Partida Rol por web

[DM12/19] De vuelta a casa

escena I - exploración

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21/11/2019, 21:57
Director

El frio de la noche Ostland se os clavaba en los huesos, aun con el calor del fuego, vuestras mantas sobre el cuerpo, y los estómagos con algo de comida, lo cual a los no Ostalenses os sorprende un poco el caldo con un poco de suerte, incluía un poco de carne y unas pocas verduras, ya que os esperabais la "tradicional" sopa de piedras de la que tanto cantan los bardos y juglares por todo el imperio.

Cada uno estaba en sus pensamientos, cuando se os acerca unos pesados pasos de armadura, y tras poneros de pie, os ponéis a escuchar lo que dice.

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21/11/2019, 22:18
Caballero de la Orden de Izale

Con su armadura completa, "mañana a primera hora saldrán varios grupos a explorar, dire los nombres de los integrantes y su dirección" el caballero coge un pergamino, y empieza a decir nombres, cuando termina cada grupo dice su dirección, hasta que llega a la parte que os interesa, pues dice vuestros nombres "... Vosotros iréis a explorar las cercanías del castillo, al oeste, y evaluar las defensas de las sucias bestias que lo habitán" comenta, antes de continuar un poco mas, al poco de terminar, se va.

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22/11/2019, 09:22
Urgan Jossefsson "Matabestigors"

La noche allí no era mejor que en las montañas, pues el clima gélido del norte se filtraba por debajo de los flecos de la manta deshilachada que me cubría los hombros mientras  me mantenía junto a la hoguera, pensativo. Aquel viaje infructuoso podía tener una parte buena si lograba meterme en la batalla por la fortaleza y, a juzgar por la cantidad de hombres, todo parecía indicar que aquello era inminente

Observé las llamas, obnubilado con su danza, hasta que los metálicos pasos de un caballero nos sacó de nuestra ensoñación para indicarnos cual sería nuestro destino al día siguiente... evaluar las defensas

Miré al caballero mientras sopesaba mis palabras, mas me las guardé en aquellos momentos dado que no tenía sentido discutir allí. Se me podía dar mucho mejor uso en primera línea, pero "evaluar" las defensas podía incluir varias acciones ofensivas para ponerlas a prueba... después de todo, quién no evaluaba algo sin ponerlo a prueba?

Sonreí para mí mismo mientras sacaba el hacha y empezaba a afilarla, pese a estar tan afilada como se podía. El día venidero prometía ser movidito

...

Me desperté con el movimiento matutino del campamento, descubriendo un gratificante caldo que no esperaba dado que nos encontrábamos en plena campaña; al menos parecía que los fondos para los víveres eran generosos por el momento, con lo que no dude en engullir una buena ración que me calentara el cuerpo

Empecé a ajustarme la armadura, asegurando mis armas en su lugar así como el escudo, mientras me colocaba junto al resto de "elegidos" que nos encargaríamos de evaluar las defensas enemigas... torciendo ligeramente el gesto al ver entre ellos a un elfa aunque sin emitir juicio alguno al respecto. Los prejuicios eran cosa de los barbaslargas, mi mundo era la guerra y si esa elfa ayudaba a ello tanto mejor. Le daría el beneficio de la duda, por el momento

-Urgan Jossefson- dije con firmeza al llegar junto a ellos, analizando a los presentes

Notas de juego

EEEING??? Dónde está el post de Anawelle? Lo he soñado o había un post suyo???  o_O'

PD: Editaré el turno dado que no está lo de Anawelle

 

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22/11/2019, 09:41
Hraldan Mondfeder

- Ah, hmm magnífico. - dijo el joven iniciado, terminándose el trozo de carne. Estaba encantado de comenzar esta misión. Desde que entrara a la orden a iniciarse en los estudios teológicos no había tenido apenas tiempo de entrenar el aspecto marcial que requieren los sacerdotes de su dios. Durante el último año lleva vagando por estas tierras con el viejo maestro Oswald, desarrollando la parte teórica de su aprendizaje.

