solo quedan Alden y ella.

.- Bien guaperas, tendrás que servir. Como dije tendremos los cuerpos. Vamos a irnos a por ellos, no están demasiado lejos, pero será un paseo a pie nada romántico-.

Coloca los dedos sobre le lóbulo de la oreja derecha y con dos toques enciende el comunicador. Drexler y Roy ya andaban fuera.

.- Muy bien haraganes, Alden y yo vamos a ir andando a por los cuerpos. En cuanto los tengamos os digo la ubicación y empezamos el juego de despiste de los pies planos.

Si la cosa se tuerce, recordad que nos podemos volver a ver en la esquina del Bar Agallas. Aquella donde conocimos a Stuart, el timador-.

Supongo que en un par de horas estaremos ya listos para la traca final, y con suerte al final del día estaremos lejos de este planeta de mierda-.

Se ciño la ropa al traje, echo un vistazo al infeliz que había estado grogui en el suelo del almacén. Y enfilo con paso decidido hacia la puerta.

Poco podría hacer para detenerlos, y seguramente fuera mejor que pudieran investigar un lugar donde si habían estado ellos, así los señuelos no aparecerían de la nada.

Ahora sus principales problemas, podían ser él transportar los cadaveres y toparse con una patrulla quisquillosa, saltarse algún control de velocidad, o sencillamente, llamar mucho la atención.

Sonrío ante la escena de ver a todos mis compañeros a tope con le plan, organizándonos algo después del estrés y los nervios ocasionados por el evento reciente en el espaciopuerto.

Saludo con la mano y me despido de nuestro conductor y de nuestro matón y me dispongo a hablar cuando Kat toma la iniciativa y establece el primer punto a realizar. Asiento con tranquilidad y me llevo las manos a la espalda.

- Toda la razón - digo siguiendo a mi compañera -. Aunque es toda una pena que no sea un paseo de placer - añado con fingida tristeza.

Estoy de acuerdo con el plan de acción, pero...

- ¿Te parece, de todos modos, si alargamos este paseo no romántico, para estudiar un poco la zona? - pregunto a Kat - No me gustaría que el vehículo que usaremos no llame mucho la atención, espero que no se nos adelanten nuestros compañeros y nos de tiempo a hacer algo más, ya que salimos a por nuestros sustitutos - añado con una sonrisa -. Las damas primero.

-El sector de descarga de mercancías TR-6-A está cerca de aquí, se puede llegar andando-repito a la espalda de Gobston .

No me hace mucho caso pero no me lo tomo a mal: en los marines conocí a muchos tipos que lidiaban peor con el estrés (podía liarse una buena en un campamento de hospitalización ), Roy simplemente se pone un poco gruñón. Mientras mantenga el cañón apuntando bajo puedo aguantar unas cuantas protestas.

-Allí descargan las naves de carga pesada con materiales en bruto para la estación: minerales, combustible, piezas de repuesto... y apostaría mi mano buena a que los contrabandistas también. El tipo del puesto de comida mencionó a un tal Li-Dao, que era el tipo que le traía los bloques de nutrientes procesados y le hacía un precio especial. Por lo visto, es un mercante sineuropeo que se saca un extra con las "pérdidas" de sus cargamentos.

Me noto parlanchin. Después de comer, cuando las efedrinas me hacen efecto, soy peor que un loro.

Drexler y Roy llegan en poco tiempo al lugar descrito por el primero. Llamarlo espaciopuerto es excederse en el uso del vocabulario. Aquello es más bien era un área de carga y descarga donde los vehículos gravitatorios pesados tiran, más que depositan, sus cargas para salir cagando hostias de la Perferia.

Pero hay donde elegir.

Porque por un lado los mini-cargueros urbanos son vehículos gravitatorios muy molones. Pueden alzar el vuelo de forma rápida y son maniobrables a la par que resistentes. Lo malo es que ninguno viene libre de protección. En todos ellos el conductor y los estibadores están protegidos normalmente por uno o dos matones armados. Aunque no dejan de ser seguretas de ciudad y Drexler puede apostar su ciberbrazo a que no se van a jugar la vida por ese trabajo.