Hace un par de semanas el maestro le pidió que entregara una carta al hermano Reinhard, cuyos contactos le llevaron a embarcarse en esta misión.

  Evaluando luego con la mirada a los compañeros asignados, sentenció Ulric nos guiará. -

Al escuchar la escueta presentación del barbudo enano, le respondió - Hraldan Mondfeder, encantado.

Notas de juego

¿Nos conocemos entre nosotros?

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22/11/2019, 13:04
Urgan Jossefsson "Matabestigors"

Observé como los demás se presentaban, pero el chico humano que se interesó por mis habilidades me hizo enarcar una ceja dado su aspecto y sus modales.

- Preferiría que fuera Grimnir quien se interesara por mi sino en lo que está por venir... pero si tu dios invernal quiere darnos su apoyo no seré yo quien lo desprecie. Contra los Poderes Ruinosos cualquier ayuda es bien recibida- dije al tal Hraldan antes de mirar al chico 

- La guerra es mi oficio, muchacho- dije henchido de orgullo - En cuanto a esa hoja... no parece una mala herramienta, deja que le echa un vistazo- añadí 

Pondría la hoja frente a mí, estirada, viendo si tenía alguna curvatura en la hoja antes de lanzar un par de golpes al aire y una estocada, devolviéndole la hoja al chico al término, dándole mi opinión al respecto -Es una buena hoja, solo asegúrate de usar la parte afilada contra el enemigo- le diría con una medio sonrisa guasona antes de lanzarle al regazo la piedra de afilar . Hazle pases suaves y largos, no demasiado fuertes, de arriba a bajo en ambas caras de la hoja... cuando empieces a notar el brazo cansado habrás acabado- añadí mientras observaba

(Protege a un dawi de los grobis y siempre pedirá ayuda, enséñale a matar y sabrá defenderse, recordé que me decía mi padre cuando apenas era un barbilampiño)

Notas de juego

Hay varias piezas de cuero que podrías comprar con 7 co tienes un gorro de cuero (3 co, protege la cabeza con 1 PA) o un justillo de cuero (6 co, protege el cuerpo con 1 PA)

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22/11/2019, 14:39
Anawelle Hoffmann

Anawelle dormitaba entre las mantas de su tienda de campaña mientras el rumor de las graves voces de los hombres a la luz de las hogueras la acunaban.
Era de noche, hacía frio y aunque tenía que compartir la tienda con la cocinera, dos sirvientas y una rapaza de no mas de seis veranos, el miedo de estar en el mismo lugar que una hechicera hacía que la tienda fuera prácticamente suya.
Prezosamente abrió los ojos cuando el campamento entró en un estado de agitación. Los pasos metalicos de las armaduras resonaban por doquier y las voces se elevaban.
-¿Van a atacar de noche?- Se preguntó la hechicera mientras se levantaba y asomaba la cabeza a través de la lona.
Desde hace tiempo los caballeros de Izale luchaban en una guerra continua contra los hombres bestia que habian tomado su hogar. Ahora, doce años despues, el conde elector habia sido convencido de la importancia estratégica de ese lugar y varios nobles habian acudido a su llamada. Ahora un verdadero ejercito se habia reunido para presentar batalla y Anawelle habia sido enviada por sus maestros para que aprendiera y apoyara a las tropas. Una tarea de la que estaba orgullosa.
Con paso firme se acercó hasta la hoguera de su zona, donde un caballero de Izale ordenaba los distintos grupos de ataque.
La desilusión se reflejó en el rostro de Anawelle cuando fue nombrada para un grupo de reconocimiento y exploración.
-Mierda.- masculló entre dientes mirando de reojo a sus compañeros. Ella quería estar en el centro de la batalla, asediando el castillo de frente mientras utilizaba su magia, no de exploradora en el lado oeste.
Un enano, un elfo y mas hombres humanos. Anawelle sintió el frio de la noche y se estremeció. Cruzó los brazos en un intento de darse calor mientras se acercaba a la hoguera.
Sus compañeros comenzaron a presentarse, asi que ella también lo hizo.
-Hola, soy Anawelle Hoffmann... - una duda la asaltó de inmediato. Los hombres y los enanos eran muy supersticiosos y los elfos desconfiaban de la magia humana. No podía decirles que era una hechicera o la rehuirian. -... Podeis llamarme Ana, para simplificar.

Notas de juego

A ver si no se borra esta vez. 

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22/11/2019, 16:26
Alexis Hartmann

Tomaría el sirviente la piedra que el enano dejaría caer en su regazo, y con la lengua fuera intentaría darle al filo las pasadas de la mejor manera posible. Nunca había estado en una pelea, así que se esforzó en afilar la espada lo mejor posible para luego empezar a dar torpes estocadas y cortes laterales a unos metros del grupo. 

Daba pena verle atacar a decir verdad, pero su juego de pies era grácil, no se correspondía con lo que hacía con las manos.

Después la hechicera hablaría, y el sirviente la miraría de arriba a abajo un poco absorto. Si él no parecía el tipo de persona que debiera estar ahí, la mujer todavía menos. ¿Adonde cojones iba con esa pinta? Mejor seguir callado, no vaya a ser... pensó para sí mismo.

Con una sonrisa y asintiendo sin decir nada, devolvería la piedra de afilar al enano con una sonrisa en la boca y se relajaría hasta el momento que les mandaran partir. 

¿Estaba listo?

 

- Tiradas (1)

Notas de juego

A ver si tampoco se me borra.

Tiro carisma con el noble, a ver si me fía equipo, porque doy entre pena y asco. Sigo dando pena.

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22/11/2019, 19:00
Caballero de la Orden de Izale

El caballero mira al sirviente, "quita de mi camino, campesino, no voy a darte ni una misera moneda, si quieres un escudo, te lo buscas por tu cuenta" le dice quitandolo de su camino.

Notas de juego

te dejaría hacer una tirada para encontrar un escudo y comprarlo, pero no tienes dinero por lo que no puedes comprar nada.

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22/11/2019, 19:33
Hraldan Mondfeder

Hraldan vio la escena, se percató de lo nervioso que estaba el joven Hartmann y se apiadó de él. Hraldan no cree que el muchacho sea mucho menor que él, y no entiende como ha llegado a embarcarse en esta empresa. 

- Tranquilo, Hartmann. Es una misión de reconocimiento, por lo que no es seguro que vayamos a entablar combate con esas bestias. Tú quédate detrás de los guerr... - dudó por un momento al mirar al resto del grupo ​- detrás del enano si hay problemas. Además, ir ligero tiene sus ventajas. En caso de huir, no tendrás tanta carga, por ejemplo. - dijo con una media sonrisa. 

Aprovechando la ocasión, y para ayudar a tranquilizar al muchacho, empezó a contarle la historia de Ulric y algunos héroes de tiempos pasados. - No sé si sabes que hace mucho tiempo, mucho antes de que existiera el Imperio, habían hombres que luchaban contra los orcos prácticamente desnudos, vestidos solo con pieles de lobos y osos, portando grandes martillos y espadones y blabla...

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22/11/2019, 23:53
Ludwig Georg VII

Mierda pensó Ludwig. Tendré que despejarme bien para mañana. Y ahora hay que presentarse al grupo. Y yo asi, en este estado. Con lo que yo he sidp en la nobleza. 

Con no poca dificultad Ludwig dejó el odre de vino barato que tenia entre las manos y miró donde despejarse echandose agua a la cara. Tras limpiarse la borrachera en un barreño de agua echandose el frio líquido por la cara y el cogote, se acercó al grupo. 

Ludwig Georg VII. Aunque podeis llamarme Ludwig de momento. 

Todo el que controlara la historia de la zona sabía que la familia noble de los Georg fueron una de las multiples bajas del ataque de la hueste de Archaon. Por ello, el título de Ludwig parecía carecer de valor real. 