Claro que si quieren ir a lo sencillo tienen los furgones terrestres. Aunque no son tan versátiles como los gravitatorios pueden cumplir la función encomendada. Y en ese caso no tendrían que lidiar con ningún guardia: los transportistas son gente corriente. Es muy probable que aquel sitio estuviese protegido por alguna Corporación o una Banda pero, que demonios, a nuestros chicos ya los está buscando gente más peligrosa.

Alden y Kat recorren su camino hasta el local de Cesar. No está tan cerca como pensaban en un primer momento pero tampoco es difícil llegar hasta allí siguiendo una de las calles del mercado de la Periferia. Pero el camino más corto no es el único: hay decenas de callejuelas secundarias por las que podrían moverse y cruzarse de mil maneras. El problema en la mayoría de ellas es la cantidad de gente. Está claro que un vehículo gravitatorio facilitaría mucho el avance, aunque también llamará la atención mucho más.

El local en el que Cesar se ha instalado parece ser algún tipo de instalación antigua de mantenimiento. Enormes tuberías salen en todas las direcciones, cubiertas por óxido y pintadas, como si se tratase de un gigantesco pulpo de metal oxidado, una suerte de kraken que se hubiera estrellado en medio de este lugar. Alguien ha arrancado las verjas de la entrada y puesto encima un cartel de neón estrafalario en el que se lee 'El Circo de la Carne'. Es uno de los espectáculos habituales de Cesar. En la entrada hay dos tipos, dos matones enfundados en cuero, que vigilan sin mucho interés el sitio.

Los nervios están a flor de piel y solo quiero completar esta misión y salir de este puto planeta. Escucho a Drexler hablar del puerto donde descargan las naves de carga.

- Sin duda me has leído la mente. Esa era mi idea, mucho movimiento de transportes, seguro que tardarán en notar que les falta uno. No me gustaría acercarme tanto a las patrullas como para que puedan volverse un problema antes de tiempo así que las zonas más próximas al centro quedan descartadas –

Recorremos las sucias calles sintiendo las miradas de todos sobre nosotros. Estoy tan tenso que podrían ponerme un alfiler en el culo y podría llevarlo todo el camino sin que se me cállese. Cada mirada, cada acercamiento a nosotros, hace que deslice el dedo por dentro de la gabardina hasta mi “Stacy”. Pero no se si es suerte o que estoy paranoico, pero llegamos casi sin problemas.

- Vale, aunque nada me gustaría más que liarme a tiros y pillar el primer camión que encontremos, eso atraería la atención sobre nosotros antes de tiempo. Creo que deberíamos peinar la zona desde una distancia prudencial para localizar el camión más desprotegido, colarnos dentro, piratearlo y salir como unos currantes más. Como digo, tardarán en darse cuenta de que falta y para entonces será pasto de las llamas. – Echo un vistazo rápido, hay mucho ajetreo, pero es otra cosa la que me preocupa. – También debemos tener cuidado de que no haya cámaras que puedan grabarnos o toda nuestra tapadera se irá a la mierda. Yo voy por aquí. –

Señalo una zona a la izquierda en la que se apilan grandes contenedores. Hay varios trabajadores, pero el tamaño de dichos contenedores puede taparme lo suficiente.

- Tú ve para allá –

Señalo una zona de descarga de naves donde aunque hay movimiento, no parece haber tanto ya que no es hora punta de naves.

- En cuanto lo localices me avisas y pirateamos el camión y nos largamos cagando leches ¿Correcto? –

Empiezo a moverme hacia la zona que he indicado, buscando las sombras e intentando localizar cualquier cámara que pueda haber.

Siguiendo las indicaciones de Roy ambos hombres se cuelan en la zona de carga/descarga. Aprovechando las cajas como cobertura se deslizan rápidamente hacia un lateral donde hay varios vehículos aparcados. Roy revisa varios hasta encontrar uno que parece adecuado: buen balanceo entre velocidad y resistencia, y espacio para llevarlos a todos. Una furgoneta amplia, discreta, de reparto.

Se cuela en su interior y comienza a trastear en su hardware. Tal como esperaba no es ningún prodigio de la seguridad y se hace rápidamente con el control. Su sonrisa triunfal se disipa cuando nota una pistola apuntando en su sien a través de la ventanilla del conductor.

—¿Te gusta mi vehículo puto punky?