Ludwig se sentó cerca de la hoguera donde estaba el resto del grupo y sacó una pistola. Claramente aun no estaba en plena posesión de sus factultades, peor al revisar la pistola decorada que llevaba claramente se notaba que lo habia hecho miles de veces y se lo sabía de memoria. 

Un galgo trotó hasta su lado y le olió con su afilado hocico. Ludwig sonrió levemente. Veo que tu tambien vienes Archie. Mañana tenemos trabajo. 

Esta no era una oportunidad de oro, pero tras caer a lo más bajo de la escala social sólo poco a poco podria salir del pozo. Cuando se apuntó al ataque a Izale esperaba ser uno de entre unos pocos y ganar gran gloria en el proceso. El conjunto de tropas presente le habia supoesto un duro chasco, pero peor era quedarse sin posibilidades de demostrar su valia. 

Los 2 hombretones tenian opciones de ser un buen muro de contención, aunque sus bravatas esperaba que fueran reales. Sino podia ser un problema. La mujer le resultó curiosa. Pensaba que era una sirviente o compañera de cama antes de que hablara. y el joven Hartmann le inspiró ternura. Él no era muy distinto cuando Archaon arrasó el feudo de su familia y el de tantas otras casas nobiliarias. Pensó en decirle algo de ánimo, pero le vinieron ganas de vomitar por lo malo del vino y decidió que casi mejor esperaba al alba antes de decir nada inadecuado. 

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23/11/2019, 03:20
Anawelle Hoffmann

-Vale.- Visto el grado de éxito de su presentación decidió ir a por un poco de ese caldo con carne guisada que olía tan bien. Había decidido no cenar porque la comida de campaña de ostland no era precisamente agradable, siendo preferible esperar al desayuno, pero habían tirado la casa por la ventana con esta comida.
"Si quieres que tu tropa tenga buena moral, sacia su hambre y ahoga su sed." Le vino de memoria la cita de un antiguo caballero de nombre ya olvidado que había leído en la biblioteca de sus maestros, en la academia de hachicería. El desenlace era inminente. Mañana sería el ataque al bastión Izale, dos días a lo sumo. Parecían desesperados y después de doce años no se lo echaba en cara.

-Me retiro dormir. Mañana nos vemos. Que descanséis bien.- Anawelle volvía a tener ese tono mitad marisabidilla mitad madre. Ya se habían presentado, era mejor que supieran que no era ni una mocosa ni una "doncella".

Notas de juego

Por mi comenzamos la exploración.

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23/11/2019, 09:28
Director

La luna se empieza a alzar a medida que pasan las horas, y el campamento va empezando a perder vida, ya que sus integrantes se van a dormir, como Anawelle, que prefiere un descanso reparador antes de una difícil misión que pasarlo de juerga, mientras, Urgan enseña unos cuantos movimientos a Alexis, el cual vuelve de manera infructuosa de comprar un escudo, no por falta de vendedores, si no por medios propios, aunque vuelve con un gorro de cuero, por su parte, Hraldan ha conseguido un pequeño grupo de seguidores de Ulric y gente que teme por su valor en la inminente batalla que con suerte, sera en 2 lunas, a los cuales arenga, pero no era un sacerdote de Ulric, pero sabía como levantar el animo, como reza el refrán, en tiempos de guerra cualquier agujero es trinchera, y en el imperio esto es una realidad muy clara, y por su parte Ludwig juega un poco con Archi, antes de dormir.

A la mañana siguiente, aunque todavía no había salido el sol, os preparáis para partir, con un leve rezo a Sigmar para que os proteja y a Taal para que os guíe por sus dominios, y también a Ulric, aunque este es mas por parte de Hraldan, comienza la expedición.

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23/11/2019, 13:13
Alexis Hartmann

Alexis sentía una extraña sensación de seguridad con su casco recién adquirido. Sus orejas quedaban totalmente cubiertas y el mismo se golpeaba con el puño cerrado con una sonrisa comprobando lo bien que aguantaba los golpes aquella armadura.

¿Para que coño llevarán armaduras tan pesadas si esto también sirve? Se preguntaba a sí mismo.

Prepararía sus cosas, su espada recién afilada con la que sentía que podría cortarle la cabeza a un dragón, y guardaría su indumentaria de más valor, poniéndose la más antigua para la misión, vaya a ser que el barro se la estropee.

Le echaría un cachito de carne a Archie y con una sonrisa miraría a Ludwig, asintiendo. Le encantaban los animales y sabía como cuidarlos y adiestrarlos en cierto modo.

Luego miraría al enano y al resto de gente que ya se estaban preparando y veía caras diferentes a la suya. ¿Estaría equivocado de estar tan animado? ¡Pero si les habían dado de comer genial! ¡¿Qué más podían pedir?! Por si acaso, mató su sonrisa y se puso serio junto a los demás. Especialmente del enano, que parecía podía tumbar a un asno de un puñetazo.

- Yo ya estoy listo, cuanto antes empecemos antes acabaremos - y miraría después al resto.

 

Notas de juego

- Vamos ya si quieres.

- Si empezamos a marchar, Alexis estaría todo el rato atento a sonidos o cosas que pudiera ver "raras" para dar la alarma. Huellas, sonidos, luces...

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23/11/2019, 13:50
Anawelle Hoffmann

Anawelle abrió los ojos, otra vez. A diferencia de la anterior ahora la luz comenzaba a filtrarse a través de la lona de la tienda.

Los ronquidos de la cocinera no la habían despertado esa noche, ya que se había puesto lana en los oídos para amortiguar el ruido. Sin embargo no podía decir lo mismo de sus compañeras de tienda, las cuales lucían ojeras por no poder dormir.

-Men sana, corpore sano.- Recitó mentalmente en la antigua lengua mientras se estiraba con una sonrisa de satisfacción.

Se aseó, peinó y rehizo su trenza atándola fuertemente con un cordel de cuero. Pasó la varilla de ese perfume que tanto le gustaba por su cuello y muñecas dejando un olor característico y primaveral.

Ajustó su espada a su sensual cintura y colocó la daga. Se puso su manto de viaje, raído por el uso. El resto de pertenencias quedarían allí, excepto su báculo, su dinero y los ingredientes para los conjuros.

Al salir al exterior el aroma de la leña inundó sus fosas nasales. El frescor de la mañana reactivó su cuerpo y se hizo patente el buen humor de la hechicera. Había dormido bien y con el estómago caliente gracias al caldo de anoche. Hubiera preferido estar en la zona cero, en el centro de la batalla, pero si había que explorar la zona oeste, lo haría lo mejor que pudiera.

Al acercarse a la hoguera de su grupo vio como el joven jugaba con su perro y los demás terminaban sus quehaceres para ponerse en marcha.

-Buenos días.- Dijo animada la hechicera. -El chico tiene razón, pongámonos en marcha cuanto antes y devolvamos el castillo Izale a sus auténticos dueños.  

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23/11/2019, 14:48
Hraldan Mondfeder

El joven iniciado estaba despierto mucho antes que otros compañeros. Como todos los días estuvo rezando por largo rato. Comió algunos frutos secos para desayunar, y luego se vistió como en una especie de ritual. Se tomó su tiempo para colocarse la túnica negra característica de su orden, el cinto con sus pertrechos, y finalmente el medallón en forma de cabeza de lobo.

Le reconfortó ver el ánimo que traían la señorita y el chaval, y se dedicó simplemente a saludar con la mano, asentar con la cabeza y bendecir el viaje con algunos susurros en un idioma antiguo.