Parece que el conductor del mismo no estaba tan lejos como Roy pensaba. Pero aún no ha tenido tiempo de pensar una disculpa para salir del follón sin un nuevo respiradero en su cabeza cuando un golpe seco derriba al conductor. Drexler acaba de aparecer tras él como una sombra resolviendo el problema de diálogo.

Kat se acerco con buen talante a los gorilas de la puerta. Estaba claro que Cesar estaría esperándola, y aunque no se lo hubiera comunicado a aquellos neandertales, ellos tendrían linea directa con el interior.

Se paro frente a ellos, y antes de que pudieran decirle alguna chorrada sobre una fiesta privada, una invitación o la llamaran encanto, y con eso se le hinchara malamente la vena de la ingle, decidió abordar el problema con celeridad.

.-Venimos a ver a Cesar. Nos esta esperando. Decidle que ya ha llegado Katerina, y que vengo con mi pareja-.

Los dos tontos, empezaron a replicar, pero alguien, en algún lugar, les hablo al comunicador y a regañadientes nos dejaron entrar.

Las lugrubes escaleras, llenas de moho, charcos de orina y vomitos, hacían las delicias de cualquiera que fuera bajando.

Ya bajo tierra, una puerta de metal robusta custodiada por otro gorila con pinta de ser ligeramente menos imbecil que los de fuera les espera. Y al abrirse esta se escucha de golpe el sonido de la música.

.- Gracias guapo-. Dice Kat sin fingir que no le interesa lo más mínimo el gorila.

Una vez dentro, ve a todos los clientes del lugar, que pibotan entre unas barras bien iluminadas, y un foso que había quedado después de desplomarse una parte de la antigua instalación.

El lugar perfecto para las luchas a muerte de gentes que no tenían nada que perder, y solamente un poco que ganar. El lugar donde conseguirían las preciadas carnes para poder dar esquinazo a la policía.

Se pararon en la barra, tarde o temprano el mismo Cesar vendría, pomposo y radico a buscarlos. O al menos, verían llegar a cualquier insensato que quisiera jugarsela.

Sumado a que "La Periferia" no era un lugar demasiado agradable, al lugar en el que acabamos y que la propia Kat ya había hecho su declaración de intenciones, no quedaba duda que el paseo no había sido uno de aquellos románticos con los que uno luego sube a tomar una última copa al piso de su pareja y una cosa lleva a la otra...

Pasamos sin problemas al interior del local del contacto de Kat, ella lo tenía todo controlado, no se puede decir que el lugar sea el más limpio del lugar, ni el más lujoso, pero al menos el más estrambótico lo que hace que me pregunte ¿Cómo puede ser que una mujer como Kat conozca lugares como estos? Pero rápido se me aparta la idea de la cabeza porque ¿Cómo un chaval hecho para el espectáculo y los lujos acaba de recadero? Lo mejor será no darle demasiadas vueltas a la cabeza y evaluar lo que he ido viendo de camino hacia aquí.

"La Periferia" es el típico sitio atestado de gente que tiene sus lugares ocultos, las ruta que parece "más segura" parece atravesar ciertas calles repletas de gente, pero con el buen camuflaje que seguro que consiguen Roy y Drexler lo más probable es que no haya problemas para llevar del punto A al punto B toda la mercancía. Me sonrío todavía más si cabe ante el pensamiento de que todo va a salir a pedir de boca, pero tengo que controlarme no se puede dar todo por sentado.

Sin embargo hay algunas cosas que me ha llamado la atención poderosamente mientras paseábamos de forma no romántica, y que he ido reportando al comunicador a mis compañeros y en persona a la propia Kat. Estoy seguro de que habrá alguna cosa que tenga que tener en cuenta más adelante, pero tengo la foto global de lo que he visto, en el momento dado me daré cuenta de lo que se me haya podido escapar.

- ¿Así que tu pareja, eh? - pregunto socarrón de repente a Kat, una vez llegamos a la barra - ¿Crees que damos el pego aún si haber hecho nuestra llegada de forma romántica? ¿O son demasiado cortos como para darse cuenta que si no vamos cogiditos de la mano, es que no hay nada?

Es la típica conversación para llenar espacio, esa que sirve para conversar mientras esperas, esperar poniendo cara de paisaje no es lo mío.