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23/11/2019, 22:28
Ludwig Georg VII

Ludwig tenia cara de haber dormido, pero de estar de resaca. No muy grave, pero aunque bebía más agua de lo normal en un adulto. Sin embargo, tenía algo que hscer. rchiecon Archie gritando a su lado se dirigió a la zona de mercaderes. Le faltaban algunas cosas. Primero munición y pólvora extra para.su viejo Cascarrabias, la pistola ornamentada que lucía en el cinto. Y luego un escudo extra. Hizo que le pintaran rápidamente una triple ola blanca en el escudo azul. Nadie lo reconocería ya, pero el signo de Weissfluss le seguía agradando. Con el escudo redondo al hombre, volvió hacia la zona de las tiendas

 Allí jugó un rato hasta que vio al joven Hartmann acercarse. Alexis, ven!le llamó. Cuando el joven se acercó le dio el escudo que había adquirido. Si algo he aprendido en mis devaneos por el Imperio es que mejor que un vivo te deba un escudo que no estar en paz y sin deudas con un muerto. Cogelo y ya me lo pagarás. Ludwig parece muy serio al decir esto, aunque los ladridos de serchie reclamando que le vuelva a tirar el palo hacen que enseguida medio día y le vuelva a lanzar el juguete. El recuerdo de Utrecht, su mentor y guardaespaldas, muerto a menos e los hombres bestia hace u  año aún le escuecen al joven ex noble. 

Notas de juego

Pues eso compro munición extra y un escudo para Alexis. 

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23/11/2019, 23:49
Urgan Jossefsson "Matabestigors"

Mientras intentaba enseñarle algo básico al muchacho que parecía por completo fuera de lugar se nos sumaron dos nuevos integrantes del grupo, o mejor dicho a juzgar al can que acompañaba a uno de ellos, haciendo que le dedicara una larga mirada al animal. Acercarse a hombres bestia acompañado de un chucho, juguetón por añadidura, no era demasiado reconfortante, lo que por el momento me guardé para mis adentros ya que no había necesidad de mostrar acritud en los primeros compases de aquella aventura que se prometía, cuanto menos, interesante a juzgar por la compañía

- Curiosa incorporación a la expedición- dije cuando se acomodaron entorno a la hoguera, no quedando demasiado claro si era por el animal o por la mujer - Podéis llamarme Urgan- añadí como coletilla a la presentación de la fémina mientras le dedicaba un asentimiento de cabeza a modo de saludo antes de hacer lo mismo con Ludwig - Los títulos, si no te permiten comandar ena... hombres, es mejor guardárselos para sí mismos. Siempre se es más proclive a ayudar a un igual que a alguien que se da aires de grandeza- aconsejé al amo del cánido sin malicia alguna, únicamente a modo de observación

Pero los buenos modales y la camaradería quedaron desterrados cuando el caballero estirado denegó de malas formas el escudo al muchacho, provocando en mí que clavara en él una mirada reprobatoria. No era necesario tratar así al chico aunque mucho me temía que en el Imperio aquello era costumbre. O se comía con cubierto de plata o se comía con las manos, no parecía haber término medio

Observé como Hraldan intentaba apaciguar los ánimos de Alexis, ante lo que no pude más que negar con la cabeza

- Será mejor que el muchacho sepa a qué vamos; sería absurdo meterlo en la boca del lobo haciéndole pensar que solo va a mirar... - recriminé al sacerdote - Vamos a matar bestias, y ellas nos intentarán matar a nosotros. Si no te ves preparado será mejor que no vengas, Alexis. Cuando todo se descontrole, que lo hará, cada cual tendrá que cuidar de sí mismo y, con suerte, podrá echarle una mano al compañero de al lado... mantente firme, no te dejes dominar por el pánico y tendrás mucho ganado- añadí con seriedad.

La guerra no era algo banal y meterse en ella sin saber nada al respecto era una completa estupidez. Mejor que supiera la verdad de antemano

Ana se retiró entonces a descansar, acto que vi más que adecuado y que secundé al instante

- Será mejor imitar a Ana y descansar; puede que no podamos hacerlo como es debido en unos cuantos días si nos adentramos en territorio enemigo- sugerí mientras hacía lo propio 

...

El movimiento de las primeras horas del día me sacaron de mi sopor nocturno, desperezándome ruidosamente antes de colocarme las piezas de armadura y asegurarlas bien junto a las armas. La aventura empezaba en serio y no tenía intención de ver caerse algo por el camino antes de empezar

Salí al exterior de la tienda justo para ver como Ludwig le entregaba un escucho a Alexis, hecho que me hizo ver con nuevos ojos al humano, al cual me acerqué sin tapujos

- Un acto muy generoso y honorable; creo que te juzgué mal anoche - me disculpé en voz baja -  Creo que será bueno contar con alguien como tú en el grupo- añadí tendiéndole la mano en un claro acto de camaradería. 

Al parecer los humanos, al menos por el momento, podían representar las dos caras de la moneda como para encasillarlos por las ideas preconcebidas que mis mayores habían inculcado en mí... sin duda aquel viaje iba a ser mucho más instructivo de los esperado. 

Esperaba salir de una pieza de él

- Pongámonos en marcha pues

Notas de juego

Siento el retraso pero hoy ha sido un día ajetreado >_<'

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24/11/2019, 12:19
Director

El camino trascurre con normalidad la primera hora de viaje, pero eso no indicaba que el camino fuera a ser facil, ya que después de algún tiempo, os empezáis a encontrar patrullas de hombres bestias, pero estas eran demasiado grandes para que os enfrentaros y a decir verdad, solo visteis una compuesta por una docena de hombres bestias con gran cornamenta, así como una o dos docenas mas de algunos que no tenían cornamenta o muy pequeña, pero a pesar de su superioridad en los bosques, vosotros contáis con un par de armas secretas: el superior olfato canino de Archie, el cual era capaz de distinguir a de esos seres con mucha distancia y solo se limitaba a gruñir avisando de la presencia de esos seres, así como los altos conocimientos de la naturaleza y ocultamiento de Arniel, por lo que evitáis a la mayoría de los peligros.

Y tras un largo tiempo de viaje, ya el sol subiendo en el cielo, pero con nubes de que podría haber lluvia, llegáis a tener a la vista el castillo, el cual parecía en un estado decrepito, con algunos muros literalmente por los suelos y la puerta principal, totalmente hecha una pena, puede que en el pasado fuera la base de una orden de caballería, pero ahora no era mas que unas ruinas, por no decir que parecía que en los muros colgaba algo, pero vuestro sentido común os decía que aquello era mejor no saber que era, y también veís de lejos lo que tuvo que ser el poblado del castillo, el cual no era mas que una tierra gris de cenizas y varias piedras y madera negra quemada que testifican que allí hubo un pueblo, ahora arrasado.

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24/11/2019, 19:44
Alexis Hartmann

El humano recogió el escudo absorto. No se creía la amabilidad del noble. Él pensaba hacer uso de su velocidad para evitar golpes, tan entrenada tras años de recibir palos en tabernas, pero un escucho sin duda lo iba a ayudar contra flechas, y quien sabe si contra más de un golpe...

Asintió y le agradeció el gesto.

- Se lo recompensaré sire. De veras muchísimas gracias.

Dicho esto partieron y empezaron a ver bestias patrullando la zona, y un castillo decrépito. No sabía por qué querían pelear por piedras cayéndose... ¿No sería mejor hacer una construcción nueva? Aquella daba pena... Trató de ver o escuchar cualquier ruido y mantenerse alerta.

- Tiradas (2)

Notas de juego

- Gracias tío. Voy a usar esquivar pero lo agradezco de veras. Igual me hubiera venido mejor una armadura de cuero, pero a caballo regalado no le mires el diente!

- Failazo en escuchar. Percepción bien. Por si veo algo raro o interesante.

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24/11/2019, 19:56
Anawelle Hoffmann

-Hasta aquí hemos llegado.- Dijo la hechicera mirando la ennegrecida tierra. -Si nos acercamos más posiblemente haya más patrullas y mejor armadas. ¿Vísteis los cuernos del último que pasó? No me metería con un bestigor ni aunque tuviera el bastón del rey fénix.-

Ya hemos explorado el lado oeste. Hay demasiadas patrullas para intervenir nosotros solos. ¿Ahora que hacemos